¿ERES POSTRERO O PRIMERO?
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Mis amados hermanos, en la bondad del Señor hoy se predicará el 26 sermón de la serie “Quién es este Jesús”, una serie que consta de 47 sermones en los cuales (como bien saben) meditamos y meditaremos en los testimonios de las personas que vivieron en la época del Señor, como también el testimonio que el Señor mismo nos dejó con su vida.
Hoy nos centraremos en una declaración corta pero profunda hecha por el Señor a “alguien” que le preguntó sobre la salvación, él le dijo: Señor, ¿son pocos los que se salvan? una pregunta que es probable que en un momento de tu vida te la hayas hecho. A lo cual, el Señor no responde directamente, sino como es costumbre suya (y muy sabia por cierto) lo expresa en una parábola. Vayamos a revisar estos textos para poder meditar en el pasaje de hoy con más luz.
El texto en el que meditaremos hoy es:
Y he aquí, hay postreros que serán primeros, y primeros que serán postreros.
INTRODUCCIÓN CONTEXTUAL
INTRODUCCIÓN CONTEXTUAL
Antes de comenzar, no debemos olvidar el contexto en el que se desarrollan las escrituras. Los judíos eran personas que confiaban ser hijos de Dios por sólo pertenecer de forma étnica al pueblo de Israel, es decir, confiaban que se salvarían sólo por ser judíos.
Bien, vayamos al contexto.
Pasaba Jesús por ciudades y aldeas, enseñando, y encaminándose a Jerusalén.
El Señor Jesús ya había enseñado por todos los alrededores de Judea sobre el mensaje del reino de Dios y ahora ya había llegado la hora de encaminarse al lugar de su muerte, a Jerusalén. Es en ese camino que:
Y alguien le dijo: Señor, ¿son pocos los que se salvan? Y él les dijo:
El Señor Jesús como podremos ver a continuación, no responde de una manera directa a su pregunta, sino, plantea una parábola para darle la respuesta y que sea esta misma persona discierna su pregunta.
Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán.
Camino angosto, inscripciones en la puerta.
Brevemente, acá encontramos:
La responsabilidad humana.
La salvación es para pocos.
Después que el padre de familia se haya levantado y cerrado la puerta, y estando fuera empecéis a llamar a la puerta, diciendo: Señor, Señor, ábrenos, él respondiendo os dirá: No sé de dónde sois. Entonces comenzaréis a decir: Delante de ti hemos comido y bebido, y en nuestras plazas enseñaste. Pero os dirá: Os digo que no sé de dónde sois; apartaos de mí todos vosotros, hacedores de maldad.
Ahora el Señor, especifica que la puerta no estará abierta siempre, es decir, la salvación está disponible por un tiempo definido. Y que al cerrarse la puerta (de manera ilustrativa) muchos tratarán de ingresar y serán rechazados “No sé de dónde sois” y aún tratarán de justificar su ingreso con “su servicio y dedicación” pero aún así serán rechazados y expulsados a un lugar.
Allí será el llanto y el crujir de dientes, cuando veáis a Abraham, a Isaac, a Jacob y a todos los profetas en el reino de Dios, y vosotros estéis excluidos.
Este lugar donde estarán se caracterizará de ser un lugar donde habrá un llanto eterno y un “enojo” eterno.
Al igual que en el relato del infierno de Lucas 18, el seno de Abraham será un lugar donde sólo los salvos por la fe en Cristo estén.
La esperanza de este “alguien” es ahogada al escuchar que sería excluido por pensar que la salvación es para pocos (en su forma de pensar), es decir solo para los israelitas. Y esto es confirmado con el próximo versículo:
Porque vendrán del oriente y del occidente, del norte y del sur, y se sentarán a la mesa en el reino de Dios.
¡Qué hermoso pasaje! la promesa del pacto a Abraham será cumplida con la inclusión de nosotros al Pacto eterno de Gracia del Señor, los cristianos de todas las edades nos sentaremos a la mesa en el reino de Dios, que representa la comunión eterna que tendrán con el Dios Jehová.
Y es en ese contexto que llegamos a nuestro pasaje:
Exposición del Texto
Exposición del Texto
Y he aquí, hay postreros que serán primeros, y primeros que serán postreros.
Abordaremos este pasaje desde el contexto superior y de forma aplicativa.
Una vez mas, debemos recordar a quién dirige esta declaración el Señor Jesús, es: a los judíos, a aquellos que él había venido y estos lo habían rechazado:
A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.
A los judíos les fue otorgado el privilegio de oír el evangelio desde los mimos labios del Señor Jesús. Y además de ello, el Señor les había confiado sus oráculos y su palabra.
Vino a Nazaret, donde se había criado; y en el día de reposo entró en la sinagoga, conforme a su costumbre, y se levantó a leer.
que son israelitas, de los cuales son la adopción, la gloria, el pacto, la promulgación de la ley, el culto y las promesas;de quienes son los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén.
Entonces concluimos en primera instancia, que estos “primeros” hace referencia a los judíos que tuvieron la bendición del pacto y las promesas y rechazaron al Señor Jesús tornándose en postreros, es decir condenados, y los postreros son aquellos que no de forma directa recibirían el mensaje del evangelio, sino por medio de los santos apóstoles del Señor, esto es: a judíos y gentiles que se tornarán en primeros, es decir exaltados.
Pero aún hay más por meditar en nuestro texto:
¿Quiénes son los postreros?
¿Quiénes son los primeros?
1. ¿Quiénes son los postreros?
1. ¿Quiénes son los postreros?
Hay postreros que serán primeros...
Postrero = Escatos = Lo más lejos, lo último. Es la misma palabra que se utiliza para “escatología” es decir “el estudio de las “últimas cosas”. Entonces, estos son los últimos en la tierra, los necios, débiles y viles del mundo, pero son “Las primicias de Cristo”
Con esa breve aclaración, mencionaremos 3 características de estos “postreros”
Son aquellos que se han humillado ante el ser de Dios, reconociendo su realidad finita y colocándose en lo más bajo de la clasificación humana en términos de pureza.
Estos viven con la mente y corazón puestos en las últimas cosas, que son: la 2da venida del Señor y la glorificación final.
Porque lo insensato de Dios es más sabio que los hombres, y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres. Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en su presencia. Mas por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención; para que, como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor.
El Señor Jesús está respondiendo a este “alguien” que en el lugar donde estaban, había postreros que se habían humillado ante él y le seguían, lo hacían porque se les había revelado que las profecías dadas a sus padres se cumplieron en su maestro y tenían la mente y el corazón en el día que él libere al pueblo (lo cual aún debían aprender, porque Cristo los libertó del yugo más opresor y pesado que existe, del pecado).
Estos postreros son los escogidos del Señor, tanto de los judíos como de los gentiles que serán glorificados en Cristo en el día de la redención final, en este contexto, los escogidos serán los primeros.
Aplicaciones
Aplicaciones
Los postreros según el mundo (primicias de Cristo) son aquellos que viven humillados ante Cristo, gozosos con la revelación del evangelio del Señor Jesucristo en sus corazones y vidas prácticas y meditando en las “últimas cosas” es decir, en la segunda venida del Señor Jesucristo y sus implicaciones. Estos van caminando detrás del maestro, detrás de su salvador, lo cual les hace vivir confiados.
En el mundo en el que vivimos, ser postrero no es una opción, ya que las palabras como: autoestima, autocomplacencia y autosuficiencia, reflejan el corazón individualista y necio del hombre, que dice que no necesita de Dios para “sentirse realizado”. Para estos ser postrero es la muerte.
Todas las gentes de los 4 puntos cardinales de mundo que se humillen ante el Rey de Reyes, el Señor Jesucristo y postran sus vidas al evangelio suyo, en este contexto, serán los primeros ante el Señor.
¿Cumples con las 3 características para clasificar como postrero, tanto en conocimiento como práctico (lic. de conducir)?
2. ¿Quiénes son los primeros?
2. ¿Quiénes son los primeros?
Hay primeros que serán postreros...
Primero = Protoi = Primogénito, mejor puesto.
El contexto de esta definición es muy importante porque el sentido de la palabra cambia, acá no nos vamos a referir a aquellos que estarán como primicias del Señor sino de aquellos que hallan paz y placer siendo los primeros en este mundo. En respuesta a este “alguien” el Señor le hará saber que cualquiera que ponga su esperanza en este mundo (descendencia) y sus vanidades, será postrero o último, será aquel que toque a la puerta cerrada de la salvación y no pueda entrar por llegar tarde.
Meditemos en 3 características de estos (antónimos):
Confían en su puesto terrenal, esto es: Dinero, bienes y personas, los cuales llegan a ser fuente de exaltación y sobre valoración.
A estos les es oculto el pacto de Gracia, es decir ignoran y pisotean en la obra de Cristo.
Estos viven en el “Aquí y ahora”, en el sentido que su mente está en los placeres de la vida. y estos recibirán los juicios de las últimas cosas.
Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee.También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho.Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos?Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes;y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate.Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios.
Aplicaciones
Aplicaciones
Los primeros según el mundo (las primicias del mundo) son aquellos que viven para su puesto terrenal: Dinero, bienes y personas y teniendo el corazón en esas cosas no tienen “espacio” para el tesoro del evangelio, al cual responden con desprecio, tienen como baluarte frases como: “La vida es una sola” “La vida se hizo para disfrutar” “Si no es ahora, ¿cuando?”, “tengo derecho a ser feliz”.
El mundo es su complemento, les gusta oír todo que exalte a su ser como humanos, se gozan al saber no necesitan de nadie para ser felices.
Esta primacía es corta y fenece cuando la persona desgraciada muere, ya que muere sin la gracia de Dios y terminará siendo postrera, le cerrarán la puerta de la salvación por haber despreciado ser postrero en esta tierra y recibirá la misma respuesta que el rico de Lucas 16
Pero Abraham le dijo: Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro también males; pero ahora éste es consolado aquí, y tú atormentado.
Aplicaciones Generales y Finales
Aplicaciones Generales y Finales
Ambas posiciones son mutuamente excluyentes, no pueden coexistir al mismo tiempo . No puedes ser primero y postrero al mismo tiempo como no puedes estar en el agua y respirar o también tragar y respirar.
He aquí hoy estamos reunidos creyentes que serán exaltados e incrédulos que serán condenados.
Hoy, están en Cristo o no lo estás, no hay término medio. Entonces: ¿Cómo puedo ser postrero?
Niégate a ti mismo.
Cree en el Señor Jesucristo y sé salvo, sé postrero, vive a la sombre de él.
Ten todo por basura por amor a Cristo.
No juzguemos por las apariencias, muchos hoy pueden parecer ser postreros pero en el día final se revelará que siempre fueron primogénitos del mundo.
Doctrina principal
Doctrina principal
Al igual que en la época del Señor, hoy sólo existen dos tipos de personas en el mundo, aquellas que son consideradas como postreras o creyentes que serán exaltadas al final de los tiempos por su humillación y fe ante el evangelio de Cristo y aquellas que son consideradas como primeras o incrédulas que serán condenadas al final de los tiempos por su corazón no arrepentido y por su rechazo al evangelio de salvación.