Siéntante y piensa si realmente eres un discípulo de Cristo
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Gracias damos al Señor por su ayuda en este tiempo que ya por 6 meses el Señor sostuvo esta serie ¿Quién es este Jesús?, hoy llegamos al sermón 27. Este recorrido por el evangelio de Lucas enfocado en los encuentros, conversaciones y algunas de las enseñanzas del Señor Jesús son de gran importancia para el cristiano, ya que contienen los fundamentos de la fe y la vida práctica del creyente en la fe de Jesucristo.
La semana pasada fuimos llamados cuestionarnos si somos postreros o primeros, y meditamos en que al igual que en la época del Señor, hoy sólo existen dos tipos de personas en el mundo, aquellas que son consideradas como postreras o creyentes que serán exaltadas al final de los tiempos por su humillación y fe ante el evangelio de Cristo y aquellas que son consideradas como primeras o incrédulas que serán condenadas al final de los tiempos por su corazón no arrepentido y por su rechazo al evangelio de salvación.
Hoy con la ayuda del Señor, centraremos nuestros corazones en el texto de:
Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo.
Meditaremos en el contexto en el que aparece nuestro pasaje y cual es la enseñanza que dio el Señor Jesús a los que escucharon estas palabras y ello nos llevará a meditar de una manera práctica si realmente somos discípulos de Cristo. (título del sermón)
Introducción contextual
Introducción contextual
Grandes multitudes iban con él; y volviéndose, les dijo:
Este relato comienza con nuestro Señor ya de camino a Jerusalén. Dada la fama que él obtuvo en ese tiempo, dice el texto “grandes multitudes iban con él” pero sabemos muy bien que muchos de esa multitud más tarde serían los que condenarían al mismo Señor mostrando así su verdadera naturaleza, la escritura advierte de esto:
Estando en Jerusalén en la fiesta de la pascua, muchos creyeron en su nombre, viendo las señales que hacía.Pero Jesús mismo no se fiaba de ellos, porque conocía a todos,y no tenía necesidad de que nadie le diese testimonio del hombre, pues él sabía lo que había en el hombre.
Es por ello que el Señor Jesús se detiene y declara a la multitud:
Si alguno viene a mí, y no aborrece a su padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su propia vida, no puede ser mi discípulo.
El Señor, conocía el estado de cada una de esas personas y era necesario que declare la realidad de ser un verdadero seguidor suyo, esto es: Amar por sobre todas las personas al Señor Jesucristo, y Él especifica sobre qué personas, el amor del discípulo de Cristo debe estar muy por encima de “padre, y madre, y mujer, e hijos, y hermanos, y hermanas, y aun también su propia vida” en palabras sencillas, el verdadero discípulo del Señor tiene como objeto de su amor solamente al bendito Señor, la supremacía de Cristo.
Ahora bien, la expresión “Aborrecer” no significa que el discípulo de Cristo deba odiar a sus familiares, no, al contrario el debe amar la supremacía de Cristo y por medio de ello a sus familiares, claramente esto desencadenará muchas veces en diferencias dentro del hogar, pero eso mis hermanos, eso es lo que debe pasar.
No penséis que he venido para traer paz a la tierra; no he venido para traer paz, sino espada. Porque he venido para poner en disensión al hombre contra su padre, a la hija contra su madre, y a la nuera contra su suegra; y los enemigos del hombre serán los de su casa. El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí. El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará.
El Señor está comunicando a la multitud que aquel que no puede con esta palabra, No puede ser discípulo suyo.
Y el que no lleva su cruz y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo.
Pero estas personas que seguían al maestro no sólo debían amar la supremacía a Cristo por encima de sus familiares sino que también debían considerar “llevar su cruz” es decir padecer por el nombre del Señor, pero no a la forma que ellos piensen, no, sino “en pos de Cristo” es decir padecer persecuciones por seguir al maestro. De lo contrario el que no considere esto, No puede ser discípulo suyo.
Porque ¿quién de vosotros, queriendo edificar una torre, no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo que necesita para acabarla?No sea que después que haya puesto el cimiento, y no pueda acabarla, todos los que lo vean comiencen a hacer burla de él,diciendo: Este hombre comenzó a edificar, y no pudo acabar.¿O qué rey, al marchar a la guerra contra otro rey, no se sienta primero y considera si puede hacer frente con diez mil al que viene contra él con veinte mil?Y si no puede, cuando el otro está todavía lejos, le envía una embajada y le pide condiciones de paz.
Ahora el Señor (como es característico de su santa persona) les presenta 2 parábolas, las cuales nos enseñan:
Considerar de manera concienzuda las implicaciones de la vida cristiana.
Obrar conforme a lo analizado.
En resumidas cuentas, el Señor les está diciendo “deténganse, piensen y decidan si realmente me quieren seguir, tomen en cuenta las implicancias que les presenté, que es: Dejarlo todo por mi, su familia, sus sueños, su felicidad superficial, todo.
Exposición de Texto
Exposición de Texto
Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee, no puede ser mi discípulo.
El pasaje de hoy, es la conclusión de la enseñanza de Cristo con respecto a ser un verdadero discípulo suyo, contemplando de manera práctica todo lo que implica seguir los pasos del maestro. En ese sentido meditaremos este pasaje en:
La condición que el Señor exige para ser su discípulo.
El resultado de ignorar la condición que el Señor exige.
1. La condición que el Señor exige para ser su discípulo.
1. La condición que el Señor exige para ser su discípulo.
Así, pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todo lo que posee...
Es probable que muchos de aquella multitud que le seguían, pensaban que sólo el oír y maravillarse de las enseñanzas del maestro era lo único que necesitaban para ser contados como discípulos, pero acá observamos que el Señor Jesús de manera enfática les deja en claro que las asuntos concernientes a la fe en él, deben ser analizados antes de encaminarse en la vida de discípulo suyo.
Entonces, es ahora que estas personas deben analizar sus vidas, deben analizar dónde estaba su corazón, en palabras del comentarista W. Hendriksen
El Evangelio Según San Lucas C. La parábola del rey razonable
Lo que Jesús pide es una devoción de todo corazón, una lealtad a toda prueba, una negación completa de uno mismo, de modo que uno se ponga a sí mismo, su tiempo, su dinero, sus posesiones terrenales, sus talentos, etc., a disposición de Cristo.
Es decir, que renunciar significa dejar de usar TODO lo que tenemos para nuestros propios deleites, y dedicarlos a la obra de Cristo.
Ahora cabe la pregunta ¿Quiénes puedes hacer esto de todo corazón?
R.- Sólo aquellos en los cuales el ES de Dios ha regenerado el corazón y les ha dado la capacidad de creer y dejarlo todo por su maestro. Es decir, aquellos han nacido de nuevo.
Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.
Aplicaciones
Aplicaciones
Todo profesante de la fe cristiana debe ahora detenerse, sentarse y pensar en lo que cuesta seguir a Cristo, he aquí hago eco de las preguntas que el Señor hizo:
¿Amas la supremacía de Cristo, entiendes qué es eso? (ejemplo del papa de Roma)
Si amas la supremacía de Cristo, entonces tus familiares no son lo mas importante, sino Cristo y su palabra. Hacer esto te llevará a amarlos de verdad, esto es: amar en el evangelio.
Padre y madre, guarda el 5 mandamiento.
Cónyuge, amor y sujeción, vienen del resultado del evangelio.
Hijos, si ellos ven cuánto amas la supremacía de Cristo, entonces tu los amas. (adoración familiar)
Hermanos/as, si ellos ven cuánto amas la supremacía de Cristo, entonces tu los amas. (evangelismo personal)
Tu mismo, sino amas la supremacía de Cristo, no te amas.
El es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación.Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él.Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten;y él es la cabeza del cuerpo que es la iglesia, él que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia;
¿Estas dispuesto a llevar tu cruz por causa del nombre del Señor?
Todo por lo que vives gira en torno al evangelio (familia, trabajo, amistades)
Deberás reformular tu meta de vida. (Ya no eres tu, ya no son tus sueños, es el evangelio)
Pero tú has seguido mi doctrina, conducta, propósito, fe, longanimidad, amor, paciencia, persecuciones, padecimientos, como los que me sobrevinieron en Antioquía, en Iconio, en Listra; persecuciones que he sufrido, y de todas me ha librado el Señor. Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución;
2. El resultado de ignorar la condición que el Señor exige.
2. El resultado de ignorar la condición que el Señor exige.
no puede ser mi discípulo...
“No puede” esto es: No tiene el ES de Dios.
Si me amáis, guardad mis mandamientos.Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.
Es por ese motivo que de forma categórica el Señor desestima a todo aquel que no está dispuesto a tenerlo como supremo en su vida. Y con seguridad que entre la multitud existían personas con este pensamiento (De seguir al maestro solo para beneficio personal).
Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo que me buscáis, no porque habéis visto las señales, sino porque comisteis el pan y os saciasteis.
Muchos de la multitud seguramente sólo deseaban escuchar y ver los milagros del Señor, pero por su corazón no arrepentido, no pudieron ser verdaderos discípulos, llevándolos a la condenación eterna.
Aplicaciones
Aplicaciones
No ser discípulo de Cristo, equivale a estar en condenación eterna, no existe un término medio. Es por ello que como vimos la semana pasada sólo existen dos posiciones en esta vida, o eres discípulo o eres enemigo de la cruz.
Ahora bien, si alguna persona piensa que puede estar jugando con el evangelio debe saber que es enemigo de la cruz y no es apto para el reino de Dios. y para esto el Señor concluye diciendo en este contexto:
Buena es la sal; mas si la sal se hiciere insípida, ¿con qué se sazonará? Ni para la tierra ni para el muladar es útil; la arrojan fuera. El que tiene oídos para oír, oiga.
Tristemente habrá muchos que ahora siguen al Señor Jesucristo que terminarán abandonando la fe por amor a sí mismos.
Aplicación final
Aplicación final
Ahora bien, es necesario que en este momento analices si realmente eres un discípulo de Cristo, y para ello déjame hacerte 3 preguntas.
¿Cómo llegaste a ser cristiano?
Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados,
¿Por qué eres cristiano?
Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios;
¿Para qué eres cristiano?
Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.
SI las respuestas fueron (por la familia o por mi mismo) que son alejadas de las respuestas bíblicas, preocúpate, porque es más que seguro que no eres un discípulo de Cristo.
Por favor por amor a tu alma, detente el día de hoy, siéntate y piensa si realmente eres un discípulo de Cristo.
Doctrina Principal
Doctrina Principal
Todo ser humano debe considerar seriamente que sólo existen los discípulos de Cristo y los enemigos de la Cristo. Y es en uno de estos dos grupos en lo cuales tu te encuentras hoy. El discípulo tiene como fin de vida, la supremacía de Cristo, el enemigo tiene como fin sus propios sueños y deleites. ¿Qué eres?