Infidelidad en el corazón

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Lealtad de Jesús y la deslealtad de Pedro

Introducción. La fe de la iglesia ha sido puesta a prueba.
La iglesia primitiva fue perseguida por su fe. La presión sobre la iglesia fue renunciar a su fe, maldecir y retractarse de creer.
La iglesia ahora es puesta a prueba por su fe. Hoy en día la iglesia está bajo presión, de ideologías, confusión, materialismo y comodidad. Y algunos están renunciando a su fe
ORACIÓN
Los que juzgaban a Jesús lo habían tratado indignamente, se burlaron, mintieron en su contra y quien quiere ser digno de Cristo, Pedro quería ser digno de su Señor, pero había un problema un problema en corazón.
Juan 18:15 nos aporta que había otro discípulo también cerca de Jesús. Esto pone en contraste la actitud de Pedro, la criada no se dirige a descubrir a ambos discípulos, sino a Pedro que estaba tan confiado frente al fuego.
El otro discípulo era conocido, por eso no fue molestado, pero Pedro se sintió amenazado por la mirada de la criada.

1. La vergüenza del auto esfuerzo Marcos 14.66-68

66Estando Pedro abajo, en el patio, vino una de las criadas del sumo sacerdote; 67y cuando vio a Pedro que se calentaba, mirándole, dijo: Tú también estabas con Jesús el nazareno. 68Mas él negó, diciendo: No le conozco, ni sé lo que dices. Y salió a la entrada; y cantó el gallo

Pedro estuvo cerca de Jesús pero la mirada de esta criada, puso a prueba la fidelidad de Pedro.
Pedro se sintió amenazado pero aun estaba en la puerta por si tenia que salir corriendo.
Y usa una frase enfática y con un sentido legal no lo conozco, ni sé lo qué tu dices.
La fe de Pedro fue puesta a prueba. En su corazón se resistía a no defraudar al Señor. Estaba tratando de mantenerse lo más cercano posible.
Cuando la fe se basa en la valentía no tardará mucho para que llegue nuestra vergüenza.
Es como en aquellas ocasiones que decimos voy a dejar de hacer esto porque ya no quiero defraudar al Señor y te portas muy valiente. Pero cuando tu valentía, tu fidelidad es puesta a prueba y empiezas a avergonzarte y caer en lo mismo.
Es como aquel que dice voy a dejar de decir palabras obscenas o groserías pero sigue menospreciando a las personas que le rodean. Es valiente pero aun no entiende el amor de Dios, al tener que amar al prójimo.
Nuestra fe es puesta a prueba todo el tiempo, Dios dijo en Éxodo 20:3 o te gobierna ese ídolo o te gobierna Dios.
Muchas veces decimos si Dios me gobierna, pero nuestra justificación no es por fe en Cristo, sino que nos justificamos en base a nuestros actos, con esa aparente valentía de yo soy bien fiel, de yo soy un buen cristiano, yo no peleo con mis hermanos, pero en casa es todo lo contrario, que en el trabajo no es compasivo, que con su entorno es hostil, por eso termina en vergüenza y desgracia.
Pedro no solo se avergonzó una vez, sino que como se predijo serían tres veces, Jesús enfatizó que le negaría. Pero sus acciones, su hipocresía fue motivada por el temor. La infidelidad en el corazón es hipocresía con el temor.

2. La Hipocresía con el temor

69Y la criada, viéndole otra vez, comenzó a decir a los que estaban allí: Este es de ellos. 70Pero él negó otra vez. Y poco después, los que estaban allí dijeron otra vez a Pedro: Verdaderamente tú eres de ellos; porque eres galileo, y tu manera de hablar es semejante a la de ellos. 71Entonces él comenzó a maldecir, y a jurar: No conozco a este hombre de quien habláis.

La hipocresía que surge del temor, no solo muestra claramente la infidelidad, sino que se sigue basando en el auto-esfuerzo.
Pedro una vez más estuvo bajo presión y fue un hipócrita por el miedo que tenía.
Ya se encontraba en la entrada de la casa del Sumo Sacerdote y no solo negó la segunda vez, sino que empezó a maldecir y a jurar que no conocía a Jesús.
Cuando la fe se basa en el temor hay hipocresía, es visible nuestra infidelidad del corazón.
Romanos 8:15 Nos dice que el temor nos esclaviza, no nos deja salir, nos mantiene atrapados en el engaño.
Pedro se esclavizó por el temor, y el temor lo llevo no solo a negar de Jesús, sino a tratar de aparentar ser otra persona, una persona como los que estaban ahí.
Pedro no solo quedó como mal hablado, sino como chismoso, y no solo eso sino que quedó mal delante de su Señor.
Cuando comprometemos nuestra lealtad por el temor estamos al borde de convertirnos en hipócritas, que se miren como Pedro.
Aquí Pedro no tenía al Espíritu Santo, aun la obra de salvación de JESÚS no se había llevado acabo.
Pero en Gálatas 2. 11-16. nos dice que Pedro nuevamente simuló ser un judío, y no ser un hijo de Dios. ¿Qué le recordó Pablo a Pedro en esa ocasión? No fue sus encuentros con Jesús, no fue su posición como Apóstol, no fue su tarea como ministro. Fue el Evangelio. El credo de Jesucristo.
En esta simulación con el temor que tenemos de otras personas, o de otras cosas, traemos con nosotros a otros. Pedro se había llevado entre sus pies a otros judíos e incluso a Bernabé
Bernabé fue generoso, dio toda su heredad y la trajo a los líderes, pero también había sido seducido por el temor y volviéndose en un hipócrita.
Cuando somos esclavos del temor, empezamos a imponer cosas a las personas para que no nos dejen de amar, de admirar, o incluso por temor empezamos a separarnos del grupo, empezamos a hacer divisiones, y la solución no es comer juntos, la solución no es dejar de relacionarse con los otros grupos. la solución es el Evangelio.
Podemos ser bien hipócritas tomando cosas buenas pero que es gobernado por nuestro ídolo.
Esclavo al miedo- una vida basada en el miedo.
Hijo por la fe en Jesucristo- la fe actúa a través del amor.
Esclavo: Obediencia impulsiva. Obedece a Dios y a los códigos morales por miedo al rechazo--un moralista compulsivo y cerrado. Objetivos irreales. Con frecuencia, grandes dosis de auto-crítica.
Hijo: Obedece movido por el gozo que tiene en su Padre y por gratitud por la seguridad de Su amor. "¿Cómo puedo vivir tan ingratamente hacia alguien que nunca me rechazará?
Esclavo: Se esconde. Elabora un gran número de estrategias para esconder las caídas internas y externas, tanto ante sí mismo como ante los demás. Incluye: murmuraciones, culpar a otros, odio hacia otras razas/clases, obsesiones, exceso de trabajo, etc.
Hijo: Es abierto y transparente. No es esclavo de las apariencias falsas. Es capaz de apreciar a las personas que son diferentes y a las que sufren y amarlas.
Pedro no veía la consecuencia, Pedro no podía frenar su problema le hacía falta el Evangelio. La infidelidad en el corazón tiene su consecuencia pero para todo esto tenemos el Evangelio.

3 La consecuencia y el Evangelio.

72Y el gallo cantó la segunda vez. Entonces Pedro se acordó de las palabras que Jesús le había dicho: Antes que el gallo cante dos veces, me negarás tres veces. Y pensando en esto, lloraba.

La infidelidad en corazón de Pedro ya se había mostrado.
Miró a Jesús y quedó quebrantado.
Lucas 22.61 Nos dice que El Señor lo miró, el Se escondió de todas las miradas que le preguntaban de su relación con Jesús, pero de la mirada de Jesús no pudo escapar.
El contraste con la fidelidad de Jesús a su mision queda mostrada en este versículo.
Lucas 22.62 nos dice que fue entonces que salió, ya no pudo quedarse más tiempo ahí, la caída fue inminente.
Cuando quedas quebrantado y te arrepientes pero vuelves echarle ganas te vuelves a encerrar en el círculo vicioso de la auto-justificación. Terminando ve al vídeo de Idolatría y El Evangelio para que trabajes con tu corazón al respecto.
Cuando la fe se basa en lo que Cristo hizo hay libertad, hay restauración, hay vida eterna. Juan 21. Pedro vio por 3ra vez a Jesús resucitado, el poder del pecado fue destruido. Amén
Jesús vive, Jesús reina, Jesús es el Señor. a él buscar y viviremos.
Jesús vino a salvar a Pedro y vino a salvarnos a ti y a mi, que somos de los que le echan ganas y que cuando nuestra fe está bajo presión defraudamos al Señor. El vino a salvarnos y darnos nuestra identidad como hijos de Dios.
Esta palabra es para los que le echan ganas pero que han sido quebrantados y que lloramos amargamente cuando tenemos entendemos que la mirada de Jesús penetra nuestros corazones.
Pedro tenía la intensión de escapar, y tal vez temía escapar.
Pedro es salvado por Jesús, es seducido por el temor pero nuevamente libertado por la fe en Cristo.
¿Dónde pondrás tu fe cuando el Espíritu de Dios te habla?
Oración
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