Nadab y Abiú

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Objetivo:

Reconocer que Dios es celoso y así debemos ser, celosos con lo que nos ha solicitado y evitar estrictamente lo que no le agrada, para no ser castigados por Él.

Lectura Biblica:

Levítico 10:1–7 RV1909
Y LOS hijos de Aarón, Nadab y Abiú, tomaron cada uno su incensario, y pusieron fuego en ellos, sobre el cual pusieron perfume, y ofrecieron delante de Jehová fuego extraño, que él nunca les mandó. Y salió fuego de delante de Jehová que los quemó, y murieron delante de Jehová. Entonces dijo Moisés a Aarón: Esto es lo que habló Jehová, diciendo: En mis allegados me santificaré, y en presencia de todo el pueblo seré glorificado. Y Aarón calló. Y llamó Moisés a Misael, y a Elzaphán, hijos de Uzziel, tío de Aarón, y díjoles: Llegaos y sacad a vuestros hermanos de delante del santuario fuera del campo. Y ellos llegaron, y sacáronlos con sus túnicas fuera del campo, como dijo Moisés. Entonces Moisés dijo a Aarón, y a Eleazar y a Ithamar, sus hijos: No descubráis vuestras cabezas, ni rasguéis vuestros vestidos, porque no muráis, ni se levante la ira sobre toda la congregación: empero vuestros hermanos, toda la casa de Israel, lamentarán el incendio que Jehová ha hecho. Ni saldréis de la puerta del tabernáculo del testimonio, porque moriréis; por cuanto el aceite de la unción de Jehová está sobre vosotros. Y ellos hicieron conforme al dicho de Moisés.

Versiculo para memorizar:

Levítico 10:1 RV1909
Y LOS hijos de Aarón, Nadab y Abiú, tomaron cada uno su incensario, y pusieron fuego en ellos, sobre el cual pusieron perfume, y ofrecieron delante de Jehová fuego extraño, que él nunca les mandó.
Material Exegético:
Recordaremos la historia de Nadab y Abiú. Nadab, el primogénito, Números 3:2) y Abiú, junto con Eleazar e Ithamar fueron hijos del Primer Sumo Sacerdote de Israel, Aarón hermano de Moisés. Como hijos de Aarón compartían una gran responsabilidad delante de Dios, ya que ellos fueron consagrados para trabajar como sacerdotes en el tabernáculo de Dios (Éxodo 28: 1; 1 Crónicas 23: 13).
Algunas de las funciones que desempeñaban eran: el sacrificio continuo, la quema del incienso en el lugar santo, la preparación del aceite de la santa unción y el perfume. Dios les especifica cómo debían prepararlo. Al quemar el incienso debían hacerlo tomando brazas del altar de los sacrificios, mismo que de forma continua debía tener fuego o brasas ardientes. En estas mismas instrucciones también se les prohíbe quemar sahumerio extraño (Éxodo 30: 1-9, 25-38).
Cuando Aarón y sus hijos fueron ungidos y consagrados como sacerdotes, Moisés y Aarón entraron al tabernáculo, después salieron y bendijeron al pueblo y la gloria de Jehová se apareció. Salió fuego de Jehová y consumió el holocausto y los sebos sobre el altar, lo vio el pueblo y alabaron a Jehová postrándose delante del Dios vivo. A partir de este momento el altar de los sacrificios tuvo el fuego de Dios y la labor principal de los sacerdotes era mantener ardiendo este fuego de forma continua (Levítico 9:24; 6:12, 13).
Sobre este altar, cada mañana y tarde, delante de Jehová, Aarón debía quemar incienso fragante, cuya preparación se describe en Éxodo 30:34, en el momento en que él arreglaba las lámparas (Éxodo 30:7, 8). No se debía ofrecer sobre él ningún "incienso extraño", en otras palabras, incienso que Jehová no había designado (Éxodo 30:9; Levítico 10:1), es decir, que no había sido preparado de acuerdo con sus instrucciones.
Nadab y Abiú se aventuraron, sin autorización, a realizar el servicio del incienso, el más alto y solemne de los oficios sacerdotales. Pero su ofensa fue más grave porque, en lugar de tomar fuego del altar de bronce para poner en sus incensarios, parece que se conformaron con usar un fuego común, y así fue como cometieron un acto grave delante del Creador (Números 3:1-4). Demostraron un descuido irreverente que les costó la vida. No se puede adorar a Dios como queramos, de cualquier manera, o a nuestro antojo, tiene que ser conforme a su voluntad y no a la nuestra. Es posible que Nadab y Abiú actuaran bajo la influencia del vino, o de la sidra; y que esta fuera la causa por la que ofrecieron fuego extraño y actuaran de forma tan irresponsable (Levítico 10:8-11).
Al quitarles la vida Dios estableció un precedente acerca de la importancia de servirle como debe ser, y no como a nosotros nos guste. Esto es una enseñanza para la Iglesia, debemos evitar ofrecer fuego extraño delante de Dios, pues nosotros también ejercemos un sacerdocio santo en el que nuestro Sumo Sacerdote es Cristo y nos ha consagrado con el Espíritu Santo de la promesa (1 Pedro 2:9; Hebreos6:18-20; Efesios 1:13, 14).
Qué será ofrecer fuego extraño actualmente? Pueden ser varias cosas, pero una de ellas es el SINCRETISMO. Esta palabra significa: "Proceso mediante el cual se concilian o amalgaman diferentes expresiones culturales o religiosas para conformar una nueva religión"
No podemos traer costumbres de otras religiones y pensar que haciendo esto agradamos a Dios por el simple hecho de que a nosotros nos place (Deuteronomio 12:30-32). Debemos tener mucho cuidado de no contaminar nuestra santidad con nuestros deseos. Debemos guardarnos de la levadura (Mateo 16:6-12) y hacer solo lo que Dios quiere, recordemos lo que dice 1 Juan 2:15-17:"No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo". Queremos que Dios nos ame y nos cuide, por lo tanto, Él nos pide fidelidad como dice el profeta Miqueas 6:8, él nos ha declarado lo que es bueno y lo que pide de nosotros.
Reflexionemos, hay costumbres que se oponen a la voluntad de Dios y esto es ofrecer un fuego extraño, hacerlo indudablemente tendrá sus consecuencias. Dios ama al que le obedece poniendo atención a su infalible palabra (1 Samuel 15:22,23).

Cuestionario:

l. Cómo se llamaron los hijos de Aarón? Números 3:2
2. Cómo castigó Dios a Nadab y Abiú y por qué? Levítico 10: 1, 2
3. Qué se entiende por fuego extraño?
4. Cómo se le llama al proceso de traer costumbres y formas de adoración de otras denominaciones e incorporarlas en nuestra Iglesia?
5. Dios se agrada de esto? Deuteronomio 12:29-32
6. Nosotros al pertenecer a la Iglesia de Dios lsomos sacerdotes? 1 Pedro 2:9 Cómo nos ungió Dios para santificarnos en este nuevo
sacerdocio? Efesios 1:13-14
7. En nuestros días lpodemos ser castigados por ofrecer a Dios fuego extraño?
8. Qué es más importante que el sacrificio? 1 Samuel 15:22, 23
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