El Hijo Sufriente

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Panorama de Marcos

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El Hijo Sufriente
Serie: “El Hijo sufriente” Basada en el Evangelio de Marcos
27 de diciembre 2020 /Sermón 43 en la INP “Antioquía”
Propósito: “Animar a la iglesia a responder bíblicamente ante el sufrimiento”
Pasaje: Marcos
En una ocasión cuando Jesús estaba enseñando y estaban allí sentados los fariseos y doctores de la ley escuchándolo, de pronto trajeron a un paralítico y como la casa estaba tan llena no pudieron traerlo a Jesús por la puerta, así que lo metieron por el techo de la casa, por el tejado y solo así lo acercaron a Jesús. Ahora piénsalo por segundo, ¿Qué es lo que el paralítico anhelaba escuchar de Jesús? Sin duda era “levanta tu lecho y anda”. Pero Jesús no le dijo eso sino dijo: <<Hombre, tus pecados te son perdonados>> (Luc 5:20). Entonces los fariseos y escribas comenzaron a decir: << ¿Quién es éste?>> que se atreve a decir “tus pecados te son perdonados”, <<Quién puede perdonar pecados sino sólo Dios?>>. La pregunta fue ¿Quién es éste? ¿Quién es Jesús?
Unos meses después, en otra casa que también estaba llena de líderes religiosos, Jesús estaba enseñando, pero esta vez estaba casi acostado alrededor de la mesa, <<entonces una mujer de la ciudad, que era pecadora>> trajo un frasco de perfume; entonces estando a los pies de Jesús, <<llorando, comenzó a regar con lágrimas sus pies, y los enjugaba con sus cabellos; y besaba sus pies, y los ungía con el perfume>> (Luc 7:38). Entonces, después de aprovechar la ocasión y enseñarles a todos los presentes la necesidad de perdón de esta mujer, Jesús le dijo: <<Tus pecados te son perdonados>>. Y los que estaban allí presentes, comenzaron a preguntarse: <<Quién es éste, que también perdona pecados?>>. La pregunta fue ¿Quién es éste? ¿Quién es Jesús?
El mismo Herodes, el que mató a Juan el Bautista, estaba sorprendido de todo lo que escucha de Jesús, porque algunos decían <<Juan ha resucitado de los muertos>> (Luc. 9:7). Otros decían: “es Elías” otros decían: “Algún profeta de los antiguos ha resucitado”. Y el mismo Herodes dijo: <<A Juan yo le hice decapitar; ¿quién, pues, es éste, de quien oigo tales cosas?>>. Otra vez la pregunta fue ¿Quién, pues, es éste?
Hasta los mismos discípulos de Jesús, en una noche iban con Jesús en una barca y entonces se levantó una gran tempestad de viento que echaba las olas en la barca, de modo que la barba estaba a punto de hundirse, pero Jesús estaba dormido así que lo despertaron y le dijeron ¿No te importa que perecemos? Entonces Jesús le dijo al mar: <<Calla, enmudece>> Y el viento y el mar se calmaron. Los discípulos llenos de miedo se decían uno al otro: <<¿Quién es éste, que aun el viento y el mar le obedecen?>> (Mar 4:41). La pregunta fue ¿Quién es éste? ¿Quién es Jesús?
En estas y más ocasiones, a ver lo que Jesús hacía la gente se preguntó: ¿Quién es éste? El mismo Jesús después de haberle preguntado a sus discípulos qué decía la gente acerca de quién es él, les hiso una pregunta muy directa: <<Y ustedes, quién dicen que soy>>
Si te hicieran la misma pregunta ¿Quién es Jesús? Qué responderías. Esta es la pregunta que los Evangelios de Mateo, Marcos, Lucas y Juan responden cada uno en su Evangelio. En general, los cuatro Evangelios cuentan las buenas noticias que consiste en una sola historia: Hablan de Jesús como el que trae el Reino de Dios y que ha cumplido las profecías del Antiguo Testamento. A esta historia también se le conoce como la Historia de la redención y los Evangelios narran el registro del nacimiento, vida, muerte y resurrección del Hijo de Dios, -el Mesías-, quien está formando, gobernado y trayendo su reino sobre un nuevo pueblo que es la Iglesia.
Sin embargo, cada Evangelio tiene sus diferentes énfasis o perspectivas. Para explicarlo me gusta pensar en un diamante; cada Evangelio enfatiza un lado del diamante de la persona de Jesús. Mateo escribe primariamente para un público judío por esa razón presenta a Jesús como el Rey Mesiánico de Israel que fue prometido en el Antiguo Testamento. Marcos escribe para los ciudadanos del imperio Romano con el propósito de presentar a Jesús como el Rey y el Hijo de Dios que asume una posición de siervo sufriente para dar su vida en rescate por muchos. Lucas escribe primariamente a los griegos para mostrar a Jesús como el Hombre perfecto y Redentor misericordioso del mundo. Y Juan escribe a toda persona sin distinción presentando a Jesús como aquél que es completamente humano y completamente divino en el cual debemos creer para ser salvos. Cada uno enfatiza un lado del diamante de la persona de Jesús. Cuatro evangelios que nos dicen quién es Jesús y cuál es la respuesta que nosotros debemos dar a la persona y obra de nuestro Señor Jesucristo. Los cuatro nos dicen quién es Jesús y qué significa seguir a Jesús.
El primer evangelio que se escribió fue el Evangelio de Marcos. Después surgieron los demás Evangelios; Mateo, Lucas y Juan. Pero cada uno de ellos se apoyaron del Evangelio de Marcos. Así que, a partir de hoy estaremos predicando una nueva serie de sermones basados en el Evangelio de Marcos y hemos llamado a esta serie “El Hijo sufriente”. Un evangelio que presenta a Jesús como el Rey e Hijo de Dios que asume una posición de siervo sufriente dando su vida en rescate por muchos. Así que el propósito de esta serie consiste en “Animar a la iglesia a responder bíblicamente ante el sufrimiento”.
El día de hoy a manera de introducción de todo el Evangelio de Marcos quiero concentrarme en dos aspectos: Primero estudiaremos acerca del autor de este Evangelio y segundo; qué significa seguir a Jesús desde la perspectiva de Marcos. Esto nos dará un panorama del Libro completo y en los siguientes sermones estudiaremos quién es Jesús en cada uno de sus capítulos.
I.- Acerca del autor de este Evangelio.
El autor de este Evangelio es un judío creyente llamado “Juan Marcos”. Según Hechos 12:12, Marcos era el hijo de una mujer llamada María quien vivió en Jerusalén. En su casa algunos cristianos de Jerusalén se reunían a orar por Pedro cuando estaba en prisión. De hecho, cuando Pedro fue liberado de la cárcel por un ángel, Hechos 12:12 dice:
Hechos de los Apóstoles 12:12 RVR60
Y habiendo considerado esto, llegó a casa de María la madre de Juan, el que tenía por sobrenombre Marcos, donde muchos estaban reunidos orando.
También sabemos que Juan Marcos era sobrino de Bernabé quien fue compañero del apóstol Pablo en su primer viaje misionero. En Colosenses 4:10 Pablo dice:
Colosenses 4:10 RVR60
Aristarco, mi compañero de prisiones, os saluda, y Marcos el sobrino de Bernabé, acerca del cual habéis recibido mandamientos; si fuere a vosotros, recibidle;
Juan Marcos acompañó a Pablo y a Bernabé en su primer viaje misionero. Pero como leemos en Hechos 13:13 Marcos los dejó a mitad del viaje y regresó a Jerusalén.
Hechos de los Apóstoles 13:13 RVR60
Habiendo zarpado de Pafos, Pablo y sus compañeros arribaron a Perge de Panfilia; pero Juan, apartándose de ellos, volvió a Jerusalén.
No sabemos el motivo por el que Marcos se separó de Pablo y Bernabé. Como resultado, cuando Pablo y Bernabé planeaban hacer su segundo viaje misionero, Pablo ya no permitió que Marcos se le uniera. En Hechos 15:36 al 40 registra que esto fue motivo de discusión entre Pablo y Bernabé al tal grado que decidieron separarse. Bernabé escogió a su sobrino Juan Marcos para ministrar en Chipre, mientras que Pablo escogió a Silas para reemplazar a Bernabé como su compañero de viaje.
Hechos de los Apóstoles 15:36–40 RVR60
Después de algunos días, Pablo dijo a Bernabé: Volvamos a visitar a los hermanos en todas las ciudades en que hemos anunciado la palabra del Señor, para ver cómo están.Y Bernabé quería que llevasen consigo a Juan, el que tenía por sobrenombre Marcos;pero a Pablo no le parecía bien llevar consigo al que se había apartado de ellos desde Panfilia, y no había ido con ellos a la obra.Y hubo tal desacuerdo entre ellos, que se separaron el uno del otro; Bernabé, tomando a Marcos, navegó a Chipre,y Pablo, escogiendo a Silas, salió encomendado por los hermanos a la gracia del Señor,
Sin embargo, tiempo después Juan Marcos se volvió a ganar la confianza del apóstol Pablo de tal manera que el mismo Pablo lo recomendó a la iglesia de Colosenses (4:10)
Colosenses 4:10 RVR60
Aristarco, mi compañero de prisiones, os saluda, y Marcos el sobrino de Bernabé, acerca del cual habéis recibido mandamientos; si fuere a vosotros, recibidle;
E incluso cuando Pablo estaba a punto de terminar su ministerio y estando en la cárcel reconoció lo útil que le era Marcos en el Ministerio. En 2 Tim. 4:11 Pablo escribe a Timoteo:
2 Timoteo 4:11 RVR60
Sólo Lucas está conmigo. Toma a Marcos y tráele contigo, porque me es útil para el ministerio.
Más tarde, Juan Marcos ayudó a Pedro cuando ministraba en Roma. De hecho, tuvieron una relación tan cercana que Pedro llamó a Marcos, “mi hijo” en 1 Pedro 5:13.
1 Pedro 5:13 RVR60
La iglesia que está en Babilonia, elegida juntamente con vosotros, y Marcos mi hijo, os saludan.
Fue probablemente durante este tiempo que Pedro enseñó a Marcos la mayoría de los detalles del ministerio terrenal de Jesús que se registran en el evangelio de Marcos.
¿Qué quiero mostrar con todo esto? Que Juan Marcos, un hombre que primero abandonó su trabajo misionero; Dios lo escogió para ser el autor de unos de los cuatro evangelios. Ciertamente los inicios en el Ministerio de Juan Marcos no fueron muy prometedores, sin duda tuvo su momento de debilidad cuando se apartó de Pablo y Bernabé dejándolos en el trabajo misionero, tal vez le fue difícil saber que por su culpa Pablo y Bernabé terminaron dirigiéndose cada uno por su lado, pero gracias a Dios Marcos no se quedó allí, sino que continúo desarrollando su carácter hasta llegar a ser hombre que fue. Y fue precisamente Marcos quien escribió el primer Evangelio de Jesucristo. Tener este conocimiento nos ayudará a entender el Evangelio de Marcos.
Aplicación:
1.- La historia del autor de este Evangelio nos debería animar. Sería muy bueno que todos nosotros pudiéramos tener una trayectoria de vida sin tropiezos en la vida cristiana pero si no es así, si has tenido algún tropiezo en la vida cristiana no te quedes en el camino únicamente lamentándolo.
2.- Dios puede hacernos útiles otra vez en su reino. Dios es un Dios de gracia que rescata a los que han tropezado en la vida cristiana. Marcos es un testimonio vivo de ello. No te convenzas de que no hay remedio para ti.
3.- Hermano, tu historia aun no se ha terminado de escribir. Probablemente tus capítulos anteriores de tu vida están manchados de pecados pero por la gracia de Dios actuando en nosotros, él ha limpiado nuestra vida de tal manera que los capítulos de vida que el Señor nos permita vivir, lo podamos vivirla en santidad.
4.- Hace un momento dijimos que Marcos ayudó a Pedro en su ministerio y Pedro incluso llegó a llamar “Mi hijo”. Esto significa que entre Marcos y Pedro hubo una muy cercana relación. Sin duda Marcos supo de la traición de Pedro a Jesús. Y Marcos supo como Pedro se arrepintió de su pecado y corrió al perdón de su salvador. Así que, ahora Marcos repite la misma lección: Cuando hay debilidad o caídas en la vida cristiana es momento de correr a Jesús.
5.- También Marcos, es la prueba de lo importante que en la vida cristiana tengamos personas maduras en la fe que nos guíen, tal como lo hizo Pedro con Marcos de tal manera lo que hizo su “hijo” espiritual.
Entre los primeros escritores cristianos que dijeron que Marcos escribió el segundo evangelio está Papías. Papías vivió en el principio del segundo siglo, y fue un obispo en Asia Menor cerca del año130 d. C.
Sabemos del punto de vista de Papías por el famoso historiador de la iglesia Eusebio, quien escribió cerca del año 325 d. C. En su obra Historia Eclesiástica Libro 3 capítulo 39 sección 15, Eusebio dijo lo siguiente acerca de Papías: “Marcos llegó a ser el intérprete de Pedro y escribió de manera exacta, pero no por orden, todo lo que recordaba de las cosas dichas y hechas por el Señor. Porque él no había oído al Señor ni había sido uno de sus seguidores, sino que más tarde, como he dicho, fue seguidor de Pedro. Pedro solía enseñar según la ocasión lo demandaba.
De acuerdo a Papías, el evangelio de Marcos era muy dependiente de las enseñanzas del apóstol Pedro. Marcos no había sido un testigo visual del ministerio de Jesús, pero él registró lo que Pedro había visto y oído de Jesús. Tanto es esto que Pedro lo llama “mi hijo Marcos”.
Una de las cosas que estamos aprendiendo en el Diplomado en el Ministerio Juvenil es que la iglesia debería ser un lugar donde los niños y jóvenes encuentren padres espirituales. Personas maduras en la fe que los guíen una y otra vez al evangelio, mucho más, cuando un joven no tiene el privilegio que alguno de sus padres no sean creyentes. Los adultos debemos adoptar jóvenes y entrenarlos en la fe. Esto es lo que hizo Pedro con Marcos. ¿Y cuál fue el resultado? Marcos escribió el primer Evangelio.
Oro a Dios que al conocer un poco más de la historia del autor de este Evangelio seas sorprendido del poder nuestro Señor Jesucristo para cambiar a las personas.
Así que, ya hemos hablado acerca del autor de este Evangelio ahora hablamos de qué significa seguir a Jesús desde la perspectiva de Marcos. Esto nos dará un panorama del Libro.
II.- Qué significa seguir a Jesús desde la perspectiva de Marcos.
Vayan conmigo por favor a Marcos 10:45 este es uno de los textos clave para entender el Evangelio de Marcos. Ustedes recordarán esta escena, Jacobo y Juan se le acercan al Jesús…
Marcos 10:35–37 RVR60
Entonces Jacobo y Juan, hijos de Zebedeo, se le acercaron, diciendo: Maestro, querríamos que nos hagas lo que pidiéremos. El les dijo: ¿Qué queréis que os haga? Ellos le dijeron: Concédenos que en tu gloria nos sentemos el uno a tu derecha, y el otro a tu izquierda.
Antes esta petición Jesús les contesta:
Marcos 10:38–40 RVR60
Entonces Jesús les dijo: No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber del vaso que yo bebo, o ser bautizados con el bautismo con que yo soy bautizado? Ellos dijeron: Podemos. Jesús les dijo: A la verdad, del vaso que yo bebo, beberéis, y con el bautismo con que yo soy bautizado, seréis bautizados; pero el sentaros a mi derecha y a mi izquierda, no es mío darlo, sino a aquellos para quienes está preparado.
Ahora, los otros diez se enojaron con Jacobo y Juan. Pero su enojo no era por lo que había pedido sino porque se les adelantaron…Era obvio para Jesús que estos hombres necesitaban una lección de humildad así que les dijo:
Marcos 10:45 RVR60
Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.
Marcos 10:41–44 RVR60
Cuando lo oyeron los diez, comenzaron a enojarse contra Jacobo y contra Juan. Mas Jesús, llamándolos, les dijo: Sabéis que los que son tenidos por gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y sus grandes ejercen sobre ellas potestad. Pero no será así entre vosotros, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor, y el que de vosotros quiera ser el primero, será siervo de todos.
El Evangelio de Marcos tiene 16 capítulos. Y este versículo divide el Evangelio de Marcos en dos grandes secciones. Los primeros 10 capítulos del Evangelio de Marcos resumen los tres años y medio del Ministerio terrenal de Jesús y en esos capítulos lo vemos como “el Hijo del Hombre no vino para ser
servido, sino para servir”. El resto del Evangelio de Marcos, los capítulos 11-16 resumen los últimos 8 días de la vida de Jesús en esta tierra y allí es presentado como el Hijos del hombre que vino “para dar su vida en rescate por muchos”. Así que Marcos 10:45 divide completamente el Evangelio de Marcos. En los primeros 10 capítulos el Hijo del hombre no vino para ser servido sino para servir y últimos cinco capítulos nos muestran cómo Jesús vino a dar su vida en rescate por muchos. Diez capítulos para resumir tres años y medio de Jesús y cinco capítulos para resumir ocho días de la vida de Jesús.
Esto es básicamente el Evangelio de Marcos: El Hijo del hombre no vino para ser servido, sino para servir, para dar su vida en rescate por muchos. Es por eso que hemos llamado a esta serie de sermones: “El Hijo sufriente” porque el Evangelio de Marcos presenta a Jesús como el Rey e Hijo de Dios que asume una posición de siervo sufriente dando su vida en rescate por muchos. Por lo tanto, el propósito de esta serie consiste en “Animar a la iglesia a responder bíblicamente ante el sufrimiento”.
Este énfasis en el evangelio de Marcos nos enseña tres cosas acerca de seguir a Jesús:
Primero, Ser seguidor de Jesús significa que somos y debemos comportarnos como siervos.
· “el que quiera hacerse grande entre ustedes deberá ser su servidor, 44 y el que quiera ser el primero deberá ser esclavo de todos.” Las matemáticas del Reino de Dios no son iguales a las de esta tierra. Aquí en este mundo el mayor es el que está sobre los demás, pero en el Reino de Dios el mayor es el que sirve. Buscar estar sobre los demás es contrario del Reino de Dios.
· En la iglesia y fuera de la iglesia Jesús no enseña a comportarnos como siervos. Debemos tener mucho cuidado de estar mandando a nuestros hermanos sin antes hacer las cosas primero nosotros. No somos jefes de nadie, somos esclavos de nuestro Señor Jesucristo.
La segunda cosa que implica seguir a Jesús es que:
Segundo, las dificultades y el sufrimiento son inevitables para los cristianos.
NVI] Mar. 8:34-35 Entonces llamó a la multitud y a sus discípulos. —Si alguien quiere ser mi discípulo—les dijo—, que se niegue a sí mismo, lleve su cruz y me siga. 35 Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa y por el evangelio, la salvará.
· Marcos no endulza la vida cristiana. Muestra el proceso del discipulado como algo difícil y frustrante en el que no sólo se sufre, sino en el que también se cometen errores y fallas y muestra con mucha frecuencia la manera en que los discípulos de Jesús fallaron en entender o responder en fe. A veces Marcos mostrará a los discípulos de Jesús como ciegos ante la realidad.
· Marcos nos muestra lo que realmente significa seguir a Cristo. Esto nos confronta a los creyentes para que evaluemos nuestra vida y tomemos en serio lo que realmente significa seguir a Cristo.
La tercera cosa que implica seguir a Jesús es que:
Tercero, Dios obra milagrosamente en nosotros para que podamos vivir la vida cristiana.
· Una de las características del Evangelio de Marcos es que, es el Evangelio que registra la mayor parte de los milagros de Jesús. El Evangelio que muestra la compasión y poder de Jesús sobre los que sufren. Marcos es el evangelio de los milagros. Mateo y Lucas juntos relatan 20 milagros de Jesús, recuerden que Mateo tiene 28 capítulos y Lucas 24, Marcos tiene solo tiene 16 capítulos y en Marcos aparecen 18 milagros de Jesús. Así que Marcos hace mucho más énfasis en los milagros de Jesús que los otros evangelios.
· Dios es un Dios que hace milagros en su pueblo. Nunca los deja en su condición. Y es exactamente lo que Dios hace en nuestra vida el día de hoy, el poder de Dios nos capacita para que podamos vivir una vida cristiana mientras vivimos como siervos y experimentamos las dificultades y el Sufrimiento.
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