Los límites de la imaginación.

2 Corintios 10:3–6 RVR60

Pues aunque andamos en la carne, no militamos según la carne;porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas,derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,y estando prontos para castigar toda desobediencia, cuando vuestra obediencia sea perfecta.

Introducción.

Pablo fundó la Iglesia de Corinto y por lo que podemos leer en sus cartas hacía ellos, Pablo sufría por causa de su comportamiento. Esta Iglesia tenía muchos problemas en diferentes aspectos, como divisiones, falta de discernimiento para poder ellos mismos juzgar casos dentro de la iglesia, desorden en la práctica de la santa cena, y muchos de estos problemas encontraban su raíz en la influencia que tenían las filosofías del mundo sobre ellos.

Debemos recordar que no hay neutralidad, y si no es la Escritura la que nos marca la pauta para nuestras vidas, otra cosa lo hará.

La imaginación del hombre.

Es muy común dentro del contexto académico que se incite a los alumnos a ocupar su imaginación, incluso a los niños en casa lo juguetes o incluso a los más pequeños, la decoración de las habitaciones estan orientadas a desarrollar la imaginación de los niños; el propósito es como mencioné desarrollar la imaginación al máximo.

Esto en sí no es malo, sin embargo debemos tener en cuenta que incluso en el tema de la imaginación no hay neutralidad, incluso debemos tener en mente que la misma imaginación debe desarrollarse dentro de ciertos límites.

La imaginación en la antiguedad.

En el huerto, Dios dio a Adán la tarea de embellecer el huerto y de nombrar a los animales, y estas tareas necesariamente tenían que ver con la imaginación. El poner nombre a los animales no era poner un nombre como lo haríamos con una mascota, sino que requería analizar las características de cada especie y poner un nombre de acuerdo a estas características. Esto sin duda requirió imaginación.

Otro ejemplo fue la construcción del arca, aunque Dios dio especificaciones de como quería que el arca fuera construida, Noe tuvo que usar su imaginación para el ensamble, el reunir y transportar los materiales, el acomodo de los animales, etc.

Otro uso que el hombre le dio a su imaginación fue cuando construyo la torre de Babel.

Génesis 11:1–4 RVR60

Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y unas mismas palabras.Y aconteció que cuando salieron de oriente, hallaron una llanura en la tierra de Sinar, y se establecieron allí.Y se dijeron unos a otros: Vamos, hagamos ladrillo y cozámoslo con fuego. Y les sirvió el ladrillo en lugar de piedra, y el asfalto en lugar de mezcla.Y dijeron: Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre, cuya cúspide llegue al cielo; y hagámonos un nombre, por si fuéremos esparcidos sobre la faz de toda la tierra.

Si recordamos la historia, antes de este acontecimiento, Dios declaró algo sobre el pensamiento de los hombres.

Génesis 6:5 RVR60

Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal.

Y es interesante que esta frase “todo designio de los pensamientos del corazón” hace referencia a un esquema de razonamiento o al diseño, a un esquema creativo.}

Génesis 6:5 NTV

El Señor vio la magnitud de la maldad humana en la tierra y que todo lo que la gente pensaba o imaginaba era siempre y totalmente malo.

Es interesante saber que en esta área a pesar de que era un área fértil no había piedra para construir, entonces usaron su imaginación y nos dice el pasaje que hicieron ladrillo y lo cocieron e incluso el asfalto lo usaron en lugar de brea.

Si te fijas a pesar de no tener los materiales, idearon la manera de llevar a cabo su cometido usando su imaginación.

El hombre hecho a imagen y semejanza de Dios.

Debemos recordar que el hombre es hecho a imagen y semejanza de Dios y que este aspecto de la imaginación es un don que Dios imprimió en nosotros, cuando meditamos en la obra de la creación, nos maravillamos por como Dios diseño todo.

Salmo 8:2 RVR60

De la boca de los niños y de los que maman, fundaste la fortaleza, A causa de tus enemigos, Para hacer callar al enemigo y al vengativo.

Incluso en el diseño de un bebé indefenso y pequeño Dios hace callar a sus enemigos, a aquellos que pretenden utilizar su imaginación para idear cosas vanas como la evolución, el diseño de alguien tan pequeño calla sus bocas y deja en ridículo sus vanos razonamientos.

El hombre al recibir de Dios este atributo, este tiene que rendirlo al servicio de Cristo y Su Reino. Al principio hablé de que no hay neutralidad incluso cuando hablamos de la imaginación, este aspecto debe estar sujeto a Cristo.

Adán como Noé utilizaron este don de Dios al servicio de su creador, y los hombres rebeldes de Babel lo utilizaron para su propio servicio, el cual fue contrario al propósito de Dios.

En el caso de los corintios, como ya vimos, sus problemas eran a causa de las ideas ajenas que se habían infiltrado a la Iglesia. El hombre, engañado por su corazón comienza a idear nuevas y ajenas formas de llevar a cabo su vida. Los corintios causaban división por ejemplo en la santa cena precisamente porque en sus cabezas idearon una forma diferente de celebrar esto, según sus propios estándares, los ricos por un lado y los pobres por otro. Incluso estaban poniendo en duda el ministerio de Pablo.

Pablo les recuerda a los corintios que aunque andan en la carne, refiriéndose a la debilidad, sus armas son poderosas en Dios para destruir fortalezas, o sea argumentos, ideas, filosofías que se levantan contra el verdadero conocimiento.

Como cristianos debemos entender este aspecto de no neutralidad. Las ideas y nuestra imaginación juegan en nuestra contra cuando no entendemos esto. Nuestra imaginación debe estar sujeta a Cristo.

El propósito de estas armas a las que se refiere Pablo es el de llevar cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo. Y precisamente esto presupone que el corazón y la imaginación del hombre continuamente se inclina al mal. Entonces el cristiano debe derribar ideas, imaginaciones que se levantan en contra del verdadero conocimiento.

Esto es algo que no hace el hombre sin Dios, deja volar su imaginación sin ningún tipo de restricción. Todo aspecto, la educación, la economía, el arte, et. Todas las áreas en las que nos desarrollemos requieren el uso de nuestra imaginación, pero debe estar sujeta a Cristo.

La ciencia, la tecnología, el arte etc son áreas que son útiles para el avance del Reino de Dios y deben ser desarrolladas, pero con la mira en el Reino de Dios.

La imaginación debe tener límites, pero como límites me refiero a que es la Palabra de Dios la que la limita, debe actuar libremente dentro de los límites y objetivos de la Palabra de Dios.

Si no entendemos esto es inevitable imaginar formas y maneras de rebelarnos a Dios.

Un ejemplo es cuando quieres pasar alguna materia que es complicada, hay dos opciones en las que involucramos nuestra imaginación, una de ellas es idear, usar tu creatividad para hacer trampa, ahora es muy fácil hacer esto, nadie te observa en casa, puedes abrir tu libro copiar las respuestas, puedes incluso ser muy hábil y lograr abrir sin que nadie se de cuenta el sobre del exámen y aprenderte las respuestas, aunque éticamente esta mal lo que hiciste, pusiste en práctica tu imaginación la dejaste volar sin ningún límite. Por otro lado está la opción de idear una manera interesante de aprender los conceptos de tu materia, usar herramientas o crearlas para un aprendizaje efectivo y rápido, usar la tecnología para ayudarte a aprender de mejor manera y divertida incluso, aquí también usaste tu imaginación solo que estuvo limitada al aspecto ético de la ley de Dios, o sea cuidaste de no romper ningún mandamiento en el proceso.

El utilizar tu imaginación sin estos límites es lo mismo que buscar una nueva forma de hacer las cosas fuera de la Ley de Dios. Cornelius Van Til hablando precisamente del necio que se rebela a Dios uso la imagen de un niño que tiene que gatear hasta el regazo de su padre para poder abofetearlo.

Asi el necio que ocupa un don de Dios que debe usarse para su gloria, para ofenderle.

El propósito es siempre recordar que nuestra imaginación debe funcionar dentro de los límites de la Ley de Dios.