LAS AFLICCIONES DE JOB
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Transcript
Un cambio de circunstancias a veces cambia al hombre mismo.
Con frecuencia aparecen fallas a santos y virtudes a pecadores.
Satanás sólo puede ver en Job un refinado egoísmo.
Que si sirve a Dios es porque está en su interés hacerlo.
El Señor permite a Satán sus propuestas, pero con límites.
Hubo en tierra de Uz un varón llamado Job; y era este hombre perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal.Y le nacieron siete hijos y tres hijas.Su hacienda era siete mil ovejas, tres mil camellos, quinientas yuntas de bueyes, quinientas asnas, y muchísimos criados; y era aquel varón más grande que todos los orientales.E iban sus hijos y hacían banquetes en sus casas, cada uno en su día; y enviaban a llamar a sus tres hermanas para que comiesen y bebiesen con ellos.Y acontecía que habiendo pasado en turno los días del convite, Job enviaba y los santificaba, y se levantaba de mañana y ofrecía holocaustos conforme al número de todos ellos. Porque decía Job: Quizá habrán pecado mis hijos, y habrán blasfemado contra Dios en sus corazones. De esta manera hacía todos los días.
Un día vinieron a presentarse delante de Jehová los hijos de Dios, entre los cuales vino también Satanás. Y dijo Jehová a Satanás: ¿De dónde vienes? Respondiendo Satanás a Jehová, dijo: De rodear la tierra y de andar por ella. Y Jehová dijo a Satanás: ¿No has considerado a mi siervo Job, que no hay otro como él en la tierra, varón perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal? Respondiendo Satanás a Jehová, dijo: ¿Acaso teme Job a Dios de balde?
I. El Derrotero Que Tuvo Job.
Sin guía, abrirse paso solo sin Biblia ni conocer el camino.
Sin Getsemaní, ni Calvario, sin las simpatías del Hijo de Dios.
Nosotros leemos .
Porque el Señor al que ama, disciplina,
Y azota a todo el que recibe por hijo.
Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina?
y sabemos que Dios es nuestro Padre.
Sabemos que las pruebas tienen el carácter de paternal disciplina.
Que tienen un designio misericordioso, con saludabe resultado.
Job sostuvo esta lucha con todas estas desventajas y triunfó .
y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito.
II. Aflicciones de Sus Bienes.
Un día el cielo amaneció limpio y antes de acabar, todo perdido.
Tan radical fue su ruina que quedó como un recién nacido
Para colmo de su pena, la casa sepultó a sus diez hijos .
y un gran viento vino del lado del desierto y azotó las cuatro esquinas de la casa, la cual cayó sobre los jóvenes, y murieron; y solamente escapé yo para darte la noticia.
En un momento quedó privado de cuanto poseía y de sus hijos.
¿Conseguirá Satanás que Job abandone su integridad?
El primer ataque ha concluido y Satanás debe retirarse derrotado.
Entonces Job se levantó, y rasgó su manto, y rasuró su cabeza, y se postró en tierra y adoró, y dijo: Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito.
III. Aflicciones Sobre su Persona.
En esta segunda prueba, ¿podrá Satanás triunfar?
Entonces salió Satanás de la presencia de Jehová, e hirió a Job con una sarna maligna desde la planta del pie hasta la coronilla de la cabeza. Y tomaba Job un tiesto para rascarse con él, y estaba sentado en medio de ceniza.
Entonces le dijo su mujer: ¿Aún retienes tu integridad? Maldice a Dios, y muérete.
La conducta de su mujer agravó su caso. Sin duda era fiel.
Pongámonos en su lugar de desesperación por hijos y bienes.
No es la primera vez que Satanás halla corazones que se asocien.
Job no pierde la confianza en la misericordia del Señor .
Y él le dijo: Como suele hablar cualquiera de las mujeres fatuas, has hablado. ¿Qué? ¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos? En todo esto no pecó Job con sus labios.
Si esta mujer supiera .
Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia;
Por lo cual, por amor a Cristo me gozo en las debilidades, en afrentas, en necesidades, en persecuciones, en angustias; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte.
Job, sin conocer esto, salió victorioso en este segundo ataque .
Y él le dijo: Como suele hablar cualquiera de las mujeres fatuas, has hablado. ¿Qué? ¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos? En todo esto no pecó Job con sus labios.
IV. Aflicciones por la Prolongacion.
Dos veces Satán ha fracasado, ¿triunfará la tercera?
La esperanza que se demora es tormento del corazón;
Pero árbol de vida es el deseo cumplido.
Ahora trata de debilitarlo por lo largo: día tras día, mes tras mes.
Arrostrando su pesada carga personal, familiar y amigos
Mi aliento vino a ser extraño a mi mujer,
Aunque por los hijos de mis entrañas le rogaba.
No sabemos cuánto duró, pero sabemos que fue largo.
Así se sentaron con él en tierra por siete días y siete noches, y ninguno le hablaba palabra, porque veían que su dolor era muy grande.
Job sufría en silencio, al fin explota en amarga angustia.
Después de esto abrió Job su boca, y maldijo su día.
Tal vez en su dolor ni sabía lo que estaba diciendo.
Pero lo grande de Job es que Satán fue derrotado en él.
Y él le dijo: Como suele hablar cualquiera de las mujeres fatuas, has hablado. ¿Qué? ¿Recibiremos de Dios el bien, y el mal no lo recibiremos? En todo esto no pecó Job con sus labios.