Más Que Cabello Largo
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Introducción
Introducción
Vivimos en un tiempo de suma confusión:
En Canadá arrestaron a un papá, separado de su esposa, porque no estaba dispuesto a referirse a su hija como “él”.
Su esposa, psicóloga y endocrinologa, y él tienen un hijo que a la edad de 11 años dijo que era una niña y pidió un cambio de nombre y que iniciaran tratamientos hormonales para hacer una transición de mujer a varón.
El padre no estaba de acuerdo. Al seguir refiriéndose a su hija como tal fue arrestado por estar en contra de los tratamientos y rehusaba aceptar el tratamiento hormonal de su hija.
La mayoría de la sociedad ve a la madre de esta pequeña como una heroína y no consideran:
Un alto porcentaje de niños que pasan por una etapa de confusión en no aceptar su identidad como niño o niña llegan a superar esta etapa de manera normal.
Olvidan que muchos adolescentes que inician tratamientos hormonales experimentarán consecuencias adversas muy fuertes:
Episodios de depresión
Infertilidad
Problemas de salud como consecuencia de recibir hormonas en contra de su composición biológica.
Hoy llegamos a un pasaje de la Escritura que muchos creyentes ven como un argumento para que las mujeres no se corten el cabello y que usen un velo cuando asisten a la iglesia; o que los hombres usen cabello corto y no usen sombrero dentro de un templo.
Muchos tenemos / tuvimos abuelas que al ir a la iglesia usaban un reboso o velo para poder asistir a la misa / servicio.
De igual manera, aun hoy en día, vemos que los hombres se quitan el sombrero al estar dentro de un templo o al momento de orar.
…sin embargo, 1 Corintios 11:2-16 tiene un significado mucho más grande, sobre todo para una sociedad confundida.
El antídoto para la confusión de la sociedad es la Palabra de Dios.
Los seres humanos podremos tener miles de opiniones - yo creo que está bien, yo no creo que está tan mal, o cada quien es libre para decidir - pero la realidad es que ninguno de nosotros somos Dios.
Pero, sabemos que Dios nos dejó su palabra escrita en la Biblia.
Si recurrimos a la Palabra de Dios podremos formar nuestros pensamientos para ver las cosas desde el punto de vista divino y así nos alejaremos del error que eventualmente nos lleva a la destrucción.
Hay camino que al hombre le parece derecho,
Pero al final, es camino de muerte.
El día de hoy consideraremos:
El problema en Corinto
El diseño de Dios para el hombre y la mujer
El ejemplo divino
El problema en Corinto
El problema en Corinto
El problema que estaba ocurriendo en la congregación en Corinto se describe en:
Todo hombre que cubre su cabeza mientras ora o profetiza, deshonra su cabeza.
Pero toda mujer que tiene la cabeza descubierta mientras ora o profetiza, deshonra su cabeza, porque se hace una con la que está rapada.
Habían mujeres en la congregación que estaban orando o profetizando con la cabeza descubierta.
Esto estaba provocando un escándalo en la comunidad a causa de las costumbres culturales de aquel tiempo.
Para poder entender la costumbre cultural veamos el versículo 6 en adelante:
Porque si la mujer no se cubre la cabeza, que también se corte el cabello; pero si es deshonroso para la mujer cortarse el cabello, o raparse, que se cubra.
Pues el hombre no debe cubrirse la cabeza, ya que él es la imagen y gloria de Dios, pero la mujer es la gloria del hombre.
En el mundo antiguo, sobre todo el primer siglo, en Corinto, era parte de la costumbre griega que las mujeres se cubrieran la cabeza.
De hecho, era muy común que las mujeres se cubrieran su cabeza no solo dentro de esta cultura sino también en la cultura judía.
Las mujeres cubrían su cabeza como una señal de recato y modestia.
Sin embargo, habían algunas mujeres que no se cubrían la cabeza:
Las prostitutas - de hecho las prostitutas. Eras mujeres se rapaban la cabeza y por tanto una mujer que estuviera calva estaría anunciando que tenía alguna relación con la prostitución.
Las mujeres adulteras, seductoras, o mujeres que deseaban avergonzar a sus maridos se destapaban la cabeza, lo cual traía deshonra no solo a ella sino también a su esposo - pues estaba violando una costumbre establecida.
Es como la persona que entra a un elevador y en lugar de mirar hacía la puerta se queda enfrenta mirando a todos.
Es como la persona que le dan un vaso de agua y no da las gracias.
Es como cuando alguien estornuda y nos quedamos callados sin decir “salud”.
En este caso, parece que Pablo está preocupado porque en el servicio de adoración las hermanas están descubriendo su cabeza / quitándose el velo que era parte de los usos y costumbres de su sociedad.
No se nos dice exactamente que es lo que motivaba a las mujeres a ya no portar un velo.
Pero, en base al correctivo que aplica Pablo, parece que era una clase de liberación feminista que estaba operando en la iglesia primitiva.
El movimiento de liberación feminista de cierta manera lucha por algunos derechos de la mujer:
El voto
El poder ser heredera de una propiedad
El poder recibir un salario equitativo
El no ser despedida de un trabajo a causa de un embarazo
Sin embargo, este mismo movimiento que ha logrado ciertas cosas necesarias ahora lucha por el derecho al aborto sin importar los meses de embarazo.
En otras palabras, la liberación feminista lucha por el derecho de la mujer para quitarle la vida a una mujer que lleva en su vientre.
…nosotros creemos que esta mentalidad al igual que la ideología que lleva a una madre a llevar a su hija para recibir testosterona para hacer una transición para ser un varón - van en contra de la palabra de Dios pues se oponen al diseño de Dios.
Nosotros, lejos de pensar que una mujer tiene el derecho de quitarle la vida a la mujer que lleva en el vientre creemos que la vida de la madre y la vida de la hija que lleva en el vientre - ambas poseen dignidad y deben ser protegidas.
El diseño de Dios para el hombre y la mujer
El diseño de Dios para el hombre y la mujer
Pablo sabe que en la comunidad de los corintios las mujeres debían cubrirse la cabeza.
Una mujer que cubría su cabeza demostraba que era una mujer respetable.
Una mujer que cubría su cabeza demostraba que tenía un esposo y que no andaba buscando engañar a su marido con otro.
…por tanto, Pablo exhorta a las mujeres, dentro de ese contexto, a seguir las normas de la sociedad y no causar un escándalo dentro de la comunidad.
Si una persona llegaba a un servicio de adoración y miraba que las mujeres no se cubrían la cabeza podría pensar que las hermanas no eran mujeres respetables y que vivían una vida inmoral.
¿Qué tiene que ver esto con el diseño de Dios para el hombre y la mujer?
¿Qué tiene que ver un velo con el diseño de Dios para nosotros?
El principio es sencillo - las mujeres se cubrían para demostrar que honraban / respetaban a sus maridos.
Este principio de honra y respeto era y es de suma importancia en la vida del pueblo de Dios.
Tristemente los seres humanos hemos corrompido el diseño de Dios en cuanto a lo que significa ser hombre / esposa y mujer / esposa.
Lo hemos corrompido al permitir una actitud machista.
Un hombre machista es aquel que siempre tiene la última palabra, no escucha consejo, todos en el hogar le tienen miedo, la mujer debe caminar con la cabeza agachada porque el Señor es celoso.
Esto no es parte del diseño de Dios.
Esta es la actitud de un hombre inseguro que no sabe lo que es ser un hombre de acuerdo al diseño de Dios.
Lo hemos corrompido al permitir una actitud donde no creemos que existe distinción de función y roles entre un hombre y una mujer.
Claramente un hombre y una mujer no pueden tener hijos por sí mismos.
Un hombre no es una mujer ni una mujer es un hombre. Son distintos y han recibido de parte de Dios ciertos roles / funciones dentro de la vida familiar / matrimonial.
En el diseño de Dios creemos que:
El hombre y la mujer son de igual valor ante los ojos de Dios.
Aunque el hombre fue creado directamente del polvo de la tierra por la mano de Dios, sabemos que la mujer también fue creada por la mano de Dios del costado de Adán.
Por tanto, cualquier ideología que rebaje / devalué tanto a la mujer como el hombre es una ideología que debe ser rechazada.
El hombre necesita a la mujer y la mujer necesita al hombre.
Sin embargo, en el Señor, ni la mujer es independiente del hombre, ni el hombre independiente de la mujer.
Porque así como la mujer procede del hombre, también el hombre nace de la mujer; y todas las cosas proceden de Dios.
En este pasaje vemos la interdependencia del hombre y la mujer.
Aunque el hombre fue creado primero, sabemos que todos nacemos de mujer.
Nos necesitamos los unos a los otros.
Para procrear hijos, nos necesitamos el uno al otro.
Para criar una familia nos necesitamos el uno al otro.
Para levantar una empresa se necesitan no solo hombres sino mujeres - todos dotados por Dios con inteligencia y sabiduría - nos necesitamos unos a otros.
En el hogar, el hombre es la cabeza de la mujer.
Este quizá es el punto que va en contra de todo lo que nos dice la sociedad.
Pablo lo explica de esta manera:
Pero quiero que sepan que la cabeza de todo hombre es Cristo, y la cabeza de la mujer es el hombre, y la cabeza de Cristo es Dios.
No lo podemos ignorar, borrar, o pasar por alto.
Tenemos que aceptar que esto es palabra de Dios y si no lo asimilamos vamos a fracasar en nuestra relación como pareja.
¿Qué requiere Dios de la mujer al decir que el hombre es la cabeza de la mujer?
Esto demanda honra, respeto, y amor.
Pablo escribiendo a los Efesios lo explica de esta manera:
Las mujeres estén sometidas a sus propios maridos como al Señor.
Porque el marido es cabeza de la mujer, así como Cristo es cabeza de la iglesia, siendo El mismo el Salvador del cuerpo.
Pero así como la iglesia está sujeta a Cristo, también las mujeres deben estarlo a sus maridos en todo.
Someterse quiere decir que la mujer voluntariamente acepta el liderazgo de su esposo.
Esto no quiere decir que la mujer no tiene voz ni voto sino que ella sirve como consejera, ofrece su punto de vista, pero a final de cuentas va a permitir que su esposo funcione como la cabeza en el hogar.
La mujer respeta a su marido y lo honra mediante su sumisión voluntaria.
Esto nos lleva a preguntarnos, ¿qué quiere decir que el hombre es la cabeza de la mujer?
Algunos lo han malinterpretado y creen que esto significa que nadie puede cuestionar al marido, nadie puede decirle que está haciendo algo incorrecto, que nadie puede corregirlo.
Muchos hombres creen que al ser ellos la cabeza significa que su esposa e hijos tienen que seguirlo ciegamente y soportarlo toda la vida.
¡Qué lejos está esto de la realidad!
Ser cabeza no tiene que ver con una actitud autoritaria, machista, diabólica.
Ser cabeza es lo que dice Pablo en:
Maridos, amen a sus mujeres, así como Cristo amó a la iglesia y se dio Él mismo por ella,
para santificarla, habiéndola purificado por el lavamiento del agua con la palabra,
a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia en toda su gloria, sin que tenga mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuera santa e inmaculada.
Así deben también los maridos amar a sus mujeres, como a sus propios cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama.
Porque nadie aborreció jamás su propio cuerpo, sino que lo sustenta y lo cuida, así como también Cristo a la iglesia;
Ser cabeza significa que el hombre va a amar a su esposa.
Ser cabeza significa que la mujer va a sentirse amada.
Ser cabeza significa que el hombre va a cuidar a su esposa.
Ser cabeza significa que el hombre va ayudar que la mujer alcance su potencial en Cristo.
Ser cabeza es ser siervo / servidor de su esposa.
Ser cabeza es ser alguien que va a sostener a su esposa así como Cristo sostiene y cuida a su iglesia.
Si nos enfocamos en el tamaño del cabello o que la mujer se cubra su cabeza en la iglesia perdemos de vista lo el centro de este pasaje.
Pablo quiere llevarnos a una relación matrimonial en la cual la mujer ama y honra a su marido.
…pero más que eso, Pablo desea que los hombres sean la cabeza del hogar que Dios les ordena ser.
El ejemplo divino
El ejemplo divino
Muchas veces es necesario dar un ejemplo para decirnos como debemos ser.
En el caso de los esposos, muchos simplemente repiten el comportamiento que vieron en sus padres como esposos.
…pero Pablo nos da el ejemplo más maravilloso:
Pero quiero que sepan que la cabeza de todo hombre es Cristo, y la cabeza de la mujer es el hombre, y la cabeza de Cristo es Dios.
Oh hombre, si tu eres cabeza y no sabes como debes ser, mira a aquel que es tu cabeza.
Tu cabeza es Cristo.
Él es tu ejemplo para que aprendas lo que significa ser cabeza.
Es por eso que en Efesios, Pablo le dice a los esposos, amen a sus esposas así como Cristo amó a la iglesia y dio su vida por ella.
Él es tu ejemplo.
Él es tu guía para como debes tratar a tu esposa y a tus hijos.
¿Esposos, realmente se siente tu esposa amada y respetada?
¿Esposos, realmente se sienten tu esposa y tus hijos, cuidados y protegidos?
Yo te invito a mirar a Cristo, tomar su ejemplo y ver que él vino para hacerse siervo de nosotros.
Sé que hemos fallado, no hemos sido las cabezas que Dios demanda de nosotros.
Sin embargo, él es fiel y justo para perdonar y reenfocar nuestras vidas.