Somos bendecidos al conocer más al Señor
Efesios 1:15-23
Propósito: Motivar a la congregación a conocer más al Señor para que comprendan más la salvación en Cristo y su fe se fortalezca.
Introducción
¡Cuán ignorantes somos, a veces, de lo que está cerca de nosotros! Por ejemplo, los hijos no se enteran de cuánto hacen sus padres por ellos.
A veces, la falta de comprensión puede privarnos de cosas extraordinarias. Por ejemplo, el ordenador puede hacer muchas cosas pero el desconocimiento de su funcionamiento hace que a veces solo lo utilicemos como una máquina de escribir de las antiguas.
¡Cuán ignorante somos, a veces, de la presencia de Dios y de lo que él nos ha dado! El texto de Efesios 1:15-23 nos enseña unos principios sumamente importantes acerca de nuestra relación con Dios y la salvación tan grande que hemos experimentado.
Una parte muy importante en el proceso de comprender mejor nuestra salvación es conocer al autor de ella. No se trata de un conocimiento intelectual, sino más bien de experiencia personal con Él que se revela en la vida cotidiana.
No es conocer acerca de Dios, sino conocer a Dios y reflejarlo en nuestros actos. La petición de Pablo era que los creyentes conocieran más a Dios y siguieran avanzando en la vida cristiana. Este texto nos enseña unos principios fundamentales para avanzar en este proceso.
Lectura Bíblica: Efesios 1:15-17
(Transición: Los primeros dos versículos nos muestra que en suandar diario los Efesios daban…)
I. Evidencias de la nueva vida en Cristo (vv. 15-16)
«Por eso, yo, por mi parte, desde que me enteré de la fe que tenéis en el Señor Jesús y del amor que demostráis por todos los santos, no he dejado de dar gracias por vosotros al recordaros en mis oraciones.» (vv. 15-16)
Las primeras palabras del v. 15 nos indican que había llegado al oído del apóstol Pablo noticias sobre los cristianos de la región de Asia menor o específicamente de los de la iglesia de Éfeso. Noticias que traen alegría a su corazón al escuchar un buen reporte de la conducta de los creyentes.
A razón de ese reporte el apóstol Pablo agradece al Señor en sus oraciones por la conducta de los cristianos. Menciona de manera específica dos razones por las cuales dar gracias: « la fe que tenéis en el Señor Jesús y del amor que demostráis por todos los santos,».
Estas cualidades son evidencia del conocimiento verdadero de Jesucristo y del sano crecimiento/madurez espiritual. La fe y el amor son características complementarias en la vida cristiana. La segunda suele ser resultado de la primera.
A. La fe genuina en Jesús (v. 15a)
La vida cristiana inicia cuando una persona decide creer el mensaje del evangelio. El cual expresa un llamado al arrepentimiento, a abandonar el pecado y depositar completamente la fe en Jesucristo.
B. El amor que se demostraban unos a otros (v. 15b)
El amor al que hace referencia es al que proviene de la fe en Cristo y que a pesar de ser no se correspondido o agradecido se entrega a los hermanos en la fe. Los creyentes de la ciudad de Éfeso eran reconocidos por la práctica del amor de Dios manifestado en el trato de unos a otros.
Jesucristo esperaba que todos sus discípulos se amaran unos a otros de la misma manera que Él les había amado (Juan 13.34-35). El amor entre cristianos debía causar un gran impacto en aquellos que aun no conocieran a Jesucristo.
(Aplicación: Los creyentes en la iglesia de Éfeso evidenciaban que habían experimentado la salvación por su firme creencia en Jesús y su amor sincero a los demás hermanos. De esta manera mostraban que tenían la salvación que Dios ofrecía. Tenían buena relación con Jesús y con sus hermanos.
Cuando experimentamos la salvación cambiamos nuestra manera de pensar y nuestra manera de actuar. El evangelio cambia nuestra relación con Dios y con nuestros hermanos. Los cristianos debemos dar evidencia de la salvación a través de nuestro comportamiento diario.
- ¿Cómo es tu relación con Jesús y con los hermanos en la iglesia?
- ¿Cuáles son algunas evidencias de que en verdad has experimentado la salvación que Dios ofrece a través de Jesucristo?
- ¿Si no damos evidencias de la salvación mediante nuestro comportamiento diario, cómo podemos avanzar?
- ¿Qué podrías hacer para empezar a manifestar amor a los hermanos de la iglesia?
- ¿Qué haces para cultivar tu fe, tu relación con Jesucristo?)
(Transición: La fe y el amor a los hermanos es la evidencia de conocer realmente a Jesucristo. Los siguientes versículos nos hablan de las…)
II. Bendiciones de conocer a Cristo de manera íntima (vv. 17-23)
«Pido que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el padre glorioso, os de el Espíritu de sabiduría y de revelación, para que lo conozcáis mejor» (v. 17)
Pablo ora para que los creyentes de Éfeso reciban de Dios Espíritu de sabiduría y revelación con el propósito que conocieran mejor a Dios, y entendieran el propósito y el poder de Dios en sus vidas.
¿A qué se refiere el apóstol Pablo con Espíritu de sabiduría y revelación? Frecuentemente se piensa en elementos místicos pero no es así.
«Sabiduría» se refiere al conocimiento de las cosas de Dios. Por su parte, «revelación» al descubrimiento de nuevos conocimientos. Pablo ora para que Dios les de sabiduría sobre las cosas espirituales y que tengan conocimiento pleno de Dios.
El apóstol reconoce que el verdadero conocimiento de Dios resulta en un cambio de vida. ¡Conocer a Jesucristo de manera íntima cambiará tu vida!
(Transición: Que Dios les ayudara a…)
A. Comprender la esperanza que tenían (v. 18a)
La esperanza es una de las diferencias más grandes del evangelio y de la fe en Cristo en comparación con las religiones y sectas. La fe cristiana no es un salto al vacío. ¡Tenemos esperanza!
Se dice desde hace mucho tiempo que “la esperanza es lo último que se pierde”. Este dicho popular no es del todo cierto. Sí, es posible que este mundo no tenga buen futuro, pero los cristianos tenemos esperanza.
En el pueblo de Dios, la esperanza es algo que nunca se puede perder, es un pilar fundamental. ¡Los cristianos no solo tenemos fe, tenemos esperanza!
Nuestra esperanza en Cristo no es solo un anhelo de una vida eterna en Su presencia. Es la certeza absoluta que un día estaremos en morando en Su reino.
Nuestra esperanza en Cristo es más que un sentimiento ante la posibilidad de un futuro mejor en nuestra vida. Es una total seguridad de victoria a través del Espíritu Santo en nuestro presente.
(Aplicación: Debemos buscar comprender cada día más sobre nuestra esperanza. Es necesario esforzarnos para comprender mejor nuestra esperanza en Cristo. Debemos reflexionar sobre la esperanza que Cristo nos hereda.
- ¿Por qué es importante que comprendamos más de Dios? Porque mientras más le conoces nuestra esperanza se fortalece.
- ¿Qué estás haciendo para comprender mejor esa esperanza? Hay algo que puedes comenzar a hacer ahora mismo: Acercarte más a Dios, para conocerlo mejor a Él.)
(Transición: Que Dios les ayudara a…)
B. Comprender el valor que tenían ante Él (v. 18b)
Ya nos hemos dado cuenta que una de las grandes virtudes de la fe cristiana es la esperanza que tenemos en Cristo. Pero junto con esto, Pablo habla de las riquezas de su gloriosa herencia en los santos. Esto indica que valemos mucho para Dios, ahora que somos sus hijos, ahora que nos ha dado su salvación. Somos una gloriosa herencia para nuestro Señor Jesucristo.
Hay muchos que sufren con el sentimiento de que no valen nada, que su vida no tiene sentido. Esto es verdad para los que no tienen a Jesucristo, pero para nosotros, los que seguimos a Jesucristo esa es una gran mentira. ¡Somos su gloriosa herencia!
(Aplicación: ¿No te parece, entonces, que vale la pena conocer más a Dios, para comprender mejor lo que somos en para él? Sí, vale la pena comprender cada día más esta verdad.
- ¿Cuáles son algunas cosas que usted puede hacer para comprender mejor el valor de ser hijo de Dios? ¿Qué te parece si…
· Te esfuerzas por aplicarte y responder los estudios de la escuela bíblica.
· Dedicar cada día al despertarte un tiempo de oración al Señor.
· Leer por lo menos un capítulo de la Biblia cada día y reflexionar en él.
- ¿Cuáles de esas te propones hacer usted durante la próxima semana?)
(Transición: Que Dios les ayudara a…)
C. La grandeza de Su poder con el cual ellos contaban (v. 19)
«y cuán incomparable es la grandeza de su poder a favor de los que creemos.» (v. 19a)
El apóstol también deseaba que los creyentes de Éfeso conocieran cuán grande es el poder de Dios. El poder de Dios para con los creyentes es extraordinario. Sobrepasa toda comprensión e imaginación humana.
Lo que Dios puede hacer, Su poder es de una fuerza incalculable, de magnitud indescriptible e ilimitada. Y Pablo quiere que los creyentes sepan que esa fuerza obra en beneficio de los que creen en Cristo.
Para mejor comprensión del poder infinito de Dios, el escritor inspirado cita varios ejemplos, momentos específicos en los que Dios ha usado ese poder.
«Ese poder es la fuerza grandiosa y eficaz que Dios ejerció en Cristo (1) cuando lo resucitó de entre los muertos… (2) lo sentó a su derecha en las regiones celestiales, (3) Dios sometió todas las cosas bajo el dominio de Cristo y (4) lo dio como cabeza de la iglesia.»
Estos cuatro ejemplos son una muestra inapelable y contundente del poder de Dios.
(Aplicación: ¿Por qué crees que Pablo quiere que comprendamos mejor el poder que Dios nos da? Él quiere que tengamos varias cosas en claro:
- Como cristianos, contamos con ese poder.
- Parte de la evidencia de ese poder de Dios en nosotros se muestra en el hecho que hemos sido cambiados, nuestra vida es diferente a la de aquellos que viven sin Dios.
Reflexiona sobre tu vida:
- ¿De qué manera se evidencia ese gran poder de Dios en tu vida diaria?
- ¿Cuáles cosas serían diferentes en tu vida, si hicieras mejor uso de ese gran poder que tienes a disposición?)
(Transición: Debemos decir que…)
Conclusión
La Palabra de Dios, nos enseña que debemos esforzarnos en conocer más a Dios cada día, para comprender mejor nuestra gran salvación.
En este proceso, vale la pena que evaluemos nuestra vida para saber cuánto hemos avanzado en la práctica de la vida cristiana y sobre esa base seguir avanzando.
Seguramente hay aspectos en los cuales tú andas muy bien, pero en algunos necesitas mejorar. Por ejemplo:
¿Cuánta claridad tienes respecto a la esperanza, al valor que tienes para el Señor y al poder que él ha puesto a su disposición para vivir la salvación que has recibido?
Reflexiona sobre esto, pero recuerda que el punto de partida es conocer mejor al Señor cada día. Hay varios asuntos que pueden ayudar: - La oración personal en su encuentro con él cada día, - la lectura y reflexión en la Palabra de Dios y la comunión con sus hermanos en la fe.