LAZARO PARTE 6

¿QUÉ ENTIENDO POR RESURRECCIÓN

La semana pasada vimos la llegada a la aldea de Betania por parte del Salvador:

Juan 11:17–19 RVR60

Vino, pues, Jesús, y halló que hacía ya cuatro días que Lázaro estaba en el sepulcro.Betania estaba cerca de Jerusalén, como a quince estadios;y muchos de los judíos habían venido a Marta y a María, para consolarlas por su hermano.

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Hoy estudiares un diálogo entre Jesús y Marta.Pero, empecemos analizar el carácter de las hermanas.

El carácter de las hermanos(as) es diferente.

Juan 11:20 “Entonces Marta, cuando oyó que Jesús venía, salió a encontrarle; pero María se quedó en casa.”

De inicio vemos de nuevo a Jesús, Marta y María.Se nos dice que: “Marta, cuando oyó que Jesús venía, salió a su encuentro”. A la vista de todos las textos que nos hablan de estas dos hermanas, se percibe claramente que Marta era activa y extravertida, al estilo de Pedro, mientras que María era introvertida y contemplativa, al estilo de Juan. Así, tan pronto como Marta se enteró de que Cristo venía, salió a su encuentro sin esperar a que el Señor llegara, “mientras María se quedaba sentada en casa”. Aquí hay un detalle q no sé porque Valera o Reina omiten, a lo mejor lo dan por entendido por la audiencia de la época, pero el original aparece que se queda en casa, pero también nos dice la posición en que se encontraba María:

Jn. 11:20 “Μαριὰμ δὲ ἐν τῷ οἴκῳ ἐκαθέζετο”

Juan 11:20 “Entonces Marta, cuando oyó que Jesús venía, fue a su encuentro, pero María se quedó sentada en casa.

“sentada” Esa era la postura más habitual para recibir a quienes venían para consolar a las dos hermanas por la muerte de Lázaro.

De acuerdo con las costumbres judías, quienes sufrían la pérdida de un ser amado se quedaban sentados mientras los dolientes los consolaban. Se acuerdan de la historia de Job:

Job 2:13 “Así se sentaron con él en tierra por siete días y siete noches, y ninguno le hablaba palabra, porque veían que su dolor era muy grande.”

Marta, de acuerdo con su personalidad fuerte, salió de la casa y fue al encuentro de Jesús cuando Él se acercaba.

María, también conforme a su carácter quedó sentada en la casa. En conclusión, la única razón válida es la que hemos expuesto al describir claramente el temperamento de la una y de la otra. Siempre se apreció un contraste de formas entre las dos hermanas.

En el episodio que comentamos hoy, fue Marta la que se llevó la mejor parte, precisamente por su temperamento impulsivo. Esto muestra que, entre los sinceros creyentes, puede haber temperamentos muy diferentes y hemos de tenerlo en cuenta para aprender a:

Ef. 4:2 “soportarnos con paciencia los unos a los otros en amor”

!Si todos los instrumentos de una orquesta tocasen la misma melodía, no habría concierto!

Y así como en el episodio de:

Lucas 10:41–42 RVR60

Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas.Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.

Marta era la activa y animada. María era la callada y analítica.

Hoy,Marta mostró su propio temperamento, así lo fue aquí María del suyo, con lo que se nos muestra cuán avisados hemos de andar del lado flaco por el que nos ataca el enemigo, quien precisamente por eso, da vueltas para ver por dónde nos puede entrar:

1 Pedro 5:8 RVR60

Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar;

2. La Doctrina no se Negocia.

Juan 11:21 RVR60

Y Marta dijo a Jesús: Señor, si hubieses estado aquí, mi hermano no habría muerto.

¿Qué nos quiere decir este texto? ¿Es un reclamo al Señor por haber llegado demasiado tarde? ¿Está enojada? ¿Rencorosa?

“si hubieses estado aquí, mi hermano no habría muerto.”

Todos al menos 1 vez, hemos dicho: !Dios, si hubieses....!

Las dos hermanas tenía diferente carácter, pero misma doctrina de lo que pensaban de Cristo. María repite la misma frase de Marta:

Juan 11:32 “María, cuando llegó a donde estaba Jesús, al verle, se postró a sus pies, diciéndole: Señor, si hubieses estado aquí, no habría muerto mi hermano”.

Podemos tener diferentes personalidades,carácter distintos,pero la sana doctrina NO SE NEGOCIA.

Marta, tenía roto el corazón, obviamente, ella no estaba reprendiendo al Señor por no haber evitado la muerte de Lázaro. Como se indicó en las predicaciones anteriores de la serie, el mensaje de las hermanas había llegado demasiado tarde, humanamente hablando, para que Jesús volviera a tiempo a Betania para curar a Lázaro. “si hubieses estado aquí, mi hermano no habría muerto.”

Ella creía firmemente que Jesús hubiera evitado la muerte de su hermano, como consecuencia de la enfermedad. No dudaba en lo más mínimo del poder del Señor. Sigue siendo de convicción general que para producirse la sanidad de un enfermo, el que ejercería esa función tenía que estar presente. Tal vez, en medio del dolor que las embargaba, se olvidaban que Jesús había sanado en la distancia a enfermos.

Las palabras de Marta eran simplemente una expresión dolorosa de duelo mezclado con la fe que expresó en la declaración siguiente:

3. Jesús es Jehová.

Jn. 11:22 “Mas también sé ahora que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará.”

“Mas” Kai, Conjunción adversativa “Pero”

Aunque con cierto desconocimiento teológico total sobre Jesús, eso no evitó que Marta tuviera plena confianza en que Dios responderá a cuanto le sea pedido por Jesús.

Marta sabía del poder sanador de Jesús, pero:

¿En este versículo está pensando en la resurrección de Lázaro?

Jn 11:21 “Mas también sé ahora que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará.”

No es clara la forma de la frase de Marta, pero, lo más firme sería vincularla con el versículo anterior, con lo que resultaría:

V 21 y 22 “Señor, si estuvieras aquí mi hermano no hubiese muerto,Pero también sé que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará”.

En cierto modo entendían que fuese posible la sanidad, pero no que pudiese resucitar su hermano Lázaro.

Algo para remarcar. Marta usa la palabra pedir, que se utilizaba para referirse a la oración, por tanto lo que estaba expresando es que cuanto Jesús pidiese en oración le sería otorgado. Es la forma habitual de un favor pedido por un inferior a un superior

“aiteo” Pedir-orar-ruego

Mientras que el término que usa Jesús para referirse a Sus oraciones expresa el plano de igualdad entre Él y el Padre

Jesús en la oración sacerdotal de Juan 17:

Juan 17:9 “Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son”

“ruego” “erotao”Pedir-orar

Es muy posible, que en este punto del ministerio de Jesús, tanto Marta, como el resto de los discípulos, no había comprendido totalmente el plano de igualdad en el Ser Divino, de las Personas del Padre y del Hijo.

Aprendemos:

Primero, la fortaleza de su esperanza, pues se limita a exponer a Jesús el caso con humildad y confianza.

Juan 11:22 “sé ahora que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará.”

Cuando no estamos seguros de cómo y qué hemos de pedir al Señor, dejemos que el Espíritu Santo pida en nosotros conforme a la voluntad de Dios:

Romanos 8:26 RVR60

Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.

Segundo, la debilidad de su fe, pues dice a Jesús: “Sé que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo dará”, !Jesús es Dios! Ella entonces, debería haberle dicho: “sé que puedes hacer todo cuanto quieras”.

Jesús respondió ASEGURÁNDOLE:

4. Jesús Resucitará a sus Conocidos.

Juan 11:23 RVR60

Jesús le dijo: Tu hermano resucitará.

Lázaro iba a resucitar inmediatamente, eso quería decir, pero Marta no lo entendió. Ella no tenía en mente una resurrección inmediata, pero si creía en la resurrección final, en el día postrero.Supuso que Jesús, como los otros dolientes, estaba consolándola con la resurrección de Lázaro al final de los tiempos.

Juan 11:23 “...Tu hermano resucitará.”

Para este momento, Marta no había pedido todavía nada, por lo menos explícitamente, lo que hizo fue recordar a Jesús que si hubiese estado presente no hubiera muerto. Parece ser que el interés de ella, lo mismo que el de su hermana era que no se hubiese producido el deceso de su hermano. Probablemente consideraban ya todo como algo irreversible y no había peticiones. Frente a esto, Jesús hace una promesa, excesivamente grande para ser considerada como una realidad en aquellas circunstancias: “Tu hermano resucitará”. No concretando el momento en que ocurriría, y haciéndolo en futuro, muy bien podía ser tomado, como así ocurrió, como una promesa escatológica(estudio de las cosas finales).

Pero, Jesús aprovecha la promesa para abrir un diálogo mucho más profundo que una resurrección material, un volver a la vida física después de haber estado muerto un tiempo. Jesús orienta la visión de Marta para que deje de considerar la tragedia del pasado y vea un futuro lleno de esperanza. Estas palabras deben alentar y reorientar nuestro pensamiento. Debemos estar pensando en una resurrección en la que nunca más podrá producirse la muerte. Especialmente cuando tenemos que dar un hasta luego a uno de los nuestros que ha partido para estar con Cristo, hemos de hacerlo con la certeza de que volveremos a encontrarnos para estar para siempre con Jesús.

Marta responde a Jesús:

5. La Resurrección de los cristianos es inminente y presente.

Juan 11:24 “Marta le dijo: Yo sé que resucitará en la resurrección, en el día postrero.”

Marta presta así poco aprecio a las palabras de Jesús. A causa de nuestro descontento bajo las cruces que nos agobian, también nosotros BAJAMOS LAS CORTINAS DE ACERO DE NUESTRO NEGOCIO, LLAMADA FE, y subestimamos nuestras futuras esperanzas.Irónicamente, aunque ella creía que Jesús tenía el poder para resucitar a su hermano en el futuro lejano, no pensó que podía hacerlo en ese momento.

La esperanza de la resurrección final es característica de todos los creyentes. Ante la afirmación de Jesús, Marta hace una declaración firme de su fe. Ella sabía que su hermano resucitaría en el día final, el día postrero, el último día. Es posible que Marta hubiera entendido las palabras de Jesús como elemento de consuelo al recordarle la esperanza de que todos resucitarán al final de los tiempos. La profecía lo enseña claramente:

Daniel 12:2 RVR60

Y muchos de los que duermen en el polvo de la tierra serán despertados, unos para vida eterna, y otros para vergüenza y confusión perpetua.

Jesús mismo habló de esto mencionando la resurrección final:

Juan 5:28–29 RVR60

No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz; y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; mas los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.

La frase en el día postrero está tomada también del Antiguo Testamento:

Is. 2:2 “Acontecerá en lo postrero de los tiempos...”

La certeza de la resurrección individual está ampliamente establecida en el Antiguo Testamento:

Salmo 16:10 RVR60

Porque no dejarás mi alma en el Seol, Ni permitirás que tu santo vea corrupción.

De igual manera la resurrección colectiva:

Is. 26:19 “Tus muertos vivirán; sus cadáveres resucitarán. ¡Despertad y cantad, moradores del polvo!”

La fe de Marta estaba bien fundamentada en la Escritura. La fe cristiana descansa también en la esperanza de la resurrección, que espiritualmente ya se produce en el momento de creer, en donde la identificación con Cristo comunica la vida eterna que es una verdadera resurrección de los muertos para pasar a la esfera de la vida:

Colosenses 2:12 RVR60

sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos.

Retando a Marta a ir más allá de la creencia abstracta en la resurrección final para completar su fe en Él, le dijo Jesús: “Yo soy la resurrección y la vida”…LO ESTAREMOS ESTUDIANDO EL PRÓXIMO DOMINGO

CONCLUSIÓN

Texto PRINCIPAL: Juan 11:20-24

El título de la predicación es:

¿Qué entiendo por resurrección?

Marta creía en una resurrección. Es tan fácil consolar a los que se lamentan, diciéndoles: “Bueno, algún día pronto verás a tu ser querido”. Bueno, eso no requiere mucha fe. Se requiere más fe para decir: “Acabo de perder a mi papá…acabo de perder un ser querido, pero estoy consolado en la seguridad, en la certeza de que Dios está con migo, y que Él hace bien todas las cosas” .

Hermano(a), Marta sabía desde el Antiguo Testamento, que habría resurrección de los muertos. Pero no creyó que Jesús le podría ayudar allí mismo, en ese momento. Si tenemos a Jesús,tenemos la vida. La muerte para los creyentes desde ya, la teemos que ver muy diferente. !Disfrute desde ya la bendición de ser resucitado por Jesús! Eso le hará ver la vida de una manera extraordinaria.