¿Qué le hace falta a mi familia?
Fieles a la familia • Sermon • Submitted
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· 10,884 viewsCuando lo entendamos y lo hagamos lo que Dios espera de nosotros, las cosas van a cambiar en nuestras familias, la bendición y el favor de Dios estará para con nosotros.
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Introducción:
Introducción:
Te has preguntado, ¿Qué le hace falta a tu familia?
Tal vez en una familia disfuncional, la esposa diga:
Hace falta mi esposo que nos abandonó.
Un hombre diga, ¡Hace falta una mujer que se fue!
Un hijo diga: ¡Me hace falta mi padre, o me hace falta mi madre!
O quizás, diga un hijo, me hacen falta los dos padres, porque e nunca están porque tienen que trabajar, o simplemente les han abandonado.
O quizás, es una familia funcional, y piensen, nos hace falta algunas cosas materiales, como una casa, un vehículo, unos asiento, o ropa, zapatos, etc.
Aún en una familia Cristiana, podría decir algo similar.
Inclusive podríamos sentir que emocionalmente nos falta algo, afectivamente, nos falta amor.
Pero en una familia Cristiana, nosotros debemos ver más allá de las necesidades materiales, emocionales o afectivas.debemos ver que nos hace falta espiritualmente.
Jesús dijo en MATEO 6:33
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
En nuestra lectura de hoy, encontramos en contexto, todo lo que corresponde al reinado de Salomón.
Específicamente entre el capítulo 2 y el capítulo 7, encontramos todo lo concerniente a la construcción del templo.
Más específicamente desde el capítulo 6 hasta el final del 7 encontramos la dedicación del templo.
Sin embargo del versículo 11 del capítulo 7 en adelante encontramos el pacto de Dios con Salomón.
Ahí vamos a estudiar en estos versículo, el llamado de Dios, lo que Dios esperaba del pueblo, y para hablar de ello, necesitamos preguntarnos:
¿Porqué Dios hace esta demanda al pueblo?
En los versículos 7 y 8, encontramos que las festividades prosiguieron por siete días.
El pueblo vino desde Hamat (la frontera norte de Israel cerca del río Éufrates), hasta el arroyo de Egipto (la moderna Wadi el-Arish, que está al sur de Gaza).
Finalmente, poco antes de que el pueblo regresara a sus hogares (v. 11), al octavo día (después de terminar la fiesta de los tabernáculos, que se celebraba del 15 al 22 del mes séptimo; Lv. 23:36), hicieron solemne asamblea, porque habían hecho la dedicación … en siete días, y habían celebrado la fiesta solemne por siete días (v. 9).
En total, la dedicación del templo duró quince días. Es probable que comenzara el séptimo día del mes séptimo (2 Cr. 5:3), siete días antes de la fiesta de los tabernáculos (cf. Lv. 23:39) y terminara el día veintidós, cuando finalizaba la mencionada fiesta.
La festividad que se menciona en 2 Crónicas 7:9c es seguramente la de los tabernáculos, de modo que la fiesta de dedicación (v. 9a), duró siete días, y empezó antes de la fiesta de los tabernáculos.
Cualquiera podría decir, qué bien, todo está bien con Dios.
Sin embargo, encontramos en los versículos 11-12, a Dios, reponiendo a todo lo que Salomón había hecho, y respondiendo a la actitud del pueblo, Dios establece un pacto con su pueblo, y este es otro tipo de pacto de Vasallaje.
11 Terminó, pues, Salomón la casa de Jehová, y la casa del rey; y todo lo que Salomón se propuso hacer en la casa de Jehová, y en su propia casa, fue prosperado. 12 Y apareció Jehová a Salomón de noche, y le dijo: Yo he oído tu oración, y he elegido para mí este lugar por casa de sacrificio.
Dios le dice ha salomón que ha oído sus oraciones, en referencia a la oración de Salomón en 2 Crónica 6:26-31
Dios dice a Salomón, he elegido este lugar por casa de sacrificio.
En este tipo de Pacto, se incluía una sección que mencionaba bendiciones y maldiciones.
Las bendiciones tendrían efecto si el vasallo era fiel al rey, mientras que las maldiciones alcanzarían a los desobedientes (cf. Dt. 27–28).
De conformidad con el pacto de Dios hecho con David y Salomón, apareció Jehová a Salomón para asegurarle que le complacía la obra que había hecho y la dedicación del templo (2 Cr. 7:11–12).
Ahora, en seguida, Dios animó a Salomón con la promesa de que si hacía caer su juicio sobre el pueblo por algún pecado, provocando sequía, enviando langostas o pestilencia …, el pueblo sólo tenía que volverse al Señor en sincera humildad y arrepentimiento, dejando sus malos caminos, para que fueran perdonados y restaurados 2 Crónicas 7: 13–15
13 Si yo cerrare los cielos para que no haya lluvia, y si mandare a la langosta que consuma la tierra, o si enviare pestilencia a mi pueblo; 14 si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra. 15 Ahora estarán abiertos mis ojos y atentos mis oídos a la oración en este lugar;
Y es en estos pasajes principalmente en el versículo 14, donde Dios, le dice al pueblo lo que le hacía falta.
Recuerde la pregunta inicial: ¿Porqué Dios hace esta demanda al pueblo?
Dios dice al pueblo, yo cumpliré mi parte de este pacto, pero ustedes deben hacer su parte.
Hermanos, ahora nosotros estamos en Cristo, nuestras vidas, nuestras familias, le pertenecen al Señor.
Todos nosotros al igual que el pueblo de Israel, necesitamos oír la voz de Dios , escuchar a Dios, y hacer nuestra parte.
debemos pensar, ¿qué nos hace falta para que Dios esté contentos con nosotros?, ¿Que nos hace falta para que las bendiciones de Dios estén en nuestras vidas, en nuestras familias?
Hay cuatro cosas que Dios nos manda a buscar, porque hacen falta en nuestras vidas, en nuestras familias que todos los cristianos deberíamos atender, en el llamado de Dios.
I. NOS HACE FALTA HUMILDAD ( 14a)
I. NOS HACE FALTA HUMILDAD ( 14a)
“14si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado........
Lo primero que el Señor quería de su pueblo es que se humillaran, y esto significa que había mucha soberbia en él corazón de su pueblo.
Lastimosamente en muchas familias cristianas lo que más hace falta es la humildad, y en los tiempos de crisis y dificultad la humildad es necesaria para poder reconocer que, los problemas que estamos enfrentando en nuestra familia es por causa de nuestras propias malas decisiones y no debemos culpar a nuestro Dios (Proverbios 19:3) sino que con humildad debemos buscar su ayuda.
3 La insensatez del hombre tuerce su camino, Y luego contra Jehová se irrita su corazón.
La verdadera solución a los problemas y crisis de nuestra vida está en nuestro Dios, humillarnos ante él.
Solo un Corazón Contrito y humillado, cambiará su situación la vida de nuestras familias, cambiará por el favor de Dios.
II. NOS HACE FALTA ORACIÓN (2 Crónicas 7:14b)
II. NOS HACE FALTA ORACIÓN (2 Crónicas 7:14b)
.....y oraren, ......
Es triste pero es una realidad que en muchas familias cristianas aun en tiempos de crisis lo que menos hay es tiempo para orar en familia.
Lastimosamente en muchas de nuestras familias cristianas lo que hay es abundancia de televisión, abundancia de redes sociales, abundancia de juegos en linea, abundancia de música, pero hay escasez de oración.
Toda nuestra familia tiene que comprender que la oración no es una opción, o una de las tantas armas para enfrentar las dificultades, sino que es verdaderamente una necesidad, así lo enseñó el Señor (Lucas 18:1)
1 También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar,
Necesitamos orar en familia siempre.
La oración nos abre la oportunidad para que nuestra familia reconozca que nuestro Dios puede hacer posible lo imposible (Marcos 11:24).
24 Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.
Tenemos que comprender que la oración en familia es una conexión directa con el Reino de los cielos en nuestro hogar (Mateo 18:20).
20 Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.
Muchas veces este versículo lo aplicamos únicamente a la iglesia, pero el primero lugar donde este versículo se hace realidad es en nuestra propia casa.
La oración en familia nos ayuda a perdonarnos y poder convivir en armonía con nuestros familiares (Marcos 11:25) y eso traerá bendición a nuestro hogar.
25 Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.
III. NOS HACE FALTA BUSCAR A DIOS EN LA IGLESIA (2 Crónicas 7:14C)
III. NOS HACE FALTA BUSCAR A DIOS EN LA IGLESIA (2 Crónicas 7:14C)
.....y buscaren mi rostro.....
Hoy en día las familias están tan afanadas buscando tantas cosas que se han olvidado de lo principal:
¡Buscar a Dios!
Pasamos las semanas y los meses buscando la provisión material en el trabajo, en los negocios, que muchas veces no apartamos el tiempo para buscar las cosas de Dios en la iglesia, porque no hemos creído lo que dice la palabra del Señor (Mateo 6:33).
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
Una familia que nos se congrega, que no busca al Señor en su casa, es decir en en la iglesia, es una familia que está perdiéndose de grandes bendiciones (Salmo 111:2).
2 Grandes son las obras de Jehová, Buscadas de todos los que las quieren.
No caigamos en la mala costumbre de muchas familias cristianas (Hebreos 10:25).
25 no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca.
IV. NOS HACE FALTA DEJAR NUESTROS MALOS CAMINOS (2 Crónicas 7:14d)
IV. NOS HACE FALTA DEJAR NUESTROS MALOS CAMINOS (2 Crónicas 7:14d)
Como familia cristiana tenemos que comprender que no solo se trata de llamarnos cristianos, sino de vivir como hijos de Dios (Filipenses 2:15).
15 para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo;
Muchos padres y madres de familia pensamos que podemos vivir como nos da la gana y ni nuestros hijos ni nadie tiene derecho de decirnos que no está bien lo que hacemos (Nehemías 9:16).
16 Mas ellos y nuestros padres fueron soberbios, y endurecieron su cerviz, y no escucharon tus mandamientos.
Igualmente hay hijos e hijas que no reconocen sus malos caminos, sino que en su propia opinión sus caminos son rectos (Proverbios 30:12).
12 Hay generación limpia en su propia opinión, Si bien no se ha limpiado de su inmundicia.
En muchas familias cristianas ya sus miembros se están congregando con constancia, algunos ya están sirviendo en ministerios de su iglesia, ya están ofrendando y diezmando con fidelidad, pero el Señor nos hace un llamado directamente a nuestra vida (Jeremías 7:1-3).
1 Palabra de Jehová que vino a Jeremías, diciendo:2 Ponte a la puerta de la casa de Jehová, y proclama allí esta palabra, y di: Oíd palabra de Jehová, todo Judá, los que entráis por estas puertas para adorar a Jehová.3 Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: Mejorad vuestros caminos y vuestras obras, y os haré morar en este lugar.
Como familia tenemos que tomar la decisión de ya no seguir viviendo como todos viven sino que tenemos que marcar la diferencia (Jeremías 15:19).
19 Por tanto, así dijo Jehová: Si te convirtieres, yo te restauraré, y delante de mí estarás; y si entresacares lo precioso de lo vil, serás como mi boca. Conviértanse ellos a ti, y tú no te conviertas a ellos.
Esta noche para terminar hagámonos una pregunta muy importante: ¿De quién quiero que mi familia sea amigo, del mundo o de Dios? (Santiago 4:4).
4 ¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.
CONCLUSIÓN:
CONCLUSIÓN:
Dios hizo una demanda al pueblo de Israel, a través de Salomón, porque salomón estaba cumpliendo, él había construido casa para Dios.
La habían dedicado, pero ahora Dios, dice al pueblo deben hacer lo que les ha hecho falta, para que yo actúe, Dios, dice al pueblo:
“Entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra”
Si ustedes hacen esto, yo les perdonaré y sanaré sus tierras.
Para nosotros, nuestra tierra es nuestra casa, nuestro hogar, nuestra familia, la demanda de Dios es la misma para nosotros hoy, humillarnos, orar, buscarle, convertirnos de nuestros malos caminos.
Cuando lo entendamos y lo hagamos, las cosas vana cambiar en nuestras familias, la bendición y el favor de Dios estará para con nosotros.
LA PREGUNTA ES:
¿Estamos dispuestos?