Dios cumple sus promesas.

INTRODUCCIÓN

Este libro lleva el nombre de uno de sus protagonistas. Esdras quien era un sacerdote y escriba que regreso con un grupo de judíos exiliados de Babilonia a Jerusalén aprox 458 A.C.

Dentro de las Escrituras hebreas del AT, los libros de Esdras y Nehemías forman una sola colección; ya que al ser una narración histórica literaria, los eventos que suceden ahí van entretejidos magistralmente.

Nuestras Biblias modernas lo presentan como dos libros diferentes, siendo Orígenes el primero en presentarlos separados. Algunos estudiosos consideran que la repetición de las listas en el capítulo 2 de Esdras y el capítulo 7 de Nehemías son prácticamente idénticas; esto sería la evidencia que estas dos obras eran desde un inicio dos volúmenes diferentes.

En la narrativa de estos libros encontramos un hilo conductual que dirige todos los eventos que suceden en estos libros: “La Soberanía de Dios y su providencia sobre todos los eventos que suceden”.

Los libros de Esdras y Nehemías nos muestras el regreso del pueblo de Israel a su tierra después de 70 Años de cautiverio en Babilonia en tres distintas olas de retorno de exiliados, 1) Comandada por Zorobable (Capítulos 1-6), 2) con Esdras al frente (Capítulos 7-10) y la 3ª por medio de Nehemías en el libro que lleva su nombre.

Los libros de Esdras Nehemías fueron escritos y dados por Dios al pueblo de Israel con el propósito de animar a la pequeña comunidad de judíos que se mantuvo después de la cautividad en Babilonia a permanecer fiel en su compromiso del pacto con el Señor.

De la misma forma en estos días estos libros tienen el mismo fin para la iglesia de hoy: Un exhorto y enseñanza a permanecer fiel a pacto de amor que el Señor Jesús a hecho con su pueblo (la iglesia) y a salir de Babilonia (el mundo), para vivir vidas que agraden al Señor.

En el libro podemos ir viendo el testimonio de hombres (familias) valientes que obedecieron al llamado de Dios para hacer una tarea que, no era nada fácil, tenían que reconstruir el templo, reconstruir la ciudad y los muros y restaurar la comunidad judía en su propia tierra.

Cuando Dios nos pide que hagamos algo, no lo pide porque sea fácil de hacer, lo pide porque sabe que a pesar que sea difícil para nosotros cumplir la tarea, esta nos ayudará a crecer.

Sin embargo, aun en medio de esa tarea que parecía imposible, podemos ver a través de todo el libro como la Soberanía y la providencia de Dios actuaron en todo momento a favor de su pueblo.

Independientemente de nuestras circunstancias, en Esdras podemos aprender que podemos confiar en la fidelidad de Dios, no importa lo difíciles que las situaciones de la vida sean.

Después de la división del Reino en dos partes (Israel reino norte c/ 10 tribus y Juda en el Sur c/ 2 tribus);

La nación de Israel (Reino del Norte) entro en un ciclo de distintos gobiernos (Aprox. + o - 254 años ),durante los cuales los diferentes reyes que estuvieron gobernando (con algunas excepciones), paulatina y progresivamente fueron llevando al pueblo a abandonar al Señor e inclinaron el corazón del pueblo a los pecados de las naciones vecinas tales como idolatría, inmoralidad, los matrimonios mixtos, comenzaron a ver el pecado de forma natural; hasta que el Señor los entrego en manos de los Asirios cerca del año 743 A.C.

El reino Juda (sur) siguió el mismo camino que el reino del norte, pero el Señor se mantuvo con paciencia durante otros 135 años más por amor a su Nombre y aus siervo David, sin embargo se mantuvieron en los mismos caminos que los reyes de Israel y a pesar de todas las advertencias de Dios por medio de los profetas (Jeremías) respecto al juicio que vendría no entendieron y fueron rebeldes a la voz de Dios para mantenerse en sus pecados.

Jr 25:8 Por tanto, así dice el Señor de los ejércitos: «Por cuanto no habéis obedecido mis palabras, 9 he aquí, mandaré a buscar a todas las familias del norte—declara el Señor—y a Nabucodonosor, rey de Babilonia, siervo mío, y los traeré contra esta tierra, contra sus habitantes y contra todas estas naciones de alrededor; los destruiré por completo y los haré objeto de horror, de burla y de eterna desolación. 10 »Y haré cesar de ellos la voz de gozo y la voz de alegría, la voz del novio y la voz de la novia, el sonido de las piedras de molino y la luz de la lámpara. 11 »Toda esta tierra será desolación y horror, y estas naciones servirán al rey de Babilonia setenta años.

Por medio de los profetas, Dios había instado al pueblo a dejar sus pecados y volverse a el en arrepentimiento, sin embargo la obstinación del pueblo persistió más, por lo que Dios tuvo que disciplinar a su propios pueblos.

Dios nunca dejará a sus hijos sin disciplina, esto sería contrario a su carácter Santo y de Amor.

Cuando Dios nos disciplina, lo hace con propósitos de bien. (Padre al hijo).

Pensar que Dios no castiga o disciplina, es tener un concepto equivocado de quien es Dios y de lo que significa su amor.

Dios nunca nos dejará sin disciplina, pero tampoco nunca nos dará una disciplina que no podamos resistir. Dios no dejo a su pueblo desamparado y sin esperanza, sino que lo disciplino por un tiempo (70 Años) para después restaurarlo.

El amor y la misericordia de Dios se muestran que aún después de la disciplina, el también tiene un plan para la restauración.

Jr 25:12 »Después que se hayan cumplido los setenta años, castigaré al rey de Babilonia y a esa nación por su iniquidad—declara el Señor—y a la tierra de los caldeos la haré una desolación eterna.

Dios uso a un rey humano pagano para traer disciplina a su pueblo, pero al mismo tiempo el también traería disciplina a esa misma nación pagana por la vida inmunda que llevaba.

Esd 1:1 En el primer año de Ciro, rey de Persia,

Después del reinado de los babilonios, un nuevo imperio estaba levantándose, el imperio Medo-Persa gobernada por Ciro el grande, quien conquistó la ciudad de Babilonia en el 538 A.C. donde se encontraba una parte de la comunidad de los exiliados judíos.

A diferencia de los babilonios que eran despiadados y crueles con los pueblos conquistados, los Persas eran más tolerantes con los pobladores de los pueblos conquistados, permitiéndoles mantener las costumbres, sus tradiciones, e incluso su religión.

Esd 1:1 En el primer año de Ciro, rey de Persia, para que se cumpliera la palabra del Señor por boca de Jeremías, el Señor movió el espíritu de Ciro, rey de Persia, y este hizo proclamar por todo su reino y también por escrito, diciendo:

Jeremías ya había profetizado sobre esos 70 años de cautividad por Babilonia, pero también que esa misma nación sería disciplinada. En medio de esa disciplina de Dios había también una promesa de restauración para Israel

Jr 29:10 Pues así dice el Señor: «Cuando se le hayan cumplido a Babilonia setenta años, yo os visitaré y cumpliré mi buena palabra de haceros volver a este lugar. 11 »Porque yo sé los planes que tengo para vosotros»—declara el Señor—«planes de bienestar y no de calamidad, para daros un futuro y una esperanza. 12 »Me invocaréis, y vendréis a rogarme, y yo os escucharé. 13 »Me buscaréis y me encontraréis, cuando me busquéis de todo corazón. 14 »Me dejaré hallar de vosotros»—declara el Señor—«y restauraré vuestro bienestar y os reuniré de todas las naciones y de todos los lugares adonde os expulsé»—declara el Señor—«y os traeré de nuevo al lugar de donde os envié al destierro».

Desde el año 608 (la invasión de Nabucodonosor a Judea) al 538 (el año del decretó de Ciro para el retorno) hay 70 Años. Dios estaba cumpliendo sus promesas a su pueblo.

Los planes de Dios estan siempre por encima de cualquier gobierno, fuerza o interés mundial. Dios siempre esta en control total de las circunstancias, eso debería llenar nuestro corazón de paz.

Los años en el exilio tenían el propósito de mostrar pueblo de Israel, el carácter misericordioso, paciente y perdonador que Dios tiene con el pecador.

El lugar de dejarlos a la desventura, a la destrucción, a pesar de sus múltiples pecados; Dios se mantuvo fiel a su pacto de bendecir a todas las naciones por medio de los israelitas pues ellos eran su pueblo escogido, de donde vendría el Señor Jesús.

A pesar de nuestras debilidades, del incumplimiento de nuestra parte hacía el pacto de gracias, Dios se mantiene Fiel a su palabra.

Ro 5:8 Pero Dios demuestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros

Dios tiene la misericordia suficiente para que si nos volvemos a el y le buscamos de todo nuestro corazón con verdadero arrepentimiento y fe el nos escucha. Qué Alegría saber de su misericordia.

Esd 1:1 En el primer año de Ciro, rey de Persia, para que se cumpliera la palabra del Señor por boca de Jeremías, el Señor movió el espíritu de Ciro, rey de Persia, y este hizo proclamar por todo su reino y también por escrito, diciendo:

Fue el Señor, el Dios que gobierna sobre todo y sobre todos quien movió el corazón de este rey insensato a hacer algo a favor del pueblo de Israel. Vemos la soberanía de Dios actuando.

Soberano = 1 Que se gobierna a sí mismo sin estar sometido políticamente a nadie.2 Que tiene el máximo poder o autoridad sobre algo. 3. Persona que es la máxima autoridad en un estado, en especial en una monarquía absoluta o tradicional.

Dios movió el corazón del rey Ciro para llevar a cabo la continuación de su plan redentor para la humanidad.

Pr 21:1 Como canales de agua es el corazón del rey en la mano del Señor; Él lo dirige donde le place.

No era porque Israel lo mereciera, sino porque Dios mismo así lo quizo hacer, y se basto de un hombre con Ciro un rey pagano para llevar a cabo sus planes.

Lo que Ciro hizo no fue dar una simple instrucción; sino que utilizó los medios disponibles en ese momento para hacer llegar a todos los confines de su reino esta decreto.

Hizo Proclamar: Envió mensajeros que de forma hablada trasmitieran el mensaje como una instrucción pública decretada desde el gobierno central y (enviado heraldos);

Por Escrito: Significa que no solamente llevaban el mensaje en su cabeza para decirlo, sino que los mensajeros llevaban el mensaje escrito para que quedara documentado y archivado.

Esd 1:2 Así dice Ciro, rey de Persia: «El Señor, el Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra, y Él me ha designado para que le edifique una casa en Jerusalén, que está en Judá.

¿Es acaso que Ciro era un rey creyente?

De ningún modo, pero si es posible que hubiera sido expuesto a las escrituras.El historiador Flavio Josefo, relata que Daniel leyó los escritos el profeta Isaías al rey Ciro sobre si mismo:

Is 44:28 El que dice de Ciro: «Él es mi pastor, y él cumplirá todos mis deseos», y dice de Jerusalén: «Será reedificada», y al templo: «Serás fundado».

Is 45:1 Así dice el Señor a Ciro, su ungido*(Mesías), a quien he tomado por la diestra, para someter ante él naciones, y para desatar lomos de reyes, para abrir ante él las puertas, para que no queden cerradas las entradas: 2 Yo iré delante de ti y allanaré los lugares escabrosos; romperé las puertas de bronce y haré pedazos sus barras de hierro. 3 Te daré los tesoros ocultos, y las riquezas de los lugares secretos, para que sepas que soy yo, el Señor, Dios de Israel, el que te llama por tu nombre. 4 Por amor a mi siervo Jacob y a Israel mi escogido, te he llamado por tu nombre; te he honrado, aunque no me conocías.

Sin duda alguna, el hecho que Ciro haya escuchado estas palabras escritas con mas de un siglo de anterioridad, lo llevaron a creer que el Dios de Cielo, era el Dios de Israel.

Ciro no era un Israelita, tampoco era un creyente, pero por medio de las Escrituras pudo reconocer a Dios. (igual Nabucodonosor).

No importa que sea un alcalde, gobernador, senador, ministro, embajador, o presidente, Dios puede ejercer su poder soberano para cumplir sus propósitos para su pueblos (la pandemia)

Es por medio de las Escrituras que podemos conocer el carácter de Dios verdaderamente. Es solo cuando nos exponemos a ellas, que entonces nuestras mentes y corazones son cambiados, renovados y transformados.

Dios uso a Ciro como el instrumento para hacer volver a la comunidad Judía de su exilio.

Dios no le pidió permiso a Ciro si el quería o no cumplir con sus ordenanzas, sino mas bien Dios se valió de Ciro para llevar a cabo sus propósitos.

Por medio de la Palabra, el corazón de Ciro fue incitado a obedecer y cumplir con el plan de Dios trazado para Israel.

Sal 107:20 Él envió su palabra y los sanó y los libró de la muerte.

Es por medio del poder del ES que actúa en nosotros los creyentes que la palabra toma vida y nos lleva a cumplir los planes de Dios.

Es la palabra del Señor la que trae sanidad, la que limpia el alma, la que mueve los corazones a responder al llamado de Dios, tal como lo hizo Ciro.

Esd 1:2 Así dice Ciro, rey de Persia: «El Señor, el Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra, y Él me ha designado para que le edifique una casa en Jerusalén, que está en Judá.

En linea con la profecía que había escuchado acerca de el, Ciro ahora toma la encomienda especifica de Dios para levantar de nueva cuenta el templo que había sido destruido por Nabucodonosor en la invasión a Juda.

Los reyes Persas, tenían una política de tolerancia religiosa y apoyo a los pueblos conquistados. Pretendía subordinar a los dioses de estos pueblos también para que les sirvieran. Sin embargo Ciro era más bien el que estan subordinado a los planes y propósitos del Dios del Cielo en su plan de redención.

La encomienda a Ciro tenía que ver una tarea específica: Edificar una casa en Jerusalén, es decir reedificar el Templo; pero no era solo el templo, sino tambien la ciudad, y restablecer la comunidad de los exiliados en su país natal.

Sin pueblo, la tarea de la reconstrucción del templo era imposible, sin pueblo aun con el templo todo el sistema de culto y de sacrificios no podría llevarse a cabo; en la promesa de la reconstrucción del templo tambien había una promesa de restauración a Israel como nación.

Y aqui viene el decreto del rey

Esd 1:3 »Quien de entre todos vosotros pertenezca a su pueblo, sea su Dios con él. Que suba a Jerusalén, que está en Judá, y edifique la casa del Señor, Dios de Israel; Él es el Dios que está en Jerusalén. 4  »Y a todo sobreviviente, en cualquier lugar que habite, que los hombres de aquel lugar lo ayuden con plata y oro, con bienes y ganado, junto con una ofrenda voluntaria para la casa de Dios que está en Jerusalén».

El decreto del rey era un decreto en general, no estaba dirigido a un sector especifico del pueblo, o solamente para los líderes de la comunidad, sino que estaba involucrando a todos los miembros del pueblo.

Pero lo que el decreto si tenía es dos tipos de destinatarios: 1) los que querían regresar a su nación, los que querían restablecerse como un pueblo alejado de las influencias de los reinos paganos, lo que querían recuperar la adoración al Dios verdadero; y para aquellos que les parecía una buen asusto eso de retornar al Juda, pero que se encontraban demasiado cómodos ahora con su nuevo estilo de vida dentro del imperio Persa, y que ya habían construido una cierta estabilidad y quizá hasta gozaban de ciertos beneficios.

Esd 1:3 »Quien de entre todos vosotros pertenezca a su pueblo, sea su Dios con él. Que suba a Jerusalén, que está en Judá, y edifique la casa del Señor, Dios de Israel; Él es el Dios que está en Jerusalén.

El primero grupo, los que querían regresar sabían que la tarea no era fácil, que iba a significar dejar la comodidad, la tranquilidad, y la vida que tenían en Babilonia, y que quizá el viaje iba a representar una dura jornada, llena de peligros de incertidumbre o con un gran riesgo, pero ellos estuvieron dispuestos a pagar ese precio.

Así como Dios incitó el corazón de Ciro para emitir este decreto, Dios incitó también el corazón de los hombres valientes que decidieron partir rumbo a Jerusalén.

Sin saberlo, Ciro no los estaba enviado en su nombre, sino en el Nombre del Dios verdadero.

“Sea Dios con el”, Ellos no iban solos sino que el Señor iba delante de ellos para hacer la tarea.

Después de poco más de un año que la iglesia a estado en pausa a causa de la pandemia, Dios esta poniendo en 1ª Lugar en nuestras autoridades la posibilidad de reunirnos con más frecuencia y con mayor aforo.

Pero el también nos esta incitando, no solo a los lideres o a pastor de la Iglesia, sino a todos los miembros de la iglesia a que vengamos a proclamar y exaltar el nombre de nuestro Dios como un cuerpo unido.

Dios es quien a puesto esto en nuestros corazones, y si el lo ha puesto, el estará con nosotros.

Este llamado no era para todos, sino para los que pertenecían al pueblo de Dios.

Las Palabras de Ciro fueron muy concretas y exigieron dos acciones para estos hombres:

Que suba a Jerusalén. Suba = Heb Ascender, subir-viajar(ya sea a un lugar físico, a una ubicación abstracta o algún otro lugar determinado hacia arriba).

El pueblo tenía que ejercer una acción de movimiento, tenía que dejar lo que estaba haciendo, tenía que salir de la ciudad, de su comodidad, para ir hasta Jerusalén.

Ahora nosotros hemos tenido que salir de nuestras casas para venir a la Iglesia, para una vez más como hermanos comenzar a reunirnos nuevamente para levantar la Iglesia juntos, ya sea los jueves los domingos.

Y edifique casa al Señor, Dios de Israel; El es el Dios que esta en Jerusalén. Edifique = Construir, reconstruir, construir algo nuevo.

DGLE Construir. 1 Hacer un edificio u otra construcción de arquitectura o ingeniería, o una de sus partes. 2 Hacer una obra material, generalmente la que es de gran tamaño, se realiza de acuerdo con una técnica de trabajo compleja y consta de gran cantidad de elementos.3 Elaborar una idea, una teoría, un proyecto, etc., a partir de la combinación de diversos conceptos. 4 Unir y ordenar debidamente las palabras o las oraciones de acuerdo con las normas de la gramática.

El Señor no esta llamando no a construir un edificio físico (este ya esta, pero necesita mantenimiento, limpieza y cuidado), sino a ser edificados como una casa espiritual

1 P 2:5 también vosotros, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual para un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo

La tarea de la iglesia es un obra de gran tamaño, porque conlleva anunciar el mensaje de la gran comisión a todo el mundo, es compleja porque nos enfrentamos a la huestes de Satanás; pero no va en nuestras Fuerzas sino con el poder del ES y el usa la diversidad de los dones que Dios a dado a la iglesia para edificarla.

Es por medio de la Palabra que podemos caminar en unidad, porque por las opiniones podríamos todos pensar diferente, tener cada uno sus propias ideas, pero cuando nos alienamos a la Escritura, el nos da la claridad de como hacerlo.

Edificamos la iglesia a la manera de Cristo cuando ordenamos nuestras palabras y nuestros pensamientos a la Palabra de Dios. (dejamos de hablar y pensar mal de otros, mas bien oramos, nuestra boca se convierte en una fuente de bendición para otros, etc.

Los que se levantaron para ir a Juda tenían en mente que el proyecto que estaba en su manos era enorme, pero que el Dios a quien servían, era aún mas enorme y poderos y el iría con ellos.

Esd 1:4  »Y a todo sobreviviente, en cualquier lugar que habite, que los hombres de aquel lugar lo ayuden con plata y oro, con bienes y ganado, junto con una ofrenda voluntaria para la casa de Dios que está en Jerusalén».

El Segundo grupo, el de aquellos que no querían o no podían por alguna razón su vida en Babilonia, el exhorto del Ciro fue que también sirvieran con sus recursos.

En este caso fueron recursos materiales los que ellos donarían para la edificación del templo. Plata, oro, bienes y ganado. Estas cosas se necesitaban para reanudar los sacrificios, porque había que pagar los gastos de la expedición.

Damos gracias a Dios y a ustedes por la fidelidad al dar para la obra del Señor, gracias ellos hasta hoy los gastos han salido adelante.

Pero nuestro pensamiento no debe quedarse en eso, sino que más puedo hacer , que ofrenda voluntaria puedo hacer para la casa de Dios. (Recibir a mis hermanos en la puerta, quizá ayudar en la limpieza, quiero ayudar en el mantenimiento de la iglesia, quiero invitar a otros a que asistan a las reuniones, etc.

Ec 4:9-10 Más valen dos que uno solo, pues tienen mejor remuneración por su trabajo. 10 Porque si uno de ellos cae, el otro levantará a su compañero; pero ¡ay del que cae cuando no hay otro que lo levante!

Cuando Dios nos salvo, inmediatamente nos llamó a servirle, nuestro primer servicio es llevar las nuevas de Salvación a otros.

Pero ninguna mano sobra cuando se trata de trabajar para el Señor.2

TLA Gl 6:2 Cuando tengan dificultades, ayúdense unos a otros. Esa es la manera de obedecer la ley de Cristo.

Orar por nuestros hermanos, estar al pendiente de sus necesidades incluso si tenemos la posibilidad de ayudarles, es parte de nuestro servicio para la edificación de la Iglesia.

Durante 70 Años Israel fue disciplinado, pero la promesa del Señor no solo consistía en eso, sino tenía consigo tambien una esperanza de restauración.

Tuvieron que pasar años, pero Dios siempre cumplió sus promesas a favor de su pueblo, aun en medio de la adversidad, de la dificultad, o del cautiverio, Dios siempre fue fiel, el a lo largo del tiempo orquesto estos acontecimientos para mostrar que nadie podía derribar o detener su plan de redención.

Quizá hasta este momento no has pensado que a Dios se le olvido su palabra o alguna de sus promesas, lo que posiblemente el este tratando es con el pecado de nuestro corazón, para que una vez que el termine con su trato y la disciplina, veamos su promesas cumplir aunque nos parezcan lejanas.