La paradoja del fin del mundo
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El propósito de la serie
El propósito de la serie
No es una interpretación escatológica de la Biblia.
No es un análisis doctrinal sobre los últimos tiempos.
Es una serie de herramientas para acercarnos al fin del mundo con seguridad.
Son instrumentos para evitar ser engañados y dejarnos llevar fácilmente.
Es un cambio de paradigma acerca del fin.
S1: siempre tendremos curiosidad por el fin del mundo.
S1: siempre tendremos curiosidad por el fin del mundo.
3 Más tarde estaba Jesús sentado en el monte de los Olivos, cuando llegaron los discípulos y le preguntaron en privado: —¿Cuándo sucederá eso, y cuál será la señal de tu venida y del fin del mundo?
Nuestro gusto por el fin del mundo se alimenta de tres fuentes:
1. La curiosidad natural
1. La curiosidad natural
El ejemplo de los niños: son exploradores.
Cuando nos dicen: “¿Quieren saber qué va a pasar?” activan nuestra curiosidad.
2. Nuestro gusto por lo desconocido
2. Nuestro gusto por lo desconocido
El ejemplo de la publicidad
El pensamiento de que el conocimiento es poder. Si sabemos algo podemos tener el control.
3. La promoción mediática
3. La promoción mediática
Hollywood ha promovido el fin del mundo con increíbles propuestas que combinan realidad con ficción.
Libros que se vuelven best sellers y nos explican cómo, según los escritores, sucederán las cosas.
Primera respuesta: no se dejen engañar
Primera respuesta: no se dejen engañar
4 —Tengan cuidado de que nadie los engañe—les advirtió Jesús—. 5 Vendrán muchos que, usando mi nombre, dirán: “Yo soy el Cristo”, y engañarán a muchos.
Podemos ser engañados. Debemos cuidarnos de no serlo. Los falsos Cristos sabrán manipular nuestras mentes valiéndose de la curiosidad innata para confundirnos.
Segunda respuesta: no se angustien
Segunda respuesta: no se angustien
6 Ustedes oirán de guerras y de rumores de guerras, pero procuren no alarmarse. Es necesario que eso suceda, pero no será todavía el fin. 7 Se levantará nación contra nación, y reino contra reino. Habrá hambres y terremotos por todas partes. 8 Todo esto será apenas el comienzo de los dolores.
Las guerras y terremotos nos alarman naturalmente pero Jesús nos pide que no nos angustiemos.
Las guerras y rumores no son la señal del fin sino del principio.
A lo largo de la historia, en cada época, el mundo ha vivido guerras, terremotos y toda clase de acontecimientos que causaban alarma y angustia. Jesús nos contesta: no se angustien.
El mismo mensaje aplica para nosotros.
Tercera respuesta: persevera
Tercera respuesta: persevera
12 Habrá tanta maldad que el amor de muchos se enfriará, 13 pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo.
Seguimos no sabiendo cuando será el fin, pero sí sabemos una cosa: debemos perseverar.
O sea que debiéramos estar ocupados en desarrollar la perseverancia para hallar la salvación cuando llegue el fin en vez de estar preocupados en descubrir cuándo será el fin (del mundo).
Permanecer=soportar=tener paciencia.
Cada vez que la curiosidad, el deseo por lo desconocido o los medios activen tu curiosidad por el fin del mundo reorienta esa energía trabajando en tu perseverancia.
Siempre serás curioso pero no debes dejar que la curiosidad te desenfoque y secuestre tu perseverancia.
El peligro de la curiosidad
El peligro de la curiosidad
14 Y este evangelio del reino se predicará en todo el mundo como testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin.
La curiosidad por el fin del mundo puede distraernos de cumplir con nuestra misión en la tierra.
Cuando estemos ocupados en desarrollar la perseverancia y en predicar el evangelio a todo el mundo nos quedará poco tiempo para pensar en el fin del mundo.
Lo que es muy importante saber sobre el fin del mundo es que si perseveramos seremos salvados, o sea que seremos de los que se suben a las barcas de salvación (película “2012”).