VIVIENDO COMO HIJOS DE DIOS. Parte 3

Introducción:

Hasta ahora hemos estudiado los primeros 4 versículos de Efesios 5.

En los primeros dos versículos estudiamos, que, el llamado de Dios es a Vivir nuestra vida Cristiana, imitándole a Él.

Efesios 5:1–2 RVR60

1 Sed, pues, imitadores de Dios como hijos amados. 2 Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante.

El llamado que Dios hace a través del apóstol Pablo, es:

A imitarle en la benignidad, la misericordia y el perdón.

Características de Dios de acuerdo con Efesios 4: 32;

A que nosotros como hijos amados de Dios andemos en amor, porque Dios es amor.

Posteriormente en los versículos 3 y 4, el apóstol Pablo nos llama a abstenernos de malas prácticas. Efesios 5:3-4

Efesios 5:3–4 RVR60

3 Pero fornicación y toda inmundicia, o avaricia, ni aun se nombre entre vosotros, como conviene a santos; 4 ni palabras deshonestas, ni necedades, ni truhanerías, que no convienen, sino antes bien acciones de gracias.

A abstenernos de los vicios egoístas en la conducta: fornicación, inmundicia y avaricia.

A abstenernos de las conductas impropias en el hablar: Palabras deshonestas, necedades, truhanería, porque no convienen.

Ahora en los versículos del 5-7, Pablo inspirado por Dios nos enseña las razones por la cual está enseñando está verdad. Efesios 5:5-7

Efesios 5:5–7 RVR60

5 Porque sabéis esto, que ningún fornicario, o inmundo, o avaro, que es idólatra, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios. 6 Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia. 7 No seáis, pues, partícipes con ellos.

Lo primero que encontramos es que Pablo dice:

I. Porque ustedes ya saben esto.

Pablo dice, “Porque ya sabéis esto”, es decir, él, estaba reafirmando una verdad que había enseñado a los efesios muchas veces mientras estuvo pastoreando en medio de ellos, y sin duda una verdad que otros habían reforzado.

Él estaba seguro que no iba a causar ninguna confusión en ellos con lo que les había enseñado, ni con los que estaba diciendo ahora, porque no era algo nuevo.

¿Y qué es lo que saben?

II. Dios no tolera el pecado, y el amor pervertido conduce al castigo.

Ellos ya sabían, tenían conocimiento de que el pecado no tiene lugar alguno en el reino, ni en su familia. Él es santo, y sus hijos estamos llamados a ser Santos.

Ningún fornicario, inmundo y avaro tienen herencia en el reino de Cristo y de Dios.

Fornicario, inmundo y avaro se derivan de las mismas palabras griegas básicas que vimos en el versículo 3 y que se traducen fornicación, inmundicia y avaricia.

¡La avaricia es una forma de idolatría!

El hombre avaro, por lo tanto, es más que simplemente egoísta e inmoral, es idólatra (cp. Col. 3:5).

Todos los Cristianos debemos morir a estas pasiones terrenales.

Colosenses 3:5 RVR60

5 Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría;

Ahora Pablo enseña que el que practica tales cosas no tienen herencia en el reino de Cristo y de Dios, se refiere a la esfera de la salvación, la comunidad de los redimidos y el lugar de la gloria eterna.

El reino es el gobierno de Cristo y de Dios, el cual incluye la iglesia presente, el milenio futuro y el estado eterno en la gloria.

Pablo escribiendo a Tito, dice:

Tito 2:11–12 RVR60

11 Porque la gracia de Dios se ha manifestado para salvación a todos los hombres, 12 enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente,

Lo que Pablo está diciendo es que toda persona que es salvada, y por ende forma parte de ese gobierno glorioso de Cristo y de Dios, es enseñada y guiada por el Espíritu Santo y por la inclinación de su nueva naturaleza, a abandonar el pecado y buscar siempre la justicia.

Debemos entonces entender que la persona cuyo patrón básico de vida no refleja esa orientación no puede afirmar que Dios sea su Padre o que el reino de Cristo y de Dios sea su herencia.

Se hace peligroso que nosotros como iglesia hablando de la congregación, o bien cada uno de nosotros actuando de manera individual, tratemos de “Dar seguridad”de salvación a una persona que no tiene los fundamentos bíblicos para tener tal “seguridad”

Pablo cuando escribe a los Corintios en su primera carta, da una lista detallada de pecados cuya practica habitual demuestra que una persona no es salva y no tiene defensa ante Dios. 1 Corintios 6:9-10

1 Corintios 6:9–10 RVR60

9 ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, 10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios.

Hermanos, el veredicto de Dios es que sin importar cual sea el argumento que presentemos, una vida dominada de esa manera por el pecado está condenada al infierno.

Luego Pablo termina diciendo.

III. NO SE DEJEN ENGAÑAR CON PALABRAS VANAS.

Efesios 5:6 RVR60

6 Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia.

Mucha gente, aún predicadores van a tratar de negar lo que ya Dios ha hablado, pero Pablo advierte, que no se les debe prestar atención.

Dirán cosas como estas: “mira hombre, si sólo Dios es perfecto”, “Y quien no peca”, “Si la biblia dice que todos somos pecadores”, etc....

Dios dice, en su palabra… No van a heredar el reino de los cielos, ¿Quienes?.

Todos los que tengamos una vida dominada de esa manera por el pecado.

No estoy hablando de pérdida de salvación, estamos hablando de gente que cree ser salva y está en la iglesia, pero vive bajo ese patrón de vida.

¿Yo los condeno?, no, en lo absoluto, es la palabra de Dios la que lo condena.

¡No heredaran el reino de Dios!

Por eso Pablo dice, nadie los engañe, aún pudiéramos decir, ni ustedes mismos se engañen, no crean que van a estar haciendo y deshaciendo, que van a estar viviendo como el impío y mundano, y todo bien, como Dios perdona…(Salvos siempre salvos)

Sigue diciendo: ... porque por estas cosas, es decir por causa de estos pecados listados aquí, y las mentiras de las palabras vanas, viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia, hablamos del hombre impío, mundano, de donde ya nosotros salimos.

Luego Pablo, termina diciendo,

Efesios 5:7 RVR60

7 No seáis, pues, partícipes con ellos.

“No se asocien con el mundo en su perversión”, les dice; “no se unan a ellos en la maldad.

En lugar de eso, únanse y sean socios de Cristo en la justicia.

No imiten al mundo sino más bien sean imitadores de Dios, como hijos amados” (v. 1).

Conclusión:

Si estamos viviendo en el reino de Cristo y de Dios, no nos deleitamos en el pecado, ni somos participes con el mundo en su manera de vivir.

Ahora, la palabra de Dios, es la que debe llevarnos a examinarnos, y ver como estamos viviendo.

Si nos encontramos, buscando y procurando la santidad, entonces, que bien hay que seguir así, pero si nos encontramos que nos deleitamos en el pecado, hay que ver si ya somos verdaderamente del reino de Cristo y de Dios.

Otra cosa que debemos revisar, es cómo vivimos respecto al mundo, si estamos apartados o somos participes de lo que el mundo hace y practica.

Dios dice, “No seáis participe con ellos”

Que Dios a través de su Espíritu, nos ayude a ver como estamos:

Vamos a orar.