Hageo, propósito
APERTURA: Tercer y cuarto mensaje, el 18 de diciembre del 520 a.C., dos meses después del segundo mensaje. Era el mes en que se esperaban las “lluvias tempranas” para regar las nuevas cosechas. Habiendo experimentado escasez y desaliento en el período anterior, el pueblo hubiera estado especialmente preocupado acerca de la cosecha del siguiente año. Durante el anterior período de desobediencia, habían sufrido las consecuencias de su desobediencia. ¿Qué pasaría ahora que habían decidido vivir conforme al propósito que Dios les había dado? Esta es la pregunta que pasa a contestar ahora el profeta.
I. UNA CORRECTA RELACIÓN CON DIOS ABRE LAS PUERTAS A LA VIDA DE PROPÓSITO QUE ÉL NO DIO (2:10-14)
A. Una adoración incorrecta, 10,11,14
1. Como no habían reconstruido el Templo, el pueblo estaba ofreciendo sacrificios en un altar improvisado (Esd 3:3). Estas ofrendas no eran del agrado del Señor; “lo que allí ofrecen es inmundo” (v14).
2. Las buenas obras externas del pueblo no podían proveerles la bendición de Dios ni el gozo de la santidad.
B. Un principio: La suciedad / enfermedad es contagiosa, la limpieza / salud no. (12-13)
1. Igual en el mundo espiritual: durante 16 años no había templo, no había sacrificios, no había Día de Expiación. Ellos no habían estado viviendo de acuerdo con el Pacto. Entonces, el principio se aplicó a ellos. Estaban profanos a causa de sus pecados en el pasado y por eso, todo lo que tocaron también se convirtió en profano.
2. La pureza se obtiene obedeciendo: 2 Ti 2:20-22
C. Dios nos ha dado propósito: NUESTRA MISIÓN: Proclamar el Reino de Dios en todas las naciones. // Israel lo tuvo.
II. MALAS CONSECUENCIAS NOS HACEN REFLEXIONAR A VIVIR FIELES CON ESE PROPÓSITO. (2:15-17)
A. Consecuencias de una adoración incorrecta, (15-17)
1. Del primer mensaje: Sin obediencia, no hay adoración. Sin adoración, no hay servicio.
2. Ahora: Sin servicio, no hay bendición... ¿Verdad que es cuestión de prioridades... de perspectiva?
3. ¿Quieres ser parte de una iglesia que hace la diferencia? La diferencia no la harán los demás, sino tú mismo con tu obediencia, adoración y servicio a Dios.
B. Cosechamos lo que sembramos.
1. “Mira, hemos estado trabajando en el templo durante dos meses. Tu dices que la razón por la que estamos pasando tan mala racha es porque no estábamos adorando correctamente por falta de Templo. Pues bien, ya llevamos dos meses y 21 días reconstruyendo y todavía la estamos pasando mal. ¿Qué sucede? ¿Por qué seguir trabajando entonces? Nada ha cambiado, así que esto no funciona.” Se parecen a nosotros: querían resultados inmediatos.
2. “Anoche hice lo que me aconsejaste: Salimos con mi esposa y la pasamos rebién. Pero hoy ella explotó de nuevo”.
3. Aunque el perdón es posible, a veces las consecuencias quedan aunque se haya detenido el pecado (Eco de Lev 22). Las heridas que nos causan nuestros propios pecados, requieren tiempo para sanar.
4. ¿Crees que la profunda corrupción que el pecado ha causado por años, o que los hábitos de pensamientos equivocados que se han profundamente enraizados en tu mente, van a curarse de la noche a la mañana sólo porque este día comenzaste a hacer lo correcto? Necesitamos tiempo y paciencia. “Ánimo, Dios aún no ha terminado contigo.”
III. CADA MUESTRA DE SUJECIÓN A ESE PROPÓSITO NOS TRAE MÁS BENDICIÓN. (2:18-19)
A. Bendiciones materiales presentes, 18-19
1. Después del exilio, el pueblo seguía bajo el mismo Pacto. Cuando vivía conforme a él, había fertilidad. “Causa-Efecto”
2. La reflexión en el v.18 es una advertencia a no fallar otra vez.
3. Las bendiciones superan las consecuencias del pecado... a su tiempo.
4. ...No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos Gá 6:7-9
B. Bendiciones espirituales futuras, 20-23
1. Esperanza mesiánica para Zorobabel: Dios cambiará el orden del mundo pues tiene control soberano sobre toda nación
2. A Joaquín Dios maldijo diciendo que ningún hijo suyo heredaría el trono (Jer 22:24ss). De hecho, cuando Nabucodonozor se lo llevó cautivo, no puso como rey a ninguno de sus 7 hijos, sino a otro pariente suyo, Sedequías, quien fue el último rey de Judá. Zorobabel no debe temer que Dios no va a usarlo a causa de los pecados de su abuelo.
3. No temamos a causa de nuestro pasado ni a causa de nuestro trasfondo, que Dios puede y quiere usarnos.
4. Pero, ¡cuidado!, que tampoco los méritos son hereditarios. Cada quien es responsable de su servicio a Dios. Familias de pastores y misioneros contrastan con maras integradas por hijos de pastores en la Zona 19.
5. Zorobabel no estaba destinado al juicio, sino a una misión específica. Dios le tenía un honor especial reservado. La promesa se cumplió en el oficio como gobernador de Judá; y en el hecho de que ¡Zorobabel se encuentra en las dos genealogías de Jesucristo! (Mt 1:12, Lc 3:27) ¡Vaya elección! (v23)
6. En 2 Co 1:22, el Espíritu Santo es el sello que garantiza la herencia futura del creyente (Ef 1:13-14).
(Si deseas que Dios te use a ti como parte de una iglesia que hace la diferencia, hoy es tiempo de reordenar tus prioridades atendiendo primero los asuntos de Dios. Entonces, Él nos respaldará si nuestra perspectiva de trabajo es que todo lo que hacemos lo hacemos para Él y no para nosotros mismos. En el proceso, Dios espera bendecirnos mucho si nos mantenemos fieles a Su propósito para nuestra vida. El RD requiere que el pueblo de Dios tenga prioridades correctas.)
CIERRE: Hageo registra la PD a los sacerdotes en relación a las consecuencias que cosecharon por tanto tiempo de vivir en desobediencia, haciéndolos reflexionar en las promesas de Jehová de bendecirlos. Así, fueron animados a vivir fielmente al pacto. Además, Hageo registra la PD para animar a Zorobabel a que no debe tener temor pues Dios va a usarlo a pesar de los pecados de su abuelo. Semejantemente, Dios te ha escogido a ti y a mi para vivir conforme al propósito de proclamar el RD y de bendecirnos en el proceso. ¿Estás tú haciendo tu parte en cumplir la gran comisión? De lo contrario, no estaríamos siendo parte de una iglesia que hace la diferencia. Decide hoy ganar y hacer un discípulo, que después Dios te querrá dar una nación. Para ser parte de una iglesia que hace la diferencia, tu debes tener la perspectiva clara de que vivimos primero para el RD y su proclamación. Si el RD es tu prioridad, estarás haciendo la diferencia con las bendiciones que Dios te da.