LA ÚLTIMA SEMANA Contexto.

INTRODUCCIÓN

¿Qué harías si te dijeran que tienes 1 semanade vida? ¿Sales de trabajar? ¿Llamarías a alguién? ¿Qué comerías? ¿Qué lugar te gustaría visitar? ¿Sería el día que más lee la Biblia y oras? ¿O a lo mejor te gustaría pasar tu último día en un parque de Disney? ¿Visitarías a tus familiares en tu país? Muchas ideas se nos viene a la mente, pero ¿qué fue lo que hizo Cristo? Hoy veremos el inicio de la ÚLTIMA SEMANA.

DESARROLLO

1.La Entrada Triunfal.

Este es tan sólo el segundo acontecimiento en la vida de Jesús que se encuentra registrado en los 4 evangelios. El primero fue la alimentación de los 5,000. Los discípulos saben que algo significativo está a punto de suceder. Jesús caminaba a cualquier parte a donde iba. Sin embargo ahora, a como tres kilómetros de su destino final, ¿se monta en un burro? De pronto este campesino palestino se ve como un rey conquistador al entrar a la ciudad santa. Las multitudes están ansiosas … pero ¿para qué?

Juan 12:12–15 “El siguiente día, grandes multitudes que habían venido a la fiesta, al oír que Jesús venía a Jerusalén, tomaron ramas de palmera y salieron a recibirle, y clamaban: ¡Hosanna! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor, el Rey de Israel! Y halló Jesús un asnillo, y montó sobre él, como está escrito: No temas, hija de Sion; He aquí tu Rey viene, Montado sobre un pollino de asna”.

Para que esto se diera,ocurrieron ciertos elementos que tenemos que entender.Nos darán un mejor panorama:

a. Preparación:

(Mt. 11:1-7;Mt. 21:2; Lc. 19:33-34)

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Aquí tenemos el relato de la entrada triunfal de Cristo en Jerusalén. Llegó a la ciudad en esta forma: 1. Para mostrar que no tenía miedo al poder y a la maldad de Sus enemigos en Jerusalén. No quiso entrar de incógnito en la ciudad, como quien no se atreve a dar la cara. 2. Para mostrar que no se sentía deprimido o turbado ante el pensamiento de los inminentes padecimientos. No sólo llega en público, sino también con rostro sereno y tranquilo, triunfal.

Marcos 11:1–7 “Cuando se acercaban a Jerusalén, junto a Betfagé y a Betania, frente al monte de los Olivos, Jesús envió dos de sus discípulos, y les dijo: Id a la aldea que está enfrente de vosotros, y luego que entréis en ella, hallaréis un pollino atado, en el cual ningún hombre ha montado; desatadlo y traedlo. Y si alguien os dijere: ¿Por qué hacéis eso? decid que el Señor lo necesita, y que luego lo devolverá. Fueron, y hallaron el pollino atado afuera a la puerta, en el recodo del camino, y lo desataron. Y unos de los que estaban allí les dijeron: ¿Qué hacéis desatando el pollino(Burrito)? Ellos entonces les dijeron como Jesús había mandado; y los dejaron. Y trajeron el pollino a Jesús, y echaron sobre él sus mantos, y se sentó sobre él”.

Según esta cronología de la semana de la pasión, Jesús regresó a Betania el lunes por la noche después de la entrada triunfal, y volvió a entrar en Jerusalén el martes, cuando maldijo la higuera y limpió el templo. El miércoles participó en una controversia con los dirigentes de Israel, dio un sermón sobre su segunda venida, y Judas planeó traicionarlo. El jueves los discípulos del Señor se prepararon para la comida de Pascua, la cual celebraron en el aposento alto. Desde ahí el Señor y los discípulos fueron a Getsemaní, donde Él fuera traicionado y arrestado. Después de varios juicios delante del concilio y los gobernantes seculares Pilato y Herodes la noche del jueves y la madrugada del viernes, el Señor fue crucificado el viernes. El sábado estuvo en la tumba y el domingo volvió a la vida.

El lunes, el Señor envió a dos de sus discípulos (quizás Pedro y Juan; Lc. 22:8)

Lucas 22:8 “Y Jesús envió a Pedro y a Juan, diciendo: Id, preparadnos la pascua para que la comamos”.

Mr. 11 “Y les dijo: Id a la aldea que está enfrente de vosotros”.

El aspecto externo de este triunfo era muy modesto, pues entró sentado en un pollino prestado. Nació en un establo prestado, navegó en una barca prestada, comió la Pascua en un aposento prestado, fue sepultado en un sepulcro prestado y entró montado en un pollino prestado. Que no se avergüencen los creyentes de ser deudores a otros hermanos ni de pedir prestado cuando lo necesiten, pues su Maestro no se avergonzó de ello.

Desde Betania, Jesús llega a Jerusalén, como a tres kilómetros al este. Entre las dos ciudades se encuentra el monte de los Olivos, a 866 metros de altura. La cima del monte provee un panorama impresionante, especialmente del templo, ubicado a cien metros abajo. En los siguientes días Jesús hará muchas remembranzas sobre este monte. Sobre él llorará por Jerusalén, dará el “discurso del monte de los Olivos”, orará en Getsemaní y ascenderá al cielo.

En el lado este del monte de los Olivos se encuentra una pequeña aldea llamada Betfagué.

FOTO.Desde allí Jesús envía dos discípulos, de los cuales no se mencionan sus nombres, tal vez Pedro y Juan, para traerle una burra y su burrito(el Estado podía tomar animales del público en general en beneficio y uso del propio Estado. 1º Samuel 8:17 da soporte para esta práctica.

1º Samuel 8:17 “Diezmará también vuestros rebaños, y seréis sus siervos”.

¡Jesús, como descendiente de David y Mesías, ciertamente tenía este derecho! Además, los rabinos también tenían este derecho bajo ciertas circunstancias.)Marcos explica porque. Jamás alguien ha montado el burrito(Los bueyes, los burros y los potros que jamás habían sido montados en ocasiones se les usaba con propósitos sagrados Números 19:2)

Números 19:2 “Di a los hijos de Israel que te traigan una vaca alazana, perfecta, en la cual no haya falta, sobre la cual no se haya puesto yugo”

En Mateo parece 2 animales Mateo 21:2 “diciéndoles: Id a la aldea que está enfrente de vosotros, y luego hallaréis una asna atada, y un pollino con ella; desatadla, y traédmelos”.

Si Jesús espera que el burrito se muestre un poco dócil, más les vale traer consigo a la madre, especialmente con esta multitud bravia.

Con esto, se estaba cumpliendo una:

B. Profecía

Mateo 21:4–5 “Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho por el profeta, cuando dijo: Decid a la hija de Sion: He aquí, tu Rey viene a ti, Manso, y sentado sobre una asna, Sobre un pollino, hijo de animal de carga”.

El libro de Zacarías predice al Mesías con claridad sorprendente. Este pasaje en particular era interpretado por muchos rabinos como mesiánico. Mateo muestra como esta entrada triunfal cumple:

Zacarías 9:9 “Alégrate mucho, hija de Sion; da voces de júbilo, hija de Jerusalén; he aquí tu rey vendrá a ti, justo y salvador, humilde, y cabalgando sobre un asno, sobre un pollino hijo de asna”.

Esta clase de profecía seguirá hasta el final de los evangelios. Aunque ya nos hemos acostumbrado a que Jesús cumpla las profecías a través de los evangelios, nos abrumará la cantidad de profecías que Jesús cumplirá en la última semana. La mayoría presentará el mismo mensaje: Jesús es el Mesías predicho por los profetas, pero no el esperado por la gente.

C. Alabanza

A medida que Jesús avanzaba:

Mateo 21:8 “Y la multitud, que era muy numerosa, tendía sus mantos en el camino; y otros cortaban ramas de los árboles, y las tendían en el camino”.

Lucas señala:

Lucas 19:37 “Cuando llegaban ya cerca de la bajada del monte de los Olivos, toda la multitud de los discípulos, gozándose, comenzó a alabar a Dios a grandes voces por todas las maravillas que habían visto,”

Mateo 21:9 “Y la gente que iba delante y la que iba detrás aclamaba, diciendo: ¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor! ¡Hosanna en las alturas!”

Cuando Jesús escala el monte de los Olivos, la gente está lista para aclamarlo Mesías y Rey. Esta es la segunda vez que esto sucede. Un año atrás, cuando Jesús alimentó a los 5,000 (hombres), la multitud estaba preparada para hacerlo rey por la fuerza:

Juan 6:15 “Pero entendiendo Jesús que iban a venir para apoderarse de él y hacerle rey, volvió a retirarse al monte él solo”.

Eso aconteció en Galilea. Ahora, esto sucede a las puertas del templo.

Esta multitud no está congregada por accidente. Los peregrinos de la Pascua subían a Jerusalén amontonados por esta colina. Llegaban llenos de fervor religioso y político. La cantidad de sus seguidores aumenta. Además, los rumores en cuanto a Lázaro han creado una algarabía. De hecho, las noticias en las calles son que el sanedrín quiere matar tanto a Lázaro como a Jesús. La gente se muestra curiosa, a la expectativa y con júbilo. Ansían un Mesías, y este hombre, con la capacidad de hacer tales milagros, es su candidato principal.

Cuando Jesús llega a la cima del monte de los Olivos, esta enorme multitud grita de júbilo y los ecos se escuchan hasta el otro lado de la ciudad. Ello ha atraído a todos y sus implicaciones mesiánicas han generado gran animación. Del Salmo mesiánico 118,la gente toma prestadas tales frases como “Hosanna” y “Bendito el que viene”. Y la gente le agrega tales palabras mesiánicas como “David”, “reino”, “paz” y “gloria en las alturas”. Su mensaje es claro y fuerte. El sanedrín queda paralizado. Jesús los enfrentará en poco tiempo

Salmo 118:25–26 “Oh Jehová, sálvanos ahora, te ruego; Te ruego, oh Jehová, que nos hagas prosperar ahora. Bendito el que viene en el nombre de Jehová; Desde la casa de Jehová os bendecimos”.

D. Ignoracia de los discípulos.

Juan 12:16“Estas cosas no las entendieron sus discípulos al principio; pero cuando Jesús fue glorificado, entonces se acordaron de que estas cosas estaban escritas acerca de él, y de que se las habían hecho.”

Los discípulos están tan animados con todo esto como lo está toda la gente y por las mismas razones equivocadas. También ellos están errados en cuanto al Mesías, comparten con la demás gente la idea equivocada en cuanto a su misión. De hecho, no lo entenderán sino hasta que Jesús sea glorificado (es decir, ascienda). Teniendo esto en consideración, entremos a la última semana:

2. En el momento apropiado.

Juan 12:12 “El siguiente día, grandes multitudes que habían venido a la fiesta, al oír que Jesús venía a Jerusalén”

El siguiente día fue la mañana del lunes, el día después de la cena en Betania (Jn. 12:1al 11). En la noche, Judas se había reunido con los principales sacerdotes y había acordado con ellos traicionar a Jesús:

Mateo 26:14–16 “Entonces uno de los doce, que se llamaba Judas Iscariote, fue a los principales sacerdotes, y les dijo: ¿Qué me queréis dar, y yo os lo entregaré? Y ellos le asignaron treinta piezas de plata. Y desde entonces buscaba oportunidad para entregarle.”

Pero Jesús no estaba a merced de las intrigas de sus enemigos, Él siguió en control absoluto de las circunstancias. Había llegado para Jesús el tiempo de morir, ordenado divinamente:

Juan 13:1 “Antes de la fiesta de la pascua, sabiendo Jesús que su hora había llegado para que pasase de este mundo al Padre, como había amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el fin”.

El plan del Sanedrin, era prenderlo y ejecutarlo después de la fiesta, cuando el pueblo se hubiera dispersado.Pero Jesús, lo haría en sus términos.

Sin importar los deseos de sus enemigos, el Señor moriría en el momento preciso preordenado por Dios en el plan eterno:

Hechos 2:23 “a éste, entregado por el determinado consejo y anticipado conocimiento de Dios, prendisteis y matasteis por manos de inicuos, crucificándole”

De modo adecuado y exacto, el Cordero de Dios se sacrificaría el mismo día en que se sacrificaban los corderos de Pascua,

1 Co. 5:7 “porque nuestra pascua… es Cristo”

Por lo tanto, Jesús se preparó para entrar públicamente a Jerusalén y así forzar el asunto de su muerte. Sabía que los elogios de la multitud harían enfurecer a los líderes judíos, y ellos estarían aun más desesperados por matarlo. Como siempre, Dios usaría la necedad e impiedad de los malos para llevar a cabo sus propósitos:

Génesis 50:20 “Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo”.

CONSLUSIÓN

Juan 12:12 “El siguiente día, grandes multitudes que habían venido a la fiesta, al oír que Jesús venía a Jerusalén”