Persevera en la oración
Ayuno • Sermon • Submitted
0 ratings
· 87 viewsEl ejemplo del Señor Jesús de perseverar en la oración cuando estamos en angustia es vital para nosotros.
Notes
Transcript
Persevera en la oración
Persevera en la oración
Lucas 22:39–46
39 Y saliendo, se fue, como solía, al monte de los Olivos; y sus discípulos también le siguieron. 40 Cuando llegó a aquel lugar, les dijo: Orad que no entréis en tentación. 41 Y él se apartó de ellos a distancia como de un tiro de piedra; y puesto de rodillas oró, 42 diciendo: Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya. 43 Y se le apareció un ángel del cielo para fortalecerle. 44 Y estando en agonía, oraba más intensamente; y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra. 45 Cuando se levantó de la oración, y vino a sus discípulos, los halló durmiendo a causa de la tristeza; 46 y les dijo: ¿Por qué dormís? Levantaos, y orad para que no entréis en tentación.
Introducción
Introducción
La noche en que Jesús fue arrestado, unas horas antes había subido al monte de los Olivos a orar pues le agobiaba la angustia al saber la tremenda agonía que le esperaba.
Los discípulos que le acompañaron los dejó en cierto lugar, les exhortó también a orar y Él se apartó a cierta distancia de ellos.
Cuando El Señor regresó los encontró durmiendo y les dijo estas palabras: “¿Por qué dormís? Levantaos, y orad para que no entréis en tentación.”
La agonía de Jesús
La agonía de Jesús
El plan de salvación había sido elaborado desde la eternidad, así que El Señor Jesús siendo Dios sabía todo lo que debía padecer, pero en su condición de hombre sintió angustia así como la padecemos todos nosotros.
el cual, siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; Filipenses 2:6–7.
Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. Hebreos 4:15.
Sabía que su mejor opción era la oración, se entregó a ella con tanta intensidad que su sudor era como gotas de sangre, pero al final encontró refugio y consuelo pues un ángel descendió a fortalecerle.
La tristeza de los discípulos
La tristeza de los discípulos
La causa del desgano para orar de los discípulos fue la tristeza: “Cuando se levantó de la oración, y vino a sus discípulos, los halló durmiendo a causa de la tristeza. Lucas 22:45.”
Es muy difícil orar cuando hay angustia y tristeza en el corazón, pero no es imposible.
Debes perseverar en la oración aun cuando no tengas ganas de hacerlo.
Recuerda que el espíritu está dispuesto pero la carne es débil (Mateo 26:41). No permitas que tu carne venza a tu espíritu.
Motivo de la oración
Motivo de la oración
En los momentos de tristeza y angustia eres más vulnerable a los ataques de Satanás, más aún cuando no quieres perseverar en la oración.
En esos momentos el enemigo pone en tu mente pensamientos que te conducirán a tomar malas decisiones si no los reprendes.
Esa es la razón por la que El Señor nos aconseja a orar para no entrar en tentación.
La oración puede fortalecer tu mente y espíritu para resistir y vencer los ataques del enemigo.
Conclusión
Conclusión
La oración le dio al Señor la fortaleza necesaria para soportar la tremenda agonía que sufrió por amor a nosotros.
Los discípulos al no orar estaban débiles para soportar la prueba, así que huyeron cuando El Señor fue arrestado: “Entonces todos los discípulos, dejándole, huyeron. Marcos 14:50.”
Debes perseverar en oración para resistir los ataques del enemigo, si tu no lo haces nadie podrá hacerlo por ti.
Recuerda que hay muchas almas que son presa de la angustia y del dolor sin saber que Cristo es la solución, podemos llevarles el mensaje de esperanza.