Taller para padres IWIA #1

La necesidad más importante de tus hijos.

1. Repetición/ Memorización:

Deuteronomio 6:4–9 RVR60

4 Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. 5 Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. 6 Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; 7 y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. 8 Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos; 9 y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas.

2. Introducción:

¿Cuál es la necesidad más importante de tu Hijo?

Aquello que sea más importante para tus hijos es aquello a lo que te dedicarás con todas tus fuerzas y dedicación.

3. Historia:

El apóstol Pablo fue llamado por el Señor para predicar el evangelio y establecer Iglesias.

En uno de sus viajes pasó por una ciudad llamada Listra.

Ahí encontró a un joven creyente llamado Timoteo.

Todos los hermanos hablaban bien de Timoteo.

Entonces Pablo le tomó a Timoteo para que lo acompañara en sus viajes.

Es así como Timoteo acompañó al apóstol Pablo en muchos viajes y aprendió mucho de él.

Años mas tarde el apóstol encargó al joven Timoteo el cuidado de una Iglesia con el propósito de que enseñara la Palabra y formara nuevos líderes. Timoteo llegó a ser el pastor de esta iglesia.

Timoteo sirvió en esta Iglesia con mucho amor pero necesitaba ánimo e instrucción.

Entonces el apóstol Pablo le escribió dos cartas para darle ánimo e instruirle en cómo servir en la Iglesia.

Estas cartas son conocidas como “la Primera y la segunda carta del apóstol Pablo a Timoteo”

En su segunda carta el apóstol le dice a Timoteo que él recuerda la fe verdadera que había en Timoteo, misma fe que tuvo su abuela Loida y su madre Eunice.

El apóstol también le advierte a Timoteo acerca de los falsos maestros y le anima a permanecer fiel a lo que había aprendido.

El apóstol le recuerda a Timoteo que él aprendió desde la niñez las Sagradas Escrituras y que ellas le daban la sabiduría necesaria para la salvación que es por la fe en Jesús.

Con estas palabras, y muchas otras el apóstol le anima a Timoteo que siga predicando la Palabra de Dios.

4. Preguntas:

Qué parte le gustó de esta historia?

¿Qué personajes recuerdas de esta historia?

¿Qué nos enseña esta historia sobre Dios?

¿Qué nos enseña esta historia acerca de la crianza de los hijos?

5. Verdades que aprendemos acerca de la crianza de los hijos.

La necesidad más importante que nuestros hijos es saber cómo ser salvos. 2 Timoteo 3.14-15 “14 Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido; 15 y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.” La razón principal por la cual debemos enseñar a nuestros hijos la Palabra es para que ellos sean salvos.

Es necesario enseñar el evangelio a nuestros hijos desde que son pequeños. 2 Timoteo 3.14-15 “14 Pero persiste tú en lo que has aprendido y te persuadiste, sabiendo de quién has aprendido; 15 y que desde la niñez has sabido las Sagradas Escrituras, las cuales te pueden hacer sabio para la salvación por la fe que es en Cristo Jesús.” Timoteo había sido instruido desde la niñez.

Los padres deben ser de ejemplo a sus hijos creyendo ellos mismos en el Señor con una fe verdadera. 2 Timoteo 1.5 “5 trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro que en ti también.” La abuela y la madre de Timoteo le transmitieron la fe que ellas tenían a Timoteo. (Se piensa que el papá de Timoteo no era creyente)

¿Cómo evangelizamos a nuestros hijos?

Orando por ellos. 1 Samuel 1.9-11 “9 Y se levantó Ana después que hubo comido y bebido en Silo; y mientras el sacerdote Elí estaba sentado en una silla junto a un pilar del templo de Jehová, 10 ella con amargura de alma oró a Jehová, y lloró abundantemente. 11 E hizo voto, diciendo: Jehová de los ejércitos, si te dignares mirar a la aflicción de tu sierva, y te acordares de mí, y no te olvidares de tu sierva, sino que dieres a tu sierva un hijo varón, yo lo dedicaré a Jehová todos los días de su vida, y no pasará navaja sobre su cabeza.” Ana oró por un hijo que no tenía, ¡Cuánto más debemos orar nosotros por los hijos que ya tenemos!

Enseñándoles a temer a Dios. Proverbios 14.27 “27 El temor de Jehová es manantial de vida Para apartarse de los lazos de la muerte.” Que ellos entiendan que Dios ve su vida y deber dar cuenta a él.

Enseñándoles que son pecadores. Romanos 3.10 “10 Como está escrito: No hay justo, ni aun uno;” ; Romanos 3.23 “23 por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,” Ellos necesitan entender que la raíz de todos sus males es e pecado de su corazón.

Enseñándoles el evangelio de Cristo para que puedan creer en él y ser salvos. 1 Timoteo 1.15 “15 Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.” Este es el mensaje más importante. Si queremos que nuestros hijos crean y sigan a Jesús, entonces debemos hablarles de él.

Conclusión:

La palabra de Dios dice: “todo lo que el hombre sembrare, eso también cosechará” ¿Qué estás sembrando en tus hijos? ¿Entiendes que si ellos no entregan su vida a Cristo se perderán? ¿Estas entregado a Cristo y le amas de modo que tus hijos ven en ti un ejemplo de fe?