Se los llevo el bandido

Introducción: Cuando existía la costumbre de que los hombres se llevaran a las muchachas casaderas de sus hogares. Decían las señoras cuando la muchacha se había ido con su enamorado: “Se fue con un bandido”. Este es el comentario con el que San Juan cierra el capitulo 18 en la traducción NVI: “Y Barrabas era un bandido”. Este es ya el tercer acontecimiento que marca el rechazo de su pueblo: La traición, La Negación y ahora el menosprecio. Si a usted le tocara escoger, cual de estas experiencias no le gustaría pasar.

Leamos San Juan 18:28-40

Proposición: Dios nos da dos razones por las cual el hombre menosprecia a Jesús.

No queremos reconocerle como Rey

Porque decimos que no queremos reconocerle como rey:

1.1 No reconocemos su autoridad

La persona que no reconoce la autoridad es aquella que esta confundida como los sacerdotes que no sabían cuales eran las cosas que debían guardar. Ellos guardaron de no entrar al pretrorio para no contaminarse físicamente, pero su corazón estaba totalmente sucio.

Cuando uno recién empieza a trabajar lo primero con lo que tiene problema es en identificar claramente las órdenes de su superior, pues no lo conoce.

1.2 No reconocemos su reino. Ver. 33

Pilatos no entendió a que reino se refería Jesús.

Tenemos razones equivocadas por las cuales creemos que podemos ser parte de su reino: no es por raza, ni por herencia, sino solo por la voluntad de Dios, cuando creemos en Jesucristo. Sn. Juan 1:12

No queremos reconocerle como la verdad. Ver. 37

2.1 Porque no escuchamos su voz San Juan 10:1-5

2.2 Porque no hemos experimentado esa verdad. V.38

Todavía nos estamos preguntando ¿será verdad esto?

Escuche lo que dice la Palabra de Dios en San Juan 14:5-14

CONCLUSION