CONÉCTATE

ENAMORATE DEL AMOR  •  Sermon  •  Submitted
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Notes
Transcript
Con lo que comenzamos, con ello vamos a terminar. Porque la meta es que te enamores del amor, del verdadero amor.
Oseas 6:6
Porque misericordia quiero, y no sacrificio, y conocimiento de Dios más que holocaustos.
NTV – Quiero que demuestren amor, no que ofrezcan sacrificios...
¿Recuerdan la palabra que vimos la semana pasada?

HESED:

El amor de pacto que está lleno de gracia, misericordia, ternura, fidelidad, bondad, compasión, solidaridad, lealtad, compromiso, amabilidad y es expresada con buenas acciones.
Pero HESED en su significado más básico es amor verdadero, porque esta definición incluye todas las virtudes presentadas en su significado más extenso.
El día de hoy veremos la necesidad que cada ser humano tiene de poder conectarse, conectarse para su supervivencia.

Introducción:

Quisiera comenzar hablando de aquel primer instante en el que conectamos por primera vez con una persona.
Cuando nosotros hablamos de una madre gestante que ha dado a luz, siempre hablamos del impacto que experimenta una madre el día del parto. El amor, el dolor, el cansancio y todas las demás sensaciones. Siempre vemos que impacto tuvo la madre en aquel proceso de dar a luz.
Pero ¿has pensado en el impacto que experimenta el bebé al nacer?
Piénsalo. Y déjame ayudarte, para que te des alguna idea.
El bebé lleva nueve meses en un entorno protegido, envuelto en una bolsa llena de líquido amniótico (es lugar más cómodo y acolchado donde una persona desearía estar toda su vida), a temperatura estable (sin frío ni calor), sin fricciones y con una amortiguación de ruido (el único sonido que constantemente escucha es el latido del corazón de su madre).
Y de repente, de un momento a otro, todo este pequeño mundo conocido del bebé se rompe. El bebé sale del vientre materno a un mundo desconocido para él y ahora comienza a sentir sensaciones desconocidas, todo es nuevo para él.
Comienza a sentir frío, escucha ruido, hay luces e incluso una sensación de dolor cuando el médico le da una palmadita en el trasero.
¿Te estás imaginando el impacto emocional del bebé?
El obstetra es muy consciente del estrés que está experimentando el bebé en ese instante, porque el bebé se siente desorientado, desprotegido. Y por esa razón, es que, a través de los tiempos de toda la historia humana, cuando un bebé nace, lo primero que se hace es poner al bebé sobre el pecho de la madre para que el bebé pueda sentir esa conexión con su madre. Piel con piel, sentir de cerca el sonido más familiar que recuerda, el latido de corazón de su madre.
Antes de limpiarlo, de vestirlo, las parteras antiguamente y el día de hoy obstetra pone al bebé en el pecho de la madre, porque ese contacto es vital para el alma del bebé. Cuando el bebé esta con la oreja sobre el pecho de su madre, esa piel con piel y el escuchar el sonido del corazón de mamá, es su paz.
Y así como en aquel instante en el que nacimos, tuvimos la necesidad de poder conectar con otro ser humano, en ese caso mamá; toda nuestra vida tenemos la necesidad de conectar con las personas. Eso esta en nuestro ADN, eso es nuestro diseño de creación, Dios nos creó con esa necesidad. Y nuestra alma no estará tranquila hasta que suceda ello.

Dios creó al ser humano con la necesidad de conectarse:

Dios creó al ser humano con la necesidad de conectarse a otros seres humanos. Que pueda haber una conexión piel con piel, corazón a corazón, alma con alma.
Gn. 2:18 – 22
18 Y dijo Jehová Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él.
19 Jehová Dios formó, pues, de la tierra toda bestia del campo, y toda ave de los cielos, y las trajo a Adán para que viese cómo las había de llamar; y todo lo que Adán llamó a los animales vivientes, ese es su nombre.
20 Y puso Adán nombre a toda bestia y ave de los cielos y a todo ganado del campo; mas para Adán no se halló ayuda idónea para él.
21 Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar.
22 Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre.
Los primeros capítulos de la Biblia describen aquel evento donde Dios desplegó todo su poder creativo y de la nada hace una creación. Y Dios terminó al sexto día poniendo la cereza del pastel, la cereza de la creación que es el ser humano.
Antes no existía el tiempo, espacio, ni la materia. Dios con el poder de Su Palabra hizo que de la nada surgiera el espacio, el tiempo y la materia.
Gn. 1:1
En el principio creó Dios los cielos y la tierra.
Dios dijo y de la nada fue hecho. Y cuando ya Dios hubo creado estos elementos (el espacio, tiempo y materia), en los primeros cinco días Dios lleno con su creación los cielos y la tierra.
Separó el día de la noche, el agua de la tierra. Creo toda clase de plantas, los peces y monstruos del mar, los animales terrestres y las aves de los cielos. Las estrellas, el sol y la luna. Y vio Dios que todo esto era bueno.
En el sexto día, en un determinado tiempo, Dios creó al ser humano de la materia para ubicarlo en un espacio de Su creación.
Y al final v. 31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto.
Todo parece estar bien.
Pero llegamos al v. 18 del cap. 2 y vemos que Dios dice: “…No es bueno…”
Wau, Dios diciendo que algo dentro de su creación no es bueno. Pero una aclaración; Dios no dice que su creación no sea buena, porque esto sucede antes de la caída del ser humano. Dice: no es bueno que el hombre este solo.
Lo único que no era bueno en el paraíso era la soledad de Adán.
¿Había algo defectuoso en Adán? No, no había defecto, pero estaba incompleto.
La soledad de Adán no era buena en comparación a todas las cosas creadas que si estaban completas.
Dios decidió crear a Adán con una necesidad. Una necesidad que Dios más tarde le iba a suplir.
Pero pienso, creo yo, que Dios quería que Adán se diera cuenta de su propia necesidad y Dios le manda a Adán a poner nombre a todos los animales.
Gn. 2:19 - 20
19 Jehová Dios formó, pues, de la tierra toda bestia del campo, y toda ave de los cielos, y las trajo a Adán para que viese cómo las había de llamar; y todo lo que Adán llamó a los animales vivientes, ese es su nombre.
20 Y puso Adán nombre a toda bestia y ave de los cielos y a todo ganado del campo; mas para Adán no se halló ayuda idónea para él.
Imagínate a Adán poniendo nombre a cada uno de los animales. Y ve que los animales vienen hacía de dos en dos. Según su género.
Pone nombre:
- Al león y la leona.
- Al burro y a la mula.
- Al caballo y a la yegua.
- Al toro y la vaca.
- Puso nombre a las aves, a los peces y a todos los animales.
Y Adán, pienso yo, que en ese instante empezó a darse cuenta de su necesidad. Esa necesidad de conectarse con otro ser vivo igual que él.
Adán miraba hacía arriba y podía adorar a Dios, al mirar hacía abajo, podía gobernar sobre la creación, pero, al mirar a su lado, estaba solo.
Y no me estoy refiriendo a que Dios nos creó con la necesidad de tener pareja sentimental, no solamente quiero que te límites a esa idea, porque es posible sentirse completo sin una pareja, sin él o sin ella.
Me estoy refiriendo a que Dios nos creó con la necesidad de conectar con una comunidad, con otro ser vivo que tenga intelecto, emociones y voluntad. Cuerpo y alma.
A Adán Dios le proveyó de ayuda idónea, de una pareja. ¿Por qué? Porque es obvio no, tenía que ser una mujer para poder multiplicarse y llenar la tierra. Si Dios hubiese creado a otro varón, Adán hubiese conectado con esa persona, pero hubiesen muerto ambos con una hermosa conexión y ahí terminaba la existencia de la raza humana.
El factor principal por la cual Dios proveyó una compañera a Adán fue porque: …No es bueno que el hombre este solo…
Porque si nosotros no conectamos con otro ser vivo, estaremos incompletos. Podemos caer en una profunda depresión, estresarnos y sentirnos ansiosos. Vivir en soledad no es parte de nuestra humanidad.

El ser humano muere si no se conecta:

No es bueno estar solo y es mucho más que eso, la soledad es terrible. La soledad puede dejar tu alma inválida.
Hay prisiones occidentales que al día de hoy siguen castigando a las personas aislándolas de los demás. Si el estar solo no afectará en nada, no sería un castigo. Prácticamente es un medio de tortura para muchas cárceles.
Ilustración:
En el tiempo de la guerra fría (S. XX), hubo una investigación que realizó EE.UU. y Canadá.
Los investigadores de estás naciones pagaron a voluntarios, principalmente estudiantes universitarios, para que puedan pasar días o incluso semanas aislados en un cuarto cerrado a prueba de ruidos y privados de cualquier contacto humano. Estos jóvenes no oían a nadie más, no tocaban a nadie más, no veían a nadie más. Era un aislamiento total.
Los resultados fueron perturbadores (returbio).
Apenas pasadas unas horas, los jóvenes se mostraban impacientes, necesitaban estimulación. Comenzaron a hablar solos, cantar o recitar una poesía, para que puedan romper con esa soledad y ese silencio. Muchos se volvieron ansiosos, sensibles.
Al principio se les dejo tareas para que puedan desarrollarlo durante el aislamiento, pero su desempeño mental también se vio afectado por el aislamiento, y no pudieron realizar correctamente las pruebas de aritmética y de lenguaje.
Los efectos más alarmantes de algunos jóvenes fueron las alucinaciones. Uno vio a ardillas que trabajaban, otro veía solo perros, otro veía bebés. No tenía control sobre sus visiones. Otro joven tenía una alucinación sonora, escuchaba un coro musical y otro estando solo en su cuarto de aislamiento sintió que alguien le tocaba el brazo.
Cuando estos jóvenes salieron del experimento, les resultó difícil librarse de este sentido alterado de la realidad. Ellos estaban convencidos de que todo lo que vieron fue real, que su cuarto se movía y ahora estando fuera veían que los objetos cambiaban constantemente de forma y tamaño.
¿Y saben cuánto duró este experimento?
Los investigadores esperan poder observar a estos jóvenes al menos unas semanas en aquel cuarto aislado. Pero tuvieron que detener abruptamente el experimento porque los jóvenes se veían bastante mal. Muy pocos duraron más de tres días.
Quitarle al ser humano el contacto con otro ser humano es muy destructivo; es como quitarle el agua a tu cuerpo.
Pero Marlon el día de hoy no podemos experimentar un aislamiento total, es muy muy difícil.
Déjame decirte que no es tan difícil como crees.
¿Tú no te has fijado que en nuestra cultura moderna existe bastante desconexión los unos de los otros?
Lo que quiero que entiendan es que es posible estar rodeado de personas, pero estar aislándote por dentro. Es posible sentirte solo, aunque parezcas acompañado.
No necesitamos un cuarto cerrado y aislado para sentirnos solos.
Podrías tratar de refutarme diciendo: Marlon vivimos en la era de las redes sociales. Pero creo que en el fondo tú mismo sabes que, aunque estamos más conectados virtualmente, nos sentimos más solos que nunca.
El uso de la red es para poder fundamentar la comunicación, pero vemos que provoca todo lo contrario. Ha disminuido nuestra comunicación familiar, la comunicación cara a cara, persona a persona, piel con piel, con nuestros amigos, hermanos, etc. Y al mismo tiempo ha incrementado la depresión, la ansiedad en nuestras vidas.
- En estos tiempos ya es difícil salir con los amigos y no ver a alguien cogiendo el celular.
- Ya es difícil salir con la familia y no ver a uno revisando el Facebook.
- Ya es difícil salir y ver parejas que están usando 100% de su tiempo juntos para conversar, jugar o mostrarse afecto.
Esa es nuestra generación. En nuestra generación se está perdiendo el valor de la comunidad o de la familia.
…No es bueno que el hombre este solo… A pesar de que estés rodeado de personas, siempre habrá ansiedad, estrés, depresión o congoja en tu vida mientras sigues conectado a esa realidad virtual.
Si tú no te desconectas de esa realidad virtual no vas a poder conectar con tu vida real. Si tú no te desconectas de esa comunidad virtual no podrás conectarte con tu comunidad real de cuerpo y alma.
Tú y yo tenemos una necesidad en nuestras almas y es conectar con las personas, piel con piel, cara a cara, corazón a corazón. Ese es nuestro diseño original. …No es bueno que el hombre este solo…
Tu identidad en esta vida se construye principalmente con la relación que tienes con Dios. Pero al mismo tiempo tu identidad se construye con el roce que tienes con las demás personas. Tu carácter se moldea por las circunstancias en las que Dios te pone, pero también por la fricción que tienes con las personas.
Si no estás teniendo una buena conexión con tu familia, con tus hermanos sanguíneos y tus hermanos en Cristo. Si no estás teniendo una buena conexión con tus amigos. Es muy seguro que sientas ese tipo de depresión o decaimiento emocional en algún instante.
Pero déjame decirte que Cristo entiende tu necesidad de conexión.

Cristo entiende tu necesidad de conexión:

Solamente hay una persona que ha podido mantener una conexión perfecta en el tiempo infinito en el que existe. Ese es Cristo.
Hablamos de la perfecta conexión de la Trinidad. El Padre conectado a al Hijo, El Hijo conectado al Padre. El Espíritu conectado al Hijo, El Hijo conectado al Espíritu. El Padre conectado al Espíritu, el Espíritu conectado al Padre.
Son tres personas en uno (Tri – unidad, Trinidad). Es la pluralidad de tres personas en un solo Dios (como les dije la semana pasada, la Trinidad no es un tema que ahora vamos a ver, espero que si se dé más adelante). Lo que quiero resaltar aquí es la conexión intima que Dios tiene en sí mismo. Esa conexión perfecta.
Existen muchos versículos para mostrar la conexión intima y perfecta de Dios en si mismo. Pero vamos a coger solo un verso, el cual ya vimos.
Gn. 1:1
En el principio creo Dios los cielos y la tierra.
Ese sustantivo que tu ves ahí, Dios. Ese sustantivo involucra la Trinidad. En el hebreo es ELOHIM, este sustantivo presenta a la pluralidad de las tres personas en un solo Ser actuando en el momento de la creación.
Para cuando Dios creo el tiempo, ya mucho antes, en la eternidad pasada había una conexión íntima y perfecta de Dios en sí mismo.
Pero esa conexión intima y perfecta que existía en Dios, un día se tuvo que romper por amor a nosotros. Y es por eso que Cristo entiende nuestra necesidad de conexión, no solo porque tomo forma de hombre, sino porque se desconecto por un momento de esa perfecta conexión que tenía con las otras dos personas de la Trinidad.
Mt. 27:46
Cerca de la hora novena, Jesús clamó a gran voz, diciendo: Elí, Elí, ¿lama sabactani? Esto es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?
Cristo se desconecto en aquella Cruz, de su perfecta conexión con el Padre y con el Espíritu Santo, por amor a nosotros, por el HESED a cada uno de nosotros.
Cristo cargo nuestros pecados en aquella Cruz, pago nuestros pecados en aquella Cruz. Y como Dios es Santo Santo Santo y como no puede ver pecado delante de Él, tuvo que dar la espalda por un instante a Su Hijo porque Cristo cargaba en su persona todos nuestros pecados.
Cristo conoce que por tu falta de conexión muchas veces te sientes solo, porque Él sabe lo que es estar solo. Cristo conoce tu angustia y decaimiento emocional, porque Él paso angustia en esa Cruz.
Porque lo que ha Cristo le dolió, no fueron los clavos, la corona de espinas, que lo abofetearan, lo golpearán, lo escupieran o que le atravesaran con una lanza en su costado. Lo que ha Cristo le dolió fue esa desconexión que tuvo con Su Padre. Esa desconexión que tuvo consigo mismo.
¿Puedes hacerte una idea del dolor que significó para Cristo quedarse solo en aquella Cruz? Se quedo solo Aquel que siempre estuvo unido a Dios.
De cierta manera Cristo sintió el infierno en esa Cruz. Porque el infierno es ausencia absoluta de Dios. El infierno es la soledad eterna.
Y Jesús lo experimentó en esa Cruz por ti y por mí, por amor.
Y lo que mantuvo a Cristo en esa Cruz, soportando el dolor de la soledad fue la esperanza de recuperar una relación rota del hombre con Dios.
Esa relación que el hombre quebró en el huerto del Edén, Cristo tuvo que recuperarla a través de su sacrificio.
Cristo me ayuda a conectarme con Dios y con los demás:
Para que tu yo volviéramos a conectar con Dios, Cristo tuvo que desconectarse por un momento de Dios.
1 Tm. 2:5 - 6
Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo en rescate por todos, de lo cual se dio testimonio a su debido tiempo.
Nosotros rompimos esa relación que teníamos con Dios, cavamos un abismo entre Dios y nosotros. Y Cristo tuvo que poner un puente en ese abismo para que tú y yo podamos tener una conexión con Dios.
Solamente a través de Cristo nosotros podemos conectarnos con el Padre. Solamente a través de Cristo tenemos entrada ante el trono de la Gracia.
Porque sino llegamos al Padre, sino nos conectamos con Dios menos podemos conectarnos con las demás personas.
Gn. 2:21 - 22
21 Entonces Jehová Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar.
22 Y de la costilla que Jehová Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre.
La única persona que pudo aliviar la necesidad de Adán de poder conectar con otro ser vivo igual a él, fue Dios. Dios le proveyó, le dio, una pareja a Adán. Así que Adán no estuvo más solo.
Necesitas conectarte con Dios para poder conectarte con las demás personas. Solo Él provee y pone las personas adecuadas para poder satisfacer esa necesidad de conexión. Solo Dios provee y pone las personas adecuadas en tu vida, para poder formar tu identidad y tu carácter.

Conclusión:

Entonces yo necesito entender que mi falta de conexión con las demás personas, es una falta de relación con Dios. Y no hay relación con Dios, no hay conexión con Dios, si no tengo relación con Cristo.
Si no conectas con las demás personas y sientes vivir en soledad a pesar de estar rodeado de personas, es porque primero no has conectado con el que conoce tu necesidad.
Y tú me dirás: ¿Marlon, porque tendría que conectar con las demás personas?
Necesitamos conectarnos con las personas, porque es a ellos a quienes Dios me manda a mostrar HESED.
No a un perro, gato, no a una cosa u objeto.
Sino a una persona que tiene alma y cuerpo. A un ser vivo que tiene intelecto, voluntad y emociones.
Busca relacionarte más con Cristo, conócelo, busca a través Su Palabra conocer más de Su amor. Ora y pídele a Dios con confianza, que te pueda poner personas con las cuales conectar y mostrarles HESED.
Dios te puso en esta comunidad cristiana por algo y es en este lugar, con los jóvenes y adultos de esta congregación con quienes primero deberías de conectar y mostrar HESED.
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