Las Trompetas

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Las Trompetas:

Gratitud a Jesús por la Proclamación del Juicio

“Ahora es el juicio de este mundo;

ahora el príncipe de este mundo será echado fuera”

(Juan 12:31)

INTRODUCCIÓN

            Había un día especial en el calendario de las fiestas de redención en el antiguo Israel y este era el día de sonar las trompetas. Esta celebración se llevaba a cabo en el primer día del séptimo mes (primer mes del año civil) del calendario religioso y se conocía como Rosh Hashana, el primer día de año nuevo, el año civil.

I. SIGNIFICADO DE LA FIESTA DE LAS TROMPETAS (Lev. 23:24-25; Núm. 29:1-6)

            Tanto el libro de Levítico como Números hablan de este día como una “conmemoración al son de trompetas” (Lev. 23:24) y como el “día de sonar las trompetas” (Núm. 29:1). Se tocaban las trompetas porque se avecinaba el día de la expiación y los primeros nueve días del mes debían ser días de preparación para esa ocasión. Mediante esta ceremonia se anunciaba y se proclamaba que en  nueve días todo israelita debía estar cabalmente preparado para enfrentar el día del juicio ante Dios.

           

II. CRISTO Y LA PROCLAMACIÓN DEL JUICIO (Juan 12:31)

            “Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera” (Juan 12:31).

1. ¿En qué consiste este juicio? En que el príncipe de este mundo pierde su dominio sobre él (Juan 12:31). “El dominio de Satanás sobre las almas de los hombres será quebrantado” (DTG 579).

            2.  ¿Cuándo ocurre este juicio? “Ahora”. Esta es la hora de Jesús. El “ahora de la crucifixión”. Cristo proclamó con autoridad que Satanás sería destruido y fue en la cruz donde se definió el destino y derrota final de Satanás.

            Gratitud a Jesús porque proclamó la derrota final de Satanás. Satanás es un enemigo derrotado y en esto la iglesia y el creyente deben encontrar seguridad. Puede vencer al enemigo porque Cristo lo venció.

           

III. LA IGLESIA LLAMADA AL JUICIO (Apoc. 8, 9; 1 Ped. 4:17)

1.                          “Porque es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios; y si primero comienza por nosotros, ¿cuál será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios?” (1 Ped. 4:17).

            2.             Cristo “pronunciará el juicio sobre cada alma” (DTG 181).

            3.            “Nuestra condenación en el juicio no se deberá al hecho de que hayamos estado en el error, sino al hecho de haber descuidado las oportunidades enviadas por el cielo para que aprendiésemos lo que es la verdad” (DTG 454).

            4.             El Apocalipsis describe la profecía de las 7 trompetas y “las trompetas son la seguridad que Dios da a sus santos perseguidos de que a pesar de las guerras, plagas, hambres y muerte por las cuales pasen, él continúa ejerciendo el control del mundo; que aún es juez y castigará a los impíos” (7 CBA 804).

            5. Ilustración: “Y dijimos que estaba bien”

En la entrevista que le hicieron a la hija de Billy Graham en el Early Show, Jane Clayson le preguntó: "¿Cómo pudo Dios permitir que sucediera esto?“

 (se refería a los ataques del 11 de septiembre).

Anne Graham dio una respuesta sumamente profunda y llena de sabiduría.

Dijo:

             "Al igual que nosotros, creo que Dios está profundamente triste por este suceso, pero durante años hemos estado diciéndole a Dios que se salga  de nuestras escuelas, que se salga de nuestro gobierno y que se salga de nuestras vidas”.

Y siendo el caballero que Él es, creo que se ha  retirado tranquilamente. ¿Cómo podemos esperar que Dios nos dé Su bendición y Su protección cuando le hemos exigido que nos deje estar solos?"

A la luz de ciertos sucesos recientes... ataques de terroristas, balaceras en las escuelas, etc., creo que todo comenzó cuando Madeleine Murria O'Hare se quejó de que no quería que se rezara en nuestras escuelas, y dijimos que estaba bien.  Ella fue asesinada y hasta hace poco que se descubrió su cuerpo

Luego alguien dijo que mejor no se leyera la Biblia en las escuelas...la Biblia dice no matarás, no robarás, amarás a tu prójimo como a ti  mismo.

Y dijimos que estaba bien.

Luego el Dr. Benjamín Spock dijo que no debíamos pegarle a nuestros hijos cuando se portan mal porque sus pequeñas personalidades se truncarían y podríamos lastimar su autoestima.

Dijimos que los expertos saben lo que están diciendo.

Luego alguien dijo, dejemos que nuestras hijas aborten si quieren, y ni siquiera tienen que decirles a sus padres.

Y dijimos que estaba bien.

Luego uno de los consejeros del consejo de administración de las escuelas dijo, ya que los muchachos siempre van a ser muchachos y de todos modos lo van a hacer, démosle a nuestros hijos todos los condones que quieran para que puedan divertirse al máximo, y no tenemos que decirle a sus padres que se los dimos en la escuela.

Y dijimos que estaba bien.

 Luego alguien dijo vamos a imprimir revistas con fotografías de mujeres desnudas y decir que esto es una apreciación sana y realista de la belleza del cuerpo femenino.

Y dijimos que estaba bien.

Y luego alguien más llevó más allá esa apreciación y publicó fotografías de niños desnudos, llevándola aún más allá cuando las colocó en Internet.

Y dijimos que estaba bien.

Ellos tienen derecho a su libertad de expresión.

Luego la industria de las diversiones dijo, hagamos shows por televisión y películas que promuevan lo profano, la violencia y el sexo ilícito.

Grabemos música que estimule las violaciones, las drogas, los suicidios y los temas satánicos.

            Y dijimos que estaba bien.

Ahora nos preguntamos:

•       ¿por qué nuestros niños no tienen conciencia,

•       por qué no saben distinguir entre el bien y el mal,

•       y por qué no les preocupa matar a desconocidos, a sus compañeros de escuela, o a ellos mismos?.

Probablemente, si lo pensamos bien y despacio, encontraremos la respuesta.

Creo que tiene mucho que ver con "LO QUE SEMBRAMOS ES LO QUE RECOGEMOS."

Es curioso cómo la gente simplemente manda a Dios a la basura y luego se pregunta por qué el mundo está en proceso de destrucción.

Con estos ejemplos verídicos, pareciera que Dios no está al control de los acontecimientos de este mundo o que ha abandonado al mundo a su suerte. Sin embargo, podemos reflexionar en lo siguiente:

1.                          Dios gobierna en aquellos que se arrepienten y se someten a él  voluntariamente (Mat. 3:2).

2.                          Dios finalmente cortará la impiedad de los rebeldes y los someterá al castigo de fuego en ocasión del juicio (Mat. 3:10).

3.                          Dios todavía tiene en sus manos el control de este mundo (Mat. 3:12)

4.            “El gran juicio se ha estado llevando a cabo desde hace algún tiempo. Ahora el Señor dice: Mide el templo y a los que adoran en él. Mientras recorréis las calles haciendo vuestros negocios, recordad que Dios os está midiendo; mientras desempeñáis vuestros deberes en el hogar, mientras conversáis, Dios os está midiendo. Recordad que vuestras palabras y acciones están siendo fotografiadas en los libros del cielo, así como el artista reproduce el rostro en la placa pálida… ” (Comentarios de Elena G. de White, CBA, Tomo 7, pág. 983).

IV. LA PROCLAMACIÓN FINAL (Apoc. 14:6,7; Joel 2:1)

            “Tocad trompeta en Sion, y dad alarma en mi santo monte; tiemblen todos los moradores de la tierra, porque viene el día de Jehová, porque está cercano” (Joel 2:1).

El profeta Joel al hablar acerca de los acontecimientos finales advierte a la iglesia sobre la necesidad de estar apercibidos para la manifestación del “día de Jehová” (Joel 2:1).

            El sonido de las trompetas alertaba al pueblo de los peligros y proclamaba la necesidad de preparación. Se acerca el fin de este mundo y es preciso que la iglesia de Dios se levante de su letargo espiritual y se arrepienta y humille.

            Hay muchos que se siente satisfechos con lo que han alcanzado espiritualmente. Se sienten “ricos” y “enriquecidos” y que de “ninguna cosa” tienen necesidad (ver Apoc. 3:17). Otros creen que cuando llegue el tiempo de prueba se avivarán cuando descienda la lluvia tardía (ver TM 515).  Todos necesitan ser alertados y despertados por el sonido de la trompeta del centinela de Sión.

            El profeta Juan proclama que “ha llegado la hora de su juicio” (Apoc. 14:7).

            ¿Por qué debemos agradecer al proclamarse la hora del juicio de Dios? Finalmente, el carácter de Dios será vindicado.

1.      Los creyentes serán afirmados,

2.      Los creyentes serán afianzados,

3.      Los creyentes serán confirmados en su fe y su estabilidad y seguridad para la eternidad se establecerá.

            Es un motivo de gratitud porque la proclamación del juicio debe llevarnos a Dios en una actitud de arrepentimiento.

CONCLUSIÓN

El salmo 103 era un salmo especialmente seleccionado por el pueblo judío para cantarse en un contexto de juicio. Recordaba todas las bendiciones de que el pueblo fue objeto en todo el año. Contrasta magistralmente las deficiencias humanas con las providencias divinas:

  1. Somos pecadores y él perdona todas nuestras iniquidades v.3 y 10 al 12
  2. Estamos enfermos y él sana todas nuestras dolencias v. 3
  3. Somos tratados injustamente y él nos trata con  todo derecho y justicia v. 6
  4. Caemos en  angustia y desesperación y él rescata del hoyo nuestras vidas v.4
  5. Somos abandonados y despreciados y él nos corona de favores y misericordias v. 4
  6. Estamos con hambre y él sacia de bien nuestra boca v. 5
  7. Somos polvo y la vida se puede marchitar repentinamente y él es Creador que se compadece de su pueblo  y un día compartirá su eternidad a  todos los que le temen v. 13 al 17
  8. Por todo esto el salmista proclama y exhorta al pueblo y al universo a BENDECIR A JEHOVÁ. Esta palabra, bendecid o bendice se repite 6 veces. El salmista sabe que no puede pagar con nada todas las bendiciones recibidas durante el año, pero no deja de alabar y bendecir  a su Dios.
  9. El pueblo adventista no debe hacer menos. Bendigamos al Señor siempre.

“DEMOS A JESÚS LA MEJOR OFRENDA

QUE NUNCA LE HEMOS DADO”.

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