La parabola de la mujer de Tecoa
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Transcript
Objetivo:
Promover entre nosotros los hermanos, las buenas relaciones fraternales para la buena convivencia con base a los principios de la ley de nuestro Dios, como el perdón y la reconciliación.
Lectura Biblica:
2 samuel 14:1-19
1 Y CONOCIENDO Joab hijo de Sarvia, que el corazón del rey estaba por Absalom, 2 Envió Joab a Tecoa, y tomó de allá una mujer astuta, y díjole: Yo te ruego que te enlutes, y te vistas de ropas de luto, y no te unjas con óleo, antes sé como mujer que ha mucho tiempo que trae luto por algún muerto; 3 Y entrando al rey, habla con él de esta manera. Y puso Joab las palabras en su boca. 4 Entró pues aquella mujer de Tecoa al rey, y postrándose en tierra sobre su rostro hizo reverencia, y dijo: Oh rey, salva. 5 Y el rey le dijo: ¿Qué tienes? Y ella respondió: Yo a la verdad soy una mujer viuda y mi marido es muerto. 6 Y tu sierva tenía dos hijos y los dos riñeron en el campo; y no habiendo quien los despartiese, hirió el uno al otro, y matólo. 7 Y he aquí toda la parentela se ha levantado contra tu sierva, diciendo: Entrega al que mató a su hermano, para que le hagamos morir por la vida de su hermano a quien él mató, y quitemos también el heredero. Así apagarán el ascua que me ha quedado, no dejando a mi marido nombre ni reliquia sobre la tierra. 8 Entonces el rey dijo a la mujer: Vete a tu casa, que yo mandaré acerca de ti. 9 Y la mujer de Tecoa dijo al rey: Rey señor mío, la maldad sea sobre mí y sobre la casa de mi padre; mas el rey y su trono sin culpa. 10 Y el rey dijo: Al que hablare contra ti, tráelo a mí, que no te tocará más. 11 Dijo ella entonces: Ruégote, oh rey, que te acuerdes de Jehová tu Dios, que no dejes a los cercanos de la sangre aumentar el daño con destruir a mi hijo. Y él respondió: Vive Jehová, que no caerá ni un cabello de la cabeza de tu hijo en tierra. 12 Y la mujer dijo: Ruégote que hable tu criada una palabra a mi señor el rey. Y él dijo: Habla. 13 Entonces la mujer dijo: ¿Por qué pues piensas tú otro tanto contra el pueblo de Dios? que hablando el rey esta palabra, es como culpado, por cuanto el rey no hace volver a su fugitivo. 14 Porque de cierto morimos, y somos como aguas derramadas por tierra, que no pueden volver a recogerse: ni Dios quita la vida, sino que arbitra medio para que su desviado no sea de él excluído. 15 Y que yo he venido ahora para decir esto al rey mi señor, es porque el pueblo me ha puesto miedo. Mas tu sierva dijo: Hablaré ahora al rey: quizá él hará lo que su sierva diga. 16 Pues el rey oirá, para librar a su sierva de mano del hombre que me quiere raer a mí, y a mi hijo juntamente, de la heredad de Dios. 17 Tu sierva pues dice: Que sea ahora la respuesta de mi señor el rey para descanso; pues que mi señor el rey es como un ángel de Dios para escuchar lo bueno y lo malo. Así Jehová tu Dios sea contigo. 18 Entonces él respondió, y dijo a la mujer: Yo te ruego que no me encubras nada de lo que yo te preguntare. Y la mujer dijo: Hable mi señor el rey. 19 Y el rey dijo: ¿No ha sido la mano de Joab contigo en todas estas cosas? Y la mujer respondió y dijo: Vive tu alma, rey señor mío, que no hay que apartarse a derecha ni a izquierda de todo lo que mi señor el rey ha hablado: porque tu siervo Joab, él me mandó, y él puso en boca de tu sierva todas estas palabras;
Texto para memorizar:
32 Enséñame tú lo que yo no veo: Que si hice mal, no lo haré más.
"Tecoa (heb. Teqóa, Teqóah), "sonar', sonido de "trompeta". Tecoa fue una ciudad de Judá, hogar de Hira, uno de los valientes de David (2 Samuel 23:26) y del profeta Amós (Amós 1:1; 2 Crónicas 20:20).
Esta historia tiene que ver con el cumplimiento de lo que Dios le dijo a David que tendría que enfrentar por haber tomado a la mujer de Uría: "Por lo cual ahora no se apartará jamás de tu casa la espada; por cuanto me menospreciaste, y tomaste la mujer de Uría Hetheo para que fuese tu mujer" (2 Samuel 12:10).
Por lo que nos narra la Escritura, sabemos que Amnón hijo de David violó a su hermana Tamar, no obstante, el rey no hizo nada. Absalom, hermano de Tamar, maquinó un plan para vengar a su hermana y matar a Amnón, su medio hermano y primogénito de David. Consumado el hecho, sabiendo que había hecho mal, Absalom huye a Gessur pensando que su padre podía llevarlo a juicio, pero una vez más David no hace nada, solo llora (2 Samuel 13:37).
David estaba muy triste por su relación de enemistad con su hijo Absalom, pero no hacía nada para remediarla. Joab, el general en jefe de David, se dió cuenta de esto y decidió hacer algo para reconciliar a David y a Absalom. Joab, era fiel a David, y tal vez haya hecho esto pensando en dos cosas. Primero, Joab pensó que era peligroso tener a Absalom como enemigo en un país distante, y que lo mejor y más seguro era lograr la reconciliación entre padre e hijo. Segundo, Joab organizó esto sabiendo exactamente la forma de ser de David y demostrándole lealtad, pero no era una lealtad desinteresada. Joab sabía que Absalom podía llegar a ser el próximo rey de Israel y pensaba en formar parte de su reino. Es así como Joab decide llegar al corazón de David trayendo a una mujer delante de él con una historia o parábola inventada por Joab, misma que tenía que ver con Absalom (2 Samuel 13:37, 38).
Sabemos que la parábola de la mujer de Tecoa en realidad es una parábola creada por Joab, y que su contenido tienen que ver con lo que pasó en la familia de David (2 Samuel 14:2). Ella dice que tenía 2 hijos y que uno mata al otro, estos representan a los hijos de David, Absalom y Amnón. Los parientes que pedían la muerte de su otro hijo representan, conforme a la ley, la justicia de Dios que David no había ejecutado en Absalom, ya que de acuerdo con la ley Absalom debía morir.
No sabemos si de verdad la mujer era viuda, pero Joab le dijo que así apareciera, y al usar esta condición delante del rey y hacerle ver que su hijo era lo único que le quedaba, fue conmovido a tal grado que abogó por la mujer para que la ley no se cumpliera en su hijo. Sin saberlo, David estaba manifestando lo que él estaba haciendo ya que legalmente no hizo nada en contra de Absalom, seguramente porque era su hijo y él era el rey, pero tampoco arreglaba su enemistad con Absalom. D avid tenía una responsabilidad como rey y comoj uez principale n Israel, y cuandof ue probadoa cumplir tal responsabilidad falló. Muchos factores dieron éxito a la exposición de la mujer de Tecoa. No era de Jerusalem, lo que dificultaba investigar su caso. Era viuda, lo cual probablemente provocaría empatía. Era ya grande, lo que daba más credibilidad a su historia. Vestía ropas de luto para aumentar el impacto. Su problema, según la parábola, era también de distanciamiento familiar, pero eso no despertó sospechas en David. Nos damos cuenta de que el mismo rey David creyó que la parábola era veraz, y que le fue muy fácil ignorar la justicia de Dios a cambio de ayudar a la mujer por la situación que vivía.
Cuando el rey garantiza seguridad a la mujer, a expensas de la justicia de la ley, se logra el objetivo de esta parábola. Seguramente Joab le dijo a la mujer de Tecoa que llegado el momento enfrentara a David con respecto a Absalom y que pasara de la parábola a la realidad, pues la mujer lo hace así. Es cuando el rey pregunta si todo es obra de Joab, quien desea que David y su hijo se reconcilien. La mujer confirma haber sido enviada por Joab y aprovecha ahora la oportunidad para confrontar al rey. David no había buscado la reconciliación con su hijo. Le dice que la vida es corta, que debemos vivir en paz con todos y que el rey debe reconciliarse con el fugitivo Absalom. La mujer de Tecoa pide compasión por el atrevimiento de tratar este asunto familiar con el rey, al mismo tiempo que reconoce que David es como un ángel con el conocimiento para perdonar y ganar a un desterrado, su hijo Absalom.
Enseguida el rey David llama a Joab y lo envía para que vaya por Absalom, pero con la condición de que no lo vería, sino que solo regresara a Jerusalem. Después de tres años de vivir en el exilio y dos años más de vivir en Jerusalem sin poder ver a su padre, Absalom dice a Joab que lo lleve ante el rey. Absalom reconoce su pecado y emite su sentencia de pagar con su propia vida, pero solicita que esto se lo diga su padre directamente. Cuando Absalom llega ante su padre con una reverencia, David lo besa y no emite ninguna sentencia, solo lo recibe, se reconciliany lo perdona.
Hermanos, esta parábola del Antiguo Testamento es de gran valor para nosotros. La mujer de Tecoa nos enseña que en las relaciones personales y fraternales es bueno vivir en armonía, y si es necesaria la reconciliación debemos ir juntos por el camino del perdón, aunque los demás nos hayan hecho mucho daño. Debemos seguir el ejemplo de la misericordia divina, pues la reconciliación de todos nosotros con Dios la hizo el Señor Jesús al perdonar nuestros pecados. Hermanos, hagámoslo ahora, reconciliémonos hoy, con los hombres y con Dios.
Cuestionario:
1 En dónde se encontraba la ciudad de Tecoa? 2 Samuel 14:2
2 De quién fue esta parábola que llevó la mujer de Tecoa? 2 Samuel 14:3
3 Cuál era el propósito de esta parábola? 2 Samuel 13:37-39; 14:1
4 Cuáles son los protagonistas de la parábola? 2 Samuel 14:2-20
5 Cómo comprobar que David creyó que la parábola era cierta? 2 Samuel 14:8, 10
6 Cuál fue la actitud del rey al escuchar la parábola? 2 Samuel 14:9-11
7 Cuándo fue que David se dio cuenta que todo tenía que ver con Absalom? 2 Samuel 14:12-18
8 Cuánto tiempo tenía Absalom de no ver el rostro de su padre? 2 Samuel 13:38; 14:29
9 Qué pasó el día que David volvió a ver Absalom? 2 Samuel 14:33