Día de la Reforma

Introducción: El último domingo de Octubre se celebra en muchas iglesias evangélicas del mundo, el día de la reforma, el día de ayer lo hicimos en la 3er. IER de SPS. Celebrando también que nuestra Denominación IER en Honduras este año llego a sus 90 años de predicar el evangelio por todo el país. Como decía la remembranza del día de ayer, sería difícil contar tantos testimonios de fe y heroísmo de misioneros, pastores, evangelistas, maestros que han sembrado la semilla de La Palabra de Dios en nuestro país. Hoy guiados por las Escrituras reconocemos que la obra no ha sido de hombres sino de Dios. Leamos

Salmo 78:1–8 RVR60

1 Escucha, pueblo mío, mi ley; Inclinad vuestro oído a las palabras de mi boca. 2 Abriré mi boca en proverbios; Hablaré cosas escondidas desde tiempos antiguos, 3 Las cuales hemos oído y entendido; Que nuestros padres nos las contaron. 4 No las encubriremos a sus hijos, Contando a la generación venidera las alabanzas de Jehová, Y su potencia, y las maravillas que hizo. 5 El estableció testimonio en Jacob, Y puso ley en Israel, La cual mandó a nuestros padres Que la notificasen a sus hijos; 6 Para que lo sepa la generación venidera, y los hijos que nacerán; Y los que se levantarán lo cuenten a sus hijos, 7 A fin de que pongan en Dios su confianza, Y no se olviden de las obras de Dios; Que guarden sus mandamientos, 8 Y no sean como sus padres, Generación contumaz y rebelde; Generación que no dispuso su corazón, Ni fue fiel para con Dios su espíritu.

Una de las cosas que mas se esfuerzan los predicadores y maestros es en ser escuchados, porque hoy no tenemos esa disposición ha escuchar a otros hablar a causa de tanta distracción. Dios también quiere ser escuchado, porque el tiene muchas cosas que decirnos y el quiere que como niños escuchemos atentamente lo que el tiene que decirnos. El tiene mucho que decirnos de su sabiduría, su conocimiento, su verdad, su poder, su amor; pero también quiere contarnos historias, La Biblia contiene historias hermosas que merecen ser escuchadas: La historia de Israel, La historia del Mesias El Cristo, La historia de su iglesia (Los Hechos del Espiritu Santo). De esto quiero que escuchen esta noche, algo de la historia de la IER, para que se cumpla lo que dice el Salmo 78:

a. Que no podemos dejar de contar las maravillas que ha hecho a la nueva generación. Ver. 4

b. Que no podemos dejar de notificar lo que se nos ha ordenado que hagamos. Ver. 5

c. Que no podemos dejar de enseñarlo a otros para que lo enseñen a las generaciones venideras. Ver. 6

Con el fin de que no dejen de poner su confianza en Dios, no olviden las obras de Dios, guarden sus mandamientos y dispongan su corazón al Señor.

Primera Historia:

Nosotros somos descendientes espiritualmente en primer lugar del movimiento religioso conocido como la reforma protestante del Siglo XVI (1500), impulsado por hombres de Dios como Martin Lutero en Alemania, Suinwlio en Suiza y Juan Calvino en Francia. Hombres que predicaron al cristianismo para volver a creer únicamente en la autoridad de la Palabra de Dios, La Fe como única forma de acercarse a Dios y La Gracia como única forma de recibir el perdón de nuestros pecados y la Salvación.

La fecha que normalmente se señala como el comienzo de la Reforma es 1517, cuando Lutero clavó sus famosas 95 tesis.* Aunque, como vimos en el período anterior, ya había movimientos reformadores desde mucho antes, lo cierto es que fue con Lutero y sus seguidores que el movimiento cobró un ímpetu incontenible.

Tras una larga peregrinación espiritual, Lutero llegó por fin al convencimiento de que la salvación es por gracia, mediante la fe.* Esto le llevó a protestar contra la venta de indulgencias, y contra toda la teología que se encontraba tras ella.* Su propia teología, fundamentada en su entendimiento de la Palabra de Dios, pronto se desarrolló en direcciones que se confrontaban con la teología tradicional en más de un punto.

Empero no todos los que abandonaron el catolicismo romano se hicieron seguidores de Lutero y de sus puntos de vista. Pronto surgió otro movimiento en Suiza, bajo la dirección primero de Ulrico Zwinglio, y luego de Juan Calvino, que dio origen a las iglesias que hoy llamamos «reformadas» y «presbiterianas».

Zwinglio, el reformador de Zurich, venía de un trasfondo humanista, y llegó a conclusiones semejantes a las de Lutero por un camino distinto.* Su interés estaba principalmente en retornar a las fuentes del cristianismo, y por tanto rechazaba todo lo que no se encontrara en el Nuevo Testamento. Fue también un fogoso patriota, y murió en el campo de batalla.

El gran líder de esta tradición en la próxima generación fue Juan Calvino.* Aunque natural de Francia, Calvino fue dirigente de la reforma en Ginebra (Suiza). Su posición, más moderada que la de Zwinglio, puede verse en su magna obra, Institución de la religión cristiana, cuya primera edición no era sino un libro de bolsillo, y terminó siendo cuatro gruesos volúmenes. En ellos Calvino sistematizó la teología reformada, que pronto encontró seguidores, no solo en Suiza, sino en todo el resto de Europa.

González, Justo L.: Bosquejo De Historia De La Iglesia: González, Justo L. Decatur, GA : Asociación para la Educación Teológica Hispana., 1995, S. 83

Todos estos hombres nos dejaron un legado de apego a la verdad de la Palabra de Dios, una vida de santidad, y entrega total a Dios.

SEGUNDA HISTORIA:

En segundo lugar somos descendientes espirituales del Movimiento Misionero que desde EEUU, impulso la llegada de la Iglesia Evangélica a América Latina. Esta es la historia de la IER en Honduras, descrita de manera resumida asi: Leer historia.

CONCLUSION: De Jerusalen La Palabra de Dios llego a Europa, de Europa a America del Norte, de America del Norte a Honduras, de allí a tu corazón. De esta manera Dios nos habla a través de la historia para mostrarnos su gran amor.