Las emociones son una parte fundamental de la vida humana que, aunque dañadas por el pecado, son redimidas y restauradas por Cristo.
Las emociones sirven para guiarnos en cada decisión que tomamos en nuestra vida diaria. Es imposible tener una vida guiada solamente por la razón o la lógica.
Matthew Elliott.
Mt. 8:23–27.
Lucas 12:22
Nuestras emociones nos pueden hacer olvidar quien es Dios
Siempre debemos rendir nuestras emociones a Dios
Dios no nos rechaza a pesar de nuestras emociones
El es el único que puede cambiar nuestras emociones