CAMINANDO HACIA JESUS
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CAMINO COMPARACION A LA VIDA
CAMINO COMPARACION A LA VIDA
CAMINO LA SALVACION
CAMINO ESTRECHO Y CAMINO ANCHO
CAMINO SEGUN OPINION DEL HOMBRE
PEREGRINOS SOMOS
CAMINO ESTRECHO Y ANGOSTO NO CABEN AMISTADES , NO CABEN ORGULLOS
JUNTO AL CAMINO HERIDO SAMARITANO Y LEVITA Y SACERDITE
CAMINO PERDIDAS
ANDANDO Y LLORANDO
SAN PABLO HABLA DE UNA CARRERA
CARGAS EN JESUS
CONSEJOS DE MALOS CAMINO DE PECADORES
HIJO PRODIGO QUE VOLVIO EN SI
PUESTOS LOS OJOS EN JESUS
LA OVEJA PERDIDA
LA MUJER DE LOT MIRO HACIA ATRAS JU
Entrad por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan.
Oíd, pues, vosotros la parábola del sembrador: Cuando alguno oye la palabra del reino y no la entiende, viene el malo, y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Este es el que fue sembrado junto al camino.
El camino de la vida es hacia arriba al entendido,
Para apartarse del Seol abajo.
El camino de Jehová es fortaleza al perfecto;
Pero es destrucción a los que hacen maldad.
y habéis ya olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige, diciendo:
Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor,
Ni desmayes cuando eres reprendido por él;
Porque el Señor al que ama, disciplina,
Y azota a todo el que recibe por hijo.
Entonces tus oídos oirán a tus espaldas palabra que diga: Este es el camino, andad por él; y no echéis a la mano derecha, ni tampoco torzáis a la mano izquierda.
Les dirás asimismo: Así ha dicho Jehová: El que cae, ¿no se levanta? El que se desvía, ¿no vuelve al camino? ¿Por qué es este pueblo de Jerusalén rebelde con rebeldía perpetua? Abrazaron el engaño, y no han querido volverse.
Me mostrarás la senda de la vida;
En tu presencia hay plenitud de gozo;
Delicias a tu diestra para siempre.
Le dijo Tomás: Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo, pues, podemos saber el camino?
Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo;