Actitud del creyente ante las pruebas
De regreso a casa • Sermon • Submitted
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· 161 viewsLas Escrituras describen las actitudes que deben adoptar los creyentes en medio de la persecución, haciendo especial hincapié en la fidelidad de Dios, el ejemplo de Jesucristo y de la necesidad de la paciencia y la esperanza de los creyentes.
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El llamado a soportar en medio de la persecución
El llamado a soportar en medio de la persecución
Pasivamente
Pasivamente
Casi acaban conmigo,
pero me negué a abandonar tus mandamientos.
Ver también Mt 10:22; Mt 10:28; 1 Co 4:12; 2 Tes 1:4; Stg 5:8
Activamente
Activamente
Por lo tanto, ya que estamos rodeados por una enorme multitud de testigos de la vida de fe, quitémonos todo peso que nos impida correr, especialmente el pecado que tan fácilmente nos hace tropezar. Y corramos con perseverancia la carrera que Dios nos ha puesto por delante.
Ver también Ef 6:10–20; 2 Ti 2:3; 1 P 5:9; Ap 2:3
Actitudes que los creyentes han de adoptar para hacer frente a la persecución
Actitudes que los creyentes han de adoptar para hacer frente a la persecución
Vivir vidas santas y de perdón
Vivir vidas santas y de perdón
Procuren llevar una vida ejemplar entre sus vecinos no creyentes. Así, por más que ellos los acusen de actuar mal, verán que ustedes tienen una conducta honorable y le darán honra a Dios cuando él juzgue al mundo.
Ver también Mt 5:44; Ro 12:19–20; 1 P 2:15; 1 P 2:23; 1 P 3:16
Regocijo en el sufrimiento
Regocijo en el sufrimiento
También nos alegramos al enfrentar pruebas y dificultades porque sabemos que nos ayudan a desarrollar resistencia. Y la resistencia desarrolla firmeza de carácter, y el carácter fortalece nuestra esperanza segura de salvación. Y esa esperanza no acabará en desilusión. Pues sabemos con cuánta ternura nos ama Dios, porque nos ha dado el Espíritu Santo para llenar nuestro corazón con su amor.
Ver también Sal 30:5; Mt 5:11–12; Hch 5:41; Hch 16:22–25; Ro 12:15; Col 1:24; 1 P 1:6; 1 P 1:8; 1 P 4:12; 1 P 4:16
Confiando en la promesa de la gracia de Dios para soportar
Confiando en la promesa de la gracia de Dios para soportar
¡el fiel amor del Señor nunca se acaba!
Sus misericordias jamás terminan.
Grande es su fidelidad;
sus misericordias son nuevas cada mañana.
Ver también Sal 18:17–19; Nah 1:7–8; Ro 8:18; Ro 8:35–39; 2 Ti 3:10–11; He 13:6; Ap 3:10
Confiando en la promesa de la presencia de Dios
Confiando en la promesa de la presencia de Dios
No amen el dinero; estén contentos con lo que tienen, pues Dios ha dicho:
«Nunca te fallaré.
Jamás te abandonaré».
Ver también Sal 23:4; Is 43:2; Is 43:5; Mt 28:20; 2 Co 4:9
Orando en todo momento
Orando en todo momento
Oren en el Espíritu en todo momento y en toda ocasión. Manténganse alerta y sean persistentes en sus oraciones por todos los creyentes en todas partes.
Ver también Sal 35:24; Sal 38:15–16; Sal 129:5; Sal 143:9; Mi 7:7–8; Lc 6:28; Lc 18:7–8; 1 P 4:7
La certeza de la victoria sobre la persecución
La certeza de la victoria sobre la persecución
El triunfo de Jesucristo
El triunfo de Jesucristo
Pues Cristo tiene que reinar hasta que humille a todos sus enemigos debajo de sus pies.
Ver también Abd 21; Flp 3:20–21; 2 Tes 1:6–8; Ap 11:15
La vindicación de lo santos
La vindicación de lo santos
Y ahora, que toda la gloria sea para Dios, quien es poderoso para evitar que caigan, y para llevarlos sin mancha y con gran alegría a su gloriosa presencia.
Ver también Esd 6:8; Est 6:11–13; Sal 126:1; Dn 6:26; Hag 2:22–23; 2 Ti 1:12; Ap 2:10; Ap 7:13–17; Ap 12:11
Los creyentes deben animarse con el ejemplo de Jesucristo enfrentando la persecución
Los creyentes deben animarse con el ejemplo de Jesucristo enfrentando la persecución
La persecución de Jesucristo fue predicha en el AT
La persecución de Jesucristo fue predicha en el AT
Sal 22:1–18; Is 50:6; Is 53:7–12
El cumplimiento de estas predicciones
El cumplimiento de estas predicciones
Así fue que Pilato dejó a Barrabás en libertad. Mandó azotar a Jesús con un látigo que tenía puntas de plomo, y después lo entregó a los soldados romanos para que lo crucificaran.
Algunos de los soldados del gobernador llevaron a Jesús al cuartel y llamaron a todo el regimiento. Le quitaron la ropa y le pusieron un manto escarlata. Armaron una corona con ramas de espinos y se la pusieron en la cabeza y le colocaron una caña de junco en la mano derecha como si fuera un cetro. Luego se arrodillaron burlonamente delante de él mientras se mofaban: «¡Viva el rey de los judíos!». Lo escupieron, le quitaron la caña de junco y lo golpearon en la cabeza con ella. Cuando al fin se cansaron de hacerle burla, le quitaron el manto y volvieron a ponerle su propia ropa. Luego lo llevaron para crucificarlo.
La relevancia para los creyentes del sufrimiento inocente de Jesucristo
La relevancia para los creyentes del sufrimiento inocente de Jesucristo
Es obvio que no hay mérito en ser paciente si a uno lo golpean por haber actuado mal, pero si sufren por hacer el bien y lo soportan con paciencia, Dios se agrada de ustedes.
Pues Dios los llamó a hacer lo bueno, aunque eso signifique que tengan que sufrir, tal como Cristo sufrió por ustedes. Él es su ejemplo, y deben seguir sus pasos.
Él nunca pecó
y jamás engañó a nadie.
No respondía cuando lo insultaban
ni amenazaba con vengarse cuando sufría.
Dejaba su causa en manos de Dios,
quien siempre juzga con justicia.
Ver también 1 P 3:14–17 el sufrimiento por causa de la justicia; 1 P 4:13–14 regocijo al participar en los padecimientos de Cristo