Puesto que el diablo siempre está intentando fomentar discordia y contiendas, mantente alerta a cómo lo está haciendo en tus relaciones interpersonales. ¿Crees sus mentiras en relación a Dios? ¿A ti mismo? ¿A otras personas? ¿En qué área estás tentado a colocar tus intereses por encima de todo lo demás? Tienes que estar preparado para responder a su tentación como lo hizo Jesús en Lucas 4: con la verdad de la Palabra de Dios.