LA AUTORIDAD DE JESUCRISTO (Marcos 1:21-28)
1. AUTORIDAD PARA ENSEÑAR (21-22)
¶21 Entraron* en Capernaúm; y enseguida, en el día de reposo entrando Jesús en la sinagoga comenzó a enseñar.
22 Y se admiraban de su enseñanza; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.
22 Y se admiraban de su enseñanza; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas.
2. AUTORIDAD PARA LIBERAR (23-26)
23 Y he aquí estaba en la sinagoga de ellos un hombre con un espíritu inmundo, el cual comenzó a gritar,
24 diciendo: ¿Qué tenemos que ver contigoa, Jesús de Nazaretb? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé quién eres: el Santo de Dios.
25 Jesús lo reprendió, diciendo: ¡Cállate, y sal de él!
26 Entonces el espíritu inmundo, causándole convulsiones, gritó a gran voz y salió de él.
24 diciendo: ¿Qué tenemos que ver contigoa, Jesús de Nazaretb? ¿Has venido a destruirnos? Yo sé quién eres: el Santo de Dios.
3. NO HA HABIDO NI HABRÁ NADIE COMO JESÚS (27-28)
27 Y todos se asombraron de tal manera que discutían entre sí, diciendo: ¿Qué es esto? ¡Una enseñanza nueva con autoridad! Él manda aun a los espíritus inmundos y le obedecen.
28 Y enseguida su fama se extendió por todas partes, por toda la región alrededor de Galilea.