SI NO ES AUTOESTIMA, ENTONCES ¿QUÉ ES?

TALLER

¿Qué es la autoestima?

¿Qué es la autoestima bíblica?

Mateo 22:34–40 RVR60

Entonces los fariseos, oyendo que había hecho callar a los saduceos, se juntaron a una. Y uno de ellos, intérprete de la ley, preguntó por tentarle, diciendo: Maestro, ¿cuál es el gran mandamiento en la ley? Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el primero y grande mandamiento. Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas.

Mateo 16:24 RVR60

Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame.

Filipenses 2:3 RVR60

Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo;

Romanos 12:3 RVR60

Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno.

1. ¿Qué es la autoestima?

Valoración positiva o negativa que uno hace de sí mismo, en función de los pensamientos, sentimientos y experiencias de sí mismo.

Algunos lo llaman autoimagen.

Los autores seculares lo dividen en dos tipos:

Alta autoestima: Aquel que esta confiado en sus capacidades intelectuales, en sus capacidades profesionales, educativas, tiene destrezas. Aquel que esta positivamente confiado en sus destrezas en el mundo.

Una persona con una alta autoestima se caracteriza porque tiene mucha confianza en sus capacidades. Hablamos de la persona que asume retos, aquel que sabe llevarse a los demás por delante, etc.

Baja autoestima: Aquel que ha sido rechazado, maltratado, que se considera que es muy torpe.

Una persona con una baja autoestima se caracteriza porque se considera o son inseguras, sensibles a las críticas.

Si nosotros nos guiamos bajo este concepto, todos vamos a tener una alta autoestima o una baja autoestima.

Nosotros no demonizamos la psicología, porque hay áreas en las que es importante al momento de hacer una evaluación, como, por ejemplo: en los colegios, empresas, etc.

El problema es cuando tomamos los conceptos de la psicología como si fuera una ciencia, cosa que no lo es. Y ese concepto psicológico se quiere aplicar a la vida del creyente para tratar con los problemas; problemas que solamente un consejero bíblico a través de la Palabra de Dios puede y debe de resolver.

Etimología: La estima que se tiene de uno mismo.

Al hablar de autoestima, hay que ser muy sensibles a los múltiples casos y tipos de vivencia que ha tenido cada persona.

Y hablando bajo el concepto psicológico, yo no sé que como te defines tú, si es con baja autoestima o con una alta autoestima. Repito, bajo el concepto psicológico.

Para muchos la autoestima es la meta (no importa lo que haga consciente o inconscientemente para sentirme bien, amado o realizado), entonces enfocan sus ojos en muchas cosas que el mundo me dice que me da valor.

La corriente de la autorrealización se hizo popular con Abraham Maslow.

Abraham Maslow (Psiquiatra y psicólogo, padre de la psicología humanista), habla de las necesidades psicológicas:

Las necesidades más básicas son las biológicas y las de seguridad, cuando estas necesidades son satisfechas entonces podemos entonces movernos hacia arriba para satisfacer las necesidades psicológicas básicas: la necesidad de pertenencia y amor, la necesidad de ser apreciado por otra persona y la necesidad de autoestima.

Mi pregunta es: ¿Realmente una persona necesita tener cubierto todas estas necesidades (como Maslow lo plantea) para ser feliz, para tener una correcta autoestima, para sentirse autorrealizado?

Mira, cuando tú te ves a ti mismo como una taza que necesita ser llenada, primero tú vas a ir por la vida, consciente o inconscientemente, tratando que otras personas llenen esa taza, que algo o alguien llene tu taza. Osea: Yo necesito que mis padres me aprecien, yo necesito que mis profesores me vean de cierta manera, o los hermanos de la iglesia, o mi pareja que me vea de cierta manera.

El problema con la filosofía de Maslow o la psicología humanista que propone, es que, él ha colocado esa necesidad como algo imprescindible para yo desempeñarme correctamente.

Y chicos, estamos en un mundo caído, en un mundo lleno de pecado, incluso nosotros luchamos con el pecado que aún habita en nuestros miembros. Y esa necesidad de pertenencia y amor, esa necesidad de ser apreciados por otra persona y mi necesidad de autoestima, nunca será llenada en esta vida. Mi taza siempre va a estar vacía.

Tomando un poco la posición psicológica, quisiera hablar de aquellos que dicen tener una “baja autoestima”, supuestamente una “baja autoestima”, de aquellos que dicen que tienen un complejo de inferioridad.

Vamos a ver esto desde el instante mismo de la caída del hombre, porque ahí se da el inicio de todo.

¿Cuál fue la tentación que Satanás le vendió en el huerto del Edén a Adán y Eva?

Gn. 3:4 - 5

4 Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis;

5 sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.

¿Cuál fue la tentación que Satanás le vendió en el huerto del Edén a Adán y Eva?

…seréis como Dios…

Todo el problema del hombre o los famosos problemas psicológicos del hombre vienen porque el hombre no quiso seguir viviendo a la luz de lo que él era.

Nosotros fuimos creados a la imagen de Dios, para la gloria de Dios, no para nuestra propia gloria y para buscar nuestro deleite en Dios.

Si el hombre no hubiera pecado no habría problema de autoestima. Porque el hombre entonces estaría, en todo momento, estimando a Dios por encima de todas las cosas y ni se hubiera preocupado, en ningún momento, por sí mismo.

No estaría preocupado en que si se ama lo suficiente o no.

Dios sería su porción, su parte, su herencia, quien suple todas sus necesidades, quien llena su taza y aun lo desborda.

Pero el hombre compra esta idea de ser como Dios y a partir de ese momento, esto trae un montón de problemas psicológicos, por la sencilla razón de que ser como Dios es un estándar demasiado elevado, al cual nunca llegaremos, nunca seremos como Dios.

Hablemos de una persona tímida, que dice tener “complejos de inferioridad”, que teme hablar, se siente retraído.

En realidad, lo que esa persona tiene, es un alto concepto y estima de sí mismo.

Ro. 12:3

Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura…

Fíjate lo que el texto dice: …que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener…

Todos nosotros tenemos un mas alto concepto de nosotros mismos del que realmente deberíamos de tener.

Dice el Señor en Mt. 22:39

Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.

He oído predicadores y también lo he leído en libros la mala interpretación que le dan a este texto, diciendo:

Miren, el Señor nos dice claramente que, si tú aprendes amarte a ti mismo, podrás amar a los demás y también podrás amar a Dios.

Eso sería darle un orden equivocado a lo que ya el A.T. enseño y Cristo lo reafirmo.

Estarían agregando un mandamiento más y ubicando a este mandamiento a la cabeza. Amate a ti mismo, ama a tu prójimo y ama a Dios. Pero no hay 3 mandamientos, solo dos. Y en la práctica estaríamos diciendo que el más importante de estos 3 mandamientos es: amate a ti mismo.

Estas personas han puesto el texto bíblico de cabeza.

El Señor asume, presupone y da por sentado que tú ya te amas a ti mismo. Tú te cuidas a ti mismo.

Ef. 5:29

Porque nadie aborreció jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, …

¿Y que me puedes decir de la gente que se suicida?

Para empezar esa persona tiene problemas serios, muy serios de una mala percepción de muchas cosas. Sin embargo, aún una persona que se quita la vida, lo hace porque cree que va a estar mejor muerto que vivo.

Aun esa persona, con toda esa distorsión que tiene de la realidad, toma la decisión de quitarse la vida porque tiene un sobre aprecio de sí mismo. Se ama y no quiere estar más aquí, pero el no piensa en la secuela de dolor que va a dejar atrás, él no esta amando a los demás, él esta pensando en sí mismo.

El suicidio es el acto más egocéntrico y egoísta que existe.

Por doloroso que pueda ser esta verdad, yo espero no herir a nadie, que halla tenido que pasar por esto con un familiar, o que algún momento lo hallas pensado, no deseo herirte, pero quiero que evalúes las cosas de una forma apropiada.

El suicidio es el acto más egocéntrico y egoísta que un ser humano puede hacer y lo hace precisamente por esta realidad: el hombre se ama demasiado a sí mismo.

Yo no debo ir por la vida demandando el aprecio de los demás, la aceptación de los demás, que los demás me amen.

Lo que la Biblia me dice es que yo debo de ir por la vida amando a los demás, teniendo a los demás aun con mayor estima que yo.

Fil. 2:3

Nada hagáis por contienda o por vanagloria; antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él mismo.

Yo no necesito escuchar que alguien me diga que soy superior o que valgo más que otra persona. No, yo ya pienso eso de mí, yo ya me creo superior.

Entonces lo que yo debo de hacer, es pensar que el problema del otro es más importante que el mío, que lo que le sucede a él es más importante de lo que me sucede a mí, y debo tratar en la medida de mis posibilidades servir a los demás.

La autoestima, autoimagen o la autorrealización para el creyente consiste entender que, si yo soy hijo de Dios, mi taza no esta vacía, mi taza esta tan llena que sobreabunda y yo puedo ir por la vida amando a los demás, sirviendo a los demás.

¿Entonces cuál es la autoestima bíblica?

2. ¿Qué es la autoestima bíblica?

Tan pronto el pecado ingreso al mundo, el hombre sufrió un cambio y en ese cambio se incluyó el concepto que el hombre tiene de sí mismo.

Ahí se dio el quiebre psicológico, ahí comenzó el problema de la autoestima.

La tentación en la que cayó el hombre, fue:

Gn. 3:5

…seréis como Dios…

El hombre desde entonces busca inconscientemente ser como Dios, tener ese mismo valor. Al caer comenzó el hombre a amarse a sí mismo, dejo de mirar a Dios y comenzó a mirarse a sí mismo, busco autorrealizarse, busca amor, busca gloria, busca aceptación, el hombre se volvió ensimismado.

Autoestima es la valoración positiva o negativa que uno hace de sí mismo.

Bíblicamente, tú y yo ya nos valoramos demasiado, nos amamos, es por eso que Cristo dijo que de la misma manera en que te amas, es la manera en la que debes de amar a tu prójimo.

Según la psicología humanista, en sus dos tipos, tenemos la autoestima alta y bajo

Entonces bíblicamente ¿Tenemos autoestima alta o baja?

Todos tenemos una autoestima alta. Todos nos amamos a nosotros mismos, si lo hacemos sabiamente o no es otro asunto.

3. Conclusión

En la vida cristiana ¿Existe la autoestima?

Existe chicos, la palabra existe, no podemos opacarla, eliminarla.

La diferencia recae en esta.

Todos tenemos autoestima alta, pero el mundo busca su autoestima o se da valor a si mismo a través de las personas, de las cosas que posee, de las circunstancias y de las virtudes, cualidades o fortalezas que posee. Pero eso al final no va a llenar tu taza.

Lo que yo quiero que entiendas, es que debes de tener autoestima, sí. Pero una autoestima, donde tu taza no la llenes tú y lo que posees, ni las personas, ni las circunstancias. Sino que tu taza la llené Dios y cuando el la llené, esa taza a desbordar de su amor y el valor que él te da.

El valor que te vas a dar, nunca igualará al valor que Dios te va da.

El amor que te tú das, nunca igualará al amor que Dios te ofrece a través de Cristo.

Y es precisamente que para eso que vino Cristo, primordial y principalmente para salvar a personas de la condenación eterna. Pero la obra de Cristo en la Cruz abarco mucho más allá de eso. Cristo vino a reparar también lo que se rompió en el huerto del Edén.

Jn. 10:10

… yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.

Una autoestima bajo la psicología humanista no llenará tu vaso. Una autoestima bajo el Evangelio llenará tu vaso y hará que rebose.

Ósea, si de hoy en adelante piensas en autoestima, sería mejor que pienses en Critoestima.

La pregunta que titulaba este mensaje, era:

Si no es autoestima, entonces ¿qué es?

Es Cristoestima. La estima, el amor y el valor que Cristo te devuelve. Aquel valor que como persona perdimos en el huerto del Edén por el pecado.

Te invito a que puedas pensar en la obra de Cristo en la Cruz y no solo como Quien se sacrifico para salvarte del infierno, sino también para salvarte de tu egocentrismo.

Ahora en Cristo puedes amar a Dios, porque él te amo primero.

Ahora en Cristo puedes amar a tu prójimo, como ya te amas a ti.

Ahora en Cristo dejas de buscar ser como Dios y solo das la gloria y la honra al único Dios que existe por los siglos de los siglos, amén.