LLamados a ser Cristianos
Ser antes de hacer • Sermon • Submitted
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· 176 viewsNuestra transformación espiritual va de la mano con desarrollar el carácter de Jesús.
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Introducción:
Introducción:
Hermanos esta tarde quiero pedirles que reflexionemos un momento sobre un asunto que debe ser muy importante para nosotros como es cumplir con nuestro llamado, El Señor nos ha llamado a ser de Cristo.
Todos los que hemos nacidos de nuevo estamos llamados a seguir a Cristo y a parecernos más a él.
Antes no eramos de Cristo, cuando estábamos en el mundo hacíamos las cosas del mundo, y seguíamos al Dios de este mundo. Ahora que somos de Cristo, estamos llamados a ser de Cristo y ha ser lo que nos ha llamado a ser.
El apóstol Juan en su primera carta el capítulo 3, comienza una serie de exhortaciones a ser “hijos de Dios”
Días atrás reflexionaba con un grupo de muchachos sobre esto y la pregunta que generó la discusión era:
¿Verdaderamente parecemos ser hijos de Dios o ser de Cristo tanto como lo decimos?
Entonces es bueno pensar cómo los demás que me ven, que me conocen, que están conmigo saben que yo soy hijo(a) de Dios.
Ahora Juan escribe esta carta a la iglesia para atacar la enseñanza de los falsos maestros, que diciendo ser Cristianos, y conociendo a la grey estaban enseñando y promoviendo falsas doctrinas en la iglesia.
Los verdaderos Cristianos, no sólo decimos ser cristianos, hijos de Dios, sino que vivimos y damos evidencia en nuestras vidas de quienes somos.
Haciendo un paralelo, podemos pensar en algunos ejemplos cotidianos:
En la política: ¿Cómo se identifica a una persona que tiene una afiliación política?
En el deporte: ¿Cómo identificas a alguien que es fanático de un equipo?
Piensen en esto por un momento, ¿Cómo identificar a un cristiano o una cristiana?
Bueno el apóstol Juan, nos muestra una lista de característica que debería verse en una persona que es cristiana, que es de Cristo y vive y camina en Cristo.
Hablo de lo que identifica a un verdadero cristiano o cristiana, porque cualquiera puede decir que es cristiano o cristiana; pero el Señor dijo claramente que por sus frutos serían conocidos en:
15 Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. 16 Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?
Los hombres y mujeres que son de Cristo dan evidencia en su vida y en su carácter de su nuevo nacimiento.
Dios quiere hermanos que seamos Cristianos verdaderos, no de apariencia, que demos frutos dignos de arrepentimiento.
Hay tres evidencias que una persona muestra en su vida que le define como una persona Cristiana.
I. UNA PERSONA QUE ES DE CRISTO, DEMUESTRA CAMBIOS EN SU VIDA.
I. UNA PERSONA QUE ES DE CRISTO, DEMUESTRA CAMBIOS EN SU VIDA.
1 Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, para que seamos llamados hijos de Dios; por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoció a él. 2 Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es.
Mira usted lo que Juan dice,
... ahora somos hijo de Dios; y tal es así que la gente no le conoce..
El cristianos verdadero, muestra cambios en su vida, no los anda anunciando, ni diciéndolos, es la gente debe ver cambios en usted y en mí, hasta el punto de comentar “No era este o aquel que..”
¿Qué cambios deberíamos mostrar?
En nuestra Cosmovisión
En el control de nosotros mismos: Carácter, temperamento, emociones y nuestro cuerpo.
En nuestra forma de relacionarnos.
Pero todo tiene que ver con nuestro corazón, El Señor una vez que le recibimos como Señor y Salvador, pone su espíritu en nosotros, nuestro corazón se convierte a él y ahí Dios opera los cambios en nuestra vida.
Ahora, declara que seremos semejantes a él cuando se manifieste,
“Pero sabemos que cuando él venga, seremos como él, porque lo veremos como él realmente es.”
Eso no significa que hasta en ese momento Dios operará cambios en nuestras vidas.
Pablo enseña que el Espíritu de Dios que mora en nosotros, nos hace parecernos más a Cristo.
18 Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.
Solo el Espíritu Santo tiene el poder para hacer los cambios que Dios quiere efectuar en nuestras vidas.
Este proceso se llama santificación.
Nadie puedes reproducir el carácter de Jesús si dependes de tu propia fuerza. Por el contrario, debemos confiar y prestar atención al Espíritu que mora en nosotros.
Es el poder del Espíritu Santo que en el momento en que das un paso de fe Dios usará primero, de igual manera usará su Palabra, su pueblo y las circunstancias para moldearnos.
Es la palabra de Dios la que nos provee la verdad que necesitamos para crecer, el pueblo de Dios nos brinda el apoyo que necesitamos para crecer, y las circunstancias son el entorno donde practicar el carácter de Cristo.
Llegar a ser como Cristo, Ser Cristianos aunque es un proceso de crecimiento largo y a veces lento, es en ese proceso también que vamos mostrando los frutos alcanzados.
La segunda evidencia que damos de ser Cristianos es
II. YA NO PRACTICAMOS EL PECADO.
II. YA NO PRACTICAMOS EL PECADO.
3 Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como él es puro.
Juan dice que el que es hijo de Dios, Se purifica a sí mismo, así como él es puro, es decir, ya no anda pecando deliberadamente, va adquiriendo conciencia espiritual y si peca, sabe lo que tiene que hacer.
No vive una vida practica de pecado, sino que continuamente está buscando como agradar a Dios.
<<<Si pecamos, conscientemente de lo que estamos haciendo, con este hecho demostramos que no le conocemos>>>
1 Juan 3: 5-6
5 Y sabéis que él apareció para quitar nuestros pecados, y no hay pecado en él. 6 Todo aquel que permanece en él, no peca; todo aquel que peca, no le ha visto, ni le ha conocido.
Juan dice que todo aquel que permanece, vive en él, no peca, y aquí hablamos de cualquier tipo de pecado, desde los más terribles que una persona puede practicar, como fornicación, adulterio, disensiones, orgías, etc. hasta con el simple hecho de no hacer lo bueno, lo que agrada a Dios.
A veces nosotros pesamos nuestros pecados y los medimos; y decimos, esto no es tan malo, Dios lo perdona ( Y CLARO Dios perdona cualquier pecado, bajo dos circunstancias, confesar y apartarse); pero con esa liviandad lo vivimos haciendo, y los practicamos suavisandolos, justificándolos
17 y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.
Es bueno venir a la iglesia…… pero no venimos, nos perdemos.
Es bueno arreglar cualquier diferencia con nuestros hermanos…. Pero no lo hacemos murmuramos.
Es bueno evitar hablar mal de alguien…., pero lo que hacemos es practicar el chisme, no nos gusta, pero nos entretiene, verdad?
Y podemos mencionar muchas cosas más, como orar, leer la palabra, meditar siempre en ella, etc, pero no lo hacemos.
Juan dice en el versículo 7 - 9, 1 Juan 3: 7-9
7 Hijitos, nadie os engañe; el que hace justicia es justo, como él es justo. 8 El que practica el pecado es del diablo; porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo. 9 Todo aquel que es nacido de Dios, no practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.
Hermano, ¿es usted hijo o hija de Dios? ¿Somos hijos de Dios?
¡Apartémonos del pecado, Seamos lo que Dios nos llama a ser!
Juan Dice, nadie os engañe; pero los primeros que nos engañamos somos nosotros mismos, queriendo mostrar apariencia que somos espirituales, pero en el momento que necesitamos demostrarlo, ni por cerca practicamos lo que Dios nos manda en su palabra, Hermanos a Dios nadie le puede engañar. Esforcémonos cada día por Ser lo que Dios espera de nosotros.
Ahora, la tercera evidencia que tenemos de ser Cristianos, es.
II. PRACTICAR EL AMOR DE DIOS.
II. PRACTICAR EL AMOR DE DIOS.
En los versículos 9, y luego del 15 al 17 Juan nos dice que el amor de Dios debe estar en nosotros. 1 Juan 3. 10-11,
10 En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que no hace justicia, y que no ama a su hermano, no es de Dios. 11 Porque este es el mensaje que habéis oído desde el principio: Que nos amemos unos a otros.
Los hijos de Dios, mostramos amor hacia nuestros hermanos, un comportamiento diferente, nos hace hijos del diablo no de Dios.
El mensaje de Dios, es que nos amemos los unos a los otros. Por eso, Dios nos dio un ejemplo de amor al enviar a su hijo a morir por nosotros y darnos perdón y salvación.
Pero, habla de una amor Genuino, un amor auténtico, nos manda a practicar el amor de Dios.
Los Cristianos no necesitamos aborrecernos entre nosotros mismos, ya tenemos quién nos aborrece, 1 Juan 3:13
13 Hermanos míos, no os extrañéis si el mundo os aborrece.
Hermanos, Dios quiere que usted y yo nos amemos, no que nos aborrezcamos, Dios quiere que dejemos la practica que aprendimos en el mundo, lo que vemos en el mundo y que quizás está muy arraigada en usted, necesitamos mostrar que amamos a Dios, mostrando amor a nuestros hermanos.
1 Juan 3: 14
14 Nosotros sabemos que hemos pasado de muerte a vida, en que amamos a los hermanos. El que no ama a su hermano, permanece en muerte.
Sabemos que somos Cristianos, que ya no vivimos en el estado antiguo, porque podemos amar a nuestros hermanos.
Hay hermanos difíciles, … y eso los hace difícil de amar, pero, Amele, como Dios le ama a usted.
Sabemos que de vez en cuando encontramos comportamientos terribles, que a veces ni en el mundo los haya…. Ámeles, Dios quiere eso, ore por ellos, hable con ellos, acérquese, si lo desprecia, o no le atiende, humíllese, el Señor le va a exaltar.
Amele, no pague mal por mal, Dios quiere que haga lo bueno. No pelee, eso es fácil, amar conlleva más desprendimiento.
Amele, resuelva sus diferencias, aplique el principio de mateo 18.
Amele, no le juzgue, eso le corresponde a Dios.
Es difícil dirán algunos. sí, esto es cierto, solo si no ha entregado su corazón al Señor, si ya lo hizo, por amor a él usted puede hacer cualquier cosa que Dios le pida.
Hermano su esposa es difícil,… amelé, trátela bien, esa es la mujer que Dios le dio. Sea agradecido con Dios, mostrándole amor y consideración.
Hermana, su esposa es difícil, desconsiderado, gruñón… Ámele él es el hombre que Dios le dio, dele gracias a Dios, porque él sabe lo que hace y da, quizás otro le hubiera salido peor.
No ande por ahí quejándose, nadie le va a resolver nada, mejor ore al Señor, que él si puede cambiar todo.
Tiene un hijo rebelde, y a veces contumaz,… ámele, ore por él o ella; Dios espera eso de usted, y esas oraciones, le harán cambiar, NO LO DESECHE, NI LO TIRE A LA CALLE DE EN MEDIO, ore y batalle por él, Dios lo enderezará, sólo tiene que amarle y creerle al Señor.
Pero ese amor, debe ser Genuino, debe ser verdadero, no de apariencia o de la boca para afuera.
18 Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho y en verdad.
Debe ser como Dios nos ha amado a nosotros. 1 Juan 3: 23
23 Y este es su mandamiento: Que creamos en el nombre de su Hijo Jesucristo, y nos amemos unos a otros como nos lo ha mandado.
La cuarta y última evidencia es:
4. LOS CRISTIANOS ESTAMOS LLAMADOS A A OBEDECER SU PALABRA.
4. LOS CRISTIANOS ESTAMOS LLAMADOS A A OBEDECER SU PALABRA.
(1 Juan 3: 24)
24 Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado.
La gente debe ver en nosotros cambios permanentes, no cambios que vienen y van.
Hoy si, mañana no, necesitamos ser constantes, ser consistentes, andar como el Señor anduvo, andar con el Señor y en él Señor.
Eso solo es posible guardando(obedeciendo) la palabra de Dios.
Recuerde, el proceso, es oir, es estudiar la palabra de Dios, es aprenderla, y luego vivirla, ser no sólo oidores sino hacedores.
Es escuchando la voz del Señor, atendiendo los llamados que nos hace el Espíritu Santo cuando no andamos bien o haciendo lo que Dios no quiere o espera de nosotros, apartándonos de lo malo, discerniendo siempre el bien y el mal, que mostramos que realmente somos Cristianos.
Guardando sus mandamientos, nos va ir bien; esa es la promesa que Dios hizo a Josué, Dios nunca lo dejará ni lo desamparará para gloria de su nombre.
Conclusión:
Conclusión:
¿Somos Cristianos?, ¿Eres de Cristo?
Cuatro evidencias que muestran en su vida los que son de Cristo:
Demuestra Cambios.
No practica el pecado.
Practica el amor
practica la obediencia a la palabra de Dios.
Todo esto redunda en el hecho de que necesitamos parecernos más a Cristo, esa es la tarea, siempre hay que auto evaluarnos, ver cómo estamos y tomar conciencia de que es lo que necesitamos dejar y cambiar, Dios le va a bendecir grandemente.
La madurez espiritual no es instantánea ni automática; es un desarrollo gradual y progresivo que llevará el resto de tu vida.
Nuestra transformación espiritual en cuanto al desarrollo de carácter de Jesús se completará cuando lleguemos al cielo o cuando Jesús vuelva.
Mientras tanto dejemos que él nos vaya moldeando.
Y si usted aún no tiene a Cristo en su vida, comiense hoy a ser de Cristo y que estas carácterísticas, estén en usted.
Vamos a orar.