Teologia Clase 1
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¿Que es la Teología Propia?
¿Que es la Teología Propia?
La palabra Teología no aparece en la biblia,
Lo mas cerca que tenemos en
1 Pedro 4:11 (RVR60)
11 Si alguno habla, hable conforme a las palabras de Dios; si alguno ministra, ministre conforme al poder que Dios da, para que en todo sea Dios glorificado por Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el imperio por los siglos de los siglos. Amén.
“logia Theou” Palabras de Dios
Romanos 3:2 (RVR60)
2 Mucho, en todas maneras. Primero, ciertamente, que les ha sido confiada la palabra de Dios.
Hebreos 5:12 (RVR60)
12 Porque debiendo ser ya maestros, después de tanto tiempo, tenéis necesidad de que se os vuelva a enseñar cuáles son los primeros rudimentos de las palabras de Dios; y habéis llegado a ser tales que tenéis necesidad de leche, y no de alimento sólido.
Agustin de Hipona definio la teología como
“una explicación de la divinidad”
El Diccionario Define Teología Como:
“El estudio de Dios y su relación con el mundo”
Para comprender aun mas el significado de la palabra Teología es necesario distinguirla de otras palabras que usualmente se intercambian con esta palabra.
Religión, Doctrina o Dogma.
Religión que algunos sostienen que significa ligar o unir
La religión es un sistema que promueve la creencia en Dios y proporciona la manera de tratar de agradar a ese Dios (practicas y rituales)
27 La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.
2. threskeia (θρησκεία, 2356), véase . Se traduce «culto» en Col 2.18.
La teología y la religión deben de ir de la mano’
pero se debemos distinguirlas,
la religión debe de ser producto de nuestra teología y no al revés.
Nuestra religión no debe moldear nuestra teología
La palabra Doctrina significa “enseñanza” o “instruccion”
1 Timoteo 1:10 (RVR60)
10 para los fornicarios, para los sodomitas, para los secuestradores, para los mentirosos y perjuros, y para cuanto se oponga a la sana doctrina,
2 Timoteo 4:3 (RVR60)
3 Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias,
Tito 1:9 (RVR60)
9 retenedor de la palabra fiel tal como ha sido enseñada, para que también pueda exhortar con sana enseñanza y convencer a los que contradicen.
Tito 2:1 (RVR60)
1 Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina.
2 Timoteo 3:16 (RVR60)
16 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,
didaskalia (διδασκαλία, 1319),
La doctrina es el resultado de la Teología,
Doctrina nos presenta con las enseñanzas practicas de la Teología.
Y la doctrina se centra en aspectos particulares de la Teología.
Dogma es aun mas particular y se puede distinguir de la doctrina
Efesios 2:15 (RVR60)
15 aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz,
Hechos de los Apóstoles 16:4 (RVR60)
4 Y al pasar por las ciudades, les entregaban las ordenanzas que habían acordado los apóstoles y los ancianos que estaban en Jerusalén, para que las guardasen.
2. dogma (δόγμα, 1378), transliterado al castellano, denotaba primariamente una opinión firme o un juicio (de dokeo, tener una opinión), de ahí, opinión expresada con autoridad, doctrina, ordenanza, decreto
Ninguna doctrina o aspecto de la teología es mas fundamental que la teología de Dios.
Como la palabra teología puede ser clasificada de manera sistemática en diversas clases.
Bibliología
Cristología
Pneumatología
Antropología
Hamartiología
Soteriología
Angeleología
Eclesiología
Escatología
Es necesario hacer una distinción para referirnos a esa rama de la teología que se centra propiamente en el estudio de Dios.
Esta rama de la teología es conocida como la
Teología Propia, o Teología propiamente dicha.
Así que la teología propia es aquella que se encarga de estudiar el carácter y los atributos de Dios como se encuentran revelados en la escritura.
23 Así dijo Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas.
24 Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová.
La incomprensibilidad de Dios
7 ¿Descubrirás tú los secretos de Dios? ¿Llegarás tú a la perfección del Todopoderoso?
18 ¿A qué, pues, haréis semejante a Dios, o qué imagen le compondréis?
La cognoscibilidad de Dios
7 Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto.
3 Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.
20 Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna.
¿Importa la Teología?
Para muchos la teología es innecesaria e incluso perjudicial.
¿Cuales son las consecuencias de una teología superficial?
Alguien ha dicho que “el estudio apropiado de la humanidad es el hombre.” Yo no voy a oponerme a esa idea, pero creo que es igualmente cierto que el estudio apropiado de los elegidos de Dios, es el propio Dios. El estudio apropiado del cristiano es la Deidad. La ciencia más elevada, la especulación más sutil, la filosofía más poderosa que puedan jamás atraer la atención de un hijo de Dios, es el nombre, la naturaleza, la Persona, la obra, los hechos, y la existencia de ese grandioso Dios, a quien el cristiano llama Padre. En la contemplación de la Divinidad hay algo extraordinariamente beneficioso para la mente. Es un tema tan amplio que todos nuestros pensamientos se pierden en su inmensidad; tan profundo, que nuestro orgullo se ahoga en su infinitud. Nosotros podemos abarcar y enfrentar otros temas; en ellos sentimos una especie de auto-satisfacción y proseguimos con nuestro camino pensando: “he aquí, yo soy sabio.” Pero cuando nos aproximamos a esta ciencia de las ciencias y encontramos que nuestra plomada no puede medir su profundidad y que nuestro ojo de águila no puede ver su altura, nos alejamos pensando que el hombre vano quisiera ser sabio, pero que es como un burrito salvaje y entonces exclama solemnemente: “soy de ayer y no sé nada.” Ningún tema de contemplación tenderá a humillar la mente en mayor medida que los pensamientos de Dios. Nos veremos a obligados a sentir— “¡Gran Dios, cuán infinito eres Tú, Y nosotros somos sólo unos gusanos sin valor!” Pero si el tema humilla la mente, también la expande. Aquel que piensa en Dios con frecuencia tendrá una mente más grande que el hombre que simplemente camina con pesadez alrededor de este globo estrecho. Quizás se trate de un biólogo que hace alarde de su habilidad para hacer la disección de un escarabajo, estudiar la anatomía de una mosca o clasificar a los insectos y a los animales en grupos que tienen nombres casi imposibles de pronunciar. Puede ser un geólogo, capaz de disertar sobre el megaterio y el plesiosauro y todos los demás tipos de animales en extinción. Él puede pensar que independientemente de cuál sea su ciencia, su mente se ve ennoblecida y engrandecida. Me atrevo a decir que así es, pero después de todo, el estudio más excelente para ensanchar el alma es la ciencia de Cristo, y Cristo crucificado, y el conocimiento de la Deidad en la gloriosa Trinidad. Nada hay que pueda desarrollar tanto el intelecto, nada hay que engrandezca tanto el alma del hombre como la investigación devota, sincera y continua del grandioso tema de la Deidad. Y mientras humilla y ensan- 2 La Inmutabilidad de Dios Sermón #1 2 www.spurgeon.com.mx Volumen 1 cha, este tema es eminentemente consolador. ¡Oh, en la contemplación de Cristo hay un ungüento para cada herida! En la meditación sobre el Padre, hay descanso para cada aflicción y en la influencia del Espíritu Santo hay un bálsamo para cada llaga. ¿Quieres liberarte de tus penas? ¿Quieres ahogar tus preocupaciones? Entonces ve y lánzate a lo más profundo del mar de la Deidad; piérdete en su inmensidad. Y saldrás de allí como cuando te levantas de un lecho de descanso, renovado y lleno de vigor.