Cuando la Fe no es suficiente

A lo largo de los años vemos un sector de creyentes que confiesan tener fe en Dios pero disfrutan la vida y mucho menos vemos crecimiento progresivo en su vida espiritual.

Pedro nos deja una receta especial. Esa que este prepara para ocaciones unicas.

Bueno..la vida de creyente es unica y especial la cual deja huella aqui en la tierra y en la eternidad.

Pedro nos recuerda que el creyente tenemos todos los ingredientes necesarios para vivir la vida plena y fructifera como hijos de Dios.

Dice Pedro: Y por esto mismo, poniendo todo empeño. Es decir, que para llegar a un pleno desarrollo de la vida que hemos recibido de Dios, necesitaremos invertir tiempo, dedicación y practicar gimnasia espiritual (ver 1 Tim. 4:7).

El empeño debe traducirse en añadir, a la fe inicial, siete virtudes o cualidades que adornan el carácter del cristiano y que otorgarán resultados palpables en el presente y en la eternidad.

Romanos 12:11 NTV

No sean nunca perezosos, más bien trabajen con esmero y sirvan al Señor con entusiasmo.

1. Primeramente, el proceso se inicia con la fe, vale decir, con el primer fruto de la acción de la Palabra de Dios, ya que la fe es por el oír (Rom. 10:17)

PERO ESTO NO TERMINA AHI..

Por tanto, un creyente debe AÑADIR: “proveer, abastecer o apoyar” su vida con estas virtudes. Nutrir.

2. A la fe, cada creyente debe añadir virtud

El significado básico es “eminencia, valor, excelencia”. En síntesis, a la fe, el creyente debe añadir la excelencia, la eficiencia, ya que el Dios que lo llamó a su comunión es digno de lo mejor.

(lit., “excelencia moral”). En gr., la palabra es aretēn.

La vida moral que llevamos lea pone un valor agregado a nuestra fe o bien la puede debilitar.

Cuantos llamandose creyentes no ha cometido actos inmorales que son como dijera judas..¨manchas en nuestros agapes¨.

3. Conocimiento (gnōsin; cf. 2 P. 1:2; 3:18) no es el resultado de hacer ejercicios intelectuales, sino el conocimiento espiritual que proviene del Espíritu Santo, y que se enfoca en la persona y palabra de Dios.

Un conocimiento pleno, íntimo.

I juan 1

3 lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo.

4. También el creyente tiene que dedicarse a desarrollar el dominio propio (enkrateian; usado sólo dos veces más en el N.T.: Hch. 24:25; Gá. 5:23). implica tener señorío o dominio sobre todas las cosas y, especialmente, sobre uno mismo.

Hechos 24:25

25 Pero al disertar Pablo acerca de la justicia, del dominio propio y del juicio venidero, Félix se espantó, y dijo: Ahora vete; pero cuando tenga oportunidad te llamaré.

Cuantos hombres y mujeres de fe y con conocimiento no se han apartado y fracasado por falta de agregarle a su vida el dominio propio.

Pro. 16:32 Mejor es el que tarda en airarse que el fuerte;Y el que se enseñorea de su espíritu, que el que toma una ciudad.

Ejemplos: Saul, David, ahitofel, Nabal, etc.

Pedro sabia de que hablaba pues en el proceso de su Vida tuvo que ir agregando a su fe estos ingredientes de Caracter.

5. Vinculada a esta virtud, Pedro menciona la perseverancia (jupomoné 5281). Se trata de la constancia o el aguante que el cristiano demuestra bajo diversas pruebas y presiones. PACIENCIA.

Romanos 5:1-4

3 Amados hermanos, no podemos más que agradecerle a Dios por ustedes, porque su fe está floreciendo, y el amor de unos por otros, creciendo. 4 Con orgullo les contamos a las demás iglesias de Dios acerca de la constancia y la fidelidad de ustedes en todas las persecuciones y privaciones que están sufriendo. 5 Y Dios usará esa persecución para mostrar su justicia y para hacerlos dignos de su reino, por el cual sufren. 6

,2 Th 1:3–6.

6. A la perseverancia, el cristiano debe agregar la devoción, es decir, la “piedad” (eusébeia 2150).

El devoto es un creyente entregado, que ha hecho un voto de consagracion y dedicacion al servicio de Dios.

Devocional: adoracion, lectura, oracion, congregacion, etc.

Las primeras cinco virtudes pertenecen a la vida interior del individuo y a su relación con Dios. Las últimas dos tienen que ver con la relación del individuo con sus congéneres.

7. Afecto fraternal es la trad. castellana de la palabra gr. filadelfian, que es una preocupación práctica y ferviente por los demás (1 Jn. 4:20 “Si alguien dice: «Amo a Dios» pero odia a un hermano en Cristo, esa persona es mentirosa pues, si no amamos a quienes podemos ver, ¿cómo vamos a amar a Dios, a quien no podemos ver?”

. En su primera epístola (1 P. 1:22; cf. Ro. 12:10 “Ámense unos a otros con un afecto genuino y deléitense al honrarse mutuamente.”

; 1 Ts. 4:9; He. 13:1 “Sigan amándose unos a otros como hermanos.”

Existe hoy un individualismo en la sociedad y en los creyentes que no viene de Dios. Somos un cuerpo y cuando un se duele todos se duelen y cuando uno de alagra todos nos alegramos.

8. Mientras el afecto fraternal muestra interés por las necesidades de los demás, el amor (agapēn) anhela lo mejor para ellos. Es un amor que se sacrifica por los demas. Esa es la clase de amor que Dios muestra a los pecadores (Jn. 3:16; Ro. 5:8; 1 Jn. 4:9–11). Es interesante que la “sinfonía” de Pedro comienza con la fe y termina con el amor.

Hebreos dice que el Señor viene pronto por tanto debemos procurarnos al amor y a las buenas obras.

De tal manera que cuando praticamos esta receta no estaremos ociosos y al contrario seremos productivos en todo momento.