¿Quién es Dios y que somos nosotros?
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Introducción
Introducción
En un mundo donde existen más de 4,000 religiones en el mundo - necesitamos hacer la pregunta - ¿quién es Dios?
Algunas de estas religiones son politeístas - creen en muchos dioses:
Hinduismo
Shintoismo
Taoistas
Antiguos egipcios
Otras religiones son panteístas - creen que dios es todo y todo es dios.
Animistas africanos
Sikhismo
Y algunas son moniteístas - creen que existe un solo Dios.
Judaísmo
Cristianismo
Islam
Algunos al ver la variedad de religiones y creencias llegan a la conclusión que todas las religiones son básicamente iguales.
Dicen: Todos los caminos llegan a Dios.
Creen que a final de cuentas, todas las religiones comparten los mismos principios morales y éticos.
…por tanto, no debemos preocuparnos tanto por la identidad de Dios, su nombre(s), sus enseñanzas, porque a final de cuentas dios puede ser Zeus, Tlaloc, Allah, Vishnu, Afrodita, etc.
Dicen: Lo importante es que seas sincero en tus creencias y que ames a los demas.
Esta clase de mentalidad no funciona en otras áreas de la vida. Por ejemplo:
Matemáticas: 1 + 1 = 2…no es 3, 4, o 5.
Las matemáticas requieren que creamos en verdades objetivas.
¿Cómo reaccionaríamos a nuestro jefe que nos dijera: trabajaste 10 horas a $10 hora…tu crees que son $100 pero yo creo que son $90…mi corazón me dice que son $90 y debes respetar lo que pienso.
Ciencia: La ley de la gravedad sin importar si creemos o no en ella.
Si nos lanzamos de un edificio, immediatamente nos daremos cuenta que la ley de gravedad existe.
¿Cómo es posible que creamos que la identidad de la deidad/de Dios sea algo tan trivial que tu tienes tus creencias, yo tengo mis creencias, otro dice que no cree en nada - y a final de cuentas todos tienen la razón?
En nuestra confesión, el Mensaje y Fe Bautista, decimos: El ideal cristiano es el de una iglesia libre en un estado libre, y esto implica el derecho para todos los hombres del acceso libre y sin obstáculos a Dios, y el derecho a formar y propagar opiniones en la esfera de la religión, sin interferencia por parte del poder civil.
Creemos en la libertad religiosa.
Creemos que el estado no debe establecer ninguna religión sobre sus ciudadanos.
Creemos que el hombre es libre ante Dios de creer en él, creer en otros dioses, o no creer en ningún dios.
Pero, creemos en la verdad absoluta. Es decir, existe una sola verdad acerca de Dios.
Si los dioses de los hinduistas son los verdaderos dioses, entonces el dios del cristianismo es falso.
Si el Dios del judaísmo moderno es verdad, entonces Jesús no es Dios.
Si el Dios del Islam es el verdadero Dios, entonces el Dios del cristianismo y todos los demás dioses son falsos.
…pero si el Dios de la Biblia, revelado en el Antiguo y Nuevo Testamento, es el verdadero Dios, las demas religiones del mundo son falsas y el hombre debe conocer quienes es y que somos nosotros.
En la Biblia nos damos cuenta quien es Dios pues la Biblia es la auto-revelación de Dios. Dios es conocido por medio de su palabra revelada. Sin la Biblia no podríamos conocer a Dios.
En la Biblia nos damos cuenta que el ser humano es una creación de Dios y que ha sido creado con un propósito. Por tanto, el hombre tiene el deber de conocer con que propósito ha sido creado por Dios.
Continuamos con nuestro estudio del libro del Éxodo y consideraremos:
¿Quién es Dios?
¿Qué somos nosotros?
I. ¿Quién es Dios?
I. ¿Quién es Dios?
El profeta de Dios, Moisés, ya un hombre de 80 años ha tenido un encuentro con el Dios verdadero sobre el monte Horeb.
Dios ha dado a su siervo una misión - liberar a Israel del poder de los Egipcios.
Pero, es en esta sección en que Dios se va a revelar a Moisés de una forma muy especial - dándole a conocer su nombre.
Entonces Moisés dijo a Dios: «Si voy a los israelitas, y les digo: “El Dios de sus padres me ha enviado a ustedes”, tal vez me digan: “¿Cuál es Su nombre?”, ¿qué les responderé?».
Y dijo Dios a Moisés: «YO SOY EL QUE SOY», y añadió: «Así dirás a los israelitas: “YO SOY me ha enviado a ustedes”».
Dijo además Dios a Moisés: «Así dirás a los israelitas: “El Señor, el Dios de sus padres, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob, me ha enviado a ustedes”. Este es Mi nombre para siempre, y con él se hará memoria de Mí de generación en generación.
Moisés no sabe como iran a reaccionar los israelitas cuando él regrese a Egipto para librarlos del poder de los Egipcios.
Moisés está anticipando las preguntas que le van a hacer.
Moisés sabe que sus acciones podrían ser tomadas como una amenaza a los Egipcios, una revuelta, una protesta, y esto podría poner en riesgo las vidas de los israelitas.
Por tanto, Moisés quiere conocer el nombre del que habla con él.
Dios se revela a Moisés diciendo:
“Yo Soy el Que Soy”
Es el “Yo Soy” que ha enviado a Moisés a liberar a los israelitas.
De este nombre es que deriva lo que llamamos el tetragrammatón.
El tetragrammatón son las 4 letras hebreas que aparecen en el versículo 15.
En la RV60 cuando aparece el tetragrammatón: YHVH (yodh, he, vav, he) aparece la palabra Jehová.
En el hebreo no existen las vocales, solo consonantes.
El lector agrega las vocales para pronunciar las palabras.
Algunas Biblias prefieren insertar el nombre “Yahvé” o “Jehová” mientras que la NBLA y la NVI utilizan la palabra “SEÑOR” en mayúsculas.
¿Pero, en sí, que quiere decir que Dios es “Yo Soy el Que Soy”…o el “Yo Soy”?
Él es el Dios que existe por si mismo y no depende de nada
Dios es el creador y el que sostiene todo lo que existe
Dios no cambia y siempre es confiable
Dios es eterno
Este es el Dios verdadero, el único que existe, el Dios revelado en la Biblia.
Por tanto, no hay otros dioses - los dioses de las religiones mundiales son objetos de la imaginación de los seres humanos; son falsos y no tienen poder alguno.
Es el único y verdadero Dios y por tanto todo ser humano debe someterse a él pues es el creador, el que sostiene todo lo que existe. A él le debemos nuestra existencia.
Es el Dios que se reveló a los padres - Abraham, Isaac, y Jacob.
Es el Dios que los llamó, que los sustentó, que los guardó, que los restauró, y a quienes les dio promesas.
Ahora, la historia del Éxodo nos revela que este Dios grande, que existe por sí mismo, que no tiene principio ni final, que es eterno - se interesa por su creación.
Dios escuchó el clamor de los israelitas.
Dios tuvo compasión de sus penurias.
Dios escuchó el dolor de su pueblo elegido.
Y ahora, Dios ha determinado liberar a su pueblo de la esclavitud.
Dios quiere que Moisés le recuerde a Israel que Dios no se ha olvidado de ellos:
»Ve y reúne a los ancianos de Israel, y diles: “El Señor, el Dios de sus padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, se me ha aparecido y dijo: ‘Ciertamente los he visitado y he visto lo que les han hecho en Egipto.
’Y he dicho: Los sacaré de la aflicción de Egipto a la tierra del cananeo, del hitita, del amorreo, del ferezeo, del heveo y del jebuseo, a una tierra que mana leche y miel’ ”.
Dios quiere que sepa que su presencia está cerca de ellos.
Dios mismo ha visitado/observado lo que está viviendo su pueblo.
Dios va a liberarlos de su aflicción y los llevará a una tierra de abundancia.
Este es una parte esencial del carácter de Dios que llena nuestra vida de esperanza.
Dios a lo largo de la Escritura ha rescatado a su pueblo de sufrimiento, de dolor, de desesperación.
Dios nunca ha llegado tarde. Él sabe en que momento va a rescatar a su pueblo.
Dios ha librado, Dios libra, y Dios liberará a su pueblo que ha confiado en él.
La presencia de Dios no se aparte de su pueblo...él esta presto para atender a la necesidad de su pueblo.
Notemos lo que Dios le advierte a Moisés acerca de Faraón:
»Ellos escucharán tu voz. Entonces tú irás con los ancianos de Israel al rey de Egipto, y le dirán: “El Señor, el Dios de los hebreos, nos ha salido al encuentro. Ahora pues, permite que vayamos tres días de camino al desierto para ofrecer sacrificios al Señor nuestro Dios”.
»Pero Yo sé que el rey de Egipto no los dejará ir, si no es por la fuerza.
»Pero Yo extenderé Mi mano y heriré a Egipto con todos los prodigios que haré en medio de él, y después de esto, los dejará ir.
Dios le dice a Moisés que vaya ante Faraón para presentar la demanda de parte de Dios.
Dios advierte a Moisés que Faraón no va a querer liberar al pueblo de Israel.
Dios tiene un plan.
Dios sabe lo que va a hacer.
Dios va a sacar a Israel por la fuerza.
Dios va a extender su mano poderosa y va a herir a Egipto con plagas/maldición hasta doblegar/destruir/humillar al enemigo del pueblo de Dios para que deje ir al pueblo.
Dios obrará de tal manera que cuando salga Israel de Egipto, los mismos Egipcios estarán encantados que se vayan y les darán plata, oro, y vestidos:
»Y haré que este pueblo halle gracia ante los ojos de los egipcios, y cuando ustedes se vayan, no se irán con las manos vacías.
»Cada mujer pedirá a su vecina y a la que vive en su casa, objetos de plata, objetos de oro y vestidos, y los pondrán sobre sus hijos y sobre sus hijas. Así despojarán a los egipcios»
Es como si Dios estuviera haciendo que los egipcios les paguen a los israelitas por casi 400 años de esclavitud.
Los israelitas van a despojar a Egipto todo por causa de la mano de Dios.
No olvidemos estos objetos porque van a ser muy importantes más adelante.
Hermanos, Dios quiere que confiemos en él porque una y otra vez ha demostrado su gran poder en la historia de la redención.
Mostró su poder al sacar a Israel de Egipto y abrir el mar rojo.
Mostró su poder al liberar a Israel de la exterminación a manos de Amán.
Pero sobre todo mostró su poder al resucitar a su Hijo Jesucristo de entre los muertos después de tres días de muerto.
Seguramente podemos confiar en el Dios todopoderoso quien es el mismo ayer, hoy, y por los siglos.
II. ¿Qué somos nosotros?
II. ¿Qué somos nosotros?
Sabiendo entonces que Dios es todo lo que hemos mencionado, qué somos nosotros?
La Biblia nos da ciertas indicaciones de lo que somos:
Y dijo Dios: «Hagamos al hombre a Nuestra imagen, conforme a Nuestra semejanza; y ejerza dominio sobre los peces del mar, sobre las aves del cielo, sobre los ganados, sobre toda la tierra, y sobre todo reptil que se arrastra sobre la tierra».
¡Sin embargo, lo has hecho un poco menor que los ángeles,
Y lo coronas de gloria y majestad!
Tú le haces señorear sobre las obras de Tus manos;
Todo lo has puesto bajo sus pies:
Entonces el polvo volverá a la tierra como lo que era,
Y el espíritu volverá a Dios que lo dio.
Sabemos que no somos Dios.
Sabemos que estamos muy limitados, somos muy frágiles, nuestra vida es muy corta comparado con la eternidad.
El hombre, como la hierba son sus días;
Como la flor del campo, así florece;
Cuando el viento pasa sobre ella, deja de ser,
Y su lugar ya no la reconoce.
Y todo esto es cierto…necesitamos considerar nuestra propia existencia desde la perspectiva de Dios.
Hay demasiada gente que se cree muy por encima de Dios y otros que se creen muy por debajo de los demás.
Sin embargo, Éxodo nos enseña el propósito por el cual Dios ha llamado al hombre, por el cual Dios lo ha liberado - para ser un adorador:
»Ellos escucharán tu voz. Entonces tú irás con los ancianos de Israel al rey de Egipto, y le dirán: “El Señor, el Dios de los hebreos, nos ha salido al encuentro. Ahora pues, permite que vayamos tres días de camino al desierto para ofrecer sacrificios al Señor nuestro Dios”.
Dios liberaría a Israel de la esclavitud Egipcia para que pudieran adorar a Dios con completa libertad.
Dios estaba librando a Israel de sus amos que los agobiaban para que ahora Dios fuera su amo/Señor y así ellos pudieran gozar/disfrutar de su presencia y adorar su nombre.
Adorar a Dios implica:
Reconocer quien es
Admirar por lo que es
Demostrar nuestra gratitud por lo que ha hecho
Exaltar sus atributos/carácteristicas
Esto es lo mismo que reitera el Señor Jesús en su encuentro con la mujer de Samaria:
»Pero la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque ciertamente a los tales el Padre busca que lo adoren.
»Dios es espíritu, y los que lo adoran deben adorar en espíritu y en verdad».
Dios ha creado al hombre para deleitarse en su creador.
Dios ha creado al hombre para que sea un adorador de Dios.
Es por esto que el hombre por naturaleza es un ser religioso.
El hombre busca adorar a un ser supremo.
El hombre busca dar gloria y alabanza a alguien o a algo.
Es un sentir innato que hay en cada ser humano - que nos lleva a querer rendir adoración.
Tristemente muchos adoran lo que no es Dios - su carrera, su familia, sus hijos, su dinero, su fama, su público, su vicio/adicción, su pecado.
Pero, Jesús vino a hacernos verdaderamente libres para cumplir el propósito para el cual Dios nos ha creado - para ser adoradores del único y verdadero Dios.
»Así que, si el Hijo los hace libres, ustedes serán realmente libres.