Pertenecer a la Iglesia
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13 Viniendo Jesús a la región de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos, diciendo: ¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre? 14 Ellos dijeron: Unos, Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, Jeremías, o alguno de los profetas. 15 El les dijo: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? 16 Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. 17 Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos. 18 Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. 19 Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos. 20 Entonces mandó a sus discípulos que a nadie dijesen que él era Jesús el Cristo.
21 Desde entonces comenzó Jesús a declarar a sus discípulos que le era necesario ir a Jerusalén y padecer mucho de los ancianos, de los principales sacerdotes y de los escribas; y ser muerto, y resucitar al tercer día.
¿Por qué es significativa la declaración de Jesús en Mateo 16:18?
¿Qué consuelo contiene este versículo para los que pertenecen a Cristo y su iglesia?
Ahora bien, cuando Jesús llegó al distrito de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos: "¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre?" Y dijeron: Unos dicen Juan el Bautista, otros Elías, y otros Jeremías o alguno de los profetas. Él les dijo: "Pero, ¿quién decís que soy yo?" Simón Pedro respondió: "Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente". Y Jesús le respondió: "¡Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás! Porque no te lo ha revelado la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Y yo te digo que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia, y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella". (Mateo 16:14–18)
En este versículo, Jesús promete que Satanás no prevalecerá contra Su iglesia. Aunque la iglesia es el blanco de los planes de Satanás y enfrenta la hostilidad del mundo, la iglesia nunca puede ser destruida porque Dios ha prometido sostenerla.
La cultura occidental glorifica el individualismo, de tal manera que el concepto de pertenecer y funcionar en un contexto comunitario, en muchos sentidos, se ha perdido.
¿Es el cristianismo compatible con la idea del individualismo? En esta lección, el Dr. Ferguson muestra a partir de las Escrituras que el propósito de Cristo es construir una comunidad de adoradores que no solo le pertenezcan a Él, sino también unos a otros.
Ahora estamos llegando a nuestro tercer estudio en esta serie sobre los conceptos básicos de vivir la vida cristiana y pertenecer a la comunidad del pueblo de Dios, y luego la forma en que Dios nos da dones especiales que nos ayudan a crecer y la forma en que seguimos creciendo y seguimos en la vida cristiana, en los caminos cristianos, hasta el final.
Ya hemos pensado en lo que significa convertirse en cristiano, venir a Jesús como la luz del mundo y hemos pensado en lo que significa ser cristiano, ser un hijo de Dios y ser un servidor. del Señor Jesucristo.
Y ahora vamos a pensar en lo que significa pertenecer a la iglesia.
Una de las preguntas que sigue surgiendo y, a veces, me parece que cada vez más personas se hacen esta pregunta: "Si soy cristiano, ¿debo pertenecer a la iglesia?" Creo que, para ser honesto, si le hubieras hecho esa pregunta a un cristiano en el Nuevo Testamento, te habría preguntado de dónde venías porque entendieron que ser cristiano y pertenecer a la iglesia no son dos cosas diferentes; son simplemente dos caras de la misma moneda.
Y quiero que tratemos de ver en esta sesión por qué esto es así, por qué pertenecer a la iglesia es tan vital para nosotros mientras vivimos la vida cristiana. Y quiero verlo de dos maneras ligeramente diferentes de dos pasajes diferentes en el Nuevo Testamento.
El primer pasaje es un pasaje famoso en Mateo 16:18, donde recuerdas que Jesús le dice a Simón Pedro y a los otros Apóstoles: "Pedro, tú has hecho esta confesión y sobre esta roca voy a edificar Mi iglesia".
¿Por qué es tan significativa esa afirmación?
En primer lugar, llega en un momento muy decisivo. Viene en un punto muy decisivo en el ministerio de Jesús. Pedro acaba de confesarlo como el Cristo y el Hijo del Dios viviente. También viene interesantemente en un punto de inflexión en los Evangelios. Se nos dice en el Evangelio de Mateo, Mateo 16:21, que a partir de este momento, Jesús comenzó a explicarles qué significaba que Él era el Cristo y cómo era que Él edificaría la iglesia como aquel que murió por nuestros pecados. y resucitó para ser nuestro Señor y Salvador.
Pero no es sólo un punto decisivo y un punto de inflexión en el Evangelio; en realidad es el punto central en el Evangelio porque hay una especie de atmósfera de manifiesto en lo que Jesús está diciendo aquí. Es como si estuviera explicando Su meta al venir a este mundo y era, "Para esto vine al mundo", está diciendo. "Vine al mundo NO solo para que hubiera personas aquí y allá separados o independientes, sino que viene para que vinieran y confiaran en Mí, y para edificar una iglesia, construir una comunidad completa de personas". Y entonces, creo que debemos entender que la iglesia se encuentra en el centro mismo del plan de Jesús para Su ministerio.
Quiero decir, es cierto que la palabra "iglesia", ecclesia, se usa en los Evangelios solo en este pasaje y un par de capítulos más adelante, solo hay tres referencias a ecclesia en los cuatro Evangelios.
Entonces, alguien podría decir: "Bueno, si Jesús casi nunca lo mencionó, no puede ser muy importante", pero la verdad es todo lo contrario porque al leer los Evangelios, Jesús entiende que Sus discípulos casi NO tienen idea de cómo es en realidad la iglesia que Él va a edificar porque ellos tienen también muy poca idea del tipo de Mesías que Él es.
Y así, en lugar de hablar constantemente sobre la edificación de la iglesia, Él les da a Sus discípulos todo tipo de imágenes que indican que Él ha venido al mundo, para salvar a los pecadores individuales, y principalmente para reunirlos en una nueva comunidad la cual es el pueblo de Dios.
¿Cual es significativo de los pronombres usados en el Padrenuestro?
2 Y les dijo: Cuando oréis, decid: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra. 3 El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy. 4 Y perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todos los que nos deben. Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal.
Y si lo piensa, muchas de las imágenes del Nuevo Testamento que describen lo que significa ser cristiano NO son individualistas sino comunitarias. El hecho es que constantemente debemos orar el Padrenuestro de una forma u otra todos los días. ¿Cómo lo sabemos? Porque se nos anima a orar: "El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy". Entonces, eso es algo cotidiano. ¿Pero notas el pronombre que se usa? No es "Dame el pan de cada día". Es "Danos nuestro pan de cada día".
NO comenzamos nuestras oraciones diciendo: "Mi Padre que estás en los cielos", incluso cuando estamos solos. Comenzamos nuestras oraciones por nuestra cuenta diciendo: "Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre".
Entonces, incluso el Padrenuestro nos enseña que nunca existimos como cristianos aislados; sino que hemos sido traídos a la comunión de Jesucristo para pertenecernos unos a otros.
7 Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas.8 Todos los que antes de mí vinieron, ladrones son y salteadores; pero no los oyeron las ovejas.9 Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos.10 El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.11 Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas.12 Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el lobo arrebata las ovejas y las dispersa.13 Así que el asalariado huye, porque es asalariado, y no le importan las ovejas.14 Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen,15 así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre; y pongo mi vida por las ovejas.16 También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un pastor.
Piensa en otra imagen que usa Jesús. Él es el buen Pastor y nosotros somos las ovejas de Su rebaño. No sé si alguna vez has vivido en una parte rural del mundo donde hay pastores y ovejas, pero si has notado que algo sucede cuando aparece el pastor y mientras reúne a sus ovejas usando su perro pastor no solo acercarse al pastor, pero a medida que se acercan al pastor, inevitablemente se acercan más unos a otros, de modo que cuando somos llamados a la fe en Jesucristo, somos llamados no solo a venir a Él, sino a acercarnos cada uno a otro.
O la imagen del padre y la familia o la imagen de la cabeza y el cuerpo.
12 Porque así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros, pero todos los miembros del cuerpo, siendo muchos, son un solo cuerpo, así también Cristo. 13 Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, sean judíos o griegos, sean esclavos o libres; y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu.
Y muchas de estas imágenes muestran lo que significa ser cristiano, también son imágenes de lo que significa pertenecer a la comunidad de la iglesia.
Recuerdas la imagen que usa Pedro. Somos como piedras vivas que construyen en un templo.
4 Acercándoos a él, piedra viva, desechada ciertamente por los hombres, mas para Dios escogida y preciosa,5 vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo.
Creo que probablemente era más fácil poner piedras muertas en un templo. Las piedras muertas hacen ruido cuando las cincelas, pero una vez que las has cincelado, ya no hacen ruido para siempre. Eso NO es cierto para los cristianos, ¿verdad?
A medida que Dios nos cincela para encajar, constantemente tiene que volver a cincelarnos porque no quiere que seamos solo individuos aislados; Él quiere que seamos una nueva comunidad.
Ahora bien, esto es algo que realmente necesitamos entender en el siglo XXI porque vivimos en una época en que las familias son disfuncionales, cuando las comunidades son disfuncionales, cuando los gobiernos a veces parecen estar fuera de control; y es dentro de ese contexto que la iglesia de Jesucristo puede brillar.
Es posible que hayamos fallado al dar testimonio individual (solo de palabra) de Jesucristo porque la gente en nuestra cultura posmoderna dice: "Bueno, si eso funciona para ti, entonces está bien. Nunca funcionó para mí y no estoy realmente interesado". Y como puede ver, NO podemos influenciar en la vida de otras personas por el testimonio que damos.
Pero cuando hay una nueva comunidad o familia, los hombres y mujeres que observan esa nueva comunidad se dan cuenta de que no hay paralelo a esto en ninguna parte. No hay otro lugar al que puedan mirar para ver este tipo de comunidad, para ver cómo las cosas funcionan de la manera en que funcionan. Incluso pueden odiar lo que representa la iglesia cristiana pero, de una manera extraña, al mismo tiempo se sienten maravillosamente atraídos por el producto del evangelio, y eso le da poder al evangelio en sus vidas para que digan: "¿Cuál es el secreto de esta nueva comunidad?" Y la respuesta es que el secreto NO se encuentra en esta tierra; el secreto se encuentra en el Salvador que vino del cielo. Vino del cielo para restaurarnos a una nueva comunidad.
Y eso es lo que Él estaba enseñando a Sus discípulos cuando confesaron que Él es el Cristo.
Pero entonces podríamos hacer otra pregunta correctamente. Si Jesús dijo que Él edificaría Su iglesia, ¿cómo era realmente la iglesia que Jesús edificó? Bueno, esa es una pregunta en la que la respuesta incorrecta a esa pregunta es: "Yo quiero pensar en la iglesia en la forma en que me gusta ella y que me convenga", y la respuesta correcta es: "Bueno, ¿cómo lo hizo Cristo realmente?" Quiero decir, parece una especie de respuesta obvia, ¿no es así?
¿Qué elemento de una iglesia llena del Espíritu que casi ha desaparecido en la iglesia cristiana de hoy?
Si preguntamos cómo edifico Jesús a la iglesia, entonces debemos mantener la cabeza baja y la nariz en nuestros Nuevos Testamentos y ver cómo lo hizo en realidad.
41 Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas. 42 Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones.
43 Y sobrevino temor a toda persona; y muchas maravillas y señales eran hechas por los apóstoles.44 Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas;45 y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno.46 Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón,47 alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos.
Y es muy interesante que cuando lees los Hechos de los Apóstoles, parece que Lucas, su autor, entre otras cosas, intenta responder esa pregunta. Porque de vez en cuando, mientras lees los Hechos de los Apóstoles, probablemente hayas notado que el video de Luke de lo que sucede aparentemente de vez en cuando, presiona el botón de pausa y dice: "Está bien, hay un cuadro fijo. Quiero que mires eso".
Y así, especialmente el primer tercio o más de los Hechos de los Apóstoles está salpicado de pequeñas imágenes fijas de cómo era la iglesia. Y si lees los Hechos de los Apóstoles, realmente no puedes dejar de notar esto. Es una de las cosas más obvias y es muy interesante que la primera de ellas está al final del capítulo 2 de Hechos, ¿no? En Hechos 2:42 ¿qué encuentras ahí? Usted encuentra aquí que el Espíritu ha sido derramado. Esta nueva asamblea de personas se ha reunido. Tres mil personas han sido bautizadas. Están todos estos nuevos conversos. Y Lucas dice: "Presionemos el botón de pausa y pongamos esta nueva comunidad bajo la lupa y veremos cómo es realmente la iglesia que Jesús construye".
Así que Hechos 2:42 y siguientes no son comentarios al azar. Allí, Lucas muy deliberadamente nos está diciendo a nosotros, como lectores de los Hechos de los Apóstoles, que cuando Jesús edifica la iglesia, así es como se ve la iglesia. Así que hay una conexión real entre Mateo 16:18 y Hechos 2:42.
Entonces, ¿cómo era esa iglesia llena del Espíritu? Bueno, antes que nada, Luke nos dice que era una comunidad que perseveraba en la enseñanza de los apóstoles. Recuerdas que dice a que se dedicaban. Eso es lo que realmente quiere decir. Se dedicaron a las enseñanzas de los Apóstoles. Ellos no se conformaban solo con una enseñanza periódica.
Ahora, ¿por qué sucedió eso? Porque recuerdas cuando Jesús oró por la iglesia en Juan 17:17 “17 Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad.” , una de las cosas por las que oró fue que la Palabra de Dios santificara a Su pueblo.
La Palabra de Dios transformaría a Su pueblo.
Creo que es muy importante entenderlo porque vivimos en una época en la que las personas quieren ser transformadas y quieren saber la respuesta a la pregunta: "¿Qué necesito hacer para vivir este tipo de vida cristiana?" Y la oración de Jesús explica la respuesta. No es algo que necesites hacer por otros, entes de que suceda eso; es algo que debe ser hecho a favor de ti y por medio de la Palabra de Dios.
Mi convicción personal es que casi ha desaparecido en la iglesia cristiana. Construimos iglesias en términos de lo que necesitamos hacer.
La gente quiere saber, "¿Qué debo hacer?" Vivimos en una especie de nueva comunidad hecha a sí misma. Y lo único que falta tan a menudo no es lo que hacemos, sino lo que Dios hace con nosotros y en nosotros a través de Su Palabra.
Y tenemos indicios en realidad de lo que esto significaba. ¿Recuerdas cuando hubo una pequeña división en Hechos 6?
1 En aquellos días, como creciera el número de los discípulos, hubo murmuración de los griegos contra los hebreos, de que las viudas de aquéllos eran desatendidas en la distribución diaria. 2 Entonces los doce convocaron a la multitud de los discípulos, y dijeron: No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios, para servir a las mesas. 3 Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo.
7 Y crecía la palabra del Señor, y el número de los discípulos se multiplicaba grandemente en Jerusalén; también muchos de los sacerdotes obedecían a la fe.
En realidad, podría haber sido una división importante en la iglesia en la distribución del ministerio de misericordia. Hubo una disputa entre aquellos que eran hablantes nativos de griego y aquellos que eran hablantes nativos de hebreo y la gente se quejaba.
¿Recuerdas lo que dijeron los Apóstoles? Ahora, había 12 de ellos nuevamente y el lugar de Judas había sido ocupado. Había 12 de ellos. Dijeron: "Estamos tan ocupados orando y enseñando la Palabra que tampoco podemos hacer frente a este problema. Por lo tanto, debe designar personas que lo hagan". Ahora bien, esto es algo muy interesante. Puede pertenecer a una congregación de 3000 personas, pero por lo general solo se necesitan una o dos personas para predicar la Palabra. ¿Por qué? Porque la Palabra se expone tan pocas veces, por eso.
¿Por qué estaban tan ocupados los apóstoles? Porque estaban constantemente derramando la Palabra del evangelio en los corazones y mentes de la gente día tras día como nos dice Hechos capítulo 2.
Esa, mis amigos, es la diferencia de la calidad de la vida cristiana de esas personas. ¿Y nosotros? En el siglo XXI, asumimos que puedes vivir una vida cristiana fuerte y madura sobre la base de un sermón de 23 minutos y preferiblemente no más. Y el problema es que nunca hemos estado en ese otro país donde hemos visto el producto de este tipo de enseñanza.
8 Y entrando Pablo en la sinagoga, habló con denuedo por espacio de tres meses, discutiendo y persuadiendo acerca del reino de Dios. 9 Pero endureciéndose algunos y no creyendo, maldiciendo el Camino delante de la multitud, se apartó Pablo de ellos y separó a los discípulos, discutiendo cada día en la escuela de uno llamado Tiranno. 10 Así continuó por espacio de dos años, de manera que todos los que habitaban en Asia, judíos y griegos, oyeron la palabra del Señor Jesús.
11 Y hacía Dios milagros extraordinarios por mano de Pablo,
20 Así crecía y prevalecía poderosamente la palabra del Señor.
Recuerde cuando Pablo estaba en Éfeso, en realidad se nos dan pequeños detalles de lo que hizo. Contrató la sala de conferencias de un profesor de filosofía llamado Tyrannus. Me pregunto si ese era su apodo en lugar de su nombre real, y tuvo la sabiduría de no usar su sala de conferencias durante la hora de la siesta, desde el final de la mañana hasta el final de la tarde, para poder ganar dinero rápido alquilando su sala de conferencias a Paul. Y así, cuando todos los demás estaban durmiendo la siesta, Paul reunió a los cristianos todos los días durante un período de más de dos años. Él estaba derramando la Palabra de Dios en ellos.
Ahora bien, ¿qué técnicas de evangelización necesitaban usar para difundir el evangelio? Bueno, aparentemente no usaron ninguno. La Palabra simplemente se propagó debido a esta nueva comunidad que estaba siendo creada por el evangelio.
Ahora vivimos en diferentes tiempos, en diferentes estructuras sociales, pero esto es lo que necesitamos desesperadamente hoy en la iglesia, y lo necesitamos como individuos, que la Palabra de Dios sea derramada en nosotros para que la Palabra de Dios transforme nuestras mentes. y nuestras vidas serán renovadas.
¿De qué manera la iglesia en Hechos era una comunidad compartida?
La iglesia era una comunidad que COMPARTIA
Entonces, en primer lugar, eran una comunidad aprendía con denuedo y, en segundo lugar, eran una comunidad que compartía. Lucas usa la palabra koinonia, "comunión", la enseñanza de los Apóstoles. Estaban dedicados a la confraternidad.
¿Que significa eso? Significa que compartieron sus vidas entre ellos. De hecho, no solo compartieron sus vidas, compartieron sus posesiones.
Eso NO significa que fueran los primeros comunistas porque leemos más adelante que la gente tenía su propia propiedad privada y tenían el privilegio y el derecho de hacer con su propiedad privada lo que quisieran hacer. Pero lo que hizo el evangelio fue hacer que estas personas quisieran compartir lo que tenían, amarse unos a otros, cuidarse unos a otros, usar sus dones unos para otros, sentir que aunque eran individuos, en realidad lo más importante de ellos era que formaban parte de una nueva comunidad, y esto, que aunque eran familias individuales, necesitaban unir a su familia en una sola familia que durará para siempre. Y aprendieron esto. Eran una comunidad de aprendizaje y eran una comunidad que compartía sus vidas con sus dones y posesiones con los necesitados de esta comunidad.
La iglesia era una comunidad de adoración
Y en tercer lugar, Lucas nos dice que eran una comunidad de adoración. La razón por la que se reunían en el templo, como recordarán en los primeros capítulos de los Hechos de los Apóstoles, no era porque todavía se consideraran judíos, sino porque ese era el gran espacio de la ciudad. Y así se reunieron en una parte especial del templo. Era un área pública en cierto modo y allí se reunían para la oración y la adoración porque entendieron esto, que en la adoración y en la oración, se dedicaron a las oraciones, en la adoración y en la oración nos convertimos en lo que Dios ha querido que seamos. . Ya sabes, hay una aplicación de eso. A veces la gente dice, sobre todo en las iglesias más grandes: "Sabes, esta iglesia es muy grande. Quiero conocer gente. ¿Adónde debo ir para conocer gente?" ¿Conoces el mejor lugar para ir a conocer gente? Es la reunión de oración de la iglesia. Ahí es donde descubres lo que realmente es la iglesia, cuáles son realmente sus necesidades. Ahí es donde escuchas los corazones de tus compañeros miembros y, sin embargo, ¿no es cierto en nuestras iglesias hoy? Difícilmente podrías decir que somos devotos de la oración porque, después de todo, ¿cómo nos conoceríamos de esa manera? Bueno, lo primero que hay que entender es que la iglesia es el lugar donde primero se conoce a Dios, pero paradójicamente la forma en que se llega a conocer el latido del corazón de los demás, las preocupaciones de los demás, las necesidades de la confraternidad, la dirección de la comunión es cuando te dedicas a la adoración ya las oraciones.
La iglesia era una comunidad multicultural
En cuarto lugar, eran una comunidad multicultural. Eran una comunidad de aprendizaje, una comunidad para compartir, una comunidad de adoración, y también eran una comunidad multicultural. Ahora, eso fue cierto en parte en términos étnicos, por supuesto, y piense en lo que sucedió en el día de Pentecostés, personas de todo el mundo se convirtieron en cristianos. Pero la mayoría de ellos al menos se habrían dispersado en casa. Entonces, ¿a qué me refiero cuando digo que eran una comunidad multicultural? Bueno, en parte que Dios estaba uniendo a los creyentes judíos y los creyentes gentiles. Pero algo más: Dios estaba juntando a dueños de esclavos y esclavos. Dios estaba uniendo a padres e hijos. Dios estaba juntando a ricos y pobres. Y por supuesto, es por eso que en nuestros días la iglesia brilla porque cuando, por supuesto, esto difiere de un contexto a otro, pero cuando Dios crea esta nueva comunidad en Jesucristo, esa nueva comunidad siempre va a tener algún tipo de de la diversidad Y es la belleza de la forma en que Él nos une en Jesucristo de una manera que nada más en este mundo puede hacer que la iglesia brille en el mundo.
Una vez ministré en una iglesia, estaba parado en la parte de atrás. Sabía que básicamente no quedaban asientos en la parte de abajo de la iglesia. Vi entrar a una dama de muy bajos recursos y supe que solo había un asiento que ella podría ocupar y estaba justo al lado de un hombre que había sido nombrado caballero por la Reina. Él era "Señor". Entonces, él era alguien. Y vi a esta dama caminar por el pasillo, sentarse junto a este Caballero del Reino, darle un abrazo y plantarle un gran beso en la mejilla. Debo decir que me preguntaba qué pensaría su esposa que estaba sentada al otro lado. Pero también me senté y pensé que es por eso que amo a la iglesia porque esto no sucede en ningún otro lugar del mundo, que somos una comunidad reunida así.
Y cuando eso sucede, entonces la iglesia es una quinta cosa; es una comunidad en crecimiento y es por eso que esta pequeña sección de Hechos 2 termina cuando Lucas dice: "Y por cierto, ¿te das cuenta de que cuando la iglesia está así, el Señor añadía cada día a la iglesia los que iban siendo salvos?"
Más adelante, nos dice lo que creo que es lo más sorprendente de esta iglesia en Jerusalén. En versos consecutivos dice dos cosas que parecen totalmente contradictorias. Una era esta, la iglesia era tan diferente del mundo que la gente no se atrevía a unirse, y lo siguiente que dice es que la gente se agolpaba en la iglesia.
Y esa es una gran lección para nosotros. Cuando la gente nos dice: "Sabes, la iglesia necesita adoptar y adaptarse al mundo moderno" es por eso que la iglesia esta como esta iglesia. Y la gente piensa: "No estoy tan seguro de que pueda pertenecer allí", que Dios suscita en ellos el deseo de tener lo que tienen las personas en la iglesia porque cuando tienes a Jesucristo y Su iglesia, tienes todo lo que alguna vez tendrás. necesidad, tanto por el tiempo como por la eternidad. Entonces, si la gente dice: "¿Necesito pertenecer a la iglesia?" Creo que la respuesta es: "¿Necesitas pertenecer a la iglesia?" Piensa en lo que Jesús ha hecho Su iglesia y querrás con todo tu corazón pertenecer.