Hebreos 3.12-19 - No endurezcamos nuestros corazones - Serie Hebreos No. 17
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INTRODUCCIÓN
INTRODUCCIÓN
Si escucharas la voz de Dios y te llama a la fe ¿Cuál sería tu respuesta?
Y ahora imagina que no solo escuchas esa voz, sino ves las obras extraordinarias que hace ¿Cuál sería tu respuesta?
¿No escuchaste alguna vez la frase: ver para creer?
Bueno, algunos ni viendo creen. Que corazones tan endurecidos tenemos a veces.
Si Dios hiciese las obras y milagros más grandes delante nuestro, ¿con seguridad que creeríamos?
Pero Dios ya las hizo y las hizo en Cristo.
¿Y creemos?
Hubo un pueblo que fue severamente castigado por la incredulidad aún a pesar de las obras y había una iglesia, de los hebreos (aunque no se define realmente quienes son), que necesitaban igualmente seguir firmes en su fe, y hoy hay un pueblo acá, el pueblo nuestro de Dios, que requiere igualmente creer.
EXÉGESIS He 3.12-19
EXÉGESIS He 3.12-19
Resumen:
El autor a los hebreos cita la experiencia más dura del pueblo de Israel.
Moisés envió 12 espías, y 10 de ellos reportaron que no podrían ingresar a la tierra que Dios había prometido. Se reportó tierra de gigantes y una tierra difícil por tomar.
Josué y Caleb llamaron a calma al pueblo y el pueblo incrédulo cuestionó a Dios y quisieron apedrear a Moisés, Aaron, Josué y Caleb.
El pueblo ya se estaba organizando para volver a Egipto y renegaron contra Dios por haberlos sacado de la esclavitud de Egipto.
12 Mirad, hermanos, que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo;
“Mirad, hermanos..”
Llamado a atender la segunda advertencia: Contra la incredulidad.
“..que no haya en ninguno de vosotros corazón malo de incredulidad..”
La Incredulidad fue el evento más trágico del pueblo de Israel.
Advertencia no contra un tercero, sino contra uno mismo.
El corazón es necesario cuidar.
Puede haber fe o incredulidad.
“..para no apartarse del Dios vivo;”
Resultado: Apartarse del Dios vivo.
¡Lo último que podrían hacer! Sería perder el sentido y el destino eterno de Dios.
Jn 15.5 “5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.”
Contexto:
El pueblo de Israel fue incrédulo, a pesar de los grandes milagros y no alcanzaron el propósito de entrar en el descanso o tierra prometida de Dios.
¡Se apartaron del Dios vivo!
Esta exhortación que reciben los destinatarios, también sería para nosotros.
¡Miren hermanos!, que no haya alguno de nosotros con un corazón malo de incredulidad para apartarse del Dios vivo.
Argumento: Los creyentes "hermanos santos" deben cuidarse de la incredulidad aún cuando tenemos más grandes señales, obras y milagros que el pueblo de Israel que se apartó, y esas señales, obras y milagros son Cristo.
¡Pero había algo que podían hacer los hebreos! Y también nosotros:
13 antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado.
“.. antes exhortaos.."
“parakaleo” es una palabra muy utilizada en las Escrituras.
“rogar fervorosamente” con el fin de animar.
".. los unos a los otros cada día.."
El cuidado a la incredulidad debía ser importante, velar por el hno, cada día.
¿Cuál es el propósito?
-"..para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado."
El propósito evitar endurecimiento.
Faraón, de quien escapataron, tenía corazón endurecido.
“endurecimiento” es el resultado del engaño del pecado.
No es por un mejor pensamiento, tampoco por el despertar a nuevas filosofías, sino por el pecado.
Argumento:
Los hebreos debían cuidarse de la Incredulidad para no caer en el pecado de Israel. Ellos tenían mayores evidencias que era Cristo. La exhortación era un medio para cuidarse de la incredulidad que viene por el pecado.
La exhortación te molesta? ¿No has pensado que podrías ser animado a no ser engañado por el pecado y evitar un corazón incrédulo?
14 Porque somos hechos participantes de Cristo, con tal que retengamos firme hasta el fin nuestra confianza del principio,
"Porque somos hechos participantes de Cristo.."
La iglesia de los hebreos, no podían ser incrédulos ante señales más grandes que las de Moisés.
Cristo era el camino a las nuevas y grandes bendiciones.
¡Cristo siempre fue el camino y el único camino a las grandes bendiciones¡
En Gn 3.15 Dios no anuncia varios caminos para derrota del mal, Satanás, la muerte.
Anuncia solo uno que es Cristo.
".. Con tal que retengamos firme hasta el fin nuestra confianza del principio."
No podían caerse de Cristo.
Argumento principal de hebreos: Cristo es mayor y no hay que volver atrás en la fe, más bien Él puede sustentarte en la fe.
15 entre tanto que se dice:
Si oyereis hoy su voz,
No endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación.
Regresa la exhortación y la segunda gran advertencia.
“entre tanto que se dice:”
Ya estaba anunciado, no era algo nuevo. Lo tenían desde Gn 3.15.
Cristo es llamado en Gn 3.15.
Cristo es anunciado en la promesa a Abraham, Isaac y Jacob.
Cristo fue anunciado en la profecía de Judá, hecha por Jacob.
Igualmente Israel había recibido de la voz de Dios a través de Moisés las advertencias, las promesas.
Hoy seguimos diciendo ven a Jesucristo y muchos no van a venir. No todos pondrán su fe en Cristo. El pueblo de Israel había recibido advertencias no las escuchó.
Pero si escuchas la voz de Dios en las Escrituras, entonces:
“Si oyereis hoy su voz, no endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación.”
Se repite la advertencia. Debe ser muy seria.
Si la repetición en un pasaje de una palabra es de énfasis y clave importante (en hermenéutica), imagina la repetición de las advertencias.
No había que endurecer el corazón como había pasado al pueblo de Dios.
No fue solo endurecer, sino “provocar” a Dios.
¿Por qué sería “provocar a Dios?
Por necedad, ¿acaso no habían visto las señales? (mar rojo, maná del cielo, la gloria de Dios en Moisés, la columna de humo en el día y columna de fuego en la noche? ¿No salió agua de la roca cuando tuvieron sed? ¿No habían escuchado el trueno como voz de Dios y no tenían miedo? ¿No era el tabernáculo el lugar donde se manifestaba la presencia de Dios?
¡Es mucho peor la necedad en rendirse a Cristo!
Hace todas las señales, milagros como credenciales de mesías.
Da su vida en la cruz para el cumplimiento de las profecías.
RESUCITA como la evidencia máxima de que es Dios sobre todas las cosas.
¿Y aún así no creemos en su palabra, de que ÉL es el PAN DE VIDA, y que debemos arrepentirnos y creer en ÉL?
Que terrible provocación es rehusarse a entregarse a Cristo. Hay que ser muy orgulloso para no poder torcer tus rodillas delante de Cristo. Y HAY PERSONAS que se perderán toda la eternidad por la provocación a Dios.
Y tal vez digas que esto no podría pasarte a ti:
16 ¿Quiénes fueron los que, habiendo oído, le provocaron? ¿No fueron todos los que salieron de Egipto por mano de Moisés?
El autor dice que esto pasó con quienes salieron de Egipto y vieron las grandes obras de Dios.
“..¿No fueron todos los que salieron de Egipto por mano de Moisés?
Vagaron en el desierto tantos años, para que mueran todos los que salieron de Egipto. Toda la generación se perdió.
A excepción de Josué y Caleb.
¡Debemos tener mucho cuidado!
Dios es severo con la incredulidad. En el contexto de Hebreos, Dios es severo con aquellos que rechacen a Cristo.
Tal vez digas que esto pasó a un grupo de rebeldes en Israel, pero que nosotros estamos lejos de todo esto:
17 Pues si algunas de las ramas fueron desgajadas, y tú, siendo olivo silvestre, has sido injertado en lugar de ellas, y has sido hecho participante de la raíz y de la rica savia del olivo, 18 no te jactes contra las ramas; y si te jactas, sabe que no sustentas tú a la raíz, sino la raíz a ti. 19 Pues las ramas, dirás, fueron desgajadas para que yo fuese injertado. 20 Bien; por su incredulidad fueron desgajadas, pero tú por la fe estás en pie. No te ensoberbezcas, sino teme. 21 Porque si Dios no perdonó a las ramas naturales, a ti tampoco te perdonará. 22 Mira, pues, la bondad y la severidad de Dios; la severidad ciertamente para con los que cayeron, pero la bondad para contigo, si permaneces en esa bondad; pues de otra manera tú también serás cortado.
Que terrible advertencia.
La incredulidad no es pasada por alto.
¿Si no crees plenamente en Cristo, qué te queda?
“..Porque si Dios no perdonó a las ramas naturales, a ti tampoco te perdonará”
Todos los judíos que rechazaron a Cristo no entrarán al reposo de Dios, a la eternidad con Dios. Todos los que se vuelven contra Su Cristo, incluyéndonos, no entrarán al reino de Dios.
No estamos hablando de perder la salvación. Pero ¿cuántos “seguros” creyentes, se han apartado de la fe verdadera en Cristo? ¿Eres salvo por la fe verdadera en CRISTO, en SU PERSONA, y en SU OBRA? ¿Dónde están las evidencias?
ÉL no va a perdonar a los incrédulos.
17 ¿Y con quiénes estuvo él disgustado cuarenta años? ¿No fue con los que pecaron, cuyos cuerpos cayeron en el desierto?
No solo rechazaron a Dios por la incredulidad, sino que se ganaron que Dios esté disgustado con ellos.
Disgustar - “estar enojado y ofendido”. Era un pueblo que ofendía a Dios Santo.
“..¿No fue con los pecaron, cuyos cuerpos cayeron en el desierto?”
La incredulidad recibió su castigo y no llegaron al propósito del éxodo de Egipto.
¿Sabes? No sirve de nada, si no vas a alcanzar el destino eterno con Cristo. No sirve tantos años de la iglesia, tantas ofrendas dadas a los pobres, no sirven las obras buenas o misericordiosas, no sirve nada si no alcanzas la comunión eterna con Dios a través de Cristo.
18 ¿Y a quiénes juró que no entrarían en su reposo, sino a aquellos que desobedecieron?
Se muestra el enojo santo de Dios.
Él había “jurado”, establecido que el pueblo de Israel se pierda y no alcance el propósito de ingresar a la tierra prometida.
El pueblo se había vuelto contra Dios.
¿Lo recuerdas?
1 Entonces toda la congregación gritó, y dio voces; y el pueblo lloró aquella noche. 2 Y se quejaron contra Moisés y contra Aarón todos los hijos de Israel; y les dijo toda la multitud: ¡Ojalá muriéramos en la tierra de Egipto; o en este desierto ojalá muriéramos! 3 ¿Y por qué nos trae Jehová a esta tierra para caer a espada, y que nuestras mujeres y nuestros niños sean por presa? ¿No nos sería mejor volvernos a Egipto?
Incrédulos que Dios les daría la tierra por la cual salieron de Egipto.
4 Y decían el uno al otro: Designemos un capitán, y volvámonos a Egipto.
Y cuando Josué y Caleb exhortaban al pueblo a confiar en Jehová:
8 Si Jehová se agradare de nosotros, él nos llevará a esta tierra, y nos la entregará; tierra que fluye leche y miel. 9 Por tanto, no seáis rebeldes contra Jehová, ni temáis al pueblo de esta tierra; porque nosotros los comeremos como pan; su amparo se ha apartado de ellos, y con nosotros está Jehová; no los temáis.
El pueblo de Israel, incrédulos, quisieron matarlos:
10 Entonces toda la multitud habló de apedrearlos.
Pero la gloria de Jehová se mostró en el tabernáculo de reunión a todos los hijos de Israel,
Que pueblo más grande en sentido de necedad y de corazones endurecidos.
Por eso podemos entender mejor el versículo:
RETOMAMOS:
18 ¿Y a quiénes juró que no entrarían en su reposo, sino a aquellos que desobedecieron?
Fueron privados por Dios de ingresar a la tierra prometida por su desobediencia a causa de su incredulidad.
¿Sabes? Hay muchas personas, que creen que hacen bien, son personas que descansan en filosofía, en sus propios razonamientos, en los pensamientos del mundo. No tienen necesidad de rendirse a Cristo, están envanecidos. No creas que son personas que van a convencer a Dios en el día del juicio. Dios va a ser severo.
¿No tenemos familiares así?
¿No conocemos a jovencitos que se declaran ateos apenas tienen más de 13 años, y decimos, déjenles es parte de la edad? NO ES PARTE DE LA EDAD. ¡Es parte del pecado y de la incredulidad y es la antesala de la condenación total y eterna¡
19 Y vemos que no pudieron entrar a causa de incredulidad.
El autor a los hebreos, acaba de decir que todo esto se debió a la incredulidad del pueblo de Israel y trata de prevenir y exhortar contra la incredulidad de la audiencia.
Y no estaban en un tiempo de felicidad y abundancia. Estaban en persecución como mas tarde se verá. Aún en tribulación no podían desviarse de Cristo.
La segunda advertencia es contra la incredulidad y es severa.
MEDITEMOS EN LA PALABRA
MEDITEMOS EN LA PALABRA
No debemos olvidar:
Tenemos una posición y posesión magnífica en Cristo. Él es la Vida y nos da de Su Vida. Es lo que nos espera eternamente y lo podemos disfrutar desde hoy a través de la fe. Pero de nada nos serviría caer como cayó Israel en tiempos pasados, donde tuvieron una actitud de rendición al pecado, que generó corazones endurecidos que reflejaban su total incredulidad.
No escucharon la voz de Dios.
La voz de Dios hoy está mostrando a Cristo. Podemos ir a Cristo, hallaremos una posesión eterna de los cielos.
Necesitamos corazones sensibles a la voz de Dios, que no sean endurecidos, sino listos a escuchar y responder como ovejas que responden a su pastor que es Cristo.
No tenemos que tener un trágico final, cuando en la cruz se da una acción de salvación por nuestros pecados.
El pueblo de Israel quería volver a la esclavitud. ¿Acaso nosotros también queremos deshacernos de Cristo para volver atrás a la esclavitud del pecado y de Satanás?
No alcanzaron la tierra prometida, el reposo de Dios. Y quien no confíe en Cristo no la alcanzará.
Esa montaña, el monte Sinaí, fue donde el pueblo de Israel comenzó a andar con Dios, vieron obras maravillosas, escucharon la voz de Dios en un estruendo y bocinas y tuvieron miedo. Y aún delante de sus ojos se hizo tantas señales QUE NO SIRVIERON PARA NADA.
Nosotros hemos escuchado una voz igual de hermosa, la voz de Cristo. No necesitamos el maná del cielo, Cristo es el pan de vida.
No tenemos delante de nuestros ojos el monte Sinaí de recordatorio para saber quienes somos y a quien pertenecemos, pero dos agujeros en las manos y otros dos en los pies, son el mejor recordatorio de A quien pertenecemos y quienes somos.
Una vez más:
15 entre tanto que se dice:
Si oyereis hoy su voz,
No endurezcáis vuestros corazones, como en la provocación.
Vamos a orar.