SIN AMOR, DE NADA SIRVE.

1 Corintios 13:1–3 (RVR60)

1 Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe. 2 Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy. 3 Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve.

INTRODUCCION.

El doctor Karl Menninger, un famoso psiquiatra estadounidense y fundador de la clínica Menninger, líder la fundación del Hospital Winer (un hospital de veteranos en USA), que se convirtió en el más grande centro de entrenamiento psiquiátrico del mundo dijo lo siguiente “El amor es la medicina para nuestro enfermo y viejo mundo. Si las personas pueden aprenden a dar y recibir amor, se recuperarían por lo general de sus enfermedades físicas y mentales”.

Hay mucha verdad en la palabras de este hombre, sin embargo tenemos un problema en esta declaración. ¿Cuál?

El problema radica es que pocos tienen una idea clara de lo que es el verdadero amor, ya que es una palabra que hoy en día ha sido distorsionada de su verdadero significado completamente.

DGLEV AMOR = 1. Sentimiento de vivo afecto e inclinación hacía una persona o cosa a la que se le desea todo lo bueno. (amo a la patria, amo a mi bebé, amo a mi perro) 2 Sentimiento de intensa atracción emocional y sexual hacia una persona con la que se desea compartir una vida en común (de solo verla la amo). 3 Afición apasionada que se tiene hacía una cosa (amo la música, amo el fútbol, amo mi trabajo)

Muchos basan su concepto de amor en términos de buenos sentimientos o sentimientos románticos, de afecto cordial o incluso hasta de atracción.

Frases como “Te amo” muchas veces carecen de significado verdadero y lo único que incluyen dentro es “Amor por mi mismo y pasión y deseo por la otra persona”.(Quien te pide una prueba de amor, es que en realidad no te ama)

Por ello, es que Pablo en estas palabras, quiere hacer notar a los lectores de su carta, el verdadera significado e importancia que el amor tiene en sí como una de las verdades cardinales del cristianismo.

Es importante que recordemos que existían distintos substantivos en el griego para referirse al amor.

Eros = Ἔρως; es un termino que designa al amor como algo que se desea o apetece, especialmente relacionado con la atracción entre un hombre y una mujer.

Fileo = se usa para referirse al amor de amistad, es decir un afecto cordial.

Filostorgos = (filos/storge): Amor hacia la familia, especialmente el amor entre los esposos, o de los padres a los hijos o vs.

Agape = que designa el amor en la forma mas desinteresada y desprendida, que busca el bien de aquel que ama por encima de todo interes y provecho de quien ama. Esta es una de las palabras menos comunes en la literatura griega, pero más frecuentes en todo el NT.

Es precisamente esta palabra que apunta al amor que Dios tiene para con el hombre.

1 Juan 4:9–10 (NBV)

9 Dios nos demostró su amor enviando a su único Hijo a este perverso mundo para darnos vida eterna por medio de su muerte. 10 Eso sí es amor verdadero. No se trata de que nosotros hayamos amado a Dios, sino de que él nos amó tanto que estuvo dispuesto a enviar a su único Hijo como sacrificio expiatorio por nuestros pecados.

Este sí es amor verdadero, es la manifestación más bendita del carácter divino.

No era que nosotros lo merecíamos, o que nosotros lo pedimos; sino que Dios mismo decidió enviar al Señor Jesucristo (darnos), y Cristo a su vez aceptó venir a ponerse en nuestro lugar para darnos redención y perdón de pecados.

Ese es el verdadero concepto del Amor de Dios, y por ende un principio cardinal en la vida de todo creyente, el amor consiste en darse a sí mismo, sin demandar nada a cambio, el amor verdadero esta más interesado en dar que en recibir.

Es decir que el amor verdadero (agape) lleva implícito sacrificio.

El amor implica sacrificarnos a nosotros mismos por otros, aún y cuando otros no se preocupen de nosotros o incluso no nos amen. (Los que se duermen en la predica, los que llegan tarde, los que nos ignoran por estar el el celular, etc.).

El amor es un absoluto fundamental de la vida cristiana y un mandamiento directo del Señor Jesucristo.

Juan 13:34–35 (NTV)

34 Así que ahora les doy un nuevo mandamiento: ámense unos a otros. Tal como yo los he amado, ustedes deben amarse unos a otros. 35 El amor que tengan unos por otros será la prueba ante el mundo de que son mis discípulos».

Un mandamiento no esta sujeto a cuestionamientos, apelaciones, o interpretaciones, tampoco depende de nuestro estado de ánimo o humor para ponerlo por obra, es una orden directa que no esta sujeta a discusión. (mis mandamientos no son gravosos).

Uno de los grandes tropiezo en el avance del evangelio es la renuencia de muchos creyentes a llevar a la práctica las palabra de Jesús.

El amor verdadero no tiene que ver con un sentimiento u emoción, tampoco con una discusión a las palabras de Jesús, sino más bien con una acto determinado de la voluntad, de obediencia completa a las palabras de Jesús, y con acciones concretas que implican la búsqueda del bienestar de otros por encima del nuestro.

Romanos 13:8–10 (TLA)

8 No le deban nada a nadie. La única deuda que deben tener es la de amarse unos a otros. El que ama a los demás ya ha cumplido con todo lo que la ley exige. 9 En la ley hay mandatos como estos: «No sean infieles en su matrimonio. No maten. No roben. No se dejen dominar por el deseo de tener lo que otros tienen.» Estos mandamientos, y todos los demás, pueden resumirse en uno solo: «Cada uno debe amar a su prójimo, como se ama a sí mismo.» 10 El amor no causa daño a nadie. Cuando amamos a los demás, estamos cumpliendo toda la ley.

Es la desobediencia al Señor el reflejo de la falta de amor, en cambio quien obedece esta dispuesto a amar verdaderamente.

Sin embrago, los creyentes de Corinto no habían comprendido esa importante verdad de la vida cristiana y era muy poco practicado. (La igleisa estaba constantemente enfrentado divisiones entre sus miembros, celos, contiendas, pleitos en los tribunales civiles, y ahora incluso disputas y envidias en el ejercicio de los dones espirituales que el Señor les había concedido).

Es doloroso ver que, la misma escena en Corinto sigue sucediendo en la iglesia de hoy día, la falta de amor entre la membresía de la iglesia se sigue caracterizando.

La iglesia en Corinto tenía la doctrina correcta, tambien tenían todos los dones necesarios para cumplir con el proposito de Dios para ellos, sin embargo el amor estaba ausente.

MACARTHUR John “Es más fácil ser ortodoxo, que ser amoroso, y también es más fácil, ser activo en la iglesia que ser amoroso, sin embrago la característica suprema que Dios demanda de su pueblo es el amor”

La teología correcto (sana doctrina), no es un sustituto del amor; tampoco las tareas o las actividades religiosas (dentro y fuera de la iglesia) son un sustituto del amor.

No tenemos como creyentes ninguna clase excusa para no amar a otros “porque el amor de Dios a sido derramado en nuestros corazones”

La principal evidencia de la madurez en la vida cristiana es un amor creciente, por Dios en primer lugar, hacía el pueblo de Dios (la Iglesia), y de la misma forma por aquellas almas que estan sin Cristo.

Los corintios estaban emocionados, disputando cual de los dones que tenían era mas importante que el resto, por tal razón Pablo les dice “Ustedes deberían desear encarecidamente los dones que más ayuda. Pero ahora déjenme mostrales una manera de vida que supera a todas las demás”

1 Corintios 13:1 (RVR60)

1 Si yo hablase lenguas humanas y angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que resuena, o címbalo que retiñe.

Para los corintios el don más relevante era los que tenían que ver con las lenguas (diversos géneros de lenguas / interpretación de lenguas). Y Pablo una vez más comienza por ahí su explicación sobre la importancia suprema del amor.

Es de llamarnos la atención que Pablo comienza su exhortación haciéndolo en 1° persona, incluyéndose el mismo en la amonestación.

Pablo utiliza aquí una figura retórica llamada Hipérbole. (es una exageración hasta el limite de la imaginación para comunicar lo que quiere decir).

Pablo comienza con la frase, “Si Yo hablase lenguas humanas”, NTV Hablar todos los idiomas del mundo”, es decir, si Pablo fuera capaz de hablar en cualquier idioma, dialecto, lenguaje que existe en el mundo (2021 WP 7100 lenguas)

Sin duda alguna que los Corintios deseaban los dones de diversos géneros de lenguas e interpretación porque según ellos pensaban que eso los hacia más espirituales que el resto de los miembros de la iglesia.

Incluso lenguas angélicas; Esta frase no esta enseñando que haya un lenguaje o dialecto único o especial de los angeles. A lo largo de toda la Biblia no encontramos ninguna evidencia de tal cosa. Es mas cada que los angeles trajeron mensajes de parte de Dios, siempre lo hicieron en el idioma de quienes los recibieron (Daniel, María,Juan).

Lo que Pablo esta hiperbolizando, es que si aun el pudiera tener la elocuencia, fluidez lingüística, o la habilidad de hablar cualquier idioma que existirá en la tierra o en el cielo, pero no tiene amor, no sería mas que un metal ruidoso o un címbalo que resuena (platillos)

No importa que tan elocuentemente podemos hablar, cuan elegante, elaborado, pulcro y sorprendente pueda ser nuestra manera de hablar (Aleluya, Gloria a Dios, bendiciones, llenar nuestra boca de todas clase de textos bíblicos y en todas las versiones, incluso la proclamación de grandes verdades expuestas con gran elocuencia), sin amor, no sirve de nada.

No tengo amor; NTV No amara a los demás.

Alguien pude decir pero yo no estoy en ese punto, yo si tengo amor, amo al Señor con todo mi corazón y a los hermanos también (de lejitos, pero sí lo amo.

1 Juan 4:20–21 (TLA)

20 Si decimos que amamos a Dios, y al mismo tiempo nos odiamos unos a otros, somos unos mentirosos. Porque si no amamos al hermano, a quien podemos ver, mucho menos podemos amar a Dios, a quien no podemos ver. 21 Y Jesucristo nos dio este mandamiento: «¡Amen a Dios, y ámense unos a otros!»

Hay una incompatibilidad en la conducta de decir Amo al Señor Jesús con todo mi corazón, y al mismo tiempo no puedo amar a mi hermano en la iglesia.

Amar a Dios lleva implícito en sí mismo el amar a otros, aún cuando ellos no nos amen, porque Dios nos amo de esa forma.

El verdadero amor se da a conocer amando lo que no merece ser amado.

Dios nos amo aun siendo nosotros pecadores y nos mostró su amor en la muerte de su Hijo.

Él vino a nosotros en amor, antes de que nosotros fuéramos a el en arrepentimiento y fe.

Pablo uso un ejemplo muy gráfico, para que los corintios pudieran entender que aun teniendo según ellos el don más prominente, sin amor resulta inútil

En los tiempos del NT los ritos para honrar a las deidades paganas Cibeles, Baco y Dionisio, incluía hablar con sonidos producidos en éxtasis que iban acompañados del sonido de gong, címbalos y trompetas.

Un don usado sin la presencia del fruto más importante (amor), no es otra cosas más que solo parloteo. Sin el amor verdadero, ningún ministerio se orienta hacía otros, sino solo hacía uno mismo.

Cuando ministramos sin amor (agape), nuestro servicio es ruido que molesta a Dios y molesta a los otros creyentes.

Ministrar a otros sin amor (hablar en lenguas), no es otra cosa que religiosidad sin sentido disfrazada de cristianismo.

1 Corintios 13:2 (RVR60)

2 Y si tuviese profecía, y entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy.

Pablo ahora pasa a abordar otros tres dones necesarios para el desarrollo de la iglesia, pero que de igual modo si son usados sin la cubierta del amor, resultan vanos.

Y si tuviese profecía,… y no tengo amor nada soy.

La profecía es la proclamación de la verdad de Dios a las personas, a fin de que ellas la puedan conocer y entender. (predicación)

Pero incluso Pablo esta dejando claro que el podía estar predicando la verdad de Dios a las personas para que la conocieran, podría estar ministrado a otros sin amor, entonces no tendría sentido.

Ningún ministro de Dios esta exento de ministrar en amo (incluso los más capacitados), porque por encima de todo, todos estamos obligados a ministrar en amor.

Podemos preparar una clase, sermón, platica, taller cuidadosamente, haciendo la exégesis correcta, diseñando los materiales adecuados, cuidando cada detalle y la ortodoxia, incluso hacer sentir bien a todos los asistentes, pero nunca haber hecho un sacrificio realmente por esos niños, jóvenes, o personas.

Hacerlo más por un reconocimiento personal, que con un amor (agape) verdadero.

Nuestros motivos es el poder que esta detrás de lo que decimos y lo que hacemos. Cuando nos promovemos a nosotros mismos, en la búsqueda de un reconocimiento, un beneficio nuestro testimonio por el Señor sera debilitado, no importan cuan persuasivas, relevantes u ortodoxas sean nuestras palabras o cuanto pensemos que lo que hacemos ayuda.

Y entendiese todos los misterios y toda la ciencia… y no tengo amor, nada soy

Un misterio en el NT es una revelación que Dios manifestó a los hombres que había permanecido oculta (El misterio de la unión de Cristo y la iglesia en su Amor y relación de sujeción Ef 5:32).

Pablo llega a la conclusión, de que aún si el pudiera entender todo aquello que Dios nos ha revelado de sí mismo, además de lo que ya nos revelo (Su palabra / creación), pero si esto no va aderezado con amor por Dios y por sus hermanos, entonces todo eso es inútil.

Sin fruto espiritual (amor), tener todo ese entendimiento sería tanto como conocer como Dios conoce y todavía no ser nada.

El estudio Bíblico es vital, de suma importancia para todo creyente, pero si este se hace solo con el propósito de ampliar el bagaje que conocimiento solamente y no ponerlo en práctica; hemos perdido en vano el tiempo.

La ciencia NTV Conocimiento: puede representar el conocimiento humano. Agregar esto en nada ayudaría. Uno podría llegar a comprender todo lo que ocurre en el universo y aún así todavía sería nada al carecer de amor.

Cualquier logro espiritual, conocimiento de las verdades bíblicas sin amor es peor que permanecer en la ignorancia. El resultado de esto es orgullo, arrogancia y afectación espiritual.

TLA 1 Corintios 8:1b Sin embargo, debemos reconocer que el conocimiento nos vuelve orgullosos, mientras que el amor fortalece nuestra vida cristiana.

El mero conocimiento aún el de las verdades de Dios nos envanece cuando carece de amor, el amor es el ingrediente indispensable para la edificación.

¿Es entonces que debemos menospreciar el conocimiento de la Palabra de Dios?

Filipenses 1:9 (NBV)

9 Lo que pido en mis oraciones es que el amor de ustedes sea cada vez más grande y que su conocimiento y buen juicio crezcan,

Sin conocimiento verdadero no podemos crecer verdaderamente, tampoco no podemos tener un buen juicio de las cosas que no conocemos.

Pero sí podemos conocer y aún así no obedecer, podemos conocer y aun así no tener buen juicio, si esto no va acompañado de amor verdadero.

y si tuviese toda la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo amor, nada soy.

Pablo no se esta refiriendo aquí a la fe salvadora, sino al don de fe. Aquel don que tienen la confianza en Dios para hacer proezas a favor de sus hijos (Pedro y Juan en la puerta de la Hermosa al ciego)

La frase de mover montañas era un proverbio judío que se refería a logra lo imposible. “Tiene que ver con el ejercer la fe de una forma tan intensa, que la persona es capaz de remover barreras infranqueables. Tanto Jesús como Pablo se refirieron a este proverbio en sus respectivos contextos”

Jonás era un hombre que tenía gran fe. Él sabía que Dios tenía el poder suficiente para salvar a toda la nación de Ninive, de tal forma que por eso se resistió a ir a cumplir el llamado de Dios a predicar. Tenía gran fe en la palabra de Dios, pero el mismo no quería que los malvados ninivitas se salvaran, el no tenía amor por ellos incluso después que se arrepintieron.

Jonás 4:1–3 (NBLA)

1 Pero esto desagradó a Jonás en gran manera, y se enojó. 2 Y oró al Señor: «¡Ah Señor! ¿No era esto lo que yo decía cuando aún estaba en mi tierra? Por eso me anticipé a huir a Tarsis. Porque yo sabía que Tú eres un Dios clemente y compasivo, lento para la ira y rico en misericordia, y que te arrepientes del mal anunciado. 3 »Y ahora, oh Señor, te ruego que me quites la vida, porque mejor me es la muerte que la vida».

La fe de Jonás en la Palabra y el poder de Dios era grande, pero su amor por los perdidos era nada.

De nada le servía ser una vocero del Dios del cielo, porque su mensaje no iba envuelto de amor y compasión.

Si este o cualquier don solo son empleados para beneficio personal y no para la edificación de los otros miembros del cuerpo de Cristo, carecen de valor, y el que los tienen no es nada, es decir no ayuda para nada a nadie.

1 Corintios 13:3 (RVR60)

3 Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para ser quemado, y no tengo amor, de nada me sirve.

Pablo menciona un ultimo don (dar), el amor (agape) siempre se sacrifica por los demás, pero el sacrificio o la beneficencia en favor de otros no siempre es producida por el amor.

Repartiese = se refiere a una acción continua, en pequeñas cantidades y a largo plazo.

La filantropía puede dar sistemáticamente cantidades de bienes a lo largo del tiempo a fin de suplir las necesidades de un grupo, sin el fruto del amor genuino (fundaciones, asociaciones, agencias, etc.)

El dar por por una obligación legalista, por un deseo de reconocimiento y alabanza o por liberarse de una conciencia culpable, no sirve de nada.

Hechos de los Apóstoles 2:44–45 (NTV)

44 Todos los creyentes se reunían en un mismo lugar y compartían todo lo que tenían. 45 Vendían sus propiedades y posesiones y compartían el dinero con aquellos en necesidad.

El ejercicio de Iglesia naciente por suplir las necesidades de los creyentes, era movido por el amor y no por el reconocimiento, y cuando esto se presento el ES se encargo de descubrirlo. (Ananías y Safira)

Y si entregase mi cuerpo para ser quemado y no tengo amor nada soy.

Esta es a prueba máxima que alguien puede dar, su propia vida. Algunos estudiosos opinan que Pablo se refería al martirio por el fuego, otros el ejemplo de los amigos de Daniel, y algunos concluyen que quizá Pablo estaba hablando de forma metafórica, asi como el caso de mover montañas.

No importan cuanto pueda sufrir o cuan heroicas puedan ser los hechos, si no tienen amor, no sirven de nada delante de Dios. Sin el impulso del amor divino en nuestra vida, cualquier acción queda reducida simplemente a una obra humana, en el espíritu del yo que de nada aprovecha.

Una persona sin amor, es como un platillos que hace ruido, que no es nada, y que no le sirve lo que hace de nada.