Los creyentes en el libro de los Hechos.

Hechos 1-10

Introducción:

Repaso:

Mateo 16.24 “ Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame.”

Hebreos 7.25 “por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos.”

Panorama del libro de los Hechos. (resumen)

Capítulos 1-10

El Señor se reúne con sus discípulos y les da el mandamiento de ser sus testigos.

Después de esto el Señor asciende a los cielos.

Los discípulos eligen sucesor de Judas

Viene el Espíritu Santo después de cincuenta días de la fiesta de la pascua.

Los creyentes son llenos del Espíritu Santo y hablan en diferentes idiomas las maravillas de Dios.

Primer discurso de Pedro.

Se convierten tres mil personas y todos compartían sus vidas.

Después, Pedro sana aun cojo de nacimiento en el nombre del Señor Jesús.

Pedro predica su segundo discurso explicando la sanidad del cojo.

Los apóstoles Pedro y Juan son llevados ante el concilio.

Los discípulos oran por los apóstoles.

Los creyentes comparten sus vidas.

Los creyentes comparten sus bienes para ayudar a los necesitados.

Ananías y Safira mienten acerca de su ofrenda.

Los apóstoles hacen muchas maravillas y señales.

Pedro y Juan son encarcelados por los judíos.

En la noche un angel del Señor les libera y les manda a seguir predicando.

Ante la necesidad de ayudar a las viudas de la Iglesia se eligen los primero siete diáconos.

Esteban testifica con gran poder y sabiduría.

Es arrestado y sentenciado injustamente.

Defensa y muerte de Esteban.

A raíz de la muerte de Esteban se desata la primera persecución.

Saulo persigue a la Iglesia entrando por las casas para arrestar a hombres y mujeres que confiesan a Cristo.

Predicación de Felipe en Samaria y el evangelio es recibido con gran poder.

Los apóstoles visitan Samaria y les imparten el Espíritu Santo.

Un angel del Señor le indica a Felipe que vaya al desierto, a predicar un etíope, funcionario de la reina de Candace.

Saulo tiene un encuentro personal con Jesús cuando se diría a Damasco a arrestar a los cristianos.

Es recibido por los creyentes de Damasco y es bautizado.

Inmediatamente Saulo predica en Damasco.

Mas tarde, conociendo las intenciones de los judíos de matarle, los discípulos la sacan a Saulo por la pared de la ciudad.

Saulo llega a Jerusalén pero los otros discípulos tienen recelo de él.

Bernabé intercede por Pablo y entonces es recibido y se dedica a predicar.

Pablo es enviado a Tarso para ser protegido de las amenazas de los judíos.

Entonces las Iglesias disfrutaban de paz y eran edificadas.

Pedro visita los lugares donde los creyentes fueron esparcidos.

Al visitar Lida un paralítico llamado Eneas es sanado por el poder de Cristo.

Estro provocó que muchos en Lida y Sarón se convirtieran al Señor.

En Jope había una hermana llamada Dorcas que había muerto y tenía testimonio de buenas obras.

Cuando Pedro visita Jope Dorcas es resucitada.

Por causa de esto muchos en Jope creyeron en el Señor.

En una ciudad llamada Cesarea había un centurión llamado Cornelio, este era un varón temeroso de Dios con toda su casa.

El recibe un visión donde Dios le manda a llamar a Pedro para que le predique el evangelio.

Por otra parte, estando Pedro unos días en Jope también recibe un visión donde Dios le da instrucciones de ir donde Cornelio a predicarle.

¿Cómo vivían su fe los creyentes del libro de los Hechos?

Su fe cambió toda su manera de vivir, provocando en ellos un apego por sus hermanos y una lealtad a Cristo.

Hechos 2.41-42 “41 Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados; y se añadieron aquel día como tres mil personas. 42 Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones.”

Hechos 2.43-47 “43 Y sobrevino temor a toda persona; y muchas maravillas y señales eran hechas por los apóstoles.44 Todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas;45 y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos según la necesidad de cada uno.46 Y perseverando unánimes cada día en el templo, y partiendo el pan en las casas, comían juntos con alegría y sencillez de corazón,47 alabando a Dios, y teniendo favor con todo el pueblo. Y el Señor añadía cada día a la iglesia los que habían de ser salvos.”

Hechos 4.32-35 “32 Y la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma; y ninguno decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en común.33 Y con gran poder los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y abundante gracia era sobre todos ellos.34 Así que no había entre ellos ningún necesitado; porque todos los que poseían heredades o casas, las vendían, y traían el precio de lo vendido,35 y lo ponían a los pies de los apóstoles; y se repartía a cada uno según su necesidad.”

En la hora de la prueba, cuando dos de sus apóstoles fueron encarcelados los discípulos se unieron y pidieron, en vez de que cesara la oposición, más valentía para dar testimonio de Cristo:

Hechos de los Apóstoles 4:23–31 (RVR60)

23 Y puestos en libertad, vinieron a los suyos y contaron todo lo que los principales sacerdotes y los ancianos les habían dicho.24 Y ellos, habiéndolo oído, alzaron unánimes la voz a Dios, y dijeron: Soberano Señor, tú eres el Dios que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay;25 que por boca de David tu siervo dijiste: ¿Por qué se amotinan las gentes, Y los pueblos piensan cosas vanas? 26 Se reunieron los reyes de la tierra, Y los príncipes se juntaron en uno Contra el Señor, y contra su Cristo. 27 Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu santo Hijo Jesús, a quien ungiste, Herodes y Poncio Pilato, con los gentiles y el pueblo de Israel, 28 para hacer cuanto tu mano y tu consejo habían antes determinado que sucediera. 29 Y ahora, Señor, mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra, 30 mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús. 31 Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios.

Dios ocupó su lealtad a Cristo como un medio poderoso para salvar mas personas.

Acerca de Juan Y Pedro cuando son encarcelados: Hechos 4.1-4 “1 Hablando ellos al pueblo, vinieron sobre ellos los sacerdotes con el jefe de la guardia del templo, y los saduceos, 2 resentidos de que enseñasen al pueblo, y anunciasen en Jesús la resurrección de entre los muertos. 3 Y les echaron mano, y los pusieron en la cárcel hasta el día siguiente, porque era ya tarde. 4 Pero muchos de los que habían oído la palabra, creyeron; y el número de los varones era como cinco mil.”

Ellos manifestaron ser leales a Cristo antes que a los hombres: Hechos 5.27-29 “27 Cuando los trajeron, los presentaron en el concilio, y el sumo sacerdote les preguntó, 28 diciendo: ¿No os mandamos estrictamente que no enseñaseis en ese nombre? Y ahora habéis llenado a Jerusalén de vuestra doctrina, y queréis echar sobre nosotros la sangre de ese hombre. 29 Respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron: Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres.”

Las oposición no fue un motivo para dejar de hacer la obra: Hechos 5.40-42 “40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. 41 Y ellos salieron de la presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer afrenta por causa del Nombre. 42 Y todos los días, en el templo y por las casas, no cesaban de enseñar y predicar a Jesucristo.”

A pesar de la persecución los creyentes siguieron siendo leales a Cristo y a su mandato de ser testigos. Hechos 8.1-4 “1 Y Saulo consentía en su muerte. En aquel día hubo una gran persecución contra la iglesia que estaba en Jerusalén; y todos fueron esparcidos por las tierras de Judea y de Samaria, salvo los apóstoles. 2 Y hombres piadosos llevaron a enterrar a Esteban, e hicieron gran llanto sobre él. 3 Y Saulo asolaba la iglesia, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel. 4 Pero los que fueron esparcidos iban por todas partes anunciando el evangelio.”

Memorizar:

Hechos 5.41-42 “41 Y ellos salieron de la presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer afrenta por causa del Nombre. 42 Y todos los días, en el templo y por las casas, no cesaban de enseñar y predicar a Jesucristo.”

La fe de los primeros discípulos cambió toda su manera de vivir, provocando en ellos un apego por sus hermanos y una lealtad a Cristo.

¿Qué provoca tu fe en Cristo?