LA PAZ SOBRENATURAL PARTE 2
Sermon • Submitted
0 ratings
· 123 viewsNotes
Transcript
INTRODUCCIÓN
INTRODUCCIÓN
La semana pasada vimos la primera parte de Juan 14:27
Juan 14.27 “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.”
Dos temas aprendimos:
La paz posicional. Todos al nacer pecadores somos enemigos de Dios:
Romanos 5.10 “Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo”
2. La paz sobrenatural solo para el creyente. Esta es una paz que Dios da a sus hijos en todo momentos. No importa la situación, las dudas, los miedos que uno esté enfrentando, Dios calma esa ansiedad, ese temor y nos inunda con paz divina. Eso sí, es una paz solo para los que ya tiene la paz posicional, osea los que han hecho paz con Dios.
Oremos para seguir con la SEGUNDA PARTE DE ESTE PAZ SOBRENATURAL
BODY
BODY
LA PAZ DEL MUNDO
Juan 14.27 “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.”
Jesús inicia el pasaje hablando sobre su paz, pero ahora ofrece el contraste de la paz que Él ofrece. Continua el versículo:
Juan 14.27 “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.”
El mundo dice tener una paz para ofrecer. En la forma más realista, la paz auténtica no se encuentra en el mundo. Como ya es sabido, las personas impías (las que no han nacido de nuevo) pertenecen a un mundo impío. ?Jesús tiene la obligación de cuidar, proveer, amar a toda la humanidad? La respuesta está en la oración sacerdotal de Jesús en el aposento alto:
Juan 17.9 “Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son,”
En este versículo, Jesús oró específicamente por los discípulos y no por el mundo.
Quiero aclarar, que esto no significa que Jesús no se preocupara por el mundo o que el mundo estuviera “más allá del amor de Dios”.De hecho, ocurre exactamente lo contrario:
Juan 3.16 “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito”,
Y es más, la preparación de los discípulos está dirigida en última instancia al objetivo de que el mundo crea:
Juan 17.21 “para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste.”
Pero la tarea de Jesús incluía la protección:
Juan 17.12 “Cuando estaba con ellos en el mundo, yo los guardaba en tu nombre; a los que me diste, yo los guardé, y ninguno de ellos se perdió, sino el hijo de perdición, para que la Escritura se cumpliese.”
Algo muy interesante que se resalta en el texto, es que aquellos que Dios le había dado en el mundo:
Juan 17.9 “Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son,”
?Lo notaste? ?Lo que significa? “tuyos son”
Juan ha captado una visión extremadamente significativa de la mente y el corazón de Jesús, porque en esta oración Jesús no reclamó la propiedad de los discípulos. Por el contrario, dijo que pertenecían al Padre: “Son tuyos”. Si tuviéramos la misma perspectiva que Jesús, no haríamos afirmaciones como “mi iglesia”, “mi gente” y “mis cosas”; sino que hablaríamos de “la iglesia de Dios”, “la gente de Dios” y “las cosas de Dios”, que el Señor nos ha prestado o dado. Cuando los cristianos comienzan a reflejar este espíritu, sus vidas empiezan a evidenciar la transformación de la que hablan con tanta facilidad.
Juan 14.27 “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.”
La paz del mundo, ?Cómo es? El mundo solo ofrece una experiencia de tranquilidad momentánea y fugaz por medio del materialismo, el amor, el romance, el abuso de drogas, las falsas religiones, la psicoterapia o una hueste de otros placeres. Pero la paz falsa del mundo en realidad es producto de la ignorancia bíblica. Si los incrédulos(los que no han nacido de nuevo) entendieran la ira de Dios y el tormento eterno, agonizante y sin alivio que les espera en el infierno, no disfrutarían nunca ni un momento de paz en su vida.
La Biblia enfatiza repetidas veces que la paz del mundo es incapaz:
Isaías 48.22 “No hay paz para los malos, dijo Jehová.”
Los mundanos demandan, exigen comodidades, seguridad y consuelo, pero no ha dado el primer paso para quitar el pecado de su vida y abrir las puertas a Dios. No están arrepentidos ni confían en Él. Si usted desea paz verdadera, busque primero a Dios. Entonces la tendrá.
Nuevamente Isaías, el profeta hizo eco de las palabras del Señor:
Isaías 57.21 “No hay paz, dijo mi Dios, para los impíos.”
Primero lo dijo Jehová y ahora lo repite Isaías.
En Jeremías 6:14 Dios censuró a los falsos profetas que
Jeremías 6:14 “curan la herida de [su] pueblo con liviandad, diciendo: Paz, paz; y no hay paz”
Jesús se lamentó sobre Jerusalén:
Lucas 19:42 “¡Oh, si también tú conocieses, a lo menos en este tu día, lo que es para tu paz! Mas ahora está encubierto de tus ojos”
Sabía usted que la gente que vive alrededor de una iglesia, cuaesta mucho que venga a la iglesia. La mayoría no vive cerca. Estos vecinos están tan cerca, pero ytambién tan lejos. Es increíble como los líderes judíos estaban cerca de la salvación:
Lucas 19.47 “Y enseñaba cada día en el templo; pero los principales sacerdotes, los escribas y los principales del pueblo procuraban matarle.”
Ellos preferían las paz del mundo. Iban demasiado lejos. Rechazaban la oferta de salvación de Dios en Jesucristo cuando Dios mismo los visitaba (el tiempo de tu visitación, es temporal, termina hasta que el cerebro deje de recibir oxigeno) Muy pronto su nación, sufriría. Pero, Dios no le dio las espaldas a los judíos que si le obedecieron. En el día de hoy, continúa ofreciendo salvación a la gente que ama, sean judíos o gentiles.
La paz eterna está a su alcance, acéptela antes que sea demasiado tarde.
El apóstol Pablo escribió sobre los incrédulos que:
Romanos 3:17 “no conocieron camino de paz”
?Por qué no conocieron el camino de paz? Que yo sepa nadie quiere ir al infierno.
La respuesta está en el siguiente versículo:
Romanos 3.18 “No hay temor de Dios delante de sus ojos.”
Debido a que los oídos de los hombres y mujeres impíos están aguzados para atender las mentiras del pecado y no la verdad de la justicia, ellos no tienen temor de Dios y su ignorancia los lleva a tener un concepto errado de lo que significa temer a Dios.
Al final de los tiempos:
1 Tesalonicenses 5:3 “cuando [los incrédulos] digan: Paz y seguridad, entonces vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores a la mujer encinta, y no escaparán”
La paz del mundo solo es una ilusión. La paz basada en las circunstancias positivas temporales o el escapismo ignorante no es paz auténtica en absoluto. La razón por la cual las personas carecen de paz no es emocional, psicológica o circunstancial, sino teológica. Como ya se dijo en esta serie, solo quienes conocen a Jesucristo pueden tener paz con Dios y, por ende, experimentar la paz verdadera en esta vida.
2. El Resultado de la Paz
Juan 14.27 “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.”
Jesús repitió su mandamiento, porque usualmente olvidamos los mandamientos. Jesús usando el negativo más fuertye en griego: “No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”.
!Pastor, yo soy salvo, pero no tengo paz! !Cómo es posible que un cristiano no disfrute la paz de Dios. Ya decía un profesor mío de la Biblia, con más de 50 años de ministerio:
“Nunca pensé que pasaría gran parte de mi vida, tratando de rescatar, aclara el evangelio a los evangélicos”
!Ponga mucha atención a lo que le voy a decir!
La Biblia enseña que los cristianos son responsables de apropiarse de las promesas de Dios. El Espíritu Santo habita en los creyentes y les da poder, pero ellos por su parte deben llenarse del Espíritu:
Efesios 5.18 “antes bien sed llenos del Espíritu,”
No se trata de tener cada domingo una experiencia religiosa, se trata de caminar en Él:
Gálatas 5.16 “ Andad en el Espíritu”
A los cristianos se les ha dado vida eterna; en respuesta, ellos deben considerarse
Romanos 6:11 “muertos al pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro”
Romanos 6.13 “presentarse “[ellos] mismos a Dios como vivos de entre los muertos”
!Sí, El Espíritu Santo es su maestro sobrenatural, correcto, la Escritura lo indica:
1 Juan 2.20 “vosotros tenéis la unción del Santo, y conocéis todas las cosas.”
Pero aun así, eso no anula la responsabilidad que tienen los creyentes de estudiar las Escrituras con diligencia:
2 Timoteo 2.15 “Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad.”
El mismo apóstol Pablo que escribió:
Gálatas 2:20 “Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí”
Pablo también escribió:
1 Corintios 9.26-27 “Así que, yo de esta manera corro, no como a la ventura; de esta manera peleo, no como quien golpea el aire, sino que golpeo mi cuerpo, y lo pongo en servidumbre, no sea que habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a ser eliminado”
Entonces, como ocurre con todas las promesas de Dios, es responsabilidad de los creyentes apropiarse de la promesa de paz de Cristo.
El Salmo 34:14 manda al pueblo de Dios claramente:
Salmo 34.14 “Apártate del mal, y haz el bien; Busca la paz, y síguela.”
Mientras el Salmo 119:165 declara:
Salmo 119.165 “Mucha paz tienen los que aman tu ley, Y no hay para ellos tropiezo.”
?Vio lo que promete este Salmo? No solo paz, sino MUCHA PAZ. La sociedad moderna anhela paz mental. Aquí tenemos una instrucción muy clara de cómo llevarlo a cabo en la vida. Si amamos a Dios y obedecemos sus leyes, tendremos “mucha paz”. Confíe en Dios. Él es el único que está por encima de las presiones diarias de la vida y nos da seguridad total.
Cuando confiamos en su bondad, fidelidad y provisión, Dios nos llen:
Romanos 15:13 “de todo gozo y paz en el creer”
Vivir en angustia por el pasado, ansioso por las preocupaciones del presente o con aprensión por el futuro es no apropiarse de la paz. Como ya se dijo antes: Los creyentes no deben
Filipenses 4:6-7 “por nada [estar] afanosos, sino [hacer] conocidas [sus] peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará [sus] corazones y [sus] pensamientos en Cristo Jesús”
Dios ha perdonado el pasado, ha provisto para el presente y garantiza el futuro.
Debe quedar claro, la paz de la mente proviene de una conciencia tranquila:
Romanos 14.22 “Bienaventurado el que no se condena a sí mismo en lo que aprueba.”
Los pensamientos, palabras y obras consecuentes con la paz de Cristo darán como resultado una conciencia clara, buena y sin señalamiento:
Hechos 23.1 “ hermanos, yo con toda buena conciencia he vivido delante de Dios hasta el día de hoy.”
Por otro lado, están los DISCÍPULOS que tiene una conciencia acusadora y atribulada:
1 Samuel 24.5 “Después de esto se turbó el corazón de David, porque había cortado la orilla del manto de Saúl.”
Los cristianos que viven en pecado y sin arrepentirse pierden el derecho a experimentar la paz y la tranquilidad del legado de Cristo a su pueblo. David declaró a Dios, recordando sus pecados con Betsabé:
Salmo 32.3 “Mientras callé, se envejecieron mis huesos En mi gemir todo el día.”
La conciencia intranquila y llena de culpa se hace íntegra cuando el creyente confiesa su pecado ante Dios y se arrepiente:
1 Juan 1.9 “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.”
Cuando el creyente sabe que su pecado ha sido perdonado primeramente, mediante la cruz y que su comunión personal con Dios ha sido restaurada mediante la confesión y el arrepentimiento, ahí mismo, vuelve a experimentar la paz profunda que Dios ofrece a todos sus hijos.
“NUNCA PERDERÁS OBEDECIENDO A DIOS,
NUNCA GANARÁS DESOBEDECIENDO A DIOS”
?Qué decides?
La noche antes de la muerte del Señor, Él prometió paz sobrenatural a sus discípulos atribulados. Al apuntar hacia JESÚS como dador de la paz, no a las circunstancias aterradoras que enfrentaban en su ausencia, Jesús ofreció a sus seguidores una paz inconmovible por los sucesos de este mundo y que perdura para siempre. Esta paz es la que lo caracterizó a lo largo de sus sufrimientos mientras estuvo en Su ministerio terrenal, sería también lo que caracterizaría a sus seguidores a través de las persecuciones que enfrentarían por causa de su nombre.
CONCLUSIÓN
CONCLUSIÓN
Texto Expositivo Principal:
Juan 14.27 “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.”
A diferencia de la paz del mundo, cuya definición suele ser ausencia de conflicto, esta paz es una confiada seguridad en cualquier circunstancia.
Quienes manejan bien la ansiedad es porque conocen al Señor de manera personal. Son los que proceden con calma, mientras que otros se ahogan en el estress.
Con la paz de Cristo, no tenemos por qué temer al presente ni al futuro. Si su vida está cargada de tensión, permita que el Espíritu Santo lo llene de la paz de Cristo.