Sermon 3 Serie el engaño del Pecado. Ptr Pablo

El engaño del Pecado.  •  Sermon  •  Submitted
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“ La impotencia del pecador”

La Biblia de las Américas (Salmo 51)
1 Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a lo inmenso de tu compasión, borra mis transgresiones.
2 Lávame por completo de mi maldad, y límpiame de mi pecado.
3 Porque yo reconozco mis transgresiones, y mi pecado está siempre delante de mí.
4 Contra ti, contra ti solo he pecado, y he hecho lo malo delante de tus ojos, de manera que eres justo cuando hablas, y sin reproche cuando juzgas.
5 He aquí, yo nací en iniquidad, y en pecado me concibió mi madre.
6 He aquí, tú deseas la verdad en lo más íntimo, y en lo secreto me harás conocer sabiduría.
7 Purifícame con hisopo, y seré limpio; lávame, y seré más blanco que la nieve.
8 Hazme oír gozo y alegría; que se regocijen los huesos que has quebrantado.
9 Esconde tu rostro de mis pecados, y borra todas mis iniquidades.
10 Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí.
11 No me eches de tu presencia, y no quites de mí tu Santo Espíritu.
12 Restitúyeme el gozo de tu salvación, y sostenme con un espíritu de poder.
13 Entonces enseñaré a los transgresores tus caminos, y los pecadores se convertirán a ti.
14 Líbrame de delitos de sangre, oh Dios, Dios de mi salvación; entonces mi lengua cantará con gozo tú justicia.
15 Abre mis labios, oh Señor, para que mi boca anuncie tu alabanza.
16 Porque no te deleitas en sacrificio, de lo contrario yo lo ofrecería; no te agrada el holocausto.
17 Los sacrificios de Dios son el espíritu contrito; al corazón contrito y humillado, oh Dios, no despreciarás.
18 Haz bien con tu benevolencia a Sión; edifica los muros de Jerusalén.
19 Entonces te agradarán los sacrificios de justicia, el holocausto y el sacrificio perfecto; entonces se ofrecerán novillos sobre tu altar.
Introducción
- Este salmo contiene los principales pasos y las fases en relación con toda los asuntos de la salvación y nuestra relación con Dios.
Esa es la cuestión más importante y vital de este mundo: “ Nuestra relación con Dios”. sabemos con claridad que “ El fin principal del hombre es Glorificar a Dios”
Este Salmo es de alguien que ha reincidido;(recaer, obstina reitera, insistir, repetir) Pero lo que David nos muestra aquí acerca del pecado, es siempre cierto, ya sea en un pecador o en un reincidente, ya sea en un hombre que haya creído en Cristo o no. El pecado siempre tiene las mismas terribles características. En este salmo, encontramos uno de los relatos más perfectos y clásicos acerca del pecado y de como un hombre puede deshacerse de su pecado. Por norma general es considerado el gran salmo del arrepentimiento. Este salmo nos habla de todo lo esencial con respecto al arrepentimiento.
Desarrollo.
En este Salmo se nos señala que existe, con toda certeza, un patrón común en la experiencia de la salvación del hombre, hay ciertas cosas que siempre están presente en la experiencia cristiana típica y paradigmática y que aparecen en todas partes cuando se cuenta de la experiencia de arrepentimiento de un cristiano.
Quiero decir que la experiencia Cristiana muestra un patrón común, en la cuestión del arrepentimiento, y debido a que la salvación es muy especifica , muy concreta; por eso uno puede probarse a sí mismo y comprobar si es Cristiano o no.
Un paréntesis en lo que estoy desarrollando...
Estoy mencionando que hay ciertas cosas común en cada cristiano que se arrepiente, sobre todo, en lo que se refiere a la impotencia que el pecador siente cuando logra identificar su pecado.
No estoy tratando de estandarizar erróneamente la experiencia cristiana de la conversión e insistir en que todos los casos deben mostrar ciertos detalles concretos.
Ejemplo… la experiencia de John Bunyan , su experiencia mencionada en su libro “ Gracia Abundante” , lo más probable es que nunca oigamos algún otro cristiano experimentar el mismo arrepentimiento que tuvo de John Bunyan.
y referente a esto de estandarizar la conversión al Cristianismo, se cuenta de un hombre cristiano que estaba muy preocupado por el estado de su hijo. Estaba completamente seguro de que su hijo no era cristiano, y cuando le preguntan a que se debe aquella afirmación, el dijo que su hijo no había tenido “la experiencia del camino a Damasco”. probablemente este padre había tenido alguna experiencia parecida al relato Bíblico referido, pero eso no quiere decir que todos necesariamente deben tener las mismas experiencias.
por esto debemos cuidarnos de no insistir en que los diversos pasos y etapas que se describen en el salmo 51 deben suceder en un determinado orden cronológico.
Lo que podemos afirmar, es que en todos los casos de conversión, en cada caso de arrepentimiento, existen ciertos elementos comunes. Hay un patrón común, pero en algunos casos, una cosa viene antes que la otra y en otros lo segundo va en primer lugar. No digo que deba suceder en el mismo orden para todos, pero afirmo que la ausencia de ciertas cosas que mencionaremos, imposibilita el arrepentimiento y sin arrepentimiento no somos cristianos.
Hay ciertas personas que parecen eludir toda esta cuestión por el siguiente motivo. alguien podría opinar lo siguiente y decir; “¿Sabes?, como dices acertadamente , el salmo 51 es un gran salmo sobre la cuestión del arrepentimiento. NO sorprende que David se sintiera como se sintió en vista de las cosas que había hecho. Pero en realidad, no me interesa el Salmo 51 porque, gracias a Dios, jamas he hecho este tipo de cosas. ¿por que debería sentir lo que David experimento?.
La sencilla respuesta es que el arrepentimiento no depende en modo alguno, del tipo de pecado que se ha cometido. como se dijo en nuestro mensaje anterior “ la diferencia entre el remordimiento y el arrepentimiento es que el hombre que sufre remordimiento, es alguien que comprende que ha hecho mal; pero no experimentara arrepentimiento hasta que comprenda que ha pecado contra Dios. Cierro parentesis..
1º PUNTO. “ El Hombre que se arrepiente es alguien que se enfrenta y se mira a sí mismo”.
En la experiencia común que participan todos los que se arrepienten y buscan la gloriosa salvación de Dios, vemos que no hay hombre que se haya convertido en cristiano, sin haberse detenido a mirarse a sí mismo.
El cristiano es alguien que se ha examinado a sí mismo y ha visto lo que ha hacho. Ha reconocido sus rebeliones, su maldad y su pecado. Comprende el significado de sus actos. Comprende que ha pecado contra Dios; ha descubierto que su propia naturaleza es pecadora.
Esto es lo que algunos llaman “ EL DESPERTAR DEL PECADOR” es alguien que se mira a sí mismo y comprende las verdades básicas acerca de sí mismo y su pecado.
2º Punto. Preocupación y percepción.
Ningún hombre se ha arrepentido jamas ni se ha convertido en cristiano, sin un elemento de preocupación y percepción en su conciencia con respecto de su estado y situación pecaminosa.
esto es obvio en este salmo: “Ten piedad de mí , oh Dios” el hombre que escribió este salmo se sentía desesperado. Sentía una gran preocupación por su estado y situación.
esa es la razón por la que encontramos palabras que evidencian su desespero palabras como: Purifícame, Lávame, Borra, Crea, Renueva, Restitúyeme, Sostenme, Líbrame, etc.
David era un rey muy pudiente, y su reino era muy próspero; pero cuando comprendió esta verdad acerca de sí mismo, toda su riqueza poder y posición, no pudieron satisfacerle. Esto era lo que importaba y dijo: “Debo hallar la tranquilidad con respecto a esto; debo reconciliarme con Dios”. Eso se había convertido en lo más importe de su vida.
Lo que compartimos todos en común es que todo aquel que se ha arrepentido ha pasado por esta fase y experiencia en particular . Ha sentido una preocupación por su alma y por su relación con Dios.
Preguntas: ¿te has preocupado alguna vez por ti mismo y por el estado de tu alma? ¿sientes alguna angustia por ella, has experimentado intranquilidad por ella?
Es muy probable que alguien podría decir : “ Nunca he sentido esa gran preocupación: No veo que necesite sentir esa preocupación. Me han educado en la religión, he asistido a la iglesia toda mi vida, he intentado hacer el bien, he intentado ayudar a los demás. No pueden esperar que experimente esa preocupación de la que estamos hablando”.
Una respuesta a este tipo de afirmación es que no sabría decir si ese sentimiento de sosiego, ya evidencia un problema de entendimiento del pecado que reside aun en nosotros los cristianos .
Con responsabilidad debemos indagar y examinarnos y ver la experiencia de los santos hombres de Dios. Si esas personas piadosas , esos santos hombres y mujeres a los que la historia Bíblica y también la historia de la iglesia nos muestran y que hacen tanta referencia, también se han visto como pecadores a los ojos de Dios, ¿Por que nosotros debiéramos ser distintos? afirmo en este punto que nunca ha habido un creyente convertido al cristianismo verdadero, que no se haya considerado a sí mismo como un vil pecador; por tanto, si tu no te consideras un vil pecador, entonces no te pareces a ellos.
mis hermanos debemos considerar quien es Dios, y en realidad de que hemos sido librados. hermano recuerda ¿ de que somos salvos? o preguntado de mejor manera ¿de quién somos salvos?
recuerdo en nuestra experiencia como iglesia local en este lugar ,ha alguien cuestionando este punto de preocupación y percepción de nuestra conciencia, queriendo demostrar que el mismo no tenia problemas con esto paso del arrepentimiento, afirmaba que no se debería sentir ningún peso ni dolor por el pecado y alguna vez su punto de argumento fue: “ Imaginémonos que un hermano de nuestra iglesia con este tipo de sentimiento va en busca de empleo y se presenta frente a su entrevistado y dice: Hola soy un hombre lleno de pecado y maldad pero necesito el empleo. según su razonamiento no obtendría el trabajo y pensaba que no era razonable que un cristiano tuviera este tipo de experiencia.
No optante yo no veo motivo para que un cristiano hable de ese modo a uno de sus congéneres o sus pares, que sabe que es igual que él, por que David y todos los santos hombres de Dios no están hablando de si mismo delante de algún hombre, la realidad es que nos dirigimos a Dios, y Dios es LUZ y no hay en Él ninguna tiniebla (dice 1Juan 1:5) Dios es pura y absolutamente Santo, hay muchísimas y sobradas razones para experimentar este tipo de impotencia pecaminosa.
por ejemplo: “Si el fin principal del hombre es Glorificar a Dios” entonces el no glorificar a Dios es el mayor de los pecados.
¿Glorificamos a Dios? ¿Le entregamos desde el centro de nuestro corazón plena alabanza y honor? recordemos a Daniel cuando le dijo a Belsasar. Dn 5:23. sino que contra el Señor del cielo te has ensoberbecido, e hiciste traer delante de ti los vasos de su casa, y tú y tus grandes, tus mujeres y tus concubinas, bebisteis vino en ellos; además de esto, diste alabanza a dioses de plata y oro, de bronce, de hierro, de madera y de piedra, que ni ven, ni oyen, ni saben; y al Dios en cuya mano está tu vida, y cuyos son todos tus caminos, nunca honraste.
Y en este sentido la esencia del pecado no es tanto ser culpable de actos específicos; es el hecho de no glorificar a Dios, de no vivir nuestra vida para Dios.
Esto nos lleva a el siguiente deseo que debemos experimentar.
3º Punto.“el deseo de ser perdonados”.
1 Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a lo inmenso de tu compasión, borra mis transgresiones.
2 Lávame por completo de mi maldad, y límpiame de mi pecado.
En otras palabras , alguien que se arrepiente, es alguien que siempre esta consciente de su culpa. dice: “ Cuando me enfrento a Dios y pienso en ÉL , cuando me enfrento a su Ley, soy consciente del hecho de que soy culpable.
Al estar consciente de esto, entonces podemos desear como David;
Sal 51:7.“Purifícame con hisopo, y seré limpio; lávame, y seré más blanco que la nieve”
El Hisopo es la Planta que se utilizado para esparcir la sangre durante el ritual de la Pascua. Éx 12:22–23.
Lávame, con toda seguridad David debe haber tenido en mente a aquellas mujeres quienes lavan las ropas a las orillas de los ríos, refregando la ropas sucias con fuerza para dejarlas limpias como la pureza de la nieve.
4º Punto. “La conciencia de su absoluta impotencia”.
este también es un elemento característico de toda alma arrepentida
David no sabe que hacer consigo mismo, no puede acallar su propia conciencia. Su conciencia le estaba acusando, e hiciera lo que hiciera, era incapaz de silenciarla; Sal 51:2–3. “Lávame por completo de mi maldad, y límpiame de mi pecado.3 Porque yo reconozco mis transgresiones, y mi pecado está siempre delante de mí.”
Esto nos enseña y seguro que es la experiencia de muchos de nosotros, que una vez despierta la conciencia es algo terrible; y tarde o temprano la conciencia de todo hombre se despertara.
recordemos el pasaje de el rico y Lázaro en Lucas 16:19-31.
como la conciencia del rico se despertó en ese lugar de tormento.
David era consciente de su absoluta impotencia. De hecho va más lejos aún, sabe que no puede hacer nada al respecto. Sal 51:16.”Porque no te deleitas en sacrificio, de lo contrario yo lo ofrecería; no te agrada el holocausto”.
David un hombre rico y dice que si fuera cuestión de ofrecer sacrificios, lo aria, me imagino diciendo; “ Tengo rebaños y manadas, podría hacer una gran ofrenda. Pero tuyos son los millares de animales en los collados, todo el universo creado es tuyo; no puedo darte nada. Si eso bastara, lo aria; pero no quieres sacrificio”
Todo hombre que se arrepiente verdaderamente sabe exactamente lo que eso significa.
Cuando nuestra conciencia se despierta comenzamos a pensar diciendo erróneamente: “ Voy a vivir una vida mejor, voy a renunciar a ciertas cosas y voy a comenzar hacer otras”, comúnmente insistimos en eso, pero seguimos sin poder hallar paz, descanso y tranquilidad; y proseguimos hasta percatarnos finalmente de que nunca será suficiente y comprendemos nuestra absoluta, completa y total impotencia.
Hermano míos ¿seguimos teniendo algún vestigio de confianza en nosotros mismos? ¿Seguimos pensado en que nosotros podemos convertirnos en cristianos con nuestros esfuerzos?
5º Punto. “Una nueva actitud hacia Dios”
No dudo en aseverar que esta es quizá la prueba mas sutil y delicada para saber si nos hemos arrepentido o donde nos encontramos: “ Nuestra actitud hacia Dios”
ya hemos notado en este salmo que David reconoce que ha pecado contra Dios, sin embargo, desea a Dios por encima de todas las cosas. como ya lo hemos dicho esa es la diferencia entre remordimiento y arrepentimiento.
el hombre que no se ha arrepentido no solo puede experimentar remordimiento, sino que evita a Dios cuando comprende que ha hecho algo contra Él.
Lo extraordinario del hombre a quien Dios ha dado convicción de pecado, es que , a pesar de que sabe que ha pecado contra Dios, es a Dios a quién quiere.
esto es lo que algunos llaman la paradoja del arrepentimiento (Dicho o hecho que parece contrario a la lógica), es que se quiere aquel a quien se ha ofendido.
el impenitente evita a Dios, el penitente sabe que nadie salvo Dios puede satisfacerle verdaderamente.
David sabe que a pesar que no tiene derecho alguno ante Dios, se dirige ha Él y comienza a hablarle, por que cree que solo Dios puede ayudarle y sabe que ningún otro puede hacerlo; los sacrificios y los holocautos son insuficientes. solo hay uno que puede hacerlo limpio, y es Dios mismo.
Lo más maravilloso del canto de David, que el como un pecador arrepentido sabe que Dios tiene el poder para eliminar la mancha y la culpa de su pecado; y sabe maravillosamente, que Dios esta dispuesto a ello y desea hacerlo.
Salmo 51:1 Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a lo inmenso de tu compasión, borra mis transgresiones.
conclusion.
Querido hermano, David sabia algo de las misericordias de Dios, pero tu y yo sabemos algo muchísimo mas claro. hoy que hemos entendido progresivamente la revelación que Dios nos ha dado de si mismo y conocemos como operan sus misericordias y su inmensurable amor. Pero deseo preguntar ¿hay alguien que sea consciente de su pecado y la culpa, pero no ha encontrado la Paz? ¿la estas buscando?. si esta es tu situación en esta mañana y te sientes en miseria espiritual como se sintió David, te ruego que acudas a Dios tal como eres.
El Pan y el vino de la comunión, son recordatorios, un memorial del hecho de que una vez, hace dos mil años, este Dios misericordioso, este Dios con multitud de piedades, envió su Hijo Unigénito a este mundo. y lo envió con un solo propósito; que soportara la culpa de tu pecado y el mio. Depositó nuestro pecado sobre Él y castigó allí nuestra maldad.
Dios castigo tu pecado en Cristo , y allí ofrece su perdón.
recuerda el pregón “Jn 3:16. Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en Él, no se pierda, mas tenga vida eterna”
Tus buenas obras no bastan para expiar tu pecado, de otro modo Cristo jamas habría venido acá y muerto en la horrenda cruz. no había otro que pudiera pagar completo precio; tan solo Él podía abrir y dar acceso al Cielo.
pero, gracias a Dios, lo hizo y por ello podemos decir como Carlota Elliot la autora de estas preciosa melodía.
Tal como soy, sin más decir,  que a otro yo no puedo ir,  y Tú me invitas a venir,  bendito Cristo, vengo a Ti.
Tal como soy, sin demorar,  del mal queriéndome librar;  me puedes sólo Tú salvar,  bendito Cristo, vengo a Ti.
Un comentarista dice:
¿te preocupa tu alma? ¿eres consciente de la posición en que te encuentras? ¿te inquieta? ¿la estas haciendo frente? te pregunto ¿ No es hora de que lo hagas? : Dios existe y puedes evitarlo. tienes que comparecer ante Él, y la única forma de hacerlo es en Jesucristo. Cree en Él, entrégate a Él y serás salvo para siempre.
Recordemos que el texto dice. Salmos 51:6 He aquí, tú deseas la verdad en lo más íntimo, y en lo secreto me harás conocer sabiduría.
Dios espera que lleguemos a Él con autenticidad, dice; “tú deseas la verdad en lo más íntimo”..., ven a él sin esconder nada, ven arrepentido y Dios te perdonara, ven con el corazón roto y él lo restaurara, reacciona hoy a la Gracia de Dios. Pablo dice: Romanos 5:6-11 LBLA
[6] Porque mientras aún éramos débiles, a su tiempo Cristo murió por los impíos. [7] Porque a duras penas habrá alguien que muera por un justo, aunque tal vez alguno se atreva a morir por el bueno. [8] Pero Dios demuestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros. [9] Entonces mucho más, habiendo sido ahora justificados por su sangre, seremos salvos de la ira de Dios por medio de Él. [10] Porque sí cuando éramos enemigos fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, habiendo sido reconciliados, seremos salvos por su vida. [11] Y no sólo esto, sino que también nos gloriamos en Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo, por quien ahora hemos recibido la reconciliación.
Querido Hermano ven a Él.!!!
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