Preparados para este tiempo
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Transcript
Manténganse alerta; permanezcan firmes en la fe; sean valientes y fuertes.
INTRO
INTRO
Como recomendación final en la primera carta a los Corintios el apostol Pablo comienza diciendoles tre cosas, mantenganse alerta, permanezcan firmes en la fe y sean valientes y fuertes.
Todo lo que vivimos hasta ahora, las cosas que nos pasaron, las experiencias que vivimos, y todo loo bueno y lo malo que paso, todo converge en este punto del tiempo, para que cumplamos los propósitos de Dios.
Y Josué dijo al pueblo: Santificaos, porque Jehová hará mañana maravillas entre vosotros.
Este santificarnos, tiene que ver con una purificación y una preparación para lo que Dios va a hacer entre nosotros.
Alertas
Alertas
No debemos, pues, dormirnos como los demás, sino mantenernos alerta y en nuestro sano juicio.
Estén siempre vigilantes, y oren para que puedan escapar de todo lo que está por suceder, y presentarse delante del Hijo del hombre.
Dedíquense a la oración: perseveren en ella con agradecimiento
Firmes en la fe
Firmes en la fe
Por lo tanto, mis queridos hermanos, manténganse firmes e inconmovibles, progresando siempre en la obra del Señor, conscientes de que su trabajo en el Señor no es en vano.
Por lo tanto, pónganse toda la armadura de Dios, para que cuando llegue el día malo puedan resistir hasta el fin con firmeza.
Pues, si somos fieles hasta el fin, confiando en Dios con la misma firmeza que teníamos al principio, cuando creímos en él, entonces tendremos parte en todo lo que le pertenece a Cristo.
Valientes y fuertes
Valientes y fuertes
Ya te lo he ordenado: ¡Sé fuerte y valiente! ¡No tengas miedo ni te desanimes! Porque el Señor tu Dios te acompañará dondequiera que vayas.»
Sean fuertes y valientes. No teman ni se asusten ante esas naciones, pues el Señor su Dios siempre los acompañará; nunca los dejará ni los abandonará.»
Llamó entonces Moisés a Josué, y en presencia de todo Israel le dijo: «Sé fuerte y valiente, porque tú entrarás con este pueblo al territorio que el Señor juró darles a sus antepasados. Tú harás que ellos tomen posesión de su herencia.
Y ahora, Señor, mira sus amenazas y concede a tus siervos que con toda valentía hablen tu palabra,
mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades, señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús».
Cuando terminaron de orar, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo y hablaban con valentía la palabra de Dios.
No más vos de lamento,sino un grito de guerra.
CONCLUSIÓN
CONCLUSIÓN
adiestra mis manos para la batalla, y mis brazos para tensar arcos de bronce.
Porque si callas absolutamente en este tiempo, respiro y liberación vendrá de alguna otra parte para los judíos; mas tú y la casa de tu padre pereceréis. ¿Y quién sabe si para esta hora has llegado al reino?