QUE SIGNIFICA PARA JESÚS SU MUERTE

INTRODUCCIÓN

¿Qué significa para ti la muerte de Jesús?

Y si le preguntaramos a Jesús que significa para Él su muerte ¿Qué nos diría? La respuesta está en el siguiente texto:

Texto Expositivo Principal:

Juan 14:28-31 “Habéis oído que yo os he dicho: Voy, y vengo a vosotros. Si me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy al Padre; porque el Padre mayor es que yo. Y ahora os lo he dicho antes que suceda, para que cuando suceda, creáis. No hablaré ya mucho con vosotros; porque viene el príncipe de este mundo, y él nada tiene en mí. Mas para que el mundo conozca que amo al Padre, y como el Padre me mandó, así hago. Levantaos, vamos de aquí.”

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Juan 14.28 “Habéis oído que yo os he dicho: Voy, y vengo a vosotros. Si me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy al Padre; porque el Padre mayor es que yo.”

“Habéis oído que yo os he dicho” ¿Qué nos había dicho? Que iría al Padre

Juan 7.33 “Entonces Jesús dijo: Todavía un poco de tiempo estaré con vosotros, e iré al que me envió.”

“y vengo a vosotros”: No nos dejaría huérfanos.

Juan 14:18 “No os dejaré huérfanos; vendré a vosotros.”

Los discípulos estaban atribulados, atemorizados porque su fe era débil. Pero más allá de eso, su ansiedad se derivaba de su visión corta y egoísta. Vieron la muerte del Señor en términos de qué perderían ellos, no de qué ganaría Él. Por otro lado, Jesús usando el amor verdadero. Por cierto, ¿Para ti qué es el amor verdadero? ¿Cómo sabes que tienes el amor verdadero?

“no busca lo suyo” 1 Co. 13:5,

Jesús expuso la debilidad del amor de los discípulos y los llamó a ver la cruz desde su perspectiva.

Este pasaje revela cuatro facetas del significado que tuvo la muerte de Jesús para Él, cada una de las cuales refleja un aspecto importante de su obra. Por medio de su muerte, su ministerio recibiría vindicación, su mensaje recibiría verificación, su misión sería victoriosa y su motivación recibiría validación.

VINDICACIÓN

Según el diccionario de la lengua española, VINDICACIÓN tiene 3 significados:

1)vengar.

2)Defender, especialmente por escrito, a quien se halla injuriado, calumniado o injustamente notado.

3)Dicho de una persona: Recuperar lo que le pertenece.

El ministerio de Jesús recibiría VINDICACIÓN. Luego de haber sido Dios humillado, al hacerse 100 % hombre, Jesús adeseaba ir al Padre:

Juan 14.28 “Habéis oído que yo os he dicho: Voy, y vengo a vosotros. Si me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy al Padre; porque el Padre mayor es que yo.”

El Hijo de Dios dejó la gloria indescriptible del cielo, donde experimentaba comunión perfecta con el Padre y se hizo hombre . Aunque fue sin pecado, experimentaba debilidades humanas tales como la fatiga:

Mateo 8.24 “Y he aquí que se levantó en el mar una tempestad tan grande que las olas cubrían la barca; pero él dormía.”

El hambre:

Mateo 4.2 “Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.”

La sed:

Juan 4.7 “Vino una mujer de Samaria a sacar agua; y Jesús le dijo: Dame de beber.”

Ahora regresaba a la plenitud de la gloria que había experimentado desde toda la eternidad en la presencia del Padre. Jesús expresó su anhelo por esa gloria cuando oró:

Juan 17.5 “Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que el mundo fuese.”

Cuando Cristo fuera exaltado a la diestra del Padre, su ministerio sería vindicado eternamente por Dios; su exaltación sería la culminación de la aprobación del Padre a su vida y muerte en la tierra:

Salmo 110.1 “Jehová dijo a mi Señor: Siéntate a mi diestra, Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies.”

Ahora la afirmación del texto:

Juan 14.28 “Habéis oído que yo os he dicho: Voy, y vengo a vosotros. Si me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy al Padre; porque el Padre mayor es que yo.”

!Pastor! ¿No es son iguales? vea lo que dice Jesús mismo...

La afirmación de Jesús “El Padre mayor es que yo” ha sido tergiversado por grupos heréticos para aseverar de manera incorrecta la inferioridad del Señor ante el Padre. Jesús no iba a retractarse y negar la completa igualdad con el Padre después de haberla afirmado repetidamente junto con su deidad:

Juan 10.30 “Yo y el Padre uno somos.”

Por lo tanto, el Señor no hablaba aquí de su naturaleza esencial divina, sino de su papel sumiso durante su ministerio terrenal. En ser y esencia el Padre y el Hijo son eternamente iguales; pero en papel y función, el Hijo se sometió a la voluntad del Padre en la encarnación. La declaración de Cristo refleja la perspectiva de un siervo humilde, el papel que asumió durante su tiempo en la tierra. Ya había dicho antes en el Evangelio de Juan:

Juan 5:19 “De cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente”

Jesús en la encarnación:

Filipenses 2.5-8 “Cristo Jesús..., siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.”

Habiéndose sometido al Padre en la muerte, ha sido vindicado por el Padre desde entonces.

Nuevamente:

Juan 14.28 “Habéis oído que yo os he dicho: Voy, y vengo a vosotros. Si me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy al Padre; porque el Padre mayor es que yo.”

Es decir...Si los discípulos de Jesús lo amaban realmente, estarían felices por su retorno al Padre, porque regresaba a la esfera que pertenecía, a la gloria que tenía con el Padre antes del comienzo del mundo , al lugar donde el Padre no disminuye en gloria, sin duda más grande que el Hijo en su estado encarnado. En este punto, los discípulos habían respondido emocionalmente, en total acuerdo con su percepción de su propia ganancia o pérdida. Si hubieran amado a Jesús, habrían percibido que su partida a su “casa” era su ganancia y se habrían alegrado con Él ante la noticia. Tal como estaban las cosas, su pena era un indicador de su egocentrismo.

2. EL MENSAJE ES CONFIRMADO

Juan 14.29-30a “Y ahora os lo he dicho antes que suceda, para que cuando suceda, creáis. No hablaré ya mucho con vosotros;

Como se ha enseñado en las predicaciones anteriores, los apóstoles creían que Jesús era el Mesías y el Hijo de Dios. De hecho, cuando el Señor les preguntó: “Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?”; Pedro, quien usualmente era el vocero del resto, respondió: “Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente”

Mateo 16.16 “Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.”

Pero a pesar de sus testimonios confiados, aún luchaban con la duda. Esto llevó a que Jesús los reprendiera varias veces por su falta de fe y que ellos le imploraran:

Lucas 17:5 “Auméntanos la fe”

Por consiguiente, Jesús fortalece la fe tambaleante al recordarles esto:

Juan 14.29 “Y ahora os lo he dicho antes que suceda, para que cuando suceda, creáis.”

Los discípulos entendían del Antiguo Testamento que solo Dios puede predecir el futuro. En Isáias 46:9–10 encontramos:

Isaías 46: 9-10 “Yo soy Dios, y no hay otro Dios, y nada hay semejante a mí, que anuncio lo por venir desde el principio, y desde la antigüedad lo que aún no era hecho; que digo: Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que quiero”

Por lo tanto, cuando las predicciones de Jesús se cumplieron, la fe de los discípulos en Él se incrementó grandemente. Por ejemplo, Juan 2:19–21 registra la predicción de su muerte y su resurrección. Entonces el versículo 22 dice:

Juan 2: 22“cuando resucitó de entre los muertos, sus discípulos se acordaron que había dicho esto; y creyeron la Escritura y la palabra que Jesús había dicho”

El cumplimiento de sus predicciones ayudó a convencer a los discípulos de la deidad de Jesús, porque solo Dios sabe el futuro.

Ahora, observa versículo 30:

Juan 14.30 “No hablaré ya mucho con vosotros; porque viene el príncipe de este mundo, y él nada tiene en mí.”

No señalan el final del mensaje del Maestro, que en realidad continúa hasta el final del capítulo 16. Más bien, son un recordatorio a los discípulos de que se estaba acabando su tiempo con ellos en la tierra. Jesús era consciente de todo lo que le iba a ocurrir, no fue nunca por sorpresa. Sabía con exactitud cuánto tiempo le quedaba con los once antes de que llegaran los siervos del Enemigo a prenderlo.

3. El MINISTERIO DE JESÚS SERÍA EXITOSO

Juan 14.30 “No hablaré ya mucho con vosotros; porque viene el príncipe de este mundo, y él nada tiene en mí.”

Esta es la segunda de tres referencias a Satanás como príncipe de este mundo en el Evangelio de Juan. La otra está en:

Juan 12.31 “Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera.”

Logicamente, el diablo no es el gobernante legítimo del mundo, es un usurpador con permiso divino. Es el príncipe del sistema maligno del mundo que está en rebelión contra Dios. Las personas pertenecen a dos lugares, asi lo dijo Jesús:

Juan 8.23 “Vosotros sois de abajo, yo soy de arriba; vosotros sois de este mundo, yo no soy de este mundo.”

Jesús veía que Satanás venía en las personas de Judas, los líderes judíos y los soldados romanos que lo arrestarían en Getsemaní.

Jesús había estado en conflicto con Satanás durante toda su vida. Cuando era niño, Satanás incitó a Herodes para intentar matarlo, junto con otros niños varones en los alrededores de Belén. Cuando el ministerio de Jesús comenzaba, estaba:

Marco 1:13 “en el desierto cuarenta días, y era tentado por Satanás”

Pero las tentaciones de Satanás no se limitaron a aquel primer encuentro; persistieron durante todo el ministerio terrenal del Señor:

Lucas 4.13 “Y cuando el diablo hubo acabado toda tentación, se apartó de él por un tiempo.”

Satanás intentó en repetidas ocasiones matar a Jesús, antes de la cruz, incitando a hombres malos contra Él. Por ejemplo en:

Marcos 14.1 “Dos días después era la pascua, y la fiesta de los panes sin levadura; y buscaban los principales sacerdotes y los escribas cómo prenderle por engaño y matarle.”

Finalmente, en pocas horas, el conflicto de toda una vida entre Jesús y Satanás alcanzaría su clímax triunfal. Por fin, Satanás tendría éxito en matarlo, pero hacerlo acarrearía su propia destrucción. Lejos de ser la víctima de Satanás,

1 Juan 3:8 “el Hijo de Dios [apareció], para deshacer las obras del diablo”

Hebreos 2:14 “para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo”

La cruz marcó la derrota final de Satanás, aunque la sentencia final contra él no se ejecutará sino hasta el fin del milenio. En ese punto, su asalto final contra el pueblo de Dios se frustrará y él será arrojado al lago de fuego, donde recibirá castigo por toda la eternidad:

Apocalipsis 20.10 “Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.”

La declaración al final de Jesús en Juan 14.30:

Juan 14.30 “No hablaré ya mucho con vosotros; porque viene el príncipe de este mundo, y él nada tiene en mí.”

La frase es un modismo hebreo cuyo significado es que el diablo no puede hacer reclamaciones legales contra Jesús

! LA MUERTE DEL SEÑOR SERÍA EL PAGO Y TRIUNFO AL DIABLO!

Por cierto, no es como lo dicen algunos herejes, que fue al diablo que se le pagó, es a Dios. al diablo no se le debe nada.

4. SU ANIMO VA SER RECOMPENSADO

Juan 14.31 “Mas para que el mundo conozca que amo al Padre, y como el Padre me mandó, así hago. Levantaos, vamos de aquí.”

Lejos de que marcara su derrota a manos de Satanás, la muerte de Cristo fue la prueba final para el mundo de su amor al Padre. Jesús acababa de enfatizar que la prueba esencial del amor es la obediencia:

Juan 14.15 “Si me amáis, guardad mis mandamientos.”

Juan 14.21 “El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él.”

Jesús demostraría su amor por el Padre haciendo todo como el Padre le mandó.

Juan 14.31 “Mas para que el mundo conozca que amo al Padre, y como el Padre me mandó, así hago. Levantaos, vamos de aquí.”

Jesús termina diciendo:

Juan 14.31 “Mas para que el mundo conozca que amo al Padre, y como el Padre me mandó, así hago. Levantaos, vamos de aquí.”

La frase “Levantaos, vamos de aquí” señala una transición obvia en la narrativa. Evidentemente, en este momento Jesús y los discípulos salieron del aposento alto y caminaron por Jerusalén, saliendo hacia Getsemaní. Mientras caminaban, Jesús continuó enseñándoles.

CONCLUSIÓN

En conclusión: ¿QUÉ SIGNIFICABA PARA JESÚS SU MUERTE?

Para Jesús Su muerte significaba gozo:

Hebreos 12.2 “por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.”

Indudablemente, el camino al gozo eterno, primero atraviesa el sendero del sufrimiento, la cruz, no hay otro camino…y la corona era el precio. Jesús murió para obtenerla.

Después de triunfar sobre la muerte, Jesús regresó a la gloria que había tenido desde la eternidad en el cielo a la diestra del Padre. Allí recibe eternamente alabanza constante y sin disminución:

Apocalipsis 5:11 “de los seres vivientes, y de los ancianos”, Quienes claman:

Apocalipsis 5.12 “ a gran voz: El Cordero que fue inmolado es digno de tomar el poder, las riquezas, la sabiduría, la fortaleza, la honra, la gloria y la alabanza.”