EL TIEMPO DE DIOS ES PERFECTO.

Cita Biblica: Lucas 1:5-17.

Introducción:

!El tiempo de Dios es perfecto!

¡Espera el tiempo de Dios !

¡A su tiempo Dios lo hará !

Son algunas de las expresiones que hemos escuchado cuando estamos esperando una respuesta de parte de Dios.

Y la pregunta que sale desde nuestra paciencia, fe, amor, y confianza en Dios, es: “Cuanto es el tiempo de Dios”

No ve que ya llevo mucho tiempo pidiéndole esto o lo otro, o no ve que si no me responde, ocurrirá esto o lo otro, y ya no habrá solución para mí.

No puede ver Dios que soy humano, polvo, un simple mortal que si no veo las misericordias de él hoy, me haré viejo (a).

1.- ¡EL TIEMPO DE DIOS ES PERFECTO!

En el tiempo que el nacimiento de Jesús estaba profetizado, María portaba en su vientre la promesa del salvador del mundo. Cuando Herodes era rey en Judea, había una pareja en Judea, fieles servidores de Dios pero con una promesa retrasada, y bien retrasada ya que eran viejos, de edad avanzada. Zacarías y su esposa Elizabeth. Ambos provenientes de familia sacerdotal, no tenían hijos, no habían recibido la promesa de un descendiente. Lucas 1:5.

Ellos eran fieles no solo en servir en el templo sino en obedecer los mandamientos de Dios, y esto me habla de fuera del templo también. Lucas 1:6.

Pero tennian tres pronlemas, y uno de ellos es que, eran de edad muy avanzada. Lucas 1:7.

Pero cuando le toco ministrar en el altar, y ofrecer incienso al “Gran yo soy”

se le apareció un ángel para darle las buenas nuevas de que tendría un hijo. Lucas 1:8-11.

Por fin la oración del fiel sacerdote había sido contestada. Lucas 1:13.

Aunque él estaba pidiendo el nacimiento de un hijo desde quien sabe cuántos años atrás. El tiempo perfecto había llegado porque muchos se regocijarian en su nacimiento. Lucas 1:14-15.

Cuando, Elizabeth se encontró con María lo que ellas tenían dentro de sus vientre, se conectaron. Lucas 1:39-45.

El tiempo perfecto Es “Bendición completa y Bendición con propósito”

El propósito de ese hijo era específico, era un plan bien trazado, eso nos quiere decir que su nacimiento no podía ser antes ni después. Lucas 1:17.

Aprenderemos algunos pasos que ellos siguieron, sentando como base su servicio y fidelidad a Dios, para que ellos recibieran su promesa.

2.- SIGUE GUARDÁNDOTE PARA EL SEÑOR.

Sigue sirviendo no pares de realizar tu llamado. Hebreos 12:12.

Vivimos en un mundo sin esperanza, donde todo a nuestro alrededor nos empuja a enfocarnos en todo lo malo, en nuestros padecimientos más que nuestras bendiciones diarias, y eso nos trae como consecuencia, desanimarnos de las promesas de Dios. También hace que nuestra Fe, flaquee. Y abandonemos nuestros sueños, deseos, y peticiones delante de Dios, o que tratemos de buscar una solución por nosotros mismos. Isaías 31:1.

Lo contrario de la esperanza es la desesperanza, y trae como consecuencia la desesperación y el desaliento. Me imagino que Zacarías y Elizabeth veían entrar a muchas mujeres embarazadas al templo, y a muchos niños jugando con sus padres, lo cual podría ser un dardo muy fuerte del enemigo para desanimarse. es por eso que Hebreos 12:15. nos dice que miremoos bien.

3.-SIGUE PRENDIENDO INCIENSO.

Lo que haces mientras esperas la respuesta es la diferencia.

En el verso 10 dice que multitudes oraban mientras el incienso se quemaba. Lucas 1:10.

Tú y yo no sabemos en quien influimos, que ojos están a la expectativa de como reaccionamos en tiempos de Crisis. Que en vez de quejarte o de buscar salidas por tu cuenta, estás quemando incienso mientras esperas. Esa es la diferencia de alguien que no conoce a Dios ni confía en su palabra. Ora, Ora, Ora. Canta, Alaba, ¡Declara que tu Dios vive y reina!

4.- ACEPTA EL TIEMPO DECLARADO POR DIOS PARA QUE TU RESPUESTA LO GLORIFIQUE.

Juan no podía nacer ni antes ni después, ya que él estaba profetizado para hacer volver el corazón de los que habían abandonado el camino de Dios, y de nuevos creyentes. Lucas 1:16-17.

Conclusión:

Dios te ha puesto para plantar y edificar. Jeremías 1:10

Nos sentimos muy felices y orgullosos de que Dios nos haya salvado, y muchas veces queremos servir, para agradecerle a Dios por lo que ha hecho en nosotros y por nosotros y eso es bueno.

Pero créame, que nunca veremos una cosa más espectacular y realmente significante en nuestro caminar con Cristo, que el mirar a un alma, a la que nosotros le hallamos compartido la palabra de Dios, bautizándose, arrepintiéndose, de sus pecados.

Usted y yo somos portadores de un poder especial que transforma vidas, cambia mentes, y renueva seres humanos, por eso el señor dijo “y me seréis testigos”. Hechos 1:8.

¿testigos de qué? De mirar a un borracho restablecerse, a un drogadicto reformarse, un matrimonio restaurarse, a una prostituta restituirse, etc. En fin una serie de acontecimientos que por puros esfuerzos humanos nunca se llevaron a cabo.

Ese poder te hace un llamado, especial, para anunciar en las plazas, compartir en las calles, y anunciar el evangelio de Cristo.

Tenemos que glorificar a Dios que habiéndonos sacado de donde nos sacó, nos ha dado tan alto privilegio de ser voceros de su santa palabra y poder decirle al mundo que estos labios que eran impuros ahora le alaban, que estas manos que tocaban lo inmundo, ahora le sirven, que estos oídos que oyen cosas perversas, ahora oyen la dulce voz del señor cuando sentimos su presencia. Isaías 6:5-8.