Cuando Dios Ayuda II

Introducción: Dios nos ayuda aun sin merecerlo, esa es la expresión que pudiera salir de nuestros labios si pesáramos nuestras acciones frente a la misericordia de Dios. ¿Cuántas personas han recibido libertad de Dios sin merecerlo? ¿Sanidad sin haber hecho nada para recibirla? O ¿Bienes sin haber trabajado para tenerlo? Dios es sobradamente justo, bueno y misericordioso para con nosotros aun cuando no le seamos fieles. Pero esto debería llevarnos no a un conformismo espiritual en el cual en vez de acercarnos a Dios, nos alejemos de El. Sino debe llevarnos a una profunda reflexión de nuestra relación personal con El.

¡Señor, Dios de Israel, tú eres justo! Tú has permitido que hasta hoy sobrevivamos como remanente. Culpables como somos, estamos en tu presencia, aunque no lo merecemos." Esdras 9:15.

Tres preguntas que debemos hacernos al respecto

1. ¿Hay algún pecado que este afectando mi relación con Dios?

Debo estar plenamente capacitado para definir el pecado que hay en mi y detectar claramente cual es mi reacción ante ese pecado, cuales son las consecuencias de ese pecado en mi vida, en mi familia, en la iglesia, en la nación.

2. ¿Qué dice la Palabra de Dios al respecto?

- Debo tener bien clara las prescripciones de la Palabra de Dios

- ¿Cuál es la reacción de Dios ante mi conducta?

3. ¿Estoy confiando en la misericordia de Dios?

- Abandonando el pecado

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