La Conciencia Habla
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· 11 viewsLa conciencia es la voz de nuestra moral, debemos cuidarla para que no sea corrompida.
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Conciencia es la facultad moral que es capaz de producir culpa o reafirmación en caso de inocencia.
Conciencia es la facultad moral que es capaz de producir culpa o reafirmación en caso de inocencia.
El pecado es la causa por la cual esta voz se silencia la cual puede ser limpiada y recuperada cuando hay arrepentimiento y vuelve uno a Dios pidiendo perdón.
14 Porque cuando los gentiles que no tienen ley, hacen por naturaleza lo que es de la ley, éstos, aunque no tengan ley, son ley para sí mismos,
15 mostrando la obra de la ley escrita en sus corazones, dando testimonio su conciencia, y acusándoles o defendiéndoles sus razonamientos,
Acusándoles= Kategoréo= demandar, acusación a causa de las ofensas o errores, queja ante la ley, satanás.
Acusándoles= Kategoréo= demandar, acusación a causa de las ofensas o errores, queja ante la ley, satanás.
Defendiendo= Apologéomai= dar cuentas de uno mismo, exculpar, defender.
Defendiendo= Apologéomai= dar cuentas de uno mismo, exculpar, defender.
El tener una conciencia limpia y activa es muy importante para el creyente para poder caminar correctamente delante de Dios, es por esta causa que el ataque del enemigo se centra en corromper y callar la voz de tu conciencia, de esta forma los parámetros de tu moral (conducta) y de tu percepción del bien y el mal ahora estén bajo el control satanás a causa de sus sucias mentiras.
20 ¡Qué aflicción para los que dicen que lo malo es bueno y lo bueno es malo, que la oscuridad es luz y la luz es oscuridad, que lo amargo es dulce y lo dulce es amargo!
¿ Tu conciencia tiene el volumen suficiente para que la escuches?
¿ Tu conciencia tiene el volumen suficiente para que la escuches?
7 Como ellos seguían exigiéndole una respuesta, él se incorporó nuevamente y les dijo: «¡Muy bien, pero el que nunca haya pecado que tire la primera piedra!».
8 Luego volvió a inclinarse y siguió escribiendo en el polvo.
9 Al oír eso, los acusadores se fueron retirando uno tras otro, comenzando por los de más edad, hasta que quedaron sólo Jesús y la mujer en medio de la multitud.
10 Entonces Jesús se incorporó de nuevo y le dijo a la mujer: —¿Dónde están los que te acusaban? ¿Ni uno de ellos te condenó?
11 —Ni uno, Señor —dijo ella. —Yo tampoco —le dijo Jesús—. Vete y no peques más.
Acusaban= Quejoso ante la ley, satanás, ojo, la acusación de él o la que acusa, lo que buscan es que la acción de la persona acusada, reciba sentencia y castigo, ¿ será la acusación una acción motivada por el amor?
Acusaban= Quejoso ante la ley, satanás, ojo, la acusación de él o la que acusa, lo que buscan es que la acción de la persona acusada, reciba sentencia y castigo, ¿ será la acusación una acción motivada por el amor?
Condenó= Katakrino= Hacer juicio en contra de, conseguir sentencia, declarar en contra buscando condena.
Condenó= Katakrino= Hacer juicio en contra de, conseguir sentencia, declarar en contra buscando condena.
1 Con Cristo de testigo hablo con toda veracidad. Mi conciencia y el Espíritu Santo lo confirman.
La voz de una limpia conciencia siempre estará de acuerdo con la voz del Espíritu Santo.
1 Aconteció al año siguiente, en el tiempo que salen los reyes a la guerra, que David envió a Joab, y con él a sus siervos y a todo Israel, y destruyeron a los amonitas, y sitiaron a Rabá; pero David se quedó en Jerusalén.
2 Y sucedió un día, al caer la tarde, que se levantó David de su lecho y se paseaba sobre el terrado de la casa real; y vio desde el terrado a una mujer que se estaba bañando, la cual era muy hermosa.
3 Envió David a preguntar por aquella mujer, y le dijeron: Aquella es Betsabé hija de Eliam, mujer de Urías heteo.
7 Cuando Urías llegó, David le preguntó cómo estaban Joab y el ejército, y cómo marchaba la guerra.
8 Después le dijo a Urías: «Ve a tu casa a descansar». David incluso le envió un regalo a Urías apenas este dejó el palacio.
9 Pero Urías no fue a su casa, sino que durmió esa noche a la entrada del palacio con la guardia real.
10 Al enterarse David de que Urías no había ido a su casa, lo mandó llamar y le preguntó: —¿Qué pasa? ¿Por qué no fuiste anoche a tu casa después de haber estado fuera por tanto tiempo?
11 Urías le contestó: —El arca y el ejército de Israel y el de Judá están viviendo en carpas de campaña, y Joab y los hombres de mi señor están acampando a cielo abierto. ¿Cómo podría yo ir a casa para beber, comer y dormir con mi esposa? Juro que jamás haría semejante cosa.
12 —Está bien, quédate hoy aquí —le dijo David— y mañana puedes regresar al ejército. Así que Urías se quedó en Jerusalén ese día y el siguiente.
9 ¿Por qué, entonces, despreciaste la palabra del Señor e hiciste este acto tan horrible? Pues mataste a Urías el hitita con la espada de los amonitas y le robaste a su esposa.
10 De ahora en adelante, tu familia vivirá por la espada porque me has despreciado al tomar a la esposa de Urías para que sea tu mujer”.
11 »Esto dice el Señor: “Por lo que has hecho, haré que tu propia familia se rebele en tu contra. Ante tus propios ojos, daré tus mujeres a otro hombre, y él se acostará con ellas a la vista de todos.
12 Tú lo hiciste en secreto, pero yo haré que esto suceda abiertamente a la vista de todo Israel”.
9 —¿Cómo es posible que este perro muerto maldiga a mi señor el rey? —exclamó Abisai, el hijo de Sarvia—. ¡Déjeme ir y cortarle la cabeza!
10 —¡No! —dijo el rey—. ¿Quién les pidió su opinión a ustedes, los hijos de Sarvia? Si el Señor le dijo que me maldijera, ¿quiénes son ustedes para detenerlo?
11 Entonces David les dijo a Abisai y a sus sirvientes: —Mi propio hijo quiere matarme, ¿acaso no tiene este pariente de Saúl todavía más motivos para hacerlo? Déjenlo en paz y permítanle que maldiga, porque el Señor le dijo que lo hiciera.
1 Ten misericordia de mí, oh Dios, debido a tu amor inagotable; a causa de tu gran compasión, borra la mancha de mis pecados.
2 Lávame de la culpa hasta que quede limpio y purifícame de mis pecados.
3 Pues reconozco mis rebeliones; día y noche me persiguen.
4 Contra ti y sólo contra ti he pecado; he hecho lo que es malo ante tus ojos. Quedará demostrado que tienes razón en lo que dices y que tu juicio contra mí es justo.
22 Pero Dios quitó a Saúl y lo reemplazó con David, un hombre de quien Dios dijo: “He encontrado en David, hijo de Isaí, a un hombre conforme a mi propio corazón; él hará todo lo que yo quiero que haga”.
27 Dios nos ha dado la conciencia para que podamos examinarnos a nosotros mismos.