Honra tus Palabras
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El código oculto del poder de las Palabras.
El código oculto del poder de las Palabras.
Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre! El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios.
En el momento que Dios nos reconcilia a través de Jesucristo su Espiritu es puesto en nosotros y con ello la necesidad de clamar, hablar a Dios como Papito (Aba Padre).
Dios quiere que le llamemos papa. Jesus ensena a orar y dijo:
Cuando ustedes oren oren asi, Padre Nuestro.
Dios es nuestro Padre!
Hoy tenemos un espiritu que no teniamos antes el cual quiere quye clamemos para conectarnos con Dios.
Dios no es hombre, para que mienta,
Ni hijo de hombre para que se arrepienta.
El dijo, ¿y no hará?
Habló, ¿y no lo ejecutará?
He aquí, he recibido orden de bendecir;
El dio bendición, y no podré revocarla.
Dios honra sus palabras El toma enserio lo que dice, la pregunta es si nosotros tomamos enserio lo que le oímos?
No hay nadie que pueda anular ni revocar lo que Dios ha dicho para tu vida. Hay una relación poderosa entre lo que oímos y hablamos .
Literalmente el futuro de nuestras vidas esta en nuestras palabras. Para Dios es tan importante lo que El habla, que después de eso lo mas importante es lo que creemos de lo que El nos ha hablado.
Vamos a descubrir una formula muy poderosa para poder conectar nuestro corazón con nuestras palabras
Mas ¿qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos: que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.
El codigo que encontramos aqui esta entre lo que hablamos y lo que creemos, no solo es importante hablar, tenemos que creer, pero de la misma manera creer sin hablar se convierte en algo inoperante, sin valor y poder de transformar
¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca.
Esto lo expreso Jesucristo dandole una valor y una importancia a nuestras palabras.
Pero lo que sale de la boca, del corazón sale; y esto contamina al hombre. Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias.
No estamos hablando de hablar un modismo adaptado a la religion, porque en ocaciones podemos decir “Gloria a Dios” sin verdaderamente darsela. o podemos decir amen sin de verdad esperar que asi sea.
Estamos acostumbrados a hablar sin creer y esto no produce ningun efecto espiritual, si de verdad queremos que Dios sea coparticipe de nuestros planes tenemos que hacerlo a travez de esta formula Boca y Corazon
El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas. Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio.
Dentro de cada uno de nosotros hay un tesoro y este tesoro esta relacionado con nuestras palabras.
En ocaciones ponemos mas atención en no decir vulgaridades pero hablamos palabras ociosas, una palabra ociosa es aquella que no produce nada de parte de Dios.
No podemos tener palabras ociosas, Dios nos ha dado su Espiritu para que a traves de nuestras palabras las cosas ocurran, conectar nuestro corazon a nuestras palabras, sacar del buen tesoro de nuestro corazon palabras de bendicion, palabras de edificacion, palabras de animo, de esa manera provocamos que El poder de Dios sea manifiesto sobrenaturalmente en nuestras vidas.
Diois hablo su palabra y nos creo, encarno su palabra y nos salvo, lo que mando Dios a la tierra fue su palabra, para Dios las palabras son muy importantes, como lo deberia ser para nosotros.
Porque:
El que quiere amar la vida
Y ver días buenos,
Refrene su lengua de mal,
Y sus labios no hablen engaño;
Apártese del mal, y haga el bien;
Busque la paz, y sígala.
Porque los ojos del Señor están sobre los justos,
Y sus oídos atentos a sus oraciones;
Pero el rostro del Señor está contra aquellos que hacen el mal.
El desanimo, la depresión, el miedo, la confusión se desata por lo que hablamos, lo que sale de nuestro corazón por medio de nuestra boca.
Tenemos que hablar FE, con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación.
Entonces dije: ¡Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos.
El profeta asocia su muerte a sus palabras, y al ver que habitaba, vivía se encontraba rodeado de gente con esta misma característica, por eso bajo un ángel y toco sus labios y el futuro del profeta fue completamente distinto a lo que había asociado sus palabras.
La cultura Organizacional se compone de lo que las palabras producen.
Tus palabras para que produzcan tienen que dejar de ser ociosas, sacar del buen tesoro del corazón lo que Dios ha depositado en ti.