La necedad de la idolatría y la falsa paz

Pasaje a Meditar

Deuteronomio 29:19b (RVR60)

Tendré paz, aunque ande en la dureza de mi corazón, a fin de que con la embriaguez quite la sed.

Para un contexto al libro de Deuteronomio por favor revisar el sermón “Cuida de no olvidarte del Señor” Deuteronomio 6:12 “12 cuídate de no olvidarte de Jehová, que te sacó de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre.”

Breve resúmen del capítulo

Las primeras palabras de este capítulo son el contenido del mismo, 'Estas son las palabras del pacto' (ver. 1), es decir, las que siguen. Aquí hay:

I. Un recuento de los tratos de Dios con ellos, con el fin de traerlos a este pacto, ver. 2-8.

II. Un solemne mandato para que guarden el pacto, ver. 9.

III. Un resumen del pacto mismo, ver. 12, 13.

IV. Una especificación de las personas tomadas en el pacto, ver. 10, 11, 14, 15.

V. Una insinuación del gran propósito de este pacto contra la idolatría, en un paréntesis, ver. 16, 17.

VI. Una denuncia muy solemne y terrible de la ira de Dios contra las personas que se prometen la paz de manera pecaminosa, ver. 18-28.

VII. La conclusión de este tratado, con una distinción entre las cosas secretas y las reveladas, ver. 29.

Contexto

Deuteronomio 29:16–18 RVR60

16 Porque vosotros sabéis cómo habitamos en la tierra de Egipto, y cómo hemos pasado por en medio de las naciones por las cuales habéis pasado; 17 y habéis visto sus abominaciones y sus ídolos de madera y piedra, de plata y oro, que tienen consigo. 18 No sea que haya entre vosotros varón o mujer, o familia o tribu, cuyo corazón se aparte hoy de Jehová nuestro Dios, para ir a servir a los dioses de esas naciones; no sea que haya en medio de vosotros raíz que produzca hiel y ajenjo,

La generación con la que el Señor está ratificando el pacto del Sinaí ahora en las llanuras de Moab, son los hijos de aquellos que habían salido de Egipto, ya que la generación de sus padres murieron por tentar al Señor y quebrantar su pacto. Deuteronomio 2:14-15.

Desde su esclavitud en Egipto hasta su peregrinaje por el desierto, el pueblo de Israel presenció la idolatría de los pueblos, de lo cual debían guardarse.

Es a esta generación a la que el Señor está confirmando su pacto, pero... El Señor comunica una maldición a este pueblo, en la cual nadie debía alejarse de la adoración al único Dios vivo y verdadero, no solo externamente, sino internamente y servir a dioses falsos.

Es en esta estipulación de maldición que el Señor advierte e ilustra al pueblo el ejemplo de alguien (varón o mujer, o familia o tribu) que se engaña a sí mismo pensando que puede servir al Señor del Pacto Jehová de los ejércitos y a falsos dioses al mismo tiempo.

Exposición escritural

Deuteronomio 29:19b (RVR60)

Tendré paz, aunque ande en la dureza de mi corazón, a fin de que con la embriaguez quite la sed.

Este pasaje nos enseña principalmente:

1. Necedad y ceguera de un corazón endurecido por la idolatría

Tendré paz, aunque ande en la dureza de mi corazón...

En primer lugar debemos afirmar que el Señor es omniciente, el conoce los corazones de su pueblo, por lo que conoce que existirán este tipo de varones, mujeres, familias y tribus Deuteronomio 31.16 “16 Y Jehová dijo a Moisés: He aquí, tú vas a dormir con tus padres, y este pueblo se levantará y fornicará tras los dioses ajenos de la tierra adonde va para estar en medio de ella; y me dejará, e invalidará mi pacto que he concertado con él;”

La dureza de corazón es necia y ciega

Tendré Paz… Que necio será el corazón de un miembro del pueblo al creer que tendrá paz sin el Príncipe de Paz, ya que en su idolatría piensa que existe paz entre él y el Dios vivo y verdadero. ¡Que necedad! Éxodo 20:3-5 “3 No tendrás dioses ajenos delante de mí. 4 No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. 5 No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen,”

Aunque ande en la dureza de mi corazón… no solo será necio al creer que puede tener paz sin el Príncipe de Paz sino ignorar voluntariamente su estado deplorable de pecado. Prov.12.15 “15 El camino del necio es derecho en su opinión”

2. La lógica de un corazón endurecido

a fin de que con la embriaguez quite la sed...

Esta porción de las escrituras es difícil de traducir ya que se cree que es un proverbio antiguo y su significancia sería: “el pecador aumenta su culpa hundiéndose más en el pecado”. Por lo que vemos que un corazón duro no es capaz de pensar lógicamente, sino que sus resoluciones (que ya son pecaminosas en sí) se profundizan aún más. “La solución viene a ser peor que el problema”

Estos israelitas iban a seguir un lógica tan necia que su destrucción sería inminente.

Doctrina

Un hombre, mujer, familia o nación necia es aquella que cree tener paz con el Señor siendo idólatra, pero sabio es creer que la paz con el Señor proviene sólo de Él y su justicia perfecta en Cristo.

Deuteronomio 29:19b (RVR60)

Tendré paz, aunque ande en la dureza de mi corazón, a fin de que con la embriaguez quite la sed.

Un hombre, mujer, familia o nación necia es aquella que cree tener paz con el Señor siendo idólatra

Un corazón endurecido tiene un concepto erróneo sobre la paz

La idea básica y primaria de la palabra bíblica «paz» (AT šālôm) es la de un estado completo, íntegro, total de seguridad, como así de bienestar, prosperidad y salud.

Comúnmente el término “paz” hace referencia a una situación o estado en que no hay guerra ni luchas entre dos o más partes enfrentadas, ejm. Tratados de paz después de una guerra. Pero también se define la paz en términos “de quietud o bonanza del alma”, ejm. Búsqueda y solución a problemas que nos aquejan. Si bien estos conceptos son correctos y necesarios, solo son parciales y temporales.

Pero… Hay un concepto de paz que todos ignoramos al darlo por sentado (confusión entre gracia común y especial), que es la paz entre Dios y el hombre, ya que pensamos que al no tener problemas y vivir en libertades civiles, estamos en paz. Lejos de ser cierto, el hombre se encuentra enemistado, en guerra contra su Creador. Romanos 3.23 “23 por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,” Este error de percepción proviene de nuestra naturaleza pecaminosa, ya que con la caída de Adán en el Edén, el hombre tornó su mirada a sí mismo y a su alrededor y dejó de ver a los cielos.

El hombre fue creado para adorar y vivir para su creador, pero por la muerte espiritual que procede del pecado dejó de contemplar la gloria de su creador, dejó de verlo como su único bien y paz y pasó a mirarse a sí mismo como fuente de paz.

Siendo el hombre creado para adorar, este al desechar al Dios vivo y verdadero revelado en su creación y su Palabra como su máximo bien, por su amor al pecado, el hombre rellena ese sentido inherente de adoración con cualquier cosa, sea él mismo, otro hombre, otra criatura u otra deidad inventada con tal de hallar paz para su alma. El hombre es idólatra por naturaleza.

El pecado de idolatría embrutece al alma, no piensa sensatamente

En palabras simples, creer tener paz aparte de la paz que el Señor brinda, es pensar neciamente.

Este pecado es tanto individual como colectivo

Si bien la relación con el Señor es individual ya que cada uno dará cuentas por sus pecados, la idolatría se hereda, comunicando así este pecado de generación en generación.

La idolatría es condenada porque quita el mérito, la alabanza, la gloria al único Dios vivo y verdadero, al Señor Jehová revelado en las escrituras.

Leemos en el primer mandamiento Ex20:2-5 “2 Yo soy Jehová tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre. 3 No tendrás dioses ajenos delante de mí. 4 No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. 5 No te inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen,” Al quebrantar este mandamiento estamos “declarando la guerra al Señor”

Un corazón idólatra jamás está ni estará en paz, porque no sabrá a qué señor servir. Mt6.24a “24 Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro.

Un corazón idólatra es tan necio que ve como su más grande bien y fuente paz a un ser u objeto finito.

Salmo 115:4–8 RVR60

4 Los ídolos de ellos son plata y oro, Obra de manos de hombres. 5 Tienen boca, mas no hablan; Tienen ojos, mas no ven; 6 Orejas tienen, mas no oyen; Tienen narices, mas no huelen; 7 Manos tienen, mas no palpan; Tienen pies, mas no andan; No hablan con su garganta. 8 Semejantes a ellos son los que los hacen, Y cualquiera que confía en ellos.

Sabio es creer que la paz con el Señor proviene sólo de Él y su justicia perfecta en Cristo.

Como vimos, un corazón idólatra está en un estado de guerra contra el creador, en la cual por obvias razones tiene todas la de perder, porque ¿Qué es el hombre a lado del creador? ¿Qué palabra de sabiduría podría enseñar el hombre al creador?

El Señor no tendrá por inocente al culpable, y todos lo somos por rebelarnos ante su santo ser por lo que no estamos en paz con Él.

¿Hemos de buscar la paz tratando de agradar con nuestras obras? pero… ¿qué de puro puede ofrecer un corazón idólatra? ¡Nada!

La verdadera y única paz para nuestras almas se encuentra en la vida y obra del Señor Jesucristo

Romanos 5:1 RVR60

1 Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo;

Justicia, rectitud imputada por la fe. Gracia y Misericordia

El fin de la guerra con Dios es por medio de Cristo

Su obediencia activa consistió en guardar la ley de Dios perfectamente a lo largo de Su vida. Su obediencia pasiva consistió en Su recepción voluntaria del castigo que merecían los pecadores por quebrantar la ley.

Isaías 53:5 RVR60

5 Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.

Aplicaciones

Examina tu corazón si eres idólatra

¿Quién es tu razón de vivir?

¿A quién le dedicas más de tu tiempo?

¿En quién tu alma halla paz? (ejemplo de Lutero)

¿A quién acudes en momentos de tribulación y felicidad?

Si respondiste (alguien o algo) por amor a tu alma arrepiéntete. Santiago 4.17 “17 y al que sabe hacer lo bueno, y no lo hace, le es pecado.”

Si respondiste “Dios” ¿Qué dios?¿lo conoces?¿sabes cómo adorarlo?¿sabes lo que le agrada?¿me lo puedes presentar desde su Palabra revelada?

¿Tienes al Dios de la Bíblia como tu único Dios, sirviéndole y viviendo para él?

Esta advertencia es para los que hicieron una profesión de fe como para aquellos que no lo hicieron. La idolatría es evidente por las acciones de uno.

Una cosa es saber cuál es la paz de Cristo y otra es tener la paz de Cristo, estas en paz con Él?

¿Hasta cuando seguirás con la necedad de la idolatría? Busca la paz eterna en aquel que es eterno

Juan 14:27 RVR60

27 La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.

Deuteronomio 29:19 RVR60

19 y suceda que al oír las palabras de esta maldición, él se bendiga en su corazón, diciendo: Tendré paz, aunque ande en la dureza de mi corazón, a fin de que con la embriaguez quite la sed.

Salmo 34:14 RVR60

14 Apártate del mal, y haz el bien; Busca la paz, y síguela.