Dos Mandamientos renovados
TEXTO: 1a de Juan 3:23.
TEMA: “ DOS MANDAMIENTOS RENOVADOS”
INTRO.: (Mateo 22:37-39)
En el antiguo testamento en Deuteronomio 6:5 Dios le dio a Israel un mandamiento que decía: Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas , y en Levítico les dio lo que Jesús llamó como el segundo mandamiento Levítico 19:18. No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino amarás a tu prójimo como a ti mismo. Yo Jehová. Pero ahora tenemos este versículo que nos presenta Juan donde se cambia la gloria y obediencia a Dios el Padre o Jehová por la del Hijo Nuestro Señor Jesucristo.
O. T. Veamos el primer mandamiento renovado:
I.– CREER EN EL NOMBRE DE JESUCRISTO.
Por su muerte, El tenía ahora toda la Gloria.
a).– Mateo 28:19. Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
b).– Y pablo añade: Filipenses 2:10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra;
Filipenses. 2:11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.
c).– Y Lucas dice: Hechos 4:12 Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que
II.– AMARNOS UNOS A OTROS
a).– En Juan 13:34 Jesús dijo: Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros.
Juan 13:35 En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.
b).– Perdón.-
c).– Misericordia.- El testimonio entre cristianos.
III.– EL BLINDAGE DEL MANDAMIENTO.
a).– Una reflexión para motivarnos, 1Jn 3:21 Amados, si nuestro corazón no nos reprende, confianza tenemos en Dios;
1Jn 3:22 y cualquiera cosa que pidiéremos la recibiremos de él, porque guardamos sus mandamientos, y hacemos las cosas que son agradables delante de él.
b).– Una advertencia para permanecer en El; 1Jn 3:24 Y el que guarda sus mandamientos, permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado.
c).-
CONCLUSIÓN: