LOS TRES TEMAS MUNDANOS QUE PREDICA EL ESPÍRITU SANTO
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INTRODUCCIÓN
INTRODUCCIÓN
Este mensaje de parte de Jesús. Se da jueves por la noche. En el Monte de los Olivos, Jesús explica que nos conviene Irse, y que venga el Espíritu Santo. El Espíritu de Dios convencerá 3 areas al mundo: PECADO-JU
Juan 16.7-10 “Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.Y cuando él venga, 1.convencerá al mundo de pecado (La semana pasada aprendimos que Dios perdona cualquier pecado, menos la BLASFEMIA CONTRA EL ESPÍRITU SANTO.No olvidemos que aprendimos que“pecado” está en singular y no en plural, osea no muchos pecados, sino 1 expecífico. No se refiere al pecado en general, sino específicamente al pecado último de negarse a creer en Jesucristo. El Espíritu Santo convencerá ), 2.de justicia y (Finalmente,)de juicio.De pecado, por cuanto no creen en mí(RECHAZAR A JESÚS COMO SEÑOR Y SALVADOR);de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;”
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EL ESPÍRITU SANTO CONVENCE DE PECADO
Juan 16.9 “De pecado, por cuanto no creen en mí;”
En Juan 3:18 dijo Jesús:
“El que en él (Cristo) cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios”. Juan 3.18
En 5:40 reprendió a quienes no querían ir a Él para tener vida. A los judíos incrédulos advirtió con solemnidad:
“Si no creéis que yo soy, en vuestros pecados moriréis” (Jn. 8:24).
El uso de la frase absoluta y sin calificativos Yo soy no es menos que una afirmación directa de deidad total.
“Yo Soy” Cuando Moisés le preguntó a Dios su nombre, Él respondió frase (egō eimi) traducida “YO SOY”:
Éxodo 3.14 “Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO SOY me envió a vosotros.”
Jesús usa el mismo nombre“Yo Soy” (egō eimi) .Jesús estaba aplicando para sí el tetragrámaton (YHWH, que en la versión RVR-1960 aparece transliterado como Jehová), el nombre tan sagrado de Dios que los judíos no pronunciaban. A diferencia de sectas modernas (como los Testigos de Jehová), los judíos de la época entendieron perfectamente que Él afirmaba ser Dios. Los mormones piensan que los hombres pertenecientes a esta secta, un día van a ser como Jesús, un dios. Un dios más de tantos y que Jehová es solo el Padre, y todos los demás mormones son hijos del Padre, son dioses como Jesús. Esto evidentemente es un falso evangelio fundado por Jose Smith. Un hombre que practico la poligamia, tuvo varias esposas, y muchos hijos de todas sus esposas.
El Jesús que predica los Testígos, los mormones no se parece al de la Biblia.
¿Todas las sectas se creen cristianos? Sí, Hablan de Jesús, pero no según la Biblia. Entonces,
¿Cómo identificamos a un VERDADERO cristiano?
Para ser cristiano debe creerse toda la revelación bíblica sobre Jesús: que es la segunda persona eterna de la Trinidad, que entró en el espacio y el tiempo como Dios encarnado, que nació de una virgen, que vivió una vida sin pecado, que su muerte en la cruz fue un sacrificio expiatorio y suficiente por los pecados de quienes creen en Él, que se levantó de los muertos y ascendió al cielo con el Padre, que ahora intercede por su pueblo redimido y que un día regresará en gloria.
Rechazar esas verdades es extraviarse:
“de la sincera fidelidad a Cristo” 2 Co. 11:3
Es adorar “a otro Jesús”:
La sectas predican como dice Pablo a “otro Jesús”- no reciben el Espíritu Santo, reciben “otro espíritu”-al escuchar “otro evangelio”.
2 Corintios 11:4 “Porque si viene alguno predicando a otro Jesús que el que os hemos predicado, o si recibís otro espíritu que el que habéis recibido, u otro evangelio que el que habéis aceptado, bien lo toleráis;”
Pablo está exhortando a los Corintios sobre la consecuencia lógica de proclamar otro Jesús en el poder de otro espíritu era que los falsos apóstoles predicaban otro evangelio.
! DEBEMOS SER FIELES AL EVANGELIO!
Lo que pasaba en Corintios, de igual manera pasa hoy en día, predican falsos apóstoles:
2 Corintios 11.4 “Porque si viene alguno predicando a OTRO JESÚS que el que os hemos predicado, o si recibís OTRO ESPÍRITU que el que habéis recibido, u OTRO EVANGELIO que el que habéis aceptado, bien lo toleráis;”
Los falsos apóstoles predicaban otro Jesús, no el verdadero Señor Jesucristo que Pablo había predicado. !Pastor, pero hablan de Jesús, de Cristo!Una mala TEOLOGÍA DE CRISTO siempre ha sido la marca de las religiones y los falsos cultos. En lugar de ver a Jesús como la segunda persona eterna de la Trinidad, que se hizo hombre y murió en sacrificio expiatorio por el pecado, lo ven como un profeta, un gurú, un avatar, un revolucionario político o social, el arcángel Miguel, un espíritu pequeño de Dios, una emanación divina… cualquier cosa, excepto el Dios verdadero hecho carne. Aunque los falsos apóstoles se identificaban externamente con Jesús, el Jesús que predicaban no era el de las Escrituras.
Este pasaje nos avisa que los falsos apóstoles vienen con el poder de otro espíritu, un espíritu demoniaco, no el Espíritu Santo de quien los corintios habían recibido la salvación.
Toda enseñanza falsa al final proviene de Satanás y sus huestes demoniacas, a las que Pablo describió como “espíritus engañadores”:
1 Timoteo 4.1 “Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios;”
El apóstol Juan los llamó “espíritus de error”:
1 Juan 4.6 “En esto conocemos el espíritu de verdad y el espíritu de error.”
La consecuencia lógica de proclamar otro Jesús en el poder de otro espíritu era que los falsos apóstoles predicaban otro evangelio. No predicaban el evangelio verdadero que los corintios habían aceptado cuando Pablo les predicó por primera vez.
El creer en un falso Jesús es estar bajo la maldición de Dios:
Gálatas 1:8-9 “Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema.Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema.”
Todos los que creean en OTRO JESÚS-tenga OTRO ESPÍRITU-y prediquen OTRO EVANGELIO. Oirán decir al Señor al final:
Mateo 7:23 “Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad”
Juan 16.8 “Y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio.
Juan 16:9 “De pecado, por cuanto no creen en mí;”
El ministerio de convicción por el Espíritu es llevar a los pecadores al conocimiento BÍBLICO del salvador de Jesucristo. Iglesia Friendship, ya entendemos las palabras de Judas:
Judas 3 “Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos.”
Judas escribió este llamado obligatorio, para que los cristianos libraran una guerra sin cuartel, sin treguas en contra del error en todas sus formas, y a que lucharan con valor por la verdad, como un soldado al que se encomienda como una tarea sagrada la protección de un tesoro santo. Desde la época de Judas hasta el día de hoy, los verdaderos creyentes siempre han tenido que batallar por la pureza del evangelio de salvación
El Espíritu Santo convence al mundo de tres cosas: Primero, de pecado. Segundo, de justicia
Juan 16.10 “de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;”
Aquí la justicia es la perteneciente por naturaleza a Jesucristo como Hijo Santo de Dios. Es el otro lado de la moneda del asunto anterior; el Espíritu no solo convence a los incrédulos de su pecado, también los convence de su necesidad de tener la justicia perfecta de Cristo:
Mateo 5.20 “Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos.”
Mateo 5.48 “Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.”
Cuando comparan su impiedad con la santidad de Cristo sin pecado, sus pecados se ven más claramente. El pecador se enfrenta cara a cara con la imposibilidad de la salvación por algún esfuerzo, obra o logro de su parte.
El Espíritu nos convence de la necesidad de ser justos. La justicia aquí tiene que ver con la justicia de Cristo, mediante la cual el hombre puede ser justificado delante de Dios. Esto es, la justicia imputada a todo aquel que cree. La justicia del esfuerzo humano queda anulada para salvación. Tan sólo la justicia de Dios, que es don divino para el que cree, puede llevar a la paz con Dios, por el único Mediador que es Cristo mismo
En la Primera Epístola, Juan amplió el tema al afirmar no solo que tanto Dios como Jesús son justos:
1 Juan 1.9 “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y JUSTO para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.”
1 Juan 2.1 “Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a JESUCRISTO EL JUSTO”
Si Dios es justo, nos debe interesar: ¿Qué significaJusticia?
“Justicia” δικαιοσύνη. Significa: rectitud, buenas obras, generosidad, voluntad de perdón, actitud grata a Dios, integridad y hacen lo correcto.
Si Dios es justo, sus hijos también son justos y hacen todo el tiempo: “buenas obras, generosidad, voluntad de perdón, actitud grata a Dios, integridad y hacen lo correcto.”
Iglesia Friendship, todos los que hacen “lo correcto” proceden de Dios y los que no hacen “lo correcto” son como Caín el asesino y proceden del diablo. La Biblia dice:
1 Juan 2.29 “Si sabéis que él es justo, sabed también que TODO EL QUE HACE JUSTICIA ES NACIDO DE ÉL.”
1 Juan 3.7 “Hijitos, nadie os engañe; EL QUE HACE JUSTICIA ES JUSTO, como él es justo.”
1 Juan 3.10 “En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo: todo aquel que NO HACE JUSTICIA, y que no ama a su hermano, NO ES DE DIOS.”
La frase:
Juan 16.10b “de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;”
No preguntamos: ¿Por qué va al Padre? ¿Por qué no dice que va al Cielo?
Para que alguien sea salvo, debe ser declarado justo por el Padre. Y para que alguien sea salvo, la muerte y resurrección de Jesús debían suceder para que el pecador fuera perdonado y justificado por Dios. El Padre daría validez a lo hecho por Jesús el justo.
Por el contrario, el mundo, representado por los judíos, iba a crucificar a Jesús e Iba a decir:
Juan 19.7 “Los judíos le respondieron: Nosotros tenemos una ley, y según nuestra ley debe morir, porque se hizo a sí mismo Hijo de Dios.”
En el nombre de la justicia iba a darle muerte. Proclamaba en voz alta que él era injusto. Lo trataba como malhechor:
Juan 18:30 “Respondieron y le dijeron: Si éste no fuera malhechor, no te lo habríamos entregado.”
Pero la verdad era precisamente lo contrario. Aunque el mundo lo rechazó, el Padre lo acogió: “por cuanto voy al Padre”, lo acogió en casa y por dicha para usted y para mí, lo recibió por el camino de la cruz, la cruz que condujo a la corona.
Juan 16.10c“de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;”
Los discípulos ya no iban a observar sus actividades diarias como cuando andaba con ellos. Iba a morir, iba a recibir su recompensa:
Filipenses 2.9-11 “Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.”
Por medio de la resurrección el Padre pondría el sello de su aprobación en su vida y obra:
Hechos 2.22 “ Jesús nazareno, varón aprobado por Dios entre vosotros con las maravillas, prodigios y señales que Dios hizo entre vosotros por medio de él, como vosotros mismos sabéis;”
Romanos 1.4 “(Jesús) fue declarado Hijo de Dios con poder, según el Espíritu de santidad, por la resurrección de entre los muertos,”
Jesús, el mismo a quien el mundo había llamado malhechor, por medio de una ida victoriosa al Padre sería señalado como el Justo:
Hechos 3.14 “Mas vosotros negasteis al Santo y al Justo, y pedisteis que se os diese un homicida,”
De este modo, el mundo sería convencido de justicia. Y esta convicción resultaría en la condenación del mundo, es decir, en la condenación de Satanás y de todos los que se negaron a arrepentirse.
Juan 16.10 “de justicia, por cuanto voy al Padre, y no me veréis más;”
Después de que Jesús regresó al Padre, el Espíritu Santo continúa su obra de convencer a los hombres:
Juan 16.11a “y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.”
Los juicios del mundo son erróneos y malos, como quedó claramente demostrado por su rechazo del Hijo de Dios como Salvador. Pero mientras el mundo es incapaz de juzgar con justicia:
Juan 7.24 “No juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio.”
El Espíritu sí puede. Él convence al mundo de su falsa valoración de Jesucristo.
Juan 16.11b “y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.”
El príncipe de este mundo es Satanás:
Juan 12.31 “Ahora es el juicio de este mundo; ahora el príncipe de este mundo será echado fuera.”
Él ha sido ya juzgado y expulsado del cielo, junto con el resto de los ángeles que se rebelaron con él:
Apocalipsis 12.7-9 “Después hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban contra el dragón; y luchaban el dragón y sus ángeles; pero no prevalecieron, ni se halló ya lugar para ellos en el cielo. Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él.”
Fue derrotado por completo en la cruz. Cuando lo que parecía ser su momento de triunfo, en realidad era la hora de su perdición.
Colosenses 2.15 “y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz.”
Aunque Satanás ya está derrotado y juzgado, la sentencia final en su contra solo se ejecutará al final del milenio:
Apocalipsis 20.10 “Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos.”
Mientras tanto, va como el dios de este siglo, en busca de almas para apresar y devorar. La advertencia aleccionadora para quienes aceptan el sistema del mundo es que si su príncipe no escapará al juicio, tampoco lo harán ellos, a menos que se arrepientan. El destino del diablo garantiza el juicio de todos los pecadores que no se arrepientan.
Solo hay dos respuestas posibles a la obra de convencimiento del Espíritu: el arrepentimiento o el rechazo. Los cristianos recibirán hostilidad de quienes rechacen la convicción del Espíritu. El fin de ellos es que
“sufrirán pena de eterna perdición, excluidos de la presencia del Señor y de la gloria de su poder” 2 Tesalonicenses 1:9
Quienes se arrepientan cuando el Espíritu los convenza pasarán la eternidad en gloria y alegría celestiales e inexpresables. Pero en esta vida enfrentarán pruebas ardientes de persecución sin abandono fatal porque:
1 Juan 4.4 “Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo.”
CONCLUSIÓN
CONCLUSIÓN
En resumen, las tres tareas importantes del Espíritu Santo son:
(1) convencer al mundo de pecado y llamar al arrepentimiento.
(2) revelar la norma de justicia de Dios a todo aquel que cree, porque Cristo ya no estaría físicamente presente en la tierra.
(3) demostrar el juicio de Cristo sobre Satanás.
También, Según lo que dice Jesús, no creer en Él es pecado.
Finalmente, la muerte de Cristo en la cruz puso a nuestra disposición una relación personal con Dios. Cuando confesamos nuestro pecado, y recibimos a Cristo como Señor y Salvador, Dios nos declara justos y nos libera del castigo de nuestros pecados.