Preparado para un encuentro con Cristo

Introduccion: Una de las historias mas conmovedoras en la vida de San Agustin de Hipona es la que nos cuenta como este hombre que era atormentado por un gran conflicto interior entre el llamado de Dios y su vida pecaminosa. El tenia problemas como hombre mujeriego y clamaba a Dios por un cambio en su vida. Un dia mientras luchaba en su interior escucho la voz de un nino que cantaba: Toma y Lee. El percibio que esto era la respuesta de Dios y leyendo la Palabra de Dios abrio su corazon y fue transformado. En Cierta ocasión mientras el caminaba por una calle, escucho una voz que decia: Agustin, Agustin. Era una mujer que el habia conocido en su vieja vida. La mujer insistia en llamarle: Agustin, Agustin soy yo. El se detuvo quedo viendo a la mujer y le dijo: Si tu eres tu pero yo ya no soy yo.

Leamos Mateo 3:1-12

Juan el bautista es llamado el precursor del evangelio o de Cristo, el es llamado para cumplir un ministerio profetico de preparación ante la venida del Mesias. Enviado a predicar un mensaje de arrepentimiento a un pueblo que habitaba en tinieblas, Juan nos llama a nosotros a prepararnos tambien para un encuentro con Cristo.

Proposicion: Dios nos da tres aspectos esenciales para prepararnos para un encuentro con Cristo.

Debemos prepararnos dando una respuesta positiva a La Palabra de Dios.

La respuesta que pedia Juan era: ARREPENTIMIENTO.

En el NT las voces trad. “arrepentimiento” son metanoeoµ y metamelomai. En gr. generalmente significan “cambiar de pensamiento” y también “lamentar, sentir remordimiento” (e. d. acerca de lo que se sostenía anteriormente). Encontramos esta nota de remordimiento en la parábola del publicano (Lc. 18.13), probablemente en Mt. 21.29, 32; 27.3 y Lc. 17.4 (“Me arrepiento”), y más explícitamente en 2 Co. 7.8–10. Pero el uso neotestamentario se ve influido en mayor medida por la voz veterotestamentaria sûuÆb_; o sea que el arrepentirse no es simplemente lamentar o cambiar de pensamiento sino hacer un vuelco completo, producir una completa y total alteración de la motivación básica y la dirección de la vida del individuo. Por ello, la mejor trad. de metanoeoµ es a menudo “convertirse”, o sea “volverse” (* Conversión). También nos ayuda a explicar por qué Juan el Bautista exigía el *bautismo como senal de arrepentimiento.

Debemos prepararnos a traves de la clase de vida que llevamos.

Debemos prepararnos a traves de las obras que hacemos.