Enseñanzas de Jesús sobre la oración. Estudio 5
Enseñanzas de Jesús sobre la oración • Sermon • Submitted
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· 24 viewsJesús pone como condición final para que nuestra oración sea escuchada, la practica del perdón.
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INTRODUCCIÓN:
INTRODUCCIÓN:
Estuvimos el último martes enfocado en la enseñanza de Jesús sobre la oración en el evangelio de Marcos 24, pero específicamente en los versículos 20-24, miramos, cuatro aspectos de esta enseñanza, tales como:
I. Jesús remarca el componente histórico de la oración.
A. Con la maldición de la higuera.(v. 12-13).
B. La higuera se seca. (v. 20-21).
Jesús enseña con esto, que Dios es el mismo, su poder sigue siendo el mismo, y que nuestra oración debe confiar en sel poder de Dios.
II. Jesús enseña sobre el componente teológico de la oración.(v. 22).
Jesús enseña que oración no se relaciona con la naturaleza de la fe personal, sino con el carácter del Dios vivo.
Su enseñanza aquí radica en que tener una vida eficaz de oración requiere confiar en el poder, el propósito, la promesa, los planes, y la voluntad de Dios.
Luego enseña :
III. El componente Espiritual de la oración.(v. 23).
Jesús con esta declaración:
“cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho”
Enseña que cuando un creyente enfrenta un problema abrumador que no tiene solución humana aparente, si no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que pida por medio de oración le será hecho.
La duda a la que Jesús se refiere es en realidad una advertencia en contra de dudar de la naturaleza y del poder de Dios.
Y la cuarta enseñanza de Jesús, es en relación a:
IV. Componente práctico de la oración.(v. 24).
Este es el último componente es obvio, pero necesario, tenemos que aprender a pedir.
Pedir, nos ayudará a tener todas las cosas que el señor ha prometido para sus hijos.
Sin embargo, Santiago nos anima a pedir bien, y no pedir mal, ¿Cuando pedimos mal, cuando pedimos para nuestros deleites, y no para lo que necesitamos, entonces, hablamos de pedir conforme a la voluntad de Dios y no a la nuestra.
Ahora, continuaremos con la enseñanza de Jesús, ya que nos quedó pendiente un quinto componente de la oración que Jesús enseña.
V. COMPONENTE MORAL DE LA ORACIÓN:
V. COMPONENTE MORAL DE LA ORACIÓN:
Marcos 11: 25
25 Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.
Hermanos, vemos un reflejo del mandato de Jesús en Mateo 6:15.
15 mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.
El mandato del Señor, perdonad, si tenéis algo contra alguno, expresa el componente moral de la oración.
Perdonar a otros es un requerimiento a los creyentes para que también nuestro Padre que está en los cielos nos perdone sus ofensas.
El perdón al que se hace referencia aquí no es el perdón eterno que acompaña a la salvación, la cual no se basa en obras y que no puede perderse.
Como fue el caso en el Sermón del Monte , aquí Cristo se refirió al perdón relacional de los pecados que son parte de la vida diaria de los creyentes y que interrumpe el gozo de nuestra comunión con el Señor.
14 Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial; 15 mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.
Hermano, lo que Jesús enseña, es que tratar de orar mientras mantenemos una actitud no perdonadora contra otra persona es contraproducente.
No se puede, no se debe y no podemos orar así.
Pablo sigue esta enseñanza de Je´sus, cuando escribe a la iglesia de Éfeso.
32 Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.
Hermano, sabe por qué tanto Jesús como Pablo hacen énfasis en la actitud perdonadora, en la necesidad de perdón al orar, es porque cuando no lo hacemos, pecamos.
El salmista se refiere a esto cuando escribió.
Salmos 66:18
18 Si en mi corazón hubiese yo mirado a la iniquidad, El Señor no me habría escuchado.
Las oraciones, de un creyente, que no practica el perdón hermanos, no son escuchadas por el Señor, ¿Por qué?.
Una actitud así, muestra que guarda rencor.
Está en amargura. La carnalidad está dominando su vida.
Y está en desobediencia al mandato de Dios.
Entonces, cuando venimos a orar, debemos decidirnos, entre “mantener nuestra actitud así”o “perdonar”, si decidimos mantener mi actitud, en contra de lo que Dios ha dicho, entonces, nuestras oraciones no serán contestadas.
Dicho de otro modo, no se puede aceptar el perdón total y compasivo de Dios y después no perdonar a otra persona.
Tendríamos la actitud de aquel siervo del cual Jesús enseña en Mt. 18:23–35, el cual fue perdonado por su rey al deberle 10000 talentos, luego de rogarle porque su familia y él serían esclavos, pero él no pudo perdonar cien denarios a su consiervo, y lo ahogaba y presionaba.
Ahora piense en lo que equivale lo perdonado, Un talento es igual a 6000 denarios.
Al hombre se le perdonó 10000 talentos, o sea sesenta millones de denarios, pero este hombre no pudo perdonar cien denarios.
¿Triste, actitud, no?,
Hermanos, si nosotros venimos a orar a Dios, sin perdonar a quienes nos ofenden, o causan problema, estamos actuando como este siervo.
Mire como le dijo su Señor.
32 Entonces, llamándole su señor, le dijo: Siervo malvado, toda aquella deuda te perdoné, porque me rogaste.33 ¿No debías tú también tener misericordia de tu consiervo, como yo tuve misericordia de ti?34 Entonces su señor, enojado, le entregó a los verdugos, hasta que pagase todo lo que le debía.35 Así también mi Padre celestial hará con vosotros si no perdonáis de todo corazón cada uno a su hermano sus ofensas.
Jesús reafirma, que esta misma actitud, tendrá Dios con nosotros los creyentes, sino aprendemos a practicar el perdón.
26 Porque si vosotros no perdonáis, tampoco vuestro Padre que está en los cielos os perdonará vuestras ofensas.
Ese hermanos, es el nivel de importancia que tiene la practica de perdón en la vida Cristiana.
CONCLUSIÓN:
Podemos ver que Jesús a pesar de que la enseñanza se centra en cinco puntos, le da más realce al último.
Dios, sigue siendo el mismo Dios con poder.
La oración tiene que ver con la fe en Dios, no en nosotros mismos.
La oración requiere seguridad y no duda.
La oración requiere pedir conforme a la voluntad de Dios.
Pero si no hemos perdonado, todo eso no sirve, porque nuestra oración, no será escuchada por Dios.